Cap 12/2: La Ejecución

Cap 12/2: La Ejecución

(Tarrant P.O.V)

-¡PADRE, NO! –corrí desesperado a la piedra, subí, desvainé mi espada y detuve al verdugo que iba a decapitar a mi padre. La capucha se me cayó, revelándome.

-¡Es el chico Hightopp! –dijo alguien de la multitud.

-¿Tarrant? –oí a mi padre impactado.

-¡Ahora, PetitDoigt!

PetitDoigt, salió de mi atuendo y electrocutó al Verdugo con la piedra de su frente, dejándolo al suelo convulsionando e incosciente. Rapidamente, liberé a mi padre de esa piedra.

-¡Tarrant! –dijo emocionado tras quitarse la venda de los ojos y nos abrazamos fuertemente.

-¡Agárrenlos! –ordenó el Viejo Stayne -¡Mátenlos! ¡Maténlos a los dos!

Montones de guardias negros nos acorrolaron.

Solté un chiflido y como sorpresa, salieron Jaque con la patrulla y el Bandersnatch quien soltaba rugidos espántando a todos. Jaque le lanzó a mi padre mi "Hermanito".

(Zanik P.O.V)

-¡A la carga! –gritó Jaque y así todos hicimos un duelo contra los caballeros negros.

Tarrant esquivaba su espada al que sea y yo lo golpeaba y disparaba con su "hermanito".

PetitDoigt lanzaba relámpagos con su piedra de la frente. El Bandersnatch chocaba y le rugía a los guardias y Griffin volaba espantándolos -¡Huyan, huyan, cobardes! -se burlaba.

La verdad era un montonal para pelear. Volteé para atrás y me espanté cuando vi a Trébol Stayne ya arriba en la piedra, sosteniéndo a Tarrant, sujetándole los brazos a su espalda, torciéndoselos y amenzándolo con un cuchillo en la garganta -¡Ya basta! –gritó parando a todos -¡Bajen sus armas, o muestro, lo podrida que tiene este muchacho, la sangre por mercurio! –dijo sosteniéndo con más fuerza a Tarrant.

Mi hijo soltó un gemido -¡Suéltalo! –me iba acercar a él, cuando dos guardias negros me tomaron -¡No, suéltenme!

Por suerte, Tarrant, pisó a Stayne, logró liberarse y se tiró encima de él, luchando.

Le dí un codazo el guardia de la derecha y al otro lo empujé. Vi que Stayne ya tenía a Tarrant en el suelo sostenéindolo, incluso le llegó arañar el antebrazo, eso me dio coraje. Alza su cuchillo a él –¡Te voy a quitar esa cara de niño bonito que herdaste del puerco de tu padre! –le insultó.

Desesperado, buscaba como salvar a mi hijo, lo único que vi era el hacha del verdugo; misma que iba a usar para cortarme la cabeza, la tomé, era muy pesada, la alzè como pude, solté un grito con rabia y fuerza y...tal como hacía un verdugo...

...Le corté la mano a Stayne.

(Tarrant P.O.V)

El Viejo Stayne soltó un inmenso grito cuando mi padre le cortó la mano con el hacha del verdugo.

Me espanté, Jaque igual. Era asombroso ver cómo mi padre azotó el hacha a la perfección, tal como hacía un verdugo adecuado.

-¡Ay, mierda! –dijo mi padre impacatado al ver lo que hizo.

-¡Vamonos! –le dije bajando a la piedra con él.

-¡ATRAPEN A ESOS MALDITOS CABRONES! –gritó con ira el Viejo Stayne, mientras se sostenía la herida en su brazo.

Los guardias negros nos persguían hasts tenernos acorralados, alrededor de nosotros y arrieba en la muralla, amenazándonos con ballestas.

-¿Y ahora qué? –preguntó mi padre viendo que noy había salida.

-Ni idea –le contesté preocupado.

Se oyó un rugido atrás de nosotros. El Bandersnatch saltó sobre nosotros y nos portegió, rugiendo a los de frente. De por sí, Bandy era nuestra fiel mascota.

-Quieto, bonito, quieto –le decía un guardia amenazándole con su lanza.

-¡A la una...! –conté, poniéndome a lado derecho de Bandy

-¡A la dos...! Contó mi padre, poniéndose a su lado izquierdo.

-¡¡A las tres!! –contamos en unísono y junto con el Bandersnatch, soltamos un rugido hacia los guardias. "Rugido Bandersnatch al toque Hightopp", un mecanismo de defensa que aprendimos junto con Bandy.

Mi padre y yo lentamente nos sujetamos firmemente del pelaje del Bandersnatch, sin quitarle los ojos a los guardias –Tú dices cuándo, Tarrant –me dijo mi padre.

-OK –le dije muy atento.

Los guardias se acercaba a nosotros, mientraas Bandy se preparaba para atacar.

-¡Ahora! –grité, cuando al mismo tiempo que mi padre y yo nos subimos al lomo.

-¡Ahora! –gritaron los guardias y por el aire cayó una ola de naipes con armadura negra sobre nosotros. Bandy avanzó chochando a ellos, dio vuelta en U, tomó un guardia de su cuello con su hicico, los guardias de arriba nos lanzaban flechas.

Logramos salir del castillo, apartando cualquier guardia en nuestro camino. Ya cuando estuvimos muy lejos del castillo, Bandy soltó el guardia que sostenía en su hocico, muerto, desnucado y desangrando en el cuello, Bandy lo movía y sacudía para despertarlo, pero como vio que estaba muerto soltó un rugido de enojo, al igual que un niño haciendo un berrinche por un juguete roto.

-Déjalo, Bandy, ya se hechó a perder –le dijo mi padre.

Al oír su voz, volteé y lo ví ahí, vivo y con la cabeza en su lugar. No dudé en abrazarlo –Pensé que te iba a perder otra vez –le dije derramando lárgimas.

-Yo también, mi chiquitín –dijo mi padre soltándome –Qué valiente fuiste. Estoy tan orgullos de ti –me dijo sostenéndome la cara cons sus manos y nos volvimos abrazar.

Un poco lejos, se acercaba Jaque con la patrulla de rescate, sonrió de alivio al vernos vivos y sanos, más a mi padre.

-¡Papupi! –gritó PetitDoigt emocionada volando hacia nosotros y aterrizó al hombro de mi padre abrazándolo.

-¡PetitDoigt, nena, qué gusto verte de nuevo! –le dijo mi padre abrazándola igual.

-¡Zanik! –se oyó Jaque y corrió para abrazar a mi padre -¡Me da gusto que estés a salvo! Vámonos de aquí, tenemos que esconderlos donde no los encuentre.

Y nos largamos lejos de la Secta.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top