<Mina>

"Tengo que salir, vengo en una hora bebé". Aviso, besos sus labios y salgo sin ver hacia atrás.

Llevo cuatro días en los mismo, saliendo a la misma hora para encontrarme con la misma persona, el auto se estaciona en la segunda calle, miro hacia atrás y entro al auto.

"Pensé que no vendrías". Frunzo los labios al escuchar su japonés.

"No hay necesidad de hablar en japonés". Momo se encoge de hombros y pone en marcha el auto. "¿Para qué soy buena?".

"Mina no quiero manejar muy lejos así que te lo diré rápidamente y será sin anestesia". Suspiro y le hago una seña para que siga hablando. "Me gustas y mucho, no sé si lo que tienes con Chaeyoung es amor u otra cosa pero me gustaría intentar algo". Parpadeo varias veces e intento abrir la puerta.

"No, no quiero nada contigo, no lo sé, ¡ash!, ¡abre la puerta no quiero hablar contigo!". Salgo del auto y veo que lo acelera a toda velocidad.

"Mina tengo que decirte algo muy importante". Aparto la revista que estaba leyendo y la miro a los ojos.

Desde que rechace a Momo no  hemos hablado y me bloqueo de todas partes, la entiendo supongo que no es fácil enamorarse de una persona que no siente lo mismo por ti pero no lo se, sigo preguntándome la razón por la cual dude al hacerlo.

Al rechazarla supe que no quería nada con ella, aunque una pequeña parte de mi siempre se sintió atraída hacía ella, aclaro la garganta para que Chaeyoung siga con lo  que quiere decirme, últimamente ha estado actuando mejor que antes, me ha contado varias cosas de su pasado que agradezco, me a ayudado mucho a abrirme.

Entrando a mi corazón sin importarle nada, amo su valentía y me gusta que sea así conmigo, que sea capaz de decir lo que siente y piensa.

"Creo que tenemos que dar un gran paso". Inclino la cabeza y acomodo mi cabello para que no me entre en los ojos.

No entiendo que quiere decir con gran paso, nos hemos besado, casi hacemos el amor hace algunos días que, porque me desperté a la mitad de la noche, la encontré cambiándose la ropa y no pude evitar acercarme, besarla, tocarla pero nada más que eso.

Pensé que se sentiría forzada a hacer algo, que yo creo, que todavía no estamos preparadas para ese paso.

Mis manos suben a mi rostro y aprieto mis mejillas, luego muerdo mis labios intentando buscar una respuesta a lo que me esta diciendo, anticipandome a lo que quiere decirme.

"¿Que paso Chaeyoung?". Pregunto y sus ojos pasan por todo mi cuerpo, sonrío y me acerco a ella, con un poco de miedo la abrazo y escucho un suspiro.

"Quiero que seas mi novia, oficial". Mi corazón se acelera y mis ojos se llenan de lágrimas, nunca he sido tan feliz como ahora.

Ahora que se que va a estar a mi lado de una forma en la que "la sociedad" nos va a aceptar y que por fin podré gritar a los cuatro vientos que es mi, aunque creo que eso no importa, porque no me gustan las cosas posesivas, siento que las relación así no duran nada.

Por más que la personas le demuestra a la otra que es suya nunca se lo creen y hacen cosas que los lastiman, por eso y más cosas es que no me gustan.

Acaricio su espalda y beso su cuello, cierro los ojos inhalando su aroma, siempre he pensando que huele delicioso, tanto que abro un poco los labios para tomar un poco de su carne morderle.

"Mina...". El tono de su voz hace que me de cuenta que aquella acción le gustó.

"Gracias por hacerme tan feliz". Agradezco, se que me regañara o que me dirá que no tengo que agradecerle nada, que esa es la cosa más rara y fea que hay.

Pero es que no encuentro una mejor forma para demostrarle, en este momento, que ella es la persona que me hace más feliz en este mundo y que me apoya más que nada.

No podría pedir una persona mejor que la chica que está entre mis brazos, me separo solo un poco para unir nuestros labios, en un beso que sella lo que somos.

Novias que se quieren, que se desean y que saben que nunca terminarán.