Wooyoung despertó jadeando, su respiración estaba demasiado agitada y su cabeza dolía, estaba sudando y sentía su corazón latir muy rápido.

Suspiró y echó su cabello para atrás, mirando su celular notando que era de madrugada.

- ¿San? ¿San? .- gritó esperando respuesta la cuál nunca llegó.- mierda, ¿por qué no fuimos por él?

- porque el estúpido de Hyun nos puso una trampa y salimos heridos, ¿no recuerdas? .- escuchó la voz de Yeosang sonar por la habitación y lo miró.

- me importa poco si salgo lastimado, quiero a San, ahora...- susurró empezando a llorar.

- pronto.

- ¿pero si es demasiado tarde? .- Yeosang sonrió de lado acercándose para abrazar a su mejor amigo.

- prometo que no.- susurró acariciando su espalda.

- ¿qué haré sin él? No puedo ver su cara, no puedo oír su voz, ni siquiera ver su bella sonrisa, lo necesitó Yeonnie.- sollozo.

- más tarde iremos, tenemos un plan. Prometo que estarás con él lo más pronto posible y entonces podrás decirle tus sentimientos, de nuevo.

- lo extraño tanto.

- todos lo hacemos, pero no debemos lamentarnos, el aparecera, estara con nosotros y lo cuidaremoa muy bien.

- demasiado.- apretó sus puños en la camisa del mayor y escondió su rostro en el pecho de éste.

- San estará bien, ya lo verás.

- eso espero.

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La hora había llegado y los chicos comenzaron a prepararse.
Cada uno guardó su arma correspondiente en la parte trasera de su pantalón, cubriendolo con su chaqueta y se dirigieron a la camioneta.

- Wooyoung, Jungkook, Jaebum, Yeosang directo a buscar a San.- habló Bambam.- Yugyeom, Jimin, Jackson, Youngjae en la entrada. Mark, Jongho, Mingi, Yunho y yo distracción Namjoon y Suga, en la camioneta de alguna u otra forma querremos irnos rápidamente. Hongjoong y Seonghwa vigilancia.

- ¿de qué?

- debemos hacer las cosas bien, cuándo demos señales de llamar a la policía lo hacen y avisen cuándo lleguen.

- bien.

- tengan cuidado, no sabemos lo que esos chicos estén tramando o cuantas personas ataquen.- habló Jungkook.

Al llegar a su destino se quedaron dentro preparando sus armas, el mas nervioso era Wooyoung aquél sueño no salía de su cabeza, quería tener a San pero con vida, abrazandolo y besandolo diciéndole lo mucho que lo quería.

- saldremos de esta y sino, fue un gran gusto conocerlos y compartir todo con ustedes chicos.- habló de repente Yugyeom.

- todo saldrá bien; sólo tengamos cuidado.- dijo Jaebum en susurró. Prosiguieron a bajar de la camioneta y dirigirse a la entrada, la puerta fue abierta con mucho cuidado y entraron separándose en grupos como habían dicho antes.

Wooyoung revisaba con cuidado donde pisaba o hacia donde iba para no llamar la atención. La puerta que recordaba perfectamente llamó su atención, dio señales a los chicos de ir allá e hicieron caso.

Escucharon voces tras ella y supieron que San no estaría allí, se ocultaron al escuchar pasos y esperaron a que se retirarán para seguir.

Por otro lado Jimin se había percatado de un pequeño detalle, un pequeño charco de sangre mancho la alfombra de la entrada, tapó su boca para evitar gritar y llamó a los chicos con los que iba acompañado.

- no, no, no es San, no, no es.- negó Jackson.

- no es, no hagamos tontas teorías y recemos para que todo salga bien, prepárense.- avisó al escuchar pasos dirigiéndose hacia ellos y cada quién tomó un lugar.

Jimin se ocultó tras la pared, noqueando inmediatamente al ver a la persona pasar frente a él.

- por eso y más cosas no se metan conmigo.- sonrió al notar la sorpresa de todos.

- ¿Cómo? ¿qué...

- 5 años de karate y 3 de artes marciales.

- Mark estudia artes marciales y esta bien pendejo, chalé.- Jackson rió pero regresó a su seriedad.

- dejen a mi novio.

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Wooyoung lo encontró, había visto por la ventana el pequeño cuerpo de San retorciendose sobre la cama tratando de soltar sus manos que resultaban amarradas.

Abrió la puerta con cuidado y sacó el radio de su chaqueta.

- piso 3, habitación número 2.

- ¿qué es esto? .- respondió Jackson por la otra línea.

- era una casa que pensaban convertir en hotel pero todo eso se acabó pronto ahora llamen a la policía.

- Jimin ya noqueo a 3.- escucho la baja risa de Jungkook y lo miro.

- ese es mi novio.- comentó orgulloso.

- bien, bien, llamaremos.

Wooyoung guardó el radio de nuevo y procedió a abrir la puerta con cuidado para dirigirse al cuerpo de San y desatarlo rápidamente.

- alejate.- dijo al fin desatado haciéndose para atrás, alejándose del menor.

- ¿qué te pasa, sannie...?

- alejate por favor, no quiero saber nada de ti.- Wooyoung sintió el nudo en la garganta que tanto odiaba y bajo la mirada.

- San, vine acá por ti.

- y lo agradezco, pero no quiero verte.- sintió el cuerpo del mayor temblar y sólo miro cuando éste abrazó sus piernas alejándose del tacto del menor.

- San, no...- intento abrazarlo pero de nuevo se alejó.

- dije que no...no...no.- repitió repetidas veces.- ya no me hagas daño, ya no...

- hey Sannie soy Jungkookie hyung.- habló el mayor de todos, San quién al escuchar su voz se acercó a él para abrazarlo y aferrarse a su espalda.- tranquilo, te sacaremos de aquí.

- no lo harán.- fue lo último que escuchó antes de caer insconciente junto a sus demás amigos.

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Al abrir sus ojos sintió demasiado cansancio sobre él, se frustró cuando sintió sus manos atadas y al no poder hablar se desespero.

- ¿creyeron que se las dejaría tan fácil? Están tan equivocados.- la chica sonrió con demasiada satisfacción mirando a cada una de sus ahora víctimas.

- eres una mierda.- dijo Yeosang cuándo la tela fue retirada de sus labios.

- gracias, cariño.- beso la mejilla de Yeosang provocando que éste hiciera una mueca de asco.

- ¿dónde esta? ¿qué haces con él? .- preguntó Wooyoung.

- pasando un buen rato con Hyun.- se movió un poco dejando a la vista la gran pantalla que mostraba las cámaras dentro de la habitación.

Y allí estaba San, siendo besado por el chico desconocido. Él estaba insconciente también así que seguramente aún no sentía nada.

- ¿por qué estás haciendo esto? .-preguntó Jaebum.

- porque quiero.

- ¿sabes que estás muy mal, no?

- me importa poco, sólo quiero a Wooyoung de vuelta y si para eso debo asesinar a San, lo haré.

- sólo estas causando que me aleje más de ti, no puedes hacer que dejé de amar a alguien que ha robado por completo mi corazón.- susurró.

- ¿y yo dónde quede? ¿dónde esta el amor que decías tenerme? Las promesas, ¿qué nos  pasó?

- debiste haber pensado en eso antes de acostarte con el primero que se te pusiera en frente.- gritó.

- lo pensé, pero en ese momento me dio igual.

- pues ahora me dará igual hacerte daño a ti y al estúpido de Hyun!

- bien.- sonrió.

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Sintió húmedo su abdomen por la lengua ajena que pasaba por éste mismo. Se sintió asqueado y su cabeza dolía a no más poder.

- ¿Wooyoung...- puedo lo único que pudo pronunciar para caer en cuenta de que aquél no era él.- ¿dónde estás....?

- ¡Prometo sacarte de ahí, San! .- gritó frustrado aún cuando sabía que el mayor no podía escuharlo.

Se recosto levemente cuándo Haneul se había distraído en las cámaras, sacó el cuchillo que guardaba en su cinturón, rompió rápidamente su cuerda e iba a liberar a sus compañeros pero en ese entonces Haneul ya lo había visto.

- oh, vaya Wooyoung, siempre se te dio bien hacer estás cosas.- sonrió.- ¿ahora que harás? Además de ver cómo hieren a tu bello ángel.

- ¿no te cansas de ser tan estúpida?

- ¿no te cansas de mentirles a tus amigos? .- Wooyoung se quedó callado y bajo la mirada.

- ¿a qué se refiere Woo...- preguntó Jungkook.

- él dijo que no me había visto, ¿no es así?

- sí.- ahora hablo con confusión Yeosang.

- mintió.- los chicos miraron a Wooyoung quién aún seguía sin levantar la mirada.- vino, estuvo conmigo. Y pasamos un buen rato, de sexo.

- ¡no digas estupideces que jamás tuvimos sexo! Vine porque ella lo pidió, quería confirmar que San estaba aquí y logré hacerlo y estoy aquí para sacarlo de aquí, perdónenme por mentirles chicos...- les susurró mirandolos.

- bien....- Jaebum entrecerro sus ojos amenanzadolo con la mirada esperando a que enserio no haya pasado algo más.

- ¡Yeoonie! .- San gritaba sin ser escuchado. Aún si lo escucharán sería demasiado tarde, entonces estaría violado y con la mente hecha un asco.

- ¿por qué no mejor gimes mi nombre? Me llamo Hyun.

- te conozco maldito, asqueroso.

- ¿te han dicho que tienes un culo de envidia? .- recordó las palabras de Byul en la fiesta de Hongjoong y se sintió más asqueado, con ganas de vomitar.

Si iban a violarlo que lo hicieran rápido, quería acabar con todo esto, posiblemente con su vida.

Después de esto no podría vivir con la consciencia buena, estaría siendo torturado por sus pensamientos y no lo olvidaría.

- ¡ah, mierda! .- mordió su labio cuando el contrario había mordido su cuello. El sonido del metal captó su atención indicándole que había retirado su cinturón.

- espero que estés listo, bonito.- aquella sonrisa lo pertubo tanto, era un asco. Su pantalón estaba por ser bajado cuando logró golpear la parte baja del chicos y correr hacia la puerta aprovechando que este se estaba quejando por el dolor.

Pero fue imposible, la puerta estaba demasiado protegida, golpeó esta y cayó al suelo abrazando sus piernas escondido su rostro lleno de lágrimas en estas.

- pagarás está, Choi.- dijo retorciendose de dolor.

- te odio.

- ven acá, pequeño estúpido.- jalo de su brazo obligándole a levantarse y recibió un golpe en su mejilla haciéndolo caer de nuevo.- jamás en tu vida volverás a hacerme esto.- otro golpe, más bien una patada en su abdomen.

- eres una maldita mierda y estarás arrepintiendote por esto.- escupió sangre y limpió su nariz que estaba igualmente desangrada.

Como pudo se levantó e intentó defenderse pero su golpe fue esquivado y recibió otro haciéndolo chocar con la mesita de noche.

- débil, ¿no sabes hacer algo más que dar lástima?.- y tenía razón.

Es toda su vida no hacia nada más que eso, dar lástima. Se dejó humillar por su ex novio, dejó que jugarán con sus sentimientos y ahora se deja golpear, tu madre estaría decepcionada de ti, San.

- ve a follarte a la puta de Haneul, que para eso ambos sirven demasiado ¿no crees? .- sonrió, agarrando el brazo del chico cuando iba a golpearlo de nuevo.

Giró su brazo haciendo que el contrario gritaba del dolor. De un movimiento rápido terminó en la cama bajo aquél chico, siendo agarrado por las manos evitandole defenderse.

Apretó los dientes y se dio por vencido, estaba cansado, de todo, de todos. Cansado de ser el mismo juguete de todos, de ser débil, de no poder defenderse, de tener que aguantar a los demás cuando no debía hacerlo, por premio tantas cosas que no debía, cansado hasta el punto de querer morir.

Al menos así, no sería una molestia ¿no?

- ¡sueltalo ahora mismo si no quieres acabar muerto, hijo de perra! .- su vista se había nublado pero reconoció con perfección la voz de Wooyoung.

Sintió sus cálidos brazos abrazar su cuerpo y juntar sus frentes, al igual que sus lágrimas caer sobre su rostro.

- ¿estaré bien...?.- preguntó el mayor en susurró.

- de maravilla, lo prometo... lo prometo.- susurró aferrandose al cuerpo del mayor.- no te dejaré caer, es una promesa entre tú y yo.- San no pudo evitar reír aún débilmente y acariciar la mejilla húmeda del menor debido al llanto.

- lo siento por no quererte cerca antes, estaba engañado por las mentiras que ella decía.

- no hay problema, sólo quiero que salgamos de está y prometo que así será.- delineo sus labios con su pulgar y los juntó con los suyos, ambos labios temblorosos se movían lentamente con seguridad.

De pronto Wooyoung se separó y de nuevo juntó sus frentes con una gran sonrisa.

El mayor por su parte deslizó su mano por la mejilla del menor y cayó a las frías sábanas de la cama. Al igual que su rostro, sus ojos se habían cerrado y su respiración se había calmado, pero no reaccionaba.

- ¿San? ¡San! .- fue lo último que escuchó antes de quedar completamente inconciente.