🐼 daephilia

Una vez la carta en donde se confirmaba la aceptación de la petición para el ingreso a COEX llegó a manos de TaoZi lo primero que hizo fue sonreír.

La muchacha estaba feliz de por fin poder estar otra vez con su queridísima prima KaiLi, la vida de la joven se había vuelto tan aburrida desde que la mayor de las dos se fue a Corea que ya casi nada le divertía, las fugadas por las noches ya no eran tan divertidas como cuando estaba KaiLi, ninguna de las amigas que tenía ahora se podía comparar con aquella chica morena de ojos color esmeralda. TaoZi aún recordaba las veces que salían de algunas fiestas escapando de la policía y terminaban cansadas, con las palmas de las manos apoyadas en las rodillas mientras respiraban con algo de dificultad por la carrerilla, luego ambas se ponian a reír en medio de la calle, a las tantas de la madrugada. Pero quitando esa parte, igualmente extrañaba a su querida prima y estaba más que alegre de poder verla de nuevo.

Por otra parte, el comportamiento de sus padres. Rebobinando; las palabras que había recibido antes de subirse al avión de parte de ambos eran, por así decirlo, no normales salidas de los labios de unos padres hacia una hija.

«Felicidades querida».

«Nos alegramos por ti, cariño».

«Te enviaremos dinero necesario, solo tienes que contactarnos cada vez que lo necesites».

Vale, bien, todo correcto. TaoZi nunca se quejó ni se quejaría de que sus padres la trataban mal por que sin duda eso sería mentira, pero, ¿¡dónde coño estaban las preocupaciones y las advertencias que deberían darle a una niña de su edad!?

Acaso lo más normal no sería; «cuídate bien», «recuerda portarte de manera decente ante tus tíos», «escucha lo que tu prima KaiLi te diga», «ten cuidado con las personas», blah blah blah... Bueno, lo que unos padres normales le dirían a una hija.

Los padres de TaoZi eran, por así decirlo, demasiado buenos, tanto que a veces a esta le molestaba la manera de ser de ambos, y aunque sonara algo raro, el deseo de TaoZi era que sus padres le regañaran. Oh, qué tan raro podía llegar a sonar eso, la gente incluso la trataba de loca por la manera de pensar que tenía, devolviendo comentarios como «ya me gustaría tener unos padres que no me regañaran por cualquier cosa que hago», cada vez que recibía una de esas frases como respuestas levantaba una ceja y fruncia su ceño levemente, ya que ella parecía ser la extraterrestre entre su grupito de amigos, ¿acaso lo normal no sería que tus padres te regañaran? Para eso están, ¿no?

La cosa era que, TaoZi prefería ser regañada a ser mimada de aquella manera.

(✧)

—¡Jin TaoZi como hoy no te pongas el maldito uniforme te juro que no te vuelvo a sacar del aula de dirección por nada del mundo!

Y esa mañana como muchas otras desde que TaoZi llegó a Corea, ambas dos se encontraban en casa correteando de un lado para otro; KaiLi con el uniforme de su prima entre los brazos intentado de todos los modos posibles ponérselo y esta otra escapando de la mayor.

—¡Ni de broma me pondré esa cosa del demonio! —Berricheó la menor de las dos saltando por encima del sofá y escondiéndose detrás de este—. KaiLi jie, cada día te pareces a una vieja, deja de obligarme a ponerme eso, ¡ni que vistiendo esa cosa fuera a sacar mejores notas!

—Pero al menos yo no recibiré más quejas de parte de los profesores por tu vestimenta, además de tu mal compartamiento, claro —esto último lo dijo susurrando pero un tono suficientemente audible como para que la contraria la oyera y contratacara.

—Vamos jie, te recuerdo que tú antes eras peor que yo, todo lo que soy yo ahora lo aprendí de ti, en todo caso tú tienes algo de culpa por mi manera de ser, te recuerdo que una niña de 14 años no se escaparía sola de casa sin una de 15 acompañandola e insistiendole para ir a una fiesta organizada por los alumnos de último grado.

—Mocosa, ni se te ocurra hablar más de eso delante de XiaoYu, de la otra vez estuvo una tarde entera intertogandome cual criminal.

—Bueno, no es la primera vez que eres interrogada ¿hubo mucha diferencia a los policias de China?

—¡TaoZi!

—¿Debería contarle a YuRen lo de tu ex novia? —KaiLi no se lo dudó dos veces antes de subirse al sofá y saltar al otro lado de este, donde se encontraba TaoZi, en ese momento el uniforme ya no estaba entre sus brazos y solo se dedicaba a agarrar a la menor y amenazarla con la mirada.

—Ni se te ocurra, esa chica ya es pasado.

La menor no pudo evitar soltar una sonora risa.

—Era broma jie, nunca haría eso, sabes que te quiero mucho y no haría algo que pusiera tu vida en peligro.

KaiLi terminó por soltar a TaoZi.

—Me alegra que aún sepas pensar por mi vida, ahora piensa en mis deberes como futura presidenta y ponte el uniforme.

—Jie, eso si que no puedo aceptarlo —TaoZi golpeó las piernas de KaiLi con una patada rápida y suave, pero lo suficientemente calculada como para que la morena se cayera de culo contra el suelo.

—¡Jin TaoZi!

—¡Nos vemos en la escuela jie!

Y como de costumbre, ese día también fue sin el uniforme a clases, ganándose de nuevo un par de miradas y palabras como «que se cree, no por ser prima de KaiLi puede andar de esta manera por el recinto» que ella misma prefirio pasar de aquellas palabras y miradas por que, ciertamente, esas chicas no decían nada malo y era verdad que TaoZi, como las demás chicas de COEX, debería de llevar siempre el uniforme para asistir a clases, pero simplemente no podía porque oh, esa ridiculosa falda rosada y corta, sin duda no le agradaba, no porque fuera corta, más bien porque era rosa, demasiado rosa para una persona como TaoZi; quien acostumbraba a utilizar en su mayoría, ropa oscura o simplemente blanca.

Cuando entró al aula en donde se impartiría la primera clase del día  TaoZi se fijó que su asiento habitual estaba ocupado por otra persona y el único asiento vacío que quedaba era al lado de la chica con voz chillona de su clase, cuyo nombre aún no sabía y tampoco tenía intención de saberlo.

Se acercó al sitio vacio y dejó primero su mochila encima de la mesa, de enseguida la tipa aquella soltó las primeras palabras odiosas del día.

—Vaya, es primera hora de la mañana y el cerdo y el ruiseñor ya están sentados juntos, ¿no crees que es una mala combinación la nuestra?

TaoZi no pudo evitar soltar una corta risa y mirar hacia la dueña de la desagradable voz. Anteriormente se preguntó si aquella muchacha había nacido insultando, porque a pesar de la cara bonita y las notas altas que sacaba, juraba que su vocabulario y forma de hablar no era muy decente en una «señorita», aunque más tarde TaoZi se dio cuenta de que ella misma era así, pero no tan insolente.

—Lo siento, querida, ahora mismo me voy volando.

Y esas palabras fueron las que hicieron que todo el rostro de la chica se deformara. Quizás nunca creyó que alguien le fuera a contraatacar de esa manera.

Después de pedirle un cambio de sitio a una compañera la profesora que impartía la materia llegó y durante toda la clase, TaoZi podía sentir la mirada asesina de «voz chillona» a sus espaldas, cosa que le hacia gracia.

A segunda hora tocaba física y bueno, no era que a TaoZi no le interesara esa clase, en absoluto, le encantaba esa clase, sí, le encantaba... tan solo... no le apetecía y necesitaba fumar, esa mañana no pudo hacerlo por lo que se sentía súper incómoda sin haberse tomado al menos dos caladas y por esa misma razón, se escabulló de la segunda hora.

Tuvo que ir con sumo cuidado, como si de una espía se tratara, mirando de un lado para otro. Si algún profesor la viera o incluso, si  alguna amiga de KaiLi la viera, se metería en problemas, ¡no entendía la razón del  porqué las amigas de KaiLi le contaban todas la cosas «malas» que hacía!

Que en realidad no eran exactamente malas, simplemente fumaba de vez en cuando, o se escabullía de alguna clase, o tenía algún «debate» con algún profesor, cosas parecidas, cosas que suelen hacer alumnas y alumnos de su edad, cosas a las cuales KaiLi y las demás llamaban actos rebeldes.

Misión completa, había salido del recinto sin que nadie la viera.

Una vez salió del recinto sacó un cigarrillo, lo encendió y empezó a tomar una que otra calada, echando el humo por la boca o incluso por la nariz. Una vez que el objeto cilíndrico fue tomado completamente lo aplastó contra la pared para que el fuego se apagara completamente para finalmente tirarlo al suelo.

Sacó el móvil del bolsillo y se fijó en la hora, quedaba demasiado para ser verdad. Últimamente a TaoZi el tiempo se le pasaba demasiado lento, quizás porque no tenía con quien estar además de KaiLi, quien en su mayoría, la abandonaba para estar con su novia, Yuren. Miles de veces KaiLi le decía de acompañarlas, pero a la menor no le gustaba ser un sujetavelas, es por eso que terminaba por denegar la mayoría de esas «invitaciones».

Las demás chicas eran amables, alguna más que otra quizás, pero no las conocía lo suficiente como para estar con ellas sin tener a KaiLi de por medio, le gustaba establecer conversación con alguna cada vez que se reunían, pero no llegaba más lejos.

La única con la que quizás si se llevaba más era Kim MinSook, esa chica de mejillas redonditas a la cual encantaba de molestar, aunque terminaran al final siempre en alguna batalla de miradas o algún que otro insulto, TaoZi tenía que admitir que esa unnie era un tanto agradable, pero también, pesada en el sentido de; demasiado responsable, demasiado legal y demasiado todo lo contrario a TaoZi, bueno, exceptuando el mal genio que tenía de vez en cuando, que por cierto, a la menor le encantaba ver a la mayor enfadada y de ahí el querer molestarla.

Hablando de MinSook... TaoZi juraba que la noche anterior escuchó a su prima hablar con ella y también oyó algo de que a las primeras horas de la mañana no tenía clase.

—Bueno, el campus de SM no queda muy lejos y aún queda tiempo para la siguiente clase —una sonrisa picara de cruzó por el rostro de TaoZi—, iré a molestar a unnie.

No se lo pensó dos veces antes de ir hacia la universidad. Una vez entró en este se dirigió hacia el edificio de los dormitorios y para su suerte antes de llegar a estos se encontró a una figurita bajita, con dos moños encima de la cabeza, uno a cada lado; parecía estar leyendo algo.

TaoZi se acercó con pasos rápidos pero sordos, una vez quedó cerca de la chica le arrebató el libro de entre sus manos. Esta ante tan repentina acción se dio la vuelta, pensando que sería JunA, pero no, una vez vio a la menor detrás de ella con una sonrisa en el rostro y su libro alzado lo primero que hizo fue formular una pregunta.

—¿Qué haces aquí?

—Vengo a visitarte, unnie —la mayor rodó sus orbes y le quitó el libro a TaoZi—. Eres muy aburrida, unnie.

—¿Me vas a decir la razón exacta de porque estás aquí? —TaoZi solo se dedicó a sonreír y no contestar.

MinSook sacó su móvil de uno de sus bolsillos y encendió la pantalla.

—¿Qué haces?

—Mandarle un mensaje a KaiLi.

Rápidamente la menor le quitó el móvil a MinSook para luego dar unos pasos hacia atrás.

—No, no vas a hacerlo.

La mayor suspiró y se acercó a la contraria intentando coger el móvil, pero sin conseguirlo.

—Jin TaoZi devuelveme el móvil.

—No.

—Si me enfado no te va a hacer gracia —TaoZi soltó una pequeña risa, vaya que sí le haría gracia—. Dámelo —repitió extendiendo su mano.

—Umh, solo si prometes no mandarle ningún mensaje ni decirle nada a KaiLi jie.

—¿Cómo no le voy a decir a KaiLi? —MinSook cruzó sus brazos—. A esta hora deberías estar en COEX atentiendo en clase, no aquí tocándome las narices.

—Es que es más divertido tocarte las narices que atender a las clases de física.

MinSook respiro hondo. Esa niña le sacaba de quicio, pero no llegaría a nada hablando de aquella manera con ella.

—TaoZi, ¿acaso no te parece mal siempre hacer estas cosas? KaiLi me dijo que ya fue un par de veces al aula de profesores por tu culpa, siempre que tú haces algo mal KaiLi recibe la bronca por ti, ¿no te parece mal?

«Oh, no, de nuevo». Pensó TaoZi.

—Si te portaras mejor KaiLi no tendría que estar escuchando a los profesores quejándose de las cosas que haces, ¿no crees?

Esta vez fue TaoZi quien cruzó sus brazos y apoyó la mayoría de su peso en su pie izquierdo.

—¿No crees que eres muy pesada con esos temas?

—¿Crees que te estaría diciendo esto si no fuera porque eres prima de mi amiga de la infancia y todo lo que haces le afecta a ella?

—Sí lo harías, porque te encanta decirme que sea una persona más correcta.

—Puedo asegurarte que si no tuvieras parentesco con KaiLi no te estaría ni hablando.

—Eso me dolió —dijo llevándose la mano libre de manera exagera hacia su pecho—. Eres cruel, unnie.

—Sería mejor persona contigo si no fueras tan... —miró a TaoZi de pies a cabeza—, así.

—¿Cómo?

—Una persona tan poco responsable, que se escapa de clase, que es arrogante e insolente, que no asume responsabilidades, que mete a su prima en problemas, que habla de manera molesta, que es molesta... —paró un segundo para pensar—, ah, y que no utiliza uniforme cuando es algo obligatorio.

—¡Calma fiera!

—No, en serio, ¿porqué no utilizas el uniforme de COEX?

—Porque no me gusta.

—¿Y porqué no te gusta?

—Porque la falda es muy rosa.

MinSook soltó una corta risa—. Infantil por encima.

—¿Qué dijiste?

—Que eres infantil —pronunció marcando cada sílaba—. Por el simple hecho de que no te gusta el color rosa KaiLi tuvo que ir más de una vez a jefatura de estudios para pedir perdón por tu vestimenta.

—¿No te preocupas demasiado por KaiLi?

—Deberías ser tú la que lo haga, ya que tú provocas todo —TaoZi se quedó en silencio—. No veo la razón de no querer ponerse algo por su simple color, poniéndote el uniforme no le causarías tantos problemas a tu prima e incluso yo te lo agradecería, además, las faldas cortas te quedan bien y estoy segura de que el uniforme se te vería lindo encima.

La menor alzó una ceja, ¿acaba de oír bien? ¿MinSook le había dicho que el uniforme le quedaría bien?

Él gritó de MinSook hizo que TaoZi volviera en sí, rápidamente la mayor le quito el móvil y salió corriendo.

—¡Que llego tarde!

TaoZi rió ante repentina acción de la mayor, sacó su móvil del bolsillo y miró la hora. Ya era tiempo de ir volviendo a COEX.

(✧)

—¡Jie! ¿Dónde está mi uniforme? —KaiLi, quien se encontraba en la habitación de al lado, asomó la cabeza por la puerta con el entrecejo levemente fruncido; extrañada ante la pregunta de su prima.

—¿Me acabas de preguntar sobre tu uniforme? —La contraria asintió—. ¿El uniforme de COEX? —Volvió a afirmar—. ¿El uniforme con la falda rosa?

—¿Cuál si no?

KaiLi abrió su boca sorprendida mientras se llevaba las manos de forma exagera hacia delante de esta, rápidamente se acercó a TaoZi y le tocó la frente, confirmando si tenía fiebre o no. Esta apartó la mano de la mayor con algo de brusquedad.

—¿Qué crees que haces?

—Nunca pensé que me fueras a preguntar por el uniforme, pensé que... estabas enferma o algo —con pasos lentos la morena se acercó al armario del cajón del fondo sacó el uniforme de la menor y volvió junto a ella con él entre las manos—. Sé sincera, ¿con qué te golpeaste?

—¿Qué? Ah, nada, solo... me parece ya mal ir sin el uniforme a clases y no quiero meterte en más problemas.

—¡Vaya, desde cuando mi pequeña TaoZi se preocupa por su prima!

TaoZi tomó el uniforme que estaba entre las manos de KaiLi y luego empujó a la mayor fuera de su habitación, cuando cerró la puerta echó un suspiro.

Sí, TaoZi se ponía el uniforme para no causarle problemas a KaiLi y también porque ella misma quería; para no recibir más regaños de parte de los profesores, sí, era por eso, no por que Minsook le dijera que el uniforme le quedaría lindo, sin duda no era por eso, porque ¿en qué planeta TaoZi Le importaría lo que una persona como MinSook le dijera sobre como le quedaría algo? Sin duda en ninguno.

Bueno... quizás sí le importaba, solo un poco.