20) Estallido
No había escapatoria, parecía que al fin todo acabaría. Paul sintió un inmenso dolor, pues prefería morir antes de volver a la cárcel, pero pensaba en John, él le perdonó la vida anteriormente, ¿Iba ser capaz de pagarle de mala manera? Él no quería hacerlo, definitivamente no.
Se escuchó otro sonido, era el helicóptero que tenía Phil Spector, Mal Evans, y Pete Shotton. Por otro lado, George Martin, Geoff Emerick y Brian Epstein tenían y sostenían bien a John Lennon.
— ¿No ha oído? Entréguese señor McCartney, entréguese o mataremos a su gran amigo—volvió a decir Brian.
Vio que el helicóptero estaba justo arriba de todos ellos, Paul iba a avanzar más, la distancia en la altura de este transporte y de los Empresarios con John era demasiado corta. Se acercaría para entregarse, pero prefirió quedarse en su lugar, se arrodilló y puso sus manos en la nuca.
De pronto, se escuchó un fuerte silbido, uno que resonó por todo aquel callejón abandonado. Nadie entendió a que se debía, pero Paul sí, se sentía preocupado... pero al escuchar aquel silbido clave hizo que la tranquilidad regresara por completo, sonrió alivianado, pero no demostró su reacción real. Nadie más entendió porque se había provocado ese silbido.
—Un momento, ¿Dónde está Victoria? —preguntó Jane.
—Debe seguir en el cubículo, no ha salido—aseveró Mo'.
—Ve a verla...
—No, ¡No me quiero perder este momento! Lo lograron, finalmente lo lograron, Los Empresarios capturaron a ese desalmado de McCartney.
—Nosotros le ayudamos, no te menosprecies.
Todo era una escena perfecta, el aire del helicóptero hacía que los cabellos de todos sintieran este fuerte viento. Paul no podía ver, pues había una gran luz que destellaba en su cara. Estaba muy lejos, como estaba arrodillado también, veía a John a su misma estatura, Brian sostenía la cabeza de Lennon y parecía que en cualquier momento iba a matarlo. Paul no tenía otra opción más que esperar, y rogar para que todo saliera bien.
—Al fin... esto fue más fácil de lo que creí—dijo George Martin.
—Seremos millonarios, más de lo que ya somos—aseveró Geoff Emerick.
—Sin duda... lo tenemos, los tenemos a los dos. Aunque uno valga tan poco, la cabeza de otro es lo que nos importa—dijo Brian.
Los otros Empresarios que conducían el helicóptero, apuntaban directamente a Paul. No tenían órdenes específicas de asesinarlo, pero si él intentaba hacer algo que pudiera perjudicarlo, no dudarían en llenarlo de una lluvia de balazos.
—Te voy a dar el placer, Asher—habló Brian Epstein.
—Eh... ¿De qué? —cuestionó Jane.
Jane y Maureen estaban relativamente alejadas de los Empresarios, John, y Paul... por eso no podían escuchar muy bien lo que decían.
—Eres una idiota, ya no hay duda de ello—Brian se pegó en la frente— ¡De arrestarlo! Maldita sea, arréstalo, pégalo, humíllalo. ¡Ya es tuyo!
—Lástima que no lo puedas besar, así como pretendes—se burló George Martin.
Todos se rieron y Paul miró muy molesto a Jane, sabía que no debía confiar en ella. Sabía que Jane Asher era una persona muy inteligente, que prefería cooperar con tal de lograr sus objetivos. Ella se sentía mal por dentro, quería y aseguró que algún día podría capturar a Paul, pero no quería hacerlo de aquella manera en que lo engañó sin duda, su mirada de odio y resentimiento fue algo que se quedó impregnado en Jane.
—Lo haré, voy a detenerlo—dijo decidida.
Ella caminó lentamente, demasiado, no tenía el valor para hacerlo. Pero no quería, ni soportaría, que los Empresarios se burlaran de ella. En eso, algo la hizo detenerse. Se escuchó otro sonido, era de otro helicóptero que estaba cerca de ellos, pero no podía verse. De ahí, salió una bala perfectamente disparada, que cayó en el centro de comando del helicóptero de los Empresarios. Por lo tanto, el control se perdió y la fuerza del transporte que los otros Empresarios conducían, también. Fue impresionante lo que pasó, el helicóptero que conducían Shotton, Evans y Spector cayó lentamente hacía el suelo. Epstein, Martin y Emerick miraron hacia arriba y soltaron a John. ¡Él escapó, se aventó y logró cubrir a Paul del impacto! ¡Un verdadero estallido ocurrió cuando el helicóptero aplastó a Epstein, Martin y Emerick! ¡John y Paul se salvaron por un pelo!
El estallido fue impresionante, quedó un hueco de tierra lleno de fuego. No había duda, todos los Empresarios habían muerto. Había un pequeño incendio provocado porque la máquina cayó de manera abrupta y sorprendente. Jane y Maureen quedaron impresionadas y no podía creer lo que había sucedido, el incendio se propagó, su estado de shock era más que evidente, olvidaron totalmente que Paul estaba libre otra vez, ni siquiera los hombres más poderosos del país habían podido. Era obvio que el segundo helicóptero iba conducido por Linda y Denny, pero... ¡Había alguien más! Fue la persona que provocó que el helicóptero de los empresarios cayera sobre ellos, ¿Quién había sido?
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