Aquí les adelanto un capítulo antes de mi retiro que es en mediados de diciembre. Chequen, voten comenten y no se quejen si les causo pesadillas.

Cap 6: El Ente Titiritero

(Tarrant P.O.V)

-¿Qué te pasa? ¿Qué te pasa? -decía con desesperación , ansiedad y angustia. No paraba de dibujar a Alicia en peligro, la dibujada en distintas formas y  tapizaba los bocetos en mi pared. Eran dibujos terribles, inquietantes, en ellas estaba amarrada, amordazada y con la mirada llena de terror y piedad.

-¿Por qué veo eso? ¿por qué? -preguntaba viendo con horror los bocetos, ni parace que yo los hice -¿Qué le harán? ¿Qué le harán a mi Alicia? ¿dónde  estará? -preguntaba al sentir dolor en mi pie izquierdo -¡Padre! ¡Padre, mi pie!

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-¿Te duele? -preguntó mi padre, observando mi pie izquierdo, la hematoma se veía terrible.

-No -contesté en cuanto él me lo sobaba para calmar la hematoma -Pero me incomoda, más cuando tengo pesadillas...y...-veía más a Alicia, la veía siendo arrojada en los aposentos de los Stayne y a Ilosovic encimándose de ella, manoseándola.

-¿Qué ocurre? -se preocupó mi padre. La hematoma se ampliaba.

-¡Mi Alicia! La siento -dije tratando de calmar un dolor de cabeza.

-¿Qué ves?

Trataba de calmarme para ver perfectamente las visiones de qué es lo que le están haciendo a mi Alicia.

Ahí, Stayne ataba a Alicia en una silla. Conforme ajustaba los nudos, aprovechaba en manosearla -¡No me toques! -se sacudió Alicia -No me han dicho para qué carajos me quieren. ¿Quién era esa mujer?

-Esa mujer, querida, es Lady Amalya líder de la Secta de la Tierra Real y también la abuelastra del Sombrerero.

-¿Su abuelastra? -reaccionó Alicia.

-La madrastra de su madre: la señora Hightopp.

-Ya sé que es una abuelastra...pero, el Sombrerero jamás me contó que tenía una. Y...¿cómo es...es que ella...revivió?

-Lady Amalya no es una mujer común, Alicia es la Señora de Fantasmagoría. Un demonio que se alimenta de energía vital, energía que le transmite a través del dolor, miedo, pesadillas, sufrimiento, pero el maldito Sombrerero y su padre destruyeron sus dominios el año pasado y hemos decidido revivirla para vengarnos de ellos -le contó Stayne.

-Y...¿Para qué me quieren? -preguntó Alicia -¿Cómo es que...con mi sasngre revivieron a esa mujer?

-Necesitamos a un habitante de Sobretierra que ya había estado en Infratierra para darle fuerzas y lograr renacer un nuevo Fantasmagoría y tú Alicia...eres la indicada.

-Y, ¿cómo piensan hacerlo? ¿Qué me harán?

-Obvio que matarte en un ritual pero antes necesitamos hacerte sufrir de la más terrible manera, porque con tu dolor y sufrimiento se abrirá las puertas denuestro nuevo dominio -le sonrió de manera maquiavélica -Mi padre y yo ya pensamos cómo hacerlo. Por eso queríamos saber si eres, aún virgen -le empezó a manosear las piernas hasta metió las manos entre ellas mientras la forzaba en besarla en la boca. Furiosa, Alicia lo mordió.

-¡Ilosovic! -se oyó al Viejo Stayne -Recuerda que no debemos hacerlo hasta que llegué el día del ritual -le dijo a su hijo -Pero, si quieres -le sonrió a Alicia -Puedes probarla un poco.

-Gracias, padre -dijo el muy cínico de Ilosovic al ponerle a Alicia la mordaza en su boca, ella empezó a resoplar del coraje y miedo y aguantar los aquerosos besos que Ilosovic le daba en el cuello y hombros y la manoseaba...

(Tarrant P.O.V)

-¡No! -exclamé a sentir lo que le estaba pasando a Alicia.

-¿Qué pasó? ¿Qué le pasó a Alicia? -preguntó mi padre, preocupado por ella.

-Los Stayne. La tiene en sus aposentos, amarrada en una silla y...la estaban...

-¿La violaron?

-No. Pero sentí que la manoseaban y besuqueaban e intentaron meterle la mano en...en...

-Ya tengo la idea. Putos Pevertidos -dijo mi padre -¡Mira tu pie!

Vimos que la hematoma de mi mordida aumentaba y se disminuía conforme me calmaba -Justo lo que sospeché. Hay un veneno en mi mordida, por eso tengo pesadillas. Ni Lady Amalya quizo explicarme por qué me pasa.

(Zanik P.O.V)

Tarrant tenía razón, hay un cierto veneno en la mordida que Lady Amalya le hizo, y es por esp que últimamente tiene pesadillas. Pero había que averiguar qué tipo de veneno de Fantasmagoría traía -¡Sé quién puede decirnos por qué te ocurre! -tuve una idea.

-¿Absolem? -preguntó.

-No. Alguien que también fue víctima de la Secta y de Fantasmagoría -me levanté de su cama -Ven.

(Tarrant P.O.V)

Al parecer, mi padre tenía una idea. Salimos de mi cuarto y bajamos en el sótano de la casa. Ahí mi padre agarró una vela, la puso sobre una caja y me pidió que nos sentáramos frente a él -Dame tu mano -me pidió.

-¿Vas a usar tuspoderes conmigo? -le pregunté mientras le di mi mano.

-Algo así -me dijo -Ahora, mira fijamente la vela, muy, pero muy fijamente y repitirás conmigo...

-¿Es como Bloody Mary?

-Algo así -dijo entre risas -Pero, dí varias veces: Papa Reggi.

-¿Papa Reggi? -me sorprendí.

Y empezabamos a repetir juntos: Papa Reggi, Papa Reggi, Papa Reggi...

Y tras un parpadeo noté que ya no estábamos en el sótano, sino en un lugar blanco y vacío -¿Dónde estamos? -pregunté -¿En una celda de luz?

-No -contestó mi padre -Según Papa Reggi, estamos en una dimensión entre el mundo de los vivos y los muertos.

-¿Ya estuviste aquí antes?

-Sí, cuando praticaba mis poderes, casi me dio un soponsio la primera vez que vine.

-¿Tarrant? ¿Zanik? -escuchamos una voz.

Volteé y vi a...-¿Papa Reggi? -casi se me bloqueron las emociones al ver a mi tatarabuelo. Él nos vio con una tierna sonrisa -Qué sorpresa verlos de nuevo, mis niños.

-¡Papa Reggi! -corrí emocionado para abrazarlo -¡Qué alegría verte de nuevo! -le dije derramando lágrimas sin querer soltarlo.

-Yo también, mi chiquitín -me dijo Papa Reggi abrazándome con fuerza. Muy sonriente, mi padre se unió al abrazo -Tú también, mi pequeño Nicky.

Tiempo después...

-Supuse que tenías ciertas inquietudes -me dijo Papá Reggi, mientra él, mi padre y yo estábamos sentados en una banca.

-La verdad sí y muy preocupantes...por lo menos para mí -le dije -¿Ya sabes qué le pasó a mi pie? -le mostré mi pie y la hematoma que tenía.

Papa Reggi lo observó con lástima -Unos malditos piratas te devoraron los tres dedos y Lady Amlya te mordió la herida cuando todavía estaba fresca.

-Sí...y al parecer, cuando ella me mordió me metió un veneno de Fantasmagoría, no muy fuerte como el del perro que me mordió e hizo que se me saliera un gusano por la boca, pero últimamente me estaba jodiendo.

-¡Tarrant! -me regañó mi padre tras decir la palabra "jodiendo".

-¿Ves la hematoma? Crece cuando tengo visiones o pesadillas. Pensé preguntarselo a Lady Amalya, pero me mandó al diablo.

-Sí...es veneno de Fantasmagoría. Está manejando tu mente, como si el ente fuese un titiritero.

-¿Un titiritero? -dudó mi padre.

-Sí, el ente quien te mordió es como un titiritero que manipula tu mente. Como si tu mente fuese una marioneta y el veneno los hilos que te lo controlan.

-No creo, porque el ente que me mordió: Lady Amalya, se suicidó hace dos días -dije algo decaído.

-¿Seguros? -nos dudó Papá Reggi -¿Lady Amalya se suicidó?

-¿Lo crees imposible? -preguntó mi padre.

-Es probable. Bueno y hablando de tus pesadillas, ¿qué ves en ellas? -me preguntó.

-Pues, veo a Alicia; una amiga mía muy querida, siendo secuestrada. La veo todo el tiempo, cautiva, amarrada, amordazada, hasta siento lo que está viviendo ahora mismo. Los Stayne la tiene secuestrada, y parecen que planean hacerle algo terrible, todo para vengarse de nosotros. La verdad, me da miedo Papa Reggi. Alicia es una persona muy valiosa para mí y me lamentaría mucho si algo terrible le lleguen hacer -dije preocupado.

-Creo que esas pesadillas que has tenido, son advertencias o amenazas que ese ente te está dando, de que le van hacer algo terrible a tu amiga.

-En eso estoy seguro -dijo mi padre -Mi pregunta es: ¿Qué hacer para ayudarla?

-Eso dependerá de ustedes, mis niños. Esa es, ahora su nueva misión: Salvar a esa joven de las garras de esos pevertidos, ya que ella es valiosa para mi bello tataranieto -me acarició la cabeza.

-Más que una misión, Papa Reggi. Estoy desesperado en poder rescatar a mi Alicia.

-Entonces hazlo, hijo. No tienes nada que perder -nos sonrió Papa Reggi.

Parpadée y noté que regresamos al sótano.

-Entonces ese veneno controla mi mente y me hace tener esas pesadillas -concluí.

-Es muy probable -dijo mi padre, pensativo -Recuerda que los piratas me clavaron un cuchillo envenenado y me hicieron tener pesadillas y alucinaciones -contó.

-Pero, te lo hicieron para matarte, padre -le dije -Lo mío es como dijo Papa Reggi, amenazas para vengarse -le dije.

-Hay algo que no entiendo -dijo mi padre más pensativo -¿Cómo es posible?

-¿Qué?

-¿Los entes mueren? -preguntó confudido.

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En el Castillo de Salazen Grum...

Alicia se sentía asqueada, adolorida y aterrorizada de aquellas cochinadas que Stayne le ha hecho. Por suerte no la violó, ya que será la diversión de Ilosovic para el ritual, así que tuvo esperar tal momento.

Ilosovic puso la silla donde estaba amarrada Alicia, a lado de su cama para vigilarla, que hasta llevaba agarrado un cuchillo. Sin embargo, tanto él como su padre han bebido tanto que quedaron profundamente dormidos. Era una oportunidad para Alicia, para lograr escapar y llegar a donde estaban el Sombrerero y sus amigos.

Con las pocas fuerzas que tenía y con el ceño fruncido, Alica movía la silla donde estaba atada hacia la mano de Ilosovic que sostenía un cuchillo, lo logró. Con mucho cuidado, cortaba las sogas de sus manos que las tenía inmovilizadas a su espalda. Ya con las manos libres, se deshizo de las otras cuerdas que la mantenían unida a la silla, se desató igual los tobillos y se quitó esa incómoda mordaza que no le permitía respirar bien.

-Borrachos pendejos -insultó a los Stayne. Y sin hacer ruido, salió del cuarto.

Pero Alicia se sentía bastante débil por el cansancio y el hambre y estaba acalambrada de pasar bastante tiempo amarrada. Pero no le importaba, ella quería alejase de esa Secta de enfermos de inmediato, llegar a abrazar a sus amigos, en especial al Sombrerero y a los Hightopp.

-¡Rayos! -maldijo tras caer varias veces por la debilidad.

Pero, algo llamó su antención. Vio que todo el castillo, los pasillos, la escalera, hasta las ventanas en froma de corazón se veía carnoso, sangriento venoso y humedo, como estar adentro de un cuerpo. Hasta apestaba a muerto.

-¿Qué es eso? -se preguntó ella misma. Vio la puerta principal, pasando al asqueroso piso bañado con sangre y carne, llegó a la puerta y trataba de abrirla. Hasta que oyó unas voces chillonas -¿Tan pronto te vas, Alicia? ¿Sin tomar el té con tus amigos? ¡Oh, qué tristeza! ¡Pero, antes un recado para que nos vayas a recordad! -vio que en la puerta principal estaba decorado como espéctaculo de circo -¡Con ustedes, desde el divertido Circo de Totter's Button, para nuestra invitada de honor: Alicia Kingsleigh, el acto de las maravillosas hermanas: La alegre Talía y la tristona Melpóneme! -entre uns explosión de confetti y una melodiosa música de circo, apareció al inicio de la escalera un arlequín de espaldas que llevaba la máscara de Talía detrás de su cabeza. El arlequín es dobló hecho un arco, y en su cara, colgada de cabeza tenía la máscara de Melpómene, pero como ella estaba hecho un arco ya se veía normal, bajaba trepando en la escalera como araña (Como la Niña del Exorcista), directo a Alicia.

Alicia, buscaba dónde escapar y vio una puerta a lado izquierdo, corrió hacia allá. No sin antes que saliendo de tal arlequín, dos extrañas criaturas, ojonas, orejosas y feas, riendo como maniacos saltaron sobre ella, sujetándola hacia el piso. Eran duendes de Fnatasmagroía -¡Suéltenme...quien quieran que son!

-¿Creíste que se te sería fácil huír de nosotros, querida? -apareció Lady Amalya en la escalera -¡Guardias! -dos guardias negros agarraron a la chica.

-Nos resultaste muy difícil, Alicia -aparecieron los Stayne -Tal como presumía el chico Hightopp; increíble muchosidad.

-Hagan lo que hagan conmigo, el Sombrerero les hará pagar muy caro en lo que planean hacerme -amenazó Alicia -Y usted más. Su nietastro no se dejará vencer por un montón de fanáticos religiosos con la mente podrida -le dijo a Lady Amalya.

-Tal vez, pero veremos cómo reaccionará mi nietastro cuando encuentre a Alicia marchita y putrefacta -le dijo Amalya -¡Enciérrenla al calabozo! Y no le den de comer durante todo el día de mañana.

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(Tarrant P.O.V)

-¿Un ente qué? -preguntó Iracebeth.

Mi padre y yo fuimos a contarselo a los demás.

-Un ente titiritero -explico mi padre -Ese ente controla la mente de Tarrant a través del veneno que trae en su mordida, como si ese veneno fuesen las cuerdas y su mente el títere.

-Y es por eso que he tenido pesadillas -dije.

-¡Oh, cielos! -reaccionó Mctwisp, a terrorizado -Y, ¿por qué no lo mencionaste antes?

-¿No lo ven? Ellos me ocasionaron estas pesadillas, en ellas nos amenazaban en lastimar a Alicia como venganza de haberlos vencido el año pasado, y...

-¡Auch! - se oyó el Tiempo quejándose de dolor, lo vimos sentado en el suelo y le salían chispitas en el cuello y en su reloj- corazón.

-Y, ¿a ti qué te pasó? -le preguntó mi padre.

-No lo sé -dijo el Tiempo levantándose -Jamás sentí eso.

-¿Qué es? -preguntó Mirana

-Es como...sentí un tic toc ya...terminado...pero ha regresado...es como si si tic recuperó su toc y su toc recuperó su tic...como si alguien resucito -dijo muy pero muy confundido -Bueno, dejemos eso...y, ¿qué planean hacer con ese ente?

-¡Ya sé! -azó la pata Thackery -¡Buscarlo y decirnos dónde está Alicia!

-¿Cómo? -preguntó Jaque -¿Cómo podemos encontrar ese ente? ¿Invocarlo?

-Invocarlo...Invocarlo -decía pensativo -¡Eso es! ¡Hay que invocarlo! -dije -Lo leí en un libro cuando investigaba sobre fantasmas.

Encontramos un libro enorme en la biblioteca para mostarles cómo invocar al ente.

-Miren, aquí habla sobre cómo invocar a entes de Fantasmagoría -les mostré cierta información.

-Pero...-dudaba Bayard -No lo sé, suena peligroso.

-Es lo menos que podemos hacer para saber cómo encontrar a ese ente y a Alicia -les dije -Necesitamos un espejo pequeño, un círculo de velas, una víctima de Fantasmagoría con rasgos de agresiones; o sea yo y un lugar de completa oscuridad pero que se puede obtener luz a través de una ventana.

-Lo tenemos casi todo, menos un lugar oscuro -dijo Mirana -Todo el castillo está luminoso.

-¡Ya sé dónde! -anunció el Tiempo.

(Zanik P.O.V)

Fuimos al castillo del Tiempo, él nos invitó a una habitación circular, oscura pero que puede obtener luz a través de las ventanas.

Los chicos formaron un círculo alrededor mío y de Tarrant, las prendimos y Tarrant descalzaba su pie izquierdo.

-Recuerden, a cualquier señal de alerta, tendrán que abrir las cortinas -le dije. Cerraron las cortinas, todo era oscuridad menos la débil y tenue luz de las velas. Tarrant tomaba unas respiraciones para empezar.

-Tranquilo, todo va estar bien -le aseguré mientras colocaba una mano en su hombro. El puso un mano en la herida de su pie. Yo tomé un pequeño espejo y lo utilizaba como medio para encontrar al ente.

-Cuando quiera, Majestad -le avisó a la Reina Blanca. Ella agarraba un libro -Repiten después de mí -dijo.

Y repetíamos -¡Hazte presente! ¡Te busco! ¡Te llamo! ¡En este momento para que te manifiestes! -decíamos dentro del circulo mientras los demás observaban.

El ambiente se ponía frío que nos salía vaho.

-¡Muéstrate! ¡Refléjate! ¡Manifiéstate! -seguíamos llamando al ente.

-¿Dónde estás? ¡Te estamos llamando? -lo llamaba yo mismo en cuanto lo buscaba en el espejo -¿Dónde estás, hijo de puta? -y llegué a ver una imagen muy difierente a lo que llega reflejar lo que era la habitación donde estabamos -Veo algo -avisé..

-¿Qué es? -preguntó Tarrant, preocupado.

-Veo... es otro lugar...veo unos barrotes...¡Una celda! ¡Veo a una joven de cabello rubio a dentro...sufriendo! -avisé.

-¡Es Alicia! -se impactó Tarrant -¡La tienen! -él mismo empezó a llamar al ente -¿Dónde la tienes? ¡No vas a poder con ella! ¡Puerco del Diablo, déjala! ¡Deja a mi amiga en paz! ¡Apártala de la oscuridad! ¡Aléjala de las Tinieblas! ¡No te atrevas a lastimarla! ¡No te tendrá miedo! ¡Ella no te tendrá miedo! -le decía.

-¡Ya oíste a mi hijo, maldito! ¡Deja a esa chica en paz! ¡No la toques! -le decía con tono amenazante. De pronto, así de reente, sentí que una mano invisible me apretaba el cuello, ahorcándome. Tosí.

-¡Zanik! ¿Qué tienes? -preguntó Jaque, preocupado.

-Sentí que alguien me ahorcaba -dije tomando aire -Es él.

Miré en frente...creo que se quiere enfrentar a hora con nosotros -¡Manifiéstate! -lo llamaba -¡No te atrevas a lastimar a nadie! ¿Quién eres? ¿Dónde tienen a esa chica prisionera? ¡Dinos dónde está! ¡Danos una señal! ¡Suéltala! ¡Déjala ir hacia la luz! ¡¡Yo te invoco, espíritu del mal!! ¡DINOS DÓNDE ESTÁ ESA CHICA, HIJO DE PUTA! - sentí de nuevo esa mano invisible apretándome el cuello pero más fuerte -¡Padre! -se asustó Tarrant, tratando de ayudarme -¿Estás bien? -se puso nervioso al oírme toser más fuerte.

-¡DINOS DÓNDE ESTÁ, HIJO DE PUTA! -le grité al ente sin parar de toser.

-¡Deja de ocasionar daño! -lo llamaba Tarrant -¡No puedes hacernos daño! ¡Deja de ocasionar estos males! ¡No te atrevas a lastimar a nadie! ¡Sólo dinos dónde tienen a Alicia!

-Oigan -llamó Bayard, olfateando algo -Huelo algo...huele a...a...calabozo.

-Yo también lo huelo -dijo Iracebeth -Ese olor se me hace familiar.

-¿Estás bien? -me seguía preguntando cuando ya paré de toser -Sí -le dije, algo agotado -¡Tarrant! ¡Tu pie! - vimos que la hematoma creía que hasta las venas se me torneaban negras.

-¡Oigan, ya! -dijo Mctwisp, nervioso -¡Será mejor que dejemos esto! ¡Ya saben que te pasa cuando hacemos eso de llamar a los muertos! ¡Se nos meterá el chamucho si seguimos haciendo eso! -me arrebató el espejo.

-¿Qué coño te pasa? -lo regañé -¡Regrésame el espejo!

Él, muy nervioso me negó con la cabeza. Las velas, todas y al mismo tiempo se apagaron, pero sin ninguna razón se volvieron a prender. Tarrant quedó quieto, con la cara llena de terror, mirando en frente, apuntándolo con su dedo -¿Tarrant? ¿Qué tienes, hijo? -le pregunté, pero él seguía apuntando y las velas se apagaban y se prendían solas en un parpadeo.

-¿Qué pasa? -preguntó Mctwisp, asustado.

-Es el ente -dijo Jaque viendo a Tarrant quieto y siguiendo apuntando -Lo está manejando de nuevo.

Todos se acercaron para tratar de despertar a Tarrant -¿Tarrant? ¿Viste algo? -le seguía preguntando y conforme se apagaban y prendían las velas, nos dimos cuenta que s estábamos en otro lugar. En un cuarto de celdas, frío, oscuro y tenebroso.

-Un calabozo -dije -Alicia debe estar allá, en un calabozo...¡Búsquenla! -buscábamos a Alicia en las imágenes de ese lugar donde se reflejaba -Ahí está -dijo Tarrant, todavía congelado, apuntando hacia el frente.

Vimos a Alicia en ese calabozo, más claro lo que vi reflejado en el espejo. La tenían dentro de ese calabozo, amarrada en un mástil, gritaba y gemía a través de una mordaza, se movía tratando de liberarse -¡Es ella! -dije.

-Pobrecita -dijo la Reina Blanca viendo el sufrimiento que Alicia vivía en esas condiciones.

La luz de las velas se seguían apagando y prendiendo, pero nos dimos cuenta que lo hacían acelerando su velocidad, parpadeando y vimos algo terrible. Vimos que Alicia tenía una herida de látigo en su cara y luego otra y otra y otra, sangrándole. Se estaba llenando de terribles latigazos hasta desgarrarle las carnes. Gritabamos de terror con forma la despellejaban con latigazos.

-¿QUÉ PUTAS MADRES LE HACEN? ¿QUÉ PUTAS MADRES LE HACEN? -gritaba el Tiempo, asustado.

-¡La están matando! -gritó histérica Mally.

Tarrant convulsionaba mientras seguía apuntando a Alicia, ya casi sin piel que estuvo apunto de convertirse un un costál de sangre.

-No es real -se dio cuenta la Reina Blanca -¡Despiértenlo! -ordenó.

-¡Tarrant, despierta! ¡Hijo, despierta! ¡No es real esto! ¡Están jugando con tu mente! -pero Tarrant seguía igual.

-¡Carajo, señor Hightopp, despiértelo! -pidió Mirana asustada.

-¡Eso intento!

-¡Sombrerero ridículo, despierta! -le dijo Iracebeth, dándole una bofetada.

Tarrant logró despertó, cayó al suelo -¡Alicia! -gritó asustado viendo esa imagémn y lo que quedó de su amiga era manchas de sangre, en la pared del calabozo y el mástil donde estaba atada.

(Tarrant P.O.V)

-¡Alicia! -grité, viendo que la luz de las velas se prendían y apagaban a una velocidad normal, me quedé sin aire tratnado se eguir buscando a Alicia, pero ya alfin las velas ya estaban apagadas, dejándonos en la oscuridad. Solo nos escuchabamos tratando de calmarnos del susto.

La velas se prendieron otra vez y...

Una cara horrenda, con una sonrisa terrible, de cabello negro grasoso, ojos rojos brillantes y piel escamosa se nos apareció, gritamos de horror.

Era un ente de Fantasmagoría. Riéndo se acercaba a mí caminando en cuatro patas, oía a mi padre y a mis amigos gritando de terror y histéricos que abrieran las cortinas.

-¡Tarrant, no! -mi padre me empujó apartándome del ente. Él se encimó de mi padre.

-¡Padre! -grité al ver a mi padre tirado al suelo boca arriba, convulsionando -¡Padre, escúchame! ¡Padre! -pero, él me sostuvo del cuello con tanta fuerza. Mi padre tenía los ojos rojos brillantes del eje y su terrible sonrisa. Estaba poseído. Se levantó, me sostuvo y se puso en frente de los demás, amenazando en desnucarme.

-¡Suéltalo! -le dijo Jaque desvainando su espada.

-¡No! -dijo el ente dentro de mi padre, en su boca se oía su voz rasposa -¡Me lo llevaré! ¡Lo mataré! ¡Al igual que esa chica, para después matarlos a ustedes!

-¡Las cortinas! -Les dije.

El Tiempo abrió una de las cortinas, la luz llegó a mi padre y esté gritaba de dolor y terror, sintiéndo que ardía. Logró soltarme, mi padre o el ente dentro de él, desesperado buscaba una sombra y cuando iba apartase de la luz, Jaque los sostuvo -¡Las otras cortinas! ¡Rápido! -pidió mientras le ataba a mi padre las manos a su espalda -¡Chúpame la verga, puto! -le insultó el ente.

Invadido por la luz que las ventanas deban, el ente dentro de mi padre gritaba y chillaba, mi padre cayó al suelo retorciéndose de dolor -¡Sal de mi padre, pedazo de mierda! -le grité al ente mientras se retorcía dentro de mi padre. Hasta él mismo trataba de sacárselo cuando gritaba con su propia voz y le decía al ente -¡Sal de mí, pendejo, sino quieres que te saqué cagándote!

De pronto se incorporó y me gritó en la cara, gritó tan fuerte que casu se le desgarraba la garganta. Pero, algo lo detuvo, una cierta electricidad lo debilitó.

-¡La última cortina! -grité. Jaque la abrió y mi padre empezó a vomitar.

El vómito era negro y conforme sentía el calor de la luz se volvió cenizas.

-¡Padre! -me acerqué a mi padre para desatarlo. Ya esataba libre de la posesión del ente, pero se veía débil, desgastado físicamente y desganado, pero bien -La vi, hijo -me decía con debilidad -Ya sé dónde está...en Salazen Gum...encerrada en un calabozo.

-Lo sé...todavía sigue viva -comenté a los demás.

-¡Pupipi! ¡Papupi! -oí una voz.

-¡PetitDoigt! -vi a PetitDoigt, sana y salva, ella electrocutó a mi padre para liberarlo del ente. Voló para abrazarm en el hombro -¡Me tenías tan preocupado! ¿Dónde has estado?

-¡Lichita! -exclamó ella.

-¿Lichita? ...¡Alicia! -me espanté -¿Estuviste con ella?

Ella empezó a decir que tenía cierta información para saber cómo rescatar a Alicia. Pero antes, salimos del castillo para antender a mi padre quien seguía débil.