-Amistad sincera-

El Prom Night se celebraría pronto en Hexside, la joven aprendiz se encontraba inquieta ya que ésta iba a ser su primera celebración humana y tenía que dar una buena impresión. Buscaba videos con respecto al tema pero se sentía tan confundida ya que todos eran tan diferentes. Eda la vió afligida y se acercó a ella curiosa.

—Hey niña ¿qué ocurre?—se sentó cerca de ella.

—Habrá un baile en la escuela dentro de un mes llamado Prom Night y por más que estuve viendo videos en las redes sociales, todos son diferentes. Ustedes los humanos son muy extraños—murmuró al final.

—¿En tu mundo no hay ese tipo de cosas?.

—Si hay un baile llamado Grom en mi vieja escuela. Se llama así por un monstruo llamado Grometheus el terrible quien vive debajo del edificio. Este ser debe enfrentarse cada año por un estudiante elegido por la directiva escolar. No es nada fácil ya que tiene la facultad de leer tu mente y revelar tus más íntimos miedos. Si logras vencerlo te dan una corona como símbolo de valentía pero si fallas él escapará y causará estragos en todo el lugar. Afortunadamente nunca me eligieron en todos esos años que estuve allí por lo que no me interesaba ir a esa celebración, sería catastrófico si supieran lo que me asusta, tengo una reputación ¿sabes?—guiñó su ojo—¿tienes alguna idea de como son las fiestas aquí Eda? tengo curiosidad.

—Hmmm dejame recodar—colocó su mano en su barbilla y se quedó un buen rato mirando a la nada—¡Oh ya recuerdo!—esbozó una sonrisa al mismo tiempo que Luz se asustó por lo repentino de su actuar ya que se había quedarla mirando fijamente mientras pensaba—verás, en mis tiempos era muy aburrido, ponían la música de moda, los chicos intentaban bailar y coquetear con las chicas, la escuela proporcionaba bocadillos y ponche sin alcohol aunque hay quienes—se aclaró la garganta y continuó—ponían un poquito del "líquido feliz" para mejorar el ambiente, claro que nunca fui yo, fui una respetable señorita hasta donde recuerde—rió que carcajadas haciendo su singular sonido un sonido de un cerdo.

—Entonces es similar a las cosas que he visto en algunos videos por lo que me cuentas—miró su teléfono y se dio cuenta que llegaba tarde—Eda ya me voy, no quiero meterme en líos por no llegar a tiempo.

La chica tomaba sus cosas con rapidez pero la mayor la detuvo.

—Antes de que te vayas te diré dos cosas; uno algún idiota colocó gaseosa en el tanque de gas así que tendré que trabajar horas extras para repararlo por lo que que llegaré tarde y dos ya que estás con eso del bailecito procura buscar una pareja que es lo primero que escasea.

—¡Eso haré Eda!—exclamó con determinación—y suerte con ello.

Luz podría reparar su auto con magia pero Eda le tenía prohibido hacer eso, era orgullosa, quería hacerlo por su propia cuenta aunque a veces tenia la sensación de quisiera una mansión de oro aunque se negase a admitirlo.

La bruja decidió caminar en lugar de usar su bastón mágico y salir volando, el día de hoy no quería ser el centro de atención pero no le duró el capricho por mucho tiempo. Al llegar a la escuela fue interceptada por Boscha y su séquito de amigas.

—Vaya vaya al fin vino la chica rara a la escuela—chasqueó los dedos y trataron de quitarle su mochila cuando llegó Willow al rescate.

—¡Deja a mi amiga en paz!—dijo Willow apartando a Luz mientras miraba a los ojos molesta a la pelirosa.

—Awww la come hojas me está diciendo que hacer—sonrió burlona y chasqueó los dedos para que sus amigas vuelvan a su sitio—por ahora las dejaremos tranquila ya que no queremos llegar tarde y manchar nuestra reputación y asistencia perfecta pero si las volvemos a ver les irá peor.

El timbre retumbó por todo el lugar minutos después, ambas chicas vieron como sus enemigas entraron tranquilamente al edificio.

—Gracias Willow por eso, no se que habría hecho sin tu ayuda-—acomodó su mochila.

—Para eso son las amigas—hicieron su saludo especial—ahora vamos que se hace tarde.

Las chicas soltaron una carcajadas que parecían escucharse a varias millas de distancia haciendo enojar a Luz y Willow. Esperaron a perderías de vista para entrar al edificio.

Las clases transcurrieron normalmente, algunas se les complicaron a la bruja sobre todo en historia que no tenía ni idea de los sucesos que ocurrieron en aquel mundo. En su escuela era la mejor de su clase y sabía tantas cosas que usualmente la usaban como tutora para los jóvenes más pequeños o los que tuvieran algún problema con lo académico.

Luz decidió adelantarse a buscar a sus amigos para comer algo. Fue a todos los lugares donde posiblemente estarían pero nada, era como si hubieran desaparecido. Decidió ir afuera para ver si tuviera mejor suerte. Salió corriendo sin fijarse cuando chocó con alguien, era otra vez la pelirosada quien furiosa se levantó con ayuda de sus secuaces.

-—Fijate por donde...ah eres tu nerd—gruñó enfadada.

—Ay no lo siento mucho, no me di cuenta que estabas allí—trató de levantarse para ver si la otra chica había sufrido algún rasguño pero las otras chicas no lo permitieron.

—Asi que no me viste ¿eh?. No soy tan invisible como tu, rara—chasqueó los dedos para que la sostuvieran.

—Hey ya déjenme ir, dije que lo sentía—se quejó del mal trato, intentaba zafarse pero era inútil.

—No puedes simplemente chocar conmigo y salirte con la tuya—tomó su bebida y se la vertió en su cabeza—y con disculparse no solucionarás nada—de reojo vió como Amity se encontraba cerca—¡Hey Blight!, ven aquí y ayúdanos con la nueva.

A Amity no le pareció que maltrataran a su amiga así que comenzó a grabar con su teléfono.

—¿Que haces Blight?—preguntó confundida Boscha ya que quería que se uniera a la diversión. Decidió ignorarla y continuó tirandole bebidas encima.

—¿Acaso no ves que estoy ayudando?—dijo segura de si misma—y creo que lo hago bien.

—¡Pe-pero no estás haciendo nada Blight!—vociferó fastidiada de su actitud arrogante.

—Claro que si, estoy tomando toda la evidencia del maltrato de esta pobre chica, desiste de esto si no quieres que se lo envíe al profesor de Rugby y te expulse—amenazó con lo que más le dolía a la pelirosa, ella como capitana del equipo tenía que tener una perfecta imagen y eso podría arruinar su reputación y la sacarian del equipo.

—Argh ¡Esto no se quedará asi!—chasqueó los dedos y se retiró mirándolas con resentimiento.

—Creí que era tu amiga Boscha—susurró Amelia confundida.

—Ugh ¡Callate!.

Después ver como se fueron esas chicas molestas Amity se sintió victoriosa pero luego se acordó que Luz estaba hecha un desastre.

—¿Estas bien Luz?—la ayudó a levantarse.

—Si estoy bien ahora gracias a ti Amity—esbozó una sonrisa—por cierto ¿era verdad lo que decía aquella chica de cabellera verde?.

—Desafortunadamente si Luz—suspiró triste—desde pequeña nos han forzado tener una amistad pero me harté y deshice el vínculo. Como mi madre siempre decía "Un Blight siempre hace lo que quiere a cualquier costo", lo que no se esperaba es que su pequeña hija lo tomara tan literal. Ahora hago lo que quiero cuando quiero y a la hora que se me antoje—soltó una risita picara—¿segura que no necesitas mi ayuda? tengo una secadora de cabello en mi casillero y te puedo ayudar a secarte, que para eso están las amigas.

—Eh, no...no estoy bien gracias Amity—corrió lejos—¡nos vemos!.

Luz no quería que descubriera sus orejas puntiagudas y que luego le bombardeara de preguntas, sentia que no estaba lista para eso. Llegó al baño y se encerró en un cubículo. Se quitó su gorro y usó un hechizo de fuego para evaporar ese líquido dulce.

—Ugh espero que eso no deje una mancha permanente—miró su beanie con tristeza y la ropa que le había dado su madre años atrás estaba hecha un desastre.

Como ya no quedaba tiempo se apresuró a buscar un lugar para almorzar sola lejos de la gente además de que estaba cansada de buscarlos. Como pudo compró algo ligero y fue a una mesa vacía.

A la hora de la salida sus amigos se disculparon con ella ya que estaban ocupados con tareas en equipo y no tuvieron tiempo de decirle, que le darían algo al día siguiente. Se despidió de ellos ya que se sentía cansada, usó su bastón para ir más rápido. A lo lejos vió a Amity en una lujosa limusina. Curiosa fue a seguirlo desde las alturas y al llegar vió una gigantesca mansión.

—¡Wow esa si era una gran casa!—exclamó desde lo alto—como quisiera mirar a sus alrededores—estuvo a punto de hacerlo pero recordó que no era correcto espiar propiedades ajenas y desisitió de la idea.

La bruja salió volando en dirección a la casa de Eda para poder hacer sus deberes y descansar, ya que hoy no necesitaban a la súper heroína, no había peligros mágicos destruyendo la ciudad.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top