9 | La cena romántica
Al día siguiente
Tirada en la cama de Derek mirando el ventanal a mi lado era lo que me gustaba, decidí faltar a clase al igual que Lydia, Scott y Stiles. No tenía tantos ánimos que digamos, prefiero estar así todo el día. Mis padres no me dijeron nada, sólo que no faltara tanto a la escuela.
Scott me contó que arrestaron a Violet pero Garrett secuestró a Liam para que el alfa le ayudara con la morena porque la iban a trasladar. Pero cuando iban a hacerlo Kate llegó con sus amigos de huesos (los cuáles se llaman "bersekers" por lo que me contó Derek) y los mató a los dos. Fue muy loco enrealidad. Pero al final del día encontró al beta en un pozo.
Volteé hacia delante al escuchar pasos, Derek estaba bajando las escaleras de caracol pequeñas. Me senté en la cama, lo miré confundida por verlo arreglado y claramente guapo como siempre, al parecer iba a salir.
- ¿A dónde vas? - pregunté curiosa mirándolo con mi cabeza ladeada. Él puso su chaqueta y me miró metiendo las llaves de su camioneta en su bolsillo que estaban en la mesa
- Necesito advertirle a la manada de Brett lo de la lista de muerte. Su líder es Satomi, una antigua amiga de mi madre - me contestó
- ¿Vas a ir solo? - pregunté frunciendo mi ceño un poco. No dejaría que se fuese si no va con compañía.
- Iré por Malia para que me ayude. Ella conoce el bosque como la palma de su mano y podría ayudarme - murmuró. Se acercó a mí y dejó un beso en mi cabeza - trataré de no tardar.
- Okey... - acepté. Empezó a caminar a la salida - ¿qué haré yo mientras no estás? Peter está perdido y no puedo molestarlo
- No lo sé. Lee, juega, escucha música ¿yo qué sé? - siguió caminando- ¡si encuentro un desastre voy a quemar todas tus armas, Alice! - gritó gracioso cerrando la puerta del loft detrás suya
Reí mordiendo mi lengua. Me levanté de la cama y caminé por el lugar silbando y buscando algo con qué entretenerme. Miré las escaleras. Siempre me dió curiosidad por saber qué había arriba y el beta nunca me dijo qué hay. Tal vez este sea un buen momento para averiguarlo.
Caminé y subí las escaleras con un poco de rapidez. Al llegar al final, es un poco grande, casi como abajo. A diferencia que en este hay una cocina, cuatro puertas y otras cosas. Sabía que las puertas eran habitaciones por lo que decidí no entrar y una era de Peter (creo). Llegué a la cocina y estaba limpia, habían muchas cosas de una cocina normal junto con un refrigerador lleno de comida rápida. No sé porqué Derek no engorda si come todo eso, quizás es por el ejercicio. Y claro, no podía faltar la barrera del medio del techo donde mi novio hacía flexiones.
Pensé un poco en qué podría hacer para quemar tiempo y no se me venía nada a la mente. Hasta que una idea llegó. Derek siempre come comida ordenada de restaurantes porque es flojo para cocinar, pero, ¿le gustará que yo le cocine un poco?. Nunca lo he intentado, tal vez deba hacerlo. Ví el reloj y eran las cinco de la tarde, ya casi la comida, y él es de buen comer. Le encanta el espagueti, intentaré a la boloñesa.
Busqué todas las cosas que necesitaría en la nevera y las dejé en la encimera, me puse un delantal blanco por si acaso me ensuciaba. Puse los espaguetis e hice la salsa, agradezco a mamá porque le encanta hacer esta receta. Minutos después estaba tarareando una canción mientras revolvía todo, me había quedado muy rico.
Escuché un carraspeo detrás mío y cerré mis ojos fuertemente. Me volteé encontrando a Derek parado en el inicio de las escaleras con una mirada divertida.
- Veo que te divertiste mucho, ¿eh? - alzó una ceja. Tenía mi delantal sucio en la parte de abajo de color rojo. Sonreí.
- Me emocioné un poco, pero...- me encogí de hombros y señalé mi creación victoriosa - ¡te hice la cena!
- Sí, ya me dí cuenta. - dijo sonriendo y acercándose. Metió su dedo meñique en la salsa y la probó - sabe a la comida de tu madre.
- Es su receta, me enseñó como hace un año en San Francisco - le contesté quitándome el delantal para limpiarlo
Lo puse en la encimera, tomé un trapo con agua y desinfectante, empecé a darle con todas mis fuerzas para quitar la mancha pero no daba. Derek se colocó detrás mío y tomó mi mano para ayudarme, recostó su cabeza encima de la mía.
- ¿Estabas practicando para cuando tengamos hijos o qué? - preguntó. Reí.
- Quizás sí, quizás no... - pensé sonriendo. Hice una mueca con duda - ¿piensas que podría ser buena mamá si llegamos a ese tiempo?
- Serías la mejor de todas - besó mi mejilla - sólo los imagino correr de aquí para allá gritando "mami" o "papi"
Reí nuevamente - habrá un mini-Derek igual de enojón que tú y una mini-Alice igual de sarcástica que yo.
Soltó una pequeña risita. Pasó el tiempo y pronto estábamos en la parte de abajo comiendo espagueti juntos en el sofá. Yo estaba recostada en el brazo derecho con mis piernas extendidas a lo largo y el hombre lobo igual sólo que del otro lado. Apenas me dí cuenta que perdí mucho tiempo cocinando y ya se había hecho de noche, Derek demoró sólo dos horas afuera.
- ¿Porqué no tardaste tanto? - pregunté dudosa para luego meter una cucharada de comida en mi boca. Por lo general él tarda mucho fuera.
- Encontramos a la manada de Brett muerta en el mirador del bosque y... No pudimos decirles.. - respondió con nostalgia - Braeden estaba ahí. La atacaron y la llevé al hospital, me quedé un rato con ella.
Braeden.
Cada vez que mi cabeza repetía ese nombre mi pecho se comprimía. Desde lo que pasó no puedo sacármela de la cabeza y siento que me vigila a cada lugar en el que estoy, pero trato de ignorarlo un poco. Tengo tantas ganas de gritarle al beta que ella quiere hacerme daño, pero no puedo, al menos no por ahora.
- ¿Amor? - preguntó Derek por tercera vez. Reaccioné. - te quedaste estática. ¿Estás bien?
- Sí, no es nada...- hice un intento de sonreír. El cual él notó enseguida por lo que frunció el ceño no muy convencido. Maldigo que me conozca tan bien - solo... Espero que las cosas puedan volver a la normalidad con esto de la lista de muerte y Kate.
- No creo que dure mucho - opinó comiendo. Yo metí nuevamente una cucharada en mi boca lentamente mirando a otra parte pensativa - ¿te ha vuelto a molestar el hombre que trata de matarte? - negué rápidamente - sabes que cualquier cosa puedes decirme
Ojalá fuese tan fácil.
- Terminé. - anuncié levantándome - iré a lavar.
- Hey. - se levantó de igual manera y tomó mi mano deteniéndome. Cogió los platos, los dejó en la mesa - estás estresada, sé que lo estás cuando te vas casi corriendo
- Es que... - jugué con mis dedos y lo miré. - Braeden... Ella.... - sellé mis labios para no soltarlo - espero y se recupere pronto...- inventé
- Lo hará. No por nada pagué tanto para que no encuentre a Kate - tomó los platos - yo los lavaré. Tú vete preparando para dormir.
Besó mi cien y caminó hacia las escaleras, al ver que despareció froté mis manos con mi rostro estresada y tenía ganas de gritar. ¡Me siento tan estúpida y perra al mentirle! Me tranquilicé y caminé hacia la cama viendo el reloj que marcaba casi las nueve. El tiempo pasa volando. Mi teléfono sonó en la mesa de al lado del colchón por lo que lo tomé y contesté.
- ¿Hola? - hablé esperando que me contestaran
- Alice - escuché la voz de mi mejor amiga pelirroja al otro lado - Stiles y yo descriframos el último tercio de la lista. Te la voy a enviar.
Me llegó una foto. - ¿y cuál era la última llave para abrirla? - pregunté.
- Oye, no sé si decírtelo sea conveniente... - murmuró - no la adiviné por alguien que murió. La adiviné por alguien que va a morir. - me aclaró - fue Derek.
Fruncí mi ceño. Eso no puede ser posible, pero si lo dice alguien que sabe quién va a morir, debería confiar en ella.
- Oh, eh... - tartamudeé - ¿Meredith te ayudó? - Meredith era la chica de la casa Eichen que también era Banshee.
- No ayudó en nada. En realidad, se suicidó no hace poco tiempo, se ahorcó. - susurró - pero bueno... No es nuestra culpa. Oye, debo irme, te llamo mañana.
- Okey, adiós... - quité el celular de mi oído y colgué. Moví mi cabeza de lado a lado tratando de olvidar lo que me dijo mi amiga, estoy muy confusa.
Revisé los mensajes y abrí la foto de la lista. Ahí estaban Liam y Malia, y otras personas que no conocía. Y mi nombre era el último y mi cabeza vale ¿VEINTE MILLONES DE DÓLARES?. Me sorprendí porque no soy sobrenatural, o quizás sí. Y ahora no sólo Braeden es la que va a intentar matarme.
- ¿Qué te pasó? - preguntó Derek con sus manos en su cadera mirándome. - parece cómo si hubieses visto un fantasma
- Lydia descrifó la última parte de la lista de muerte - contesté. Le entregué el teléfono para que la viera y me empecé a quitar mi pantalón - yo soy la última.
Él frunció su ceño claramente confundido.
- Seguramente es porque eres mi alma gemela...- pensó regresándome el aparato - ¿porqué tu cabeza vale más que la mía?
Me encogí de hombros sin saber. - tal vez para el benefactor soy más peligrosa.
- O tal vez que te puso en la lista simplemente porque le pareciste bonita. -
Me tumbé en la cama - voy a averiguar con Scott sobre esto. No puedo estar en esa lista. Ya tengo demasiado con Br... El hombre quiere matarme.
- Opino lo mismo. - me apoyó quitándose la ropa. Se quedó en interiores y se acostó tapándose con la sábana marrón, pasó un brazo por mis hombros - pero descuida, mientras estemos juntos, nada va a pasar.
Asentí. Besó mis labios cortamente y apagó la luz de al lado para dormir. Cerré mis ojos y esperé a que el día siguiente llegase.
Quise hacer este capítulo así porque se me hace que no tienen tantos momentos románticos juntos, es como un día sin tantos problemas para ellos dos. Espero les haya gustado 🖤
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top