D
Siento su calor caminando a mi lado, puedo percibir el aroma natural de su piel en una mezcla mortal con su shampoo y el perfume de su cuello.
Perfecto.
Tengo miedo de que escuche el martilleo constante de mi corazon en mi pecho, la locura de mi mente revolucionadose con su presencia. No soy inmune a ella y nunca lo seré.
Me habla del clima, del trabajo, del perro del vecino que persigue a su gato cuando la noche se pone y de cómo odia a las personas religiosas. Desde hoy tambien las odio. No hay palabra que salga de su boca que no sean dignas de admiración.
Trato de tomar el camino largo, incluso le pedi que camináramos hasta el lugar. Quiero hacer de estos momentos uno que pueda guardar en el tiempo, un corte que me acompañe por siempre en mi vida. Estoy arriesgandome a que piense que soy un tacaño que no quiere pagar un taxi, pero no es asi. No hay apuro, no con ella.
Aunque el tiempo parezca volar a su lado, yo me aferro a las manecillas del reloj y lo retardo. Retardo el final. Quiero quedarme en este lapsus por siempre, a su lado. Recorrer el mundo en su compañia aunque solo vayamos al cine.
Mis dedos se estiran y se encogen a cada lado de mi cuerpo, cosquillean por tomar su mano, por sujetar su piel y unir nuestros dedos.
O levantar mi brazo y cruzar sus hombros, pegarla a mi costado y hacer de nuestro caminar una sincronía de huellas al futuro. Pero no lo hare, no aun.
Un paso a la vez, un insignificante paso por una ruta segura puede convertirse en todo un camino a hacia algún lugar.
–Llegamos– ella dice, y otra vez me encuentro embobado en el movimiento de sus labios, al abrirse y cerrarse.
Dios, quiero hacerme de su boca. Degustar esos belfos y asegurarme de que ese labial color cereza, sabe exactamente a fruta, quiero robarme su aliento y llenar sus pulmones con el mio. Pero no lo hago, en cambio asiento y le sonrio. Y ella me sonríe.
No es un intercambio justo, porque yo solo recibí su alegria certera. En cambio ella, con su sonrisa, acaba de arrancarme el alma de un cuajo y la guardó en sus ojos para no devolvermela más.
Que se la quede, es toda suya.
Entonces entramos y bufa por la fila de adolescentes que quieren comprar sus entradas. Pero me he adelantado a todo, hace como una semana que tengo la reserva. No. No me he adelantado a ningún hecho, porque sabia desde siempre que en algún momento iba a suceder. O no, que sé yo.
Festeja mi astusia sin saber el golpe de ansiedad que me produce su felicidad y simplemente pide su combo de palomitas, gaseosas y todas las golosinas que pueda cargar en sus bolsillos.
No le diré que odio los dulces, empezaré a amarlos desde ahora como nos amo a nosotros estando juntos. Porque su alegria al contemplar los confites solo equivale a una parte de la felicidad que percibí en toda mi vida. Nunca vi a alguien sonreirle de esa manera al chocolate.
Lo envidio.
Entonces entramos a la sala y la veo intentando descifrar dónde están nuestros asientos. No le diré que son los de la ultima fila porque adoro su entrecejo arrugado y la manera en la que sus dientes capturan sus labios cuando piensa.
–Estos son nuestros lugares–
Si amor, este es nuestro lugar. El uno junto al otro. Pienso, pero no se lo digo. Guardo el secreto para mi. Así que la invito a sentarse a mi lado, justo donde pertenece y ella se acurruca en la butaca, se hace pequeña con su balde entre las manos y sorbiendo de su bebida. Es una niña en el cuerpo de una mujer.
Y la amo.
Amo todo lo que su inocencia representa en estos momentos, a pesar de que fácilmente podria ser de mi estatura, sigue siendo pequeña para mi. Y quiero estrecharla en mi brazos.
La pelicula transcurre, pero estoy demasiado embobado en sus expresiones como para saber siquiera el nombre de lo que estamos viendo.
Disfruto de su risa escandalosa que podría acoplarse a las demás pero termina por sobresalir entre todas. De su boca llena de dulce y sus labios formando una perfecta "O" ante la sorpresa.
–¿Crees que ella morirá? – Me pregunta, susurrando cerca de mi cuello mientras sus ojos siguen la escena en pantalla.
–No, creo que va a tener una larga vida– Acoto, pero no me estoy refiriendo a lo mismo que ella, ella habla de la protagonista, yo hablo de mi amor por ella.
–Va a morir, es demasiado ilusa–
–Puedo jurar que no –
Sus ojos se encuentran con los mios, entonces que sonríe como si hubiese adivinado la confusión.
Estas fueron las dos horas mas cortas de mi existencia, solo me han alcanzado para plantearme toda una vida a su lado y el de su gato. Solos los tres hasta que ella decida que somos demasiado pocos para tanta felicidad.
–Namjoon–
–¿Eh?–
–Terminó –
Es cierto, pero mis pies, mi cabeza y mi corazón están desconectados de mi sistema. Pero no quiero avergonzarme más de lo que ya estoy. Por eso le sonrio mientras la sala se desocupa, sin decir nada leemos los nombres del reparto, los agradecimientos y escuchamos la musica de fondo y aún así no nos ponemos de pie hasta que la última persona en el lugar se ha ido.
–¿Te gustó? – Pregunta mientras salimos del complejo – La pelicula...
–Si – Respondo cortante porque si ésta charla se extiende no sabría qué decir, no la vi en absoluto –Fue buena
–¿Lo fue para ti? – está asombrada, entonces comprendo que fue un fiasco.
Oh oh
–Basicamente, mi conocimiento en films es el mismo que en gastronomía – respondo con diversión
–Podria ayudar con eso, es mi punto fuerte – está orgullosa de ello, y yo tambien los estoy amor mio, yo también
–Deberia comprobarlo– añado, guardo las esperanzas de que no note la desesperación en mi voz porque esta noche no termine. No aún.
–¿Es un desafío?–
–Sip– Le sonrio y veo la luz de la competencia en sus ojos– ¿Mi departamento?–
–Hecho–
Creo que mi corazón está latiendo en mi boca, siento mi sangre espesarse y correr una maratón por mi cuerpo. Sea de la manera que sea, tendré a esta mujer en mi hogar hoy. Bendito sea el destino y mi voluntad para atreverme a hacer semejante propuesta y no desmayarme mientras las palabras salían de mi boca.
–Bien, vamos para allá –
No se qué consecuencias traerá esta decision, pero sea lo que sea, mientras me mantenga a su lado yo la aceptaré gustoso. Vamos a mi casa amor mio, te llevare al lugar en el que mis pensamientos salen y canto tu nombre entre las cuatro paredes de mi habitación.
××
¡Buen dia! 😊💕
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