"Ayer, el amor era un juego fácil de jugar, ahora necesito un lugar para esconderme."

-(Yesterday)

—¿Sigues molesto? —Jimin dio un asentimiento, se encontraba sentado en el sofá, estirando sus piernas a lo largo, mientras su espalda estaba recargada en el reposabrazos.

Había sido sencillo, Jungkook había ido a visitarlos, pero específicamente a Yoongi, habían hablado un par de horas, pero Jimin había notado que Jungkook no paraba de sonreírle y de mirar a Yoongi, cosa que en verdad le molesto, pero trato de disimularlo un poco, no le gustaba ponerse celoso, pero el sólo hecho de ver como aquel otro alfa miraba y hablaba con su omega, le ponía en verdad totalmente iracundo y con muchas ganas de gritarle a Jungkook que Yoongi le pertenece, pero sabe que esa actitud ni siquiera es digna de un alfa, debía comportarse, todavía está cortejando a Yoongi, y no quiere que nada salga mal, y hasta ahora había logrado tener más confianza con el omega e inclusive darle besos por casi todo su rostro, pero definitivamente no permitiría que Jungkook se quedase con Yoongi, no señor.

—Alfa —canturreo Yoongi, y esto había hecho que Jimin se tensara en su sitio, era la primera vez que Yoongi le llamaba de ese modo, miro por sobre su hombro al omega que se acercaba con las manos detrás de la espalda hacía él y sin más se sentaba en medio de las piernas de él para después recargar su espalda sobre el pecho de Jimin y acurrucarse.

El corazón de Park Jimin latía desenfrenado, el aroma de Yoongi llego a sus narices, a pesar de ser apenas perceptible le encantaba, no evito sonreír olvidando su molestia de hace unos minutos.

—No te enojes conmigo —dijo Yoongi—, no pensé que Jungkook.

—Eres bonito, era obvio que le atraes —Jimin abrazo a Yoongi, y Yoongi coloco sus manos sobre las del alfa—, debo decirte que estoy celoso.

—¿Y por qué lo estarías?

—¿Por qué? Ese tonto de Jungkook quiere quitarme a mi omega, no se lo permitiré —Yoongi soltó una suave risa al escucharle.

—Todavía ni siquiera somos una pareja.

—De todas formas, no me rechaces, Yoonie —Yoongi negó con la cabeza—, mañana quiero llevarte al cine.

—Sabes que casi no me gusta ir —reclamo Yoongi, pero Jimin sabía que esas palabras eran mentiras, últimamente Yoongi ha querido demasiados mimos de parte de Jimin, el alfa se sentía complacido de poder dárselos, ama ver a Yoongi tranquilo y tan cerca suyo.

—Mentiroso —beso la coronilla de su cabeza—, si no te gustase, ni siquiera hubieses ido la anterior semana.

Yoongi guardo silencio, estaba cómodo en su sitio, tenía a Jimin detrás abrazándolo, la televisión estaba encendida y pasaban las noticias, pero ni siquiera les prestaban atención, Yoongi seguía concentrado en sus pensamientos, habían pasado muchas cosas en su vida a pesar de ser tan corta, y había logrado muchas cosas, su meta principal había sido escapar de su padre, y ahora sin querer se había enamorado cuando pensó que jamás lo haría, sin duda alguna experimentar todo aquello le había dado una buena iniciativa para sentirse realmente feliz.

—¿En qué piensas, omega?

—En lo afortunado que soy...

—Por supuesto que lo eres, me tienes a mí, ¿qué más podías pedir?

Yoongi soltó una suave risa ante esa respuesta de parte de Jimin.

—Podría pedir que dejases de creerte el centro de mi universo —menciono Yoongi en tono divertido.

—No puedo, tú eres el centro de mi universo, quiero ser el tuyo, mi omega.

—Tal vez...

—Sí o sí —Yoongi giro su rostro para mirar al alfa que esperaba que la respuesta saliera de los labios del omega, pero a cambio, Yoongi se atrevió a hacer algo que ni siquiera había intentado.

Se acomodó mejor para poder estirarse y atrapar los labios de Jimin sobre los suyos, brindándole un beso corto, el primer beso que había entre ellos, habían sido segundos, Jimin podía decir que fueron menos de cinco segundos, pero para él habían sido los instantes más largos de su vida, Yoongi dejo de mirarlo, no quería ver esa cara de asombro en el alfa, pues parecía totalmente hipnotizado por lo que había pasado.

—¿Me darás otro?

—Nop...

—Por favor —canturreo al alfa mientras restregaba su nariz por el sensible cuello de Yoongi haciéndole cosquillas—, no esperaba que hicieras eso, y debo decir que me encanto, omega, quiero otro ¿sí?

—Después, Jiminie —dijo Yoongi entre risas.

Aunque Jimin seguiría insistiendo en querer otro beso más de parte de Yoongi.