Capítulo 2: Alguien nuevo

Al día siguiente, Walter decidió llamar a cada uno de sus aprendices para avisarles sobre ese sobrehumano llamado Dark Fist y su equipo.

Por otro lado, Skull, Lidia y Blink se encontraban de noche en un museo que intentaba ser robada por unos ladrones. Los tres intentaban detenerlos mientras ellos trataban de dispararles, pero los tres los bloqueaban o esquivaban. Al final, Lidia logró congelar sus pies en el piso  dejándolos aturdidos. Blink agarró las armas que algunos tenían y las rompió mientras que Skull quemó otras. Justo cuando los iban a entregar a la policía, los radios de cada uno de los tres comenzó a sonar y el que les estaba llamando era Walter, así que decidieron atender la llamada.

Walter —John, Lidia, Blink, ¿están ahí?

Skull —Sí. ¿Qué sucede maestro?

—Escuchen. Un grupo de sobrehumanos maleantes están sueltos por la ciudad. Aún no sabemos sus identidades y necesitamos que todo su equipo traten de descubrirlos. Ahora también serán detectives, chicos. Esa será su misión a partir de ahora.

Los tres —De acuerdo, maestro.

Blink —¿Sabe los nombres de esos tipos?

Lidia —Tiene razón. Necesitamos datos de ellos.

Walter —El líder de ellos se hace llamar "Dark Fist", y dicen que es demasiado fuerte. Los otros siete se hacen llamar Hydro Fist, Windbender, Deleted Mind, Cory, Hypna, Hackman y el Desintegrador. Probablemente no me vallan a creer, pero ayudó a Robinson, Scratch y a Filo a escapar y estoy muy seguro que lo hizo para que se integren a su equipo.

Skull —¿Qué cosas causaron?

—Resulta que todos ellos estuvieron en contra de lo que le dijimos al presidente a la ONU. El gobierno y yo no supimos porqué. Necesitamos que comiencen a investigar ya, por favor.

Los tres —No se preocupe maestro, lo haremos.

—Tengo una cosa más que decirles. Creo que uno de esos sobrehumanos es un ex-aprendiz mío. Creo que es Hydro Fist.

Lidia —¿Qué?

Blink —¿Lo dice enserio, maestro?

Walter —Sí. Por favor intenten detenerlos y también necesitamos que los investiguen.

Los tres —Lo haremos, maestro.

Los tres colgaron  y se dispusieron a buscarlos. (El mensaje fue enviado a todos los aprendices de Walter).

Por otro lado, después de que Enrique y Smith escucharan el mensaje se dispusieron primero ir a buscar a algunos de esos sobrehumanos malvados. 

En las calles de San Diego, Cory y el Desintegrador estaban haciendo quien sabe qué, pero se notaba que de verdad estaban tramando algo ya que Enrique y Smith los estaban mirando desde lejos. Pero por otro lado, una persona toda encubierta también estaba observando a los villanos desde lejos. El tipo estaba vestido de negro, con una capucha, pelo largo y con una extraña máscara de los doctores de la peste. Ese tipo observaba lo que hacían esos villanos sobrehumanos ya que estaba armando un especie de plan para atraparlos.

Por otro lado, Enrique y Smith ya no se encontraban en el lugar donde observaban a Cory y al Desintegrador ya que fueron a atraparlos. Cory y el Desintegrador llegaron a un callejón solitario. De repente, Smith les bloqueó el paso con su velocidad de estrella fugaz.

Smith —Ustedes dos no irán a ninguna parte.

Cory —Vaya. Me imagino que eres uno de Los Extraordinarios.

Desintegrador —Eres Fugaz, ¿cierto? Lo sabemos por tu aspecto y por lo que hiciste hace un momento.

Smith —Trabajan para Dark Fist. ¿Dónde está él ahora?

Cory —Eres demasiado ingenuo. ¿Crees qué te lo vamos a decir?

Desintegrador —¿Qué es lo qué harás? Quisiera desintegrarte en este momento, pero se que esquivarás mis disparos. 

Smith —Todos fallan contra mí. Corro a la velocidad de una estrella fugaz, pero no es mi única ventaja. ¿Qué esperan?— dice Smith estando en su posee de combate.

El Desintegrador de repente disparó hacia Smith, pero él esquivó el disparo y corrió hacia él para golpearlo y tumbándolo hacia atrás. Mientras Smith se entretenía en eso, Cory se tomó el tiempo para rápidamente para tomar la forma de una botella de vidrio y quedarse en el suelo para que Smith no lo encontrara. Smith al darse cuenta que Cory de repente desapareció, fue con el Desintegrador para amenazarlo.

Smith —¿Dónde está Cory? ¡Desapareció!— dice Smith amenazando al Desintegrador con golpearle.

Desintegrador —Ja ja ja. Creí que conocías nuestras habilidades como sobrehumanos. Cory tiene la habilidad de transformarse en cualquier objeto que toque. Parece como si el objeto se duplicara. Sí algún día juegan a las escondidas, es muy seguro que ni lo encontrarás.

—Demonio. Ven ahora— dice Smith comunicándose con Enrique.

—¿Llamas a uno de tu equipo? ¡Ja ja! Ya sospechábamos que no venías solo.

De repente, Enrique llegó al callejón en donde se encontraba Smith y los villanos con su forma de Demonio asustando un poco al Desintegrador. 

—Quema el piso de esta parte. Así averiguaremos que objeto es Cory mientras sostengo a este tonto. 

Enrique —De acuerdo.

Enrique comenzó a lanzar fuego de su boca para quemar el piso. De repente, la botella de vidrio se transformo de nuevo en Cory demostrando que su plan no funcionó. 

—Ríndanse. No tienen escapatoria.

Desintegrador —¿Ustedes creen?

De repente, el Desintegrador comenzó a disparar a lo loco tratando de desintegrar a Smith y a Enrique, pero ellos dos esquivaron todos. Smith un poco cansado corrió hacia el Desintegrador, lo sujetó del cuello y con él a la mano salió corriendo al otro lado de la ciudad solo para estrellarlo contra la pared de un edificio, de nuevo correr hacia otra parte de la ciudad para estrellarlo con la pared de otro edificio, y finalmente hacer lo mismo en otro edificio que estaba cerca del callejón en el que estaban.

Por otro lado, Enrique estaba peleando contra Cory el cual se le hizo una tarea un poco fácil. Cory lograba esquivar todos los golpes que Enrique les daba y también el fuego que salía de su boca. También Cory en medio de la pelea se transformaba en objetos de metal que estaban en el lugar para que Enrique no lo logre quemar ni arañar. 

Por otro lado, mientras el Desintegrador estaba con Fugaz, él mientras estaba tirado en el suelo, rápidamente desintegró el primer piso del edificio que Smith usó para estrellarlo. El edifico de repente comenzó a caer mientras se torcía.

Smith de repente salió corriendo para sacar del edificio a todas las personas que se encontraban dentro, y esto le sirvió al Desintegrador para huir de lugar.

Desintegrador —¡Cory, ya vámonos!— avisa el Desintegrador a Cory mientras el veía como el edificio caía y dejando a Enrique.

Cory —¡De acuerdo!

Cory y el Desintegrador se reunieron rápidamente y los dos comenzaron a huir haciendo parkour por los edificios velozmente, pero de repente son interrumpidos por un extraño gas de color negro fue disparado hacia ellos provocando que cayeran de los edificios al suelo.

Ya estando en el suelo, Cory y el Desintegrador poco a poco se iban enfermando de algo que poco a poco los iba matando. De repente, el tipo encubierto con la máscara de la peste mencionado anteriormente. Él se acercó a ellos de una manera intimidante para comenzar a hablar con ellos.

??? —¿Dónde está Dark Fist?— dice el extraño con una voz exageradamente masculina.

Cory —¿Quién eres?— pregunta Cory súper debilitado.

—¡Díganme dónde están!

Desintegrador —Vaya. Qué lastima que no puedes escuchar cuando estás muerto.

De repente, el Desintegrador disparó hacia al tipo tratando de desintegrarlo, pero este bloqueó el disparo lanzando un disparo de gas negro hacia el disparo del Desintegrador. El Desintegrador algo furioso comenzó a hacer lo mismo que con Smith: disparar como loco tratando de desintegrarlo. El tipo esquivaba y bloqueaba todo y poco a poco se acercaba a él. El tipo comenzó a luchar con el Desintegrador y después con Cory solo para finalmente vencerlos y que ellos comenzaran a huir. El tipo trató de detenerlos pero desafortunadamente no lo logró.

El tipo sin más remedio decidió salir de ahí y prometer que los capturaría algún día. Al voltearse se llevó un susto ya que Smith y Enrique estaban detrás de él provocando que pusiera su posee de combate.

Smith —¡Wow, wow, wow! ¡Tranquilo, tranquilo! Escucha. Puede que nos conozcas. Somos integrantes del equipo de Los Extraordinarios. WONDERMEN para ser precisos. Soy Fugaz y el es Demonio. Salvamos San Diego hace unos pocos meses; tal vez nos conozcas— dice Smith tratando de calmar al tipo

??? —Hm, no hace falta presentarse.

—Sabes quienes somos entonces.

—Muévanse. No tengo tiempo para hablar con superhéroes.

—Oye, oye. No se sí sabías, pero esos dos hombres eran nuestro botín por así decirlo. ¿Tienes idea de lo que hiciste?

—Los dos tenemos planes muy diferentes. ¿Crees que enserio iba a saber su plan? Muévanse ya. Me tengo que ir.

Enrique —Aguarda un segundo. Eres un sobrehumano, ¿cierto?

—Eso no les interesa.

—Si no nos interesara no te estaríamos preguntando. Vimos parte de lo que hiciste contra esos dos. También buscas a Dark Fist, ¿no?

—Sí, pero no soliciten su ayuda. Conmigo está bien.

—¿Por qué llevas esa máscara? ¿Acaso tus habilidades son sobre la Peste Negra?

—¿No crees que están haciendo demasiadas preguntas?

Smith —Oye, no sé si lo sepas, pero nuestro maestro y nuestro equipo juró ayudar a todo sobrehumano que nos encontramos.

—Sí, lo sé, pero ustedes vieron que no tengo ningún problema con mi habilidad.

Enrique —Pero sí tienes problemas para atraparlos.

—(Momento pensativo) ¡Ya les dije que no necesito su ayuda! ¡Aléjense!

—¿Acaso quieres seguir con ése problema? Sí quieres no nos puedes decir tu identidad ni tampoco el porqué lo buscas, pero mínimo dinos quién eres.

—Soy "Plague Reaper"... Y lo único que quiero es arreglar las cosas como ustedes... Pero esto es algo que haré solo, y no quiero que ustedes interfieran.

De repente, Plague Reaper desapareció dejando un rastro de gas de color negro.

Smith —¿Qué opinas, Enrique? Ahora al parecer hay alguien más que también tenemos que investigar su identidad.

Enrique —Déjamelo a mí. 

—¿Qué? ¿Lo dices enserio?

—Habló como alguien de mi edad. Los adolescentes mayores piensan de esa manera. Me imagino que es alguien joven igual que yo, pero no tan joven como John y Lidia. Afortunadamente últimamente estamos repasando la historia de la Peste Negra. Ese hombre tenía una máscara de los doctores de esa época. Así que se necesita estar atento a la mayoría de los estudiantes de mi grado.

—Vaya. Se nota que activaste tu modo detective.

—¿Qué? ¿Antes no lo era? Desde que el maestro nos dió esta misión también somos detectives.

—Como sea. En fin. Tal vez te veré mañana. Buenas noches, Enrique.

—Buenas noches, Smith— dice Enrique preparándose para volar e irse a su casa.

De repente, Smith saco su radio del equipo para transmitir un mensaje a Walter y a sus compañeros.

—Chicos. Enrique y yo descubrimos algo. Desgraciadamente no supimos casi nada de Cory ni del Desintegrador. En la misión un sobrehumano vestido de negro con una máscara de los doctores de la peste se interpuso e intentó capturar a Cory y al Desintegrador, pero también falló. Se hace llamar Plague Reaper y parece que su habilidad es soltar un gas demasiado extraño; la verdad no sé que hace. Enrique ya se dió la tarea de investigarlo. Por lo tanto creo que debemos de seguir con nuestra misión. Solo quería informarles. 

Luego, Smith transmitió el mensaje a todos Los Extraordinarios y a Walter para que estén enterados. Luego, Smith con su velocidad se dirigió a su casa. 

¿Qué crees qué pase después?





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