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𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑮𝒆𝒓𝒂𝒓𝒅

Hace menos de una semana me hice "novio" de Bert y no es para nada lo que yo esperaba, es cierto que no me nace ser un romántico empedernido pero él no pone mucho de su parte tampoco.

Nos hemos besado dos veces más y apenas le vi el miércoles en un cumpleaños al que nos invitó una amiga que todos tenemos en común, Frankie no fue porque había prometido a un compañero de trabajo cubrir su turno esa noche en la cafetería.

Así que estuve con mis amigos la mayor parte del tiempo, con Robert no hubo nada especial, solamente platicamos un poco cuando fuimos a tomar asiento con otros chicos frente a la casa donde era la celebración, me dijo que para no levantar sospechas debíamos mantener la distancia, no termino de entender su lógica, antes me seguía a todas partes y ahora que se supone somos algo toca fingir que no, no sé que pasa.

Tampoco sé porque razón después de ese cumpleaños cuando Bert me escribió para proponerme esto yo acepté, lo hice sin pensar y sin medir las consecuencias de mis actos, sin embargo al día siguiente una serie de (des)afortunados acontecimientos me hicieron cuestionarme si ésta es una buena decisión.

Mi vecina, la señora Patricia me dijo cuando me saludó por la mañana antes de la escuela, que era un buen muchacho y que no me desperdiciara ¿a qué se refería? No tengo idea. Luego una vieja amiga de mi mamá visitó la cafetería donde trabajo y me dijo casi lo mismo, es por eso que ahora tengo miedo además de que estoy ansioso.

Y en esta locura estoy solo.

A todo eso sumemosle la tristeza que me da saber que le estoy ocultando esto a Frank, estoy seguro que quizás él me hubiese hecho recapacitar a tiempo, pero le prometí a Bert no decirle nada a nadie aún, más que por Bert prefiero callarlo por Frank, me dirá que Robert está jugando conmigo y que lo golpeará, una pequeña parte de mi sabe que así es pero no quiero aceptarlo, aún.

Mi manos están sudando y siento frío, tengo muchos nervios, Bert va a mi lado en el taxi que nos lleva a ese lugar, siempre imaginé que esto sería diferente, con un panorama romántico, que habría cariño y dulzura, pero ante su actitud creo que lo que menos habrá será eso.

Según las palabras de Bert en el mensaje que me envió la noche en que me lo propuso, él quería hacer esto conmigo porqué pensaba que yo era la persona ideal, dijo que me quería y que estaba seguro de querer hacerlo, no lo  voy a negar en ese instante me sentí feliz y emocionado, ahora que lo pienso quizás por eso acepté; hubo un momento ayer en la noche después de salir del trabajo, en el que le comenté que qué pensaba si lo posponiamos, que nos conociéramos más, talvez un mes, Bert se molestó, así que no quise quedar como alguien cobarde y sin palabra por lo que terminé retirando mi propuesta.

—Llegamos Gee —su voz me sacó de mis pensamientos.

Bajamos del taxi y el señor le dijo que volvería por nosotros en un rato, sentí que Bert me tomó de la cintura y abrió la puerta que nos llevaba a nuestro destino.

Nunca he querido estar más con Frankie que ahora, me hubiese gustado estar con él leyendo algún libro tirados en el suelo de su habitación como solíamos hacer cada viernes antes de ir a nuestros trabajos o simplemente estar platicando con él.

Una vez dentro, Bert me hizo girar para quedar frente a él y darme un beso en los labios, es el más largo que hemos tenido, pero solo fue un breve y leve masajeo, me sonrió un poco y se alejó.

—Iré al baño a prepararme.

Me senté en la cama, la cual era bastante grande, y comencé a fijarme en todos los detalles, las sábanas estaban limpias, había un extraño mueble no tan lejos de la cama, había un sillón, dos mesas de noches a los lados de la cama, en una de ellas había un recipiente con condones, la habitación era amplia y tenía espejos en el lado derecho de la pared y arriba, en el techo.

No había estado en un motel nunca en mi vida, así que no podría juzgar mucho pero almenos no se mira de mala muerte, Bert me dijo que era mejor venir a este lugar para tener más privacidad.

No me di cuenta de el momento en que salió del baño hasta que apagó las luces y solo quedó el reflejo de la luz blanca que se proyectaba desde el baño.

Me puse de pie y torpemente me acerqué a él, volvió a besar mis labios y acarició un poco mi cintura, quise intentar almenos guiarlo para tener una bonita experiencia de mi primera vez, iba a rodear su cuello con mis brazos cuando se separó, me quitó mi camisa y procedió a desabrochar mi pantalón. Aún no estoy duro, no me he excitado ni un poquito, sus caricias no marcan efecto en mi piel y el frío del aire acondicionado no ayuda mucho.

Bert sin hacerse de esperar besó un poco mi pecho y mordió uno de mis pezones, traté de acariciar su cabello pero rápidamente me empujó a la cama y comenzó a desvestirse.

—Tranquilo Gee —dijo al estar completamente desnudo, se colocó sobre mi, entre mis piernas, besó mi hombro y con un par de sus dedos empezó a rozar mi entrada, nunca había estado tan expuesto frente a alguien.

Cerré mis ojos, ya no puedo hacer nada por irme de aquí, lo único que se me ocurrió hacer para compensar este momento fue pensar en Frankie, logrando una semi-erección pero cuando empujó los dos dedos dentro y el ardor comenzó, el rastro de placer que comenzaba a sentir se esfumó, su estimulación no duró mucho, retiró sus dedos y se incorporó sobre sus antebrazos y sus rodillas, sin más alineó su miembro a mi entrada.

Siento que todo es tan seco, raro y forzado.

—Espera Bert ¿no usarás protección? —pregunté un tanto tímido, era nuestra primera vez pero aún así debíamos ser responsables.

—Eres virgen ¿no?

Su forma de decirlo me incomodó, claro que soy virgen, me estoy entregando a él sin ningún sentimiento de por medio y se atreve a decir eso de esa manera.

Asentí levemente mordiendo mis labios para no llorar, comenzó a penetrarme sin delicadeza y cuando estuvo por completo adentro de mi empezó a moverse a su gusto, arde y es un poco incómodo, llevé mis manos hacia su espalda en busca de un alivio pero nada, solo quiero salir de aquí y olvidar esto, seguir siendo feliz junto a Frank.

Sentí eterno este momento, hasta que su líquido caliente salió disparado hacia mi interior, respiré un poco aliviado, Bert se quedó ahí un instante, me miró de frente y me besó, quería empujarlo y apartarme, sin embargo le sonreí de medio lado.

—Sentí que no lo disfrutaste Gee, no te preocupes leí que la primera vez del pasivo es casi así —sin más comentario que ese, salió de mi interior y se devolvió al baño con su ropa.

Me hice bolita en la cama sintiendo aún el ardor en mi trasero, ¿porqué hice esto? Nada gano con estar haciéndome estas preguntas, al final del día fue mi decisión pero siento que Bert no me está siendo sincero, me acabo de entregar a él y parece como si no le importo, se supone que también fui su primera vez.

¿Verdad?

Me siento triste, solo quiero irme de aquí así que tomé mi ropa y me vestí rápido esperando a que saliera para irnos ya. Al cabo de unos minutos lo vi pagar y en silencio salimos de la habitación y nos montamos al taxi.

El viaje fue silencioso también, ni siquiera tengo ganas de intentar iniciar una plática y por lo que veo el tampoco quiere, solo me limité a ver el paisaje atraves del cristal de la ventana.

—Adiós Gee —me dijo cuando el taxi aparcó frente al parque que quedaba a pocas cuadras de mi trabajo, así, simple.

—Bye Bert —le sonreí porque no me mostraría débil ahorita, menos frente a mi "novio".

No hubo una despedida amorosa, mucho menos un simple beso, vi por última vez sus ojos azules y me bajé del coche.

Observé como el auto amarillo partió hasta que se perdió varias cuadras más adelante, me senté en una banca a dejar que el tiempo avanzara mientras se hacía la hora de mi turno, seguía con esa sensación de ardor en mi, pero puedo soportarlo, supongo, quizás hasta haya sangre y yo no revisé, suspiré para tratar de dejar pensar en ello.

Saqué mi teléfono e inevitablemente pensé en él cuando vi su estado de WhatsApp, así que decidí enviarle un mensaje.

"Te quiero mucho Frankie ♡"

"Yo te quiero muchísimo más mi Gee ❤"

Su respuesta fue casi a los segundos, me logró sacar una verdadera sonrisa, quizás me apresure con Bert y me equivoqué, espero no arrepentirme más, terminaré con esta "relación", pues no tiene sentido seguir con ello, es obvio que Robert no me quiere.

Pero está bien, lo que pasó ya está y no lo puedo borrar, así como tampoco vale arrepentirme porque nada se resolverá, es mejor cortar por lo sano, luego hablaré con Frank y le contare todo, espero que me apoye y se quede a mi lado.

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