~"Aquella noche"~

(⚠Advertencia⚠: este capítulo tiene temas sensibles como palabras soez, se recomienda discreción)

Era otra noche de trabajo común, algo bastante simple lo que tenía que hacer comparado con otros trabajos que había hecho antes.

estaba observando desde una mesa lejana como el conjunto de hombres se reían y actuaban como idiotas, mientras una chica con el cabello negro les servía.

el único importante en la mira, el hombre humano de gran tamaño.

si las cosas no salían bien y de acuerdo al plan, él tendría que encargarse.

odiaba tener que estar trabajando en conjunto con bandas humanas, pero si el jefe decía que era para que los mismos cerdos se quitaran del camino, servía.

mientras fumaba un puro, hacía minutos había llegado, sin tomarle verdadera importancia a la hora, miraba como aquella chica araña de vestido negro cantaba, miraba algunas caras de desagrado y decepción por parte de algunos humanos frente a la chica pero ella seguía cantando sin importarle.

Ya la conocía desde hace un tiempo, y de seguro estaba disfrutando de cantar en un escenario de un lugar con tanta reputación.

-Buenas noches, bienvenido a la reina de corazones- sacándolo de sus pensamientos una mesera coneja lo miraba con una sonrisa, la misma que tenían todas las meseras- ¿desea tomar algo?-

-si, gracias, quizás un poco de whisky pero no mucho, sabes, tengo que mantener la mirada en el "juego" - dijo con una de sus cuencas cerradas a lo que la camarera asintió sonriente y se marchó.

así que los pocos monstruos que ingresaban en el local eran atendidos por monstruos, bien, al menos tenían en cuenta eso, las divisiones sociales al local no le importaban, si los clientes podían pagar por lo ingerido, sólo eran más consumidores y más ingresos.

Tenía que admitir que el ambiente era agradable, se esforzaban en hacerlo y más si era un lugar totalmente público, aunque se imaginaba que ya contaba con algún registro de riñas por la intolerancia ya sea de monstruos a humanos o humanos a monstruos.

ella volvió con su pedido y se fue a atender más mesas, el lugar se volvería un desastre dentro de poco y él solo tendría que estar de espectador, así que no perdería la oportunidad de poder tomar un poco de alcohol si venía siendo el caso.

le dio una última probada a su puro para después apagarlo con el cenicero en mitad de la mesa.

y tomó el pequeño vaso tomando en gran velocidad que le generaba una sensación candente a pesar de no tener una lengua o garganta como tal.

suspiro cansado, de verdad ya quería irse a dormir aun así su hermano se molestase con él por ni siquiera reportarse de que llegó o confirmar si el trabajo ya estaba hecho.

jugaba con el borde del vaso con sus falanges aburrido, lo triste, no estaba su hermano para molestarlo con chistes ni nada al ser algo relativamente "fácil".

ni siquiera alguna de las bonitas meseras se volvió acercar, no era que fuera alguien coqueto o que buscaba algún romance pero realmente se encontraba muy aburrido y quizás pudiera conversar con alguna sin un interés más allá y tal vez alguien a quien le gustara sus chistes, el único amigo que lo aguantaba parecía que estaba tomando el mismo fastidio que su hermanito por sus chistes.

Se paró y fue al baño de caballeros, necesitaba una refrescada y se hecho agua en su "cara", se miró unos segundos al espejo y se guiño un ojo pensando "pero qué cráneo tienes hoy guapetón" riendo en sus adentros, no era narcisista, pero si debía admitir que no estaba mal.

saliendo del baño,(que estaba algo alejado, uno de los problemas del establecimiento) la música y las risas casi no se escuchaban, por lo que pudo escuchar sin sus inexistentes orejas, un tarareo, era la voz de una dama, la cual tarareaba con total dulzura en su tono de voz y en bajo volumen, no pudo evitar quedarse quieto para escuchar como entre sonidos metálicos siendo acomodados sonaba ese dulce canto.

no iría a averiguar de quien provenía esa voz por más que a sus adentros le generaba esa duda, pero era una pérdida de tiempo y "trabajo es trabajo" pero eso no le impediría estar unos segundos más disfrutando de aquella melodía.

teniendo aún no suficiente pero con la responsabilidad en la espalda se devolvió a su mesa.

A los minutos pudo ver como por las puertas principales entraba un hombre haciendo estruendo con su ruidosa voz y un arma que disparó al aire alarmando a todos.

-¡¡¡DARBY!!! - grito el hombre con gabardina color gris asfalto y un evidente enojo.

el grupo de personas que venían detrás de él también tenían armas que apuntaban en diferentes direcciones, mientras todos los que no sabían que estaba ocurriendo, salían despavoridos para no ser alcanzados por aquel conflicto.

inmediatamente los hombres que estaban en la mesa con el gordo se pararon y sacaron armas de sabrá Dios dónde, y empezaron a disparar entre ambas caras a diestra y siniestra.

Sans sólo se teletransporto a un rincón donde sabía que no tendría inconvenientes, mientras disfrutaba de como los tontos humanos se disparaban entre ellos, impresionantemente algunos de los bandos contrarios ya estaban en el suelo inmóviles mientras la sangre manchaba el piso que asemejaba un tablero de ajedrez.

al igual que algunos inocentes que no huyeron a tiempo, por la mente del esqueleto solo paso "ojala y la dueña de aquella linda voz este bien" un pensamiento raro pero la verdad si era un anhelo suyo, pensaba que las mujeres no debían sufrir por así decirlo este tipo de cosas, no había nada peor que un hombre mafioso...y sobre todo humano, a su irónica y algo cómica percepción.

le impresionaba el hecho de que el gordo al ser un gran objetivo aún seguía vivo, lo cual lo irritaba y se decía mentalmente "ya muérete maldita bola de grasa, así me puedo ir a dormir" sip, esa era la misión de Sans, si los humanos de la mafia apodaba los "Fear" no acababa con el Don de los Darby, Sans tendría que encargarse, sería fácil, tanto como cortar "manteca" con un cuchillo caliente, igual no creía que pudiera "rodar" muy lejos de él, considerando lo vago que era y lo mucho que detestaba hacer esfuerzo físico.

se reía internamente de sus juegos de palabras, lo único que les faltaba a tales juegos tan perfectos era alguien que se riera de ellos y no solo él.

noto como alguien corría con sigilo detrás de las mesas alejadas y se dirigía al escenario, era una joven de cabello castaño corto corte Bob y uniforme de camarera, la miró y vio cómo ayudaba a salir de un escondite a la chica arácnida, la misma que el ya conocía, quitándole sus tacones negros empezaron a correr ambas, pero al parecer uno de los locos recién llegados las noto y fue detrás de ellas perdiéndose de vista por uno de los pasillos del lugar.

hubiera intervenido de no ser porque el Moby-Dick se estaba yendo con sus hombres restantes, ahora si le tocara intervenir, se teletransporto lamentándose lo mas mínimo por las pérdidas de aquellas chicas, de todas maneras no era asunto suyo.

apareció delante de los tres hombres, seguro iban a un auto o algo así pero ellos solo retrocedieron al verlo.

-¿Van a algún lado compañeros? ¿Además del infierno?- preguntó con las cuencas en total oscuridad y una sonrisa amplia causando total temor en los hombres, no podrían contra un monstruo al haberse quedado sin armas.

lo demás... se los dejo a la imaginación.

~✦~

[momentos antes en el sector cerca a las cocinas]

no importaba cual fuera el área del casino, casi siempre tendría que estar parada con esos tacones infernales, tarareaba ahora que se encontraba sola, siempre que podía cantaba sola o para dormir al niño que cuidaba, lo cual disfrutaba mucho, le encantaba ver sus ojitos dormirse de a poco, aquí... no tanto, ya que los burdos a los que atendía lo podrían tomar como insinuaciones y quería evitar más situaciones como la de hace unos momentos atrás.

suspiro cansada, en serio se había levantado muy temprano y quería descansar ya y llegar donde el pequeño, odiaba dejarlo solo durante las noches, pero no tenía más opciones...

De un segundo a otro empezaron a sonar estruendos afuera del cuarto en el que ella estaba, y...¡¿disparos?! 

genial lo que le faltaba a su día.

Eso la alarmó demasiado, asomo un poco la cabeza por fuera de la puerta para ver las dos familias de mafiosos que se estaban enfrentando, retrocediendo pegándose a la pared contuvo el aire nerviosa y con mucho miedo, odiaba el ruido de disparos.

pero volvió asomarse con algo de miedo intentando mirar donde podría salir y liberarse pero sus ojos chocaron con los de la arácnida que conoció antes ese día, estaba oculta, algo que siempre ha agradecido es la excelente vista que tenía, casi nunca le fallaba a pesar de que en su instituto sus compañeras le decían "china" o "asiática" por su aspecto entrecerrados todo el tiempo.

sintiendo en su pecho un sentimiento de querer ayudar, se escabulló detrás de todo esperando no ser detectada, ahora estaba descalza, cosa que sus pies pequeños y delicados le agradecían.

en cuanto llegó le ayudó a pararse y a quitarse también sus incómodos zapatos, estaba determinada en ayudarla a salir de allí, tomando sus manos salieron de la esquina del escenario en donde estaban.

Frisk conocía este lugar demasiado bien, ya llevaba dos años trabajando en el lugar, sabía que girando en esa esquina podrían salir por una pequeña puerta de emergencias poco concurrida.

Necesitaba salir por él...

iba tan rápido con la chica atrás que no se dio cuenta en qué momento un hombres empezó a seguirlas.

-Bien, si sigues por este camino encontraras por donde puedes salir, no te preocupes ¿si?, todo va a estar bien- dijo mirándola intentando reprimir su propio miedo que le causaba todo esto.

-Muchas gracias señorita Frisk de verdad se lo agradezco mucho- decía realmente agradecida, que una humana se hubiera arriesgado de esa forma por un monstruo como ella, la hacía ver que de verdad era una buena persona, no como la mayoría en la ciudad.

la chica salió corriendo de prisa por el pasillo y terminó saliendo por una puerta a uno de los costados del local, había algunos empleados que cuando la vieron la ayudaron a salir rápido y a ponerla más a salvo como algunos clientes también.

Frisk quien se había quedado para mirar si tenía la posibilidad de ir por sus cosas, se encontró de frente con un hombre delgado que aún tenía una gabardina puesta y la miraba con malicia mientras tenía un arma en sus manos, una ametralladora Thompson para ser exactos.

-Hola hermosa, ¿Cómo estas? hace mucho que no te veía, pensaba que estabas muerta como la perra que eras-decía acercándose a ella con una expresión maliciosa como sorprendida.

Estaban los tontos que pensaban que podían cautivar a cualquier mujer con un sentido de superioridad solo por ser un criminal y estaban los locos a los cuales el respeto no tenía ningún significado en sus mentes, lastimosamente Frisk se acababa de encontrar con un tipo de la segunda categoría y desgraciadamente era el tipo de persona que ella más odiaba en el mundo.

Pensar en eso...

la paralizó.

La conocía, el desgraciado la conocía, no sabía ni el como, le sonaba su cara de algún lado, pero sus recuerdos de esos días eran tan borrosos que simplemente no lo conocía pero el a ella si, y con lo que le dijo definitivamente la conocía y no tenía las mejores intenciones con ella.

-Pensé que este trabajo sería aburrido, pero mira con que me encontré, me encontré con una pequeña puta escurridiza, al menos mi jefe se pondrá muy feliz de saber que aún sigues en la ciudad- dijo con una amplia sonrisa con sus dientes sucios y poco descuidados.

Este loco había mencionado a una de las personas que jamás pensó en volver a escuchar o saber algo de él, no sabía en que momento comenzó a llorar desenfrenadamente y de su boca salir balbuceos sin sentido que sonaban como quejidos ahogados en sus propios gritos mudos, el corazón le iba a mil en esos simples instantes mientras le apuntaba aún con esa arma

estaba en una encrucijada, ella quería salir corriendo y escapar, pero salir por la puerta tampoco le aseguraba que estaría a salvo de ese tipo, pero tampoco podía permitirse el que la dañen, cuando comenzó a trabajar se prometió que no dejaría que nada le pasaría para no tener que dejar solo al niño .

- Oye, ¿por qué no nos divertimos un poco? y después te puedo llevar con el jefe- decía acercándose aun mas, primero muerta a tener que satisfacer a este tipo, trabajar en el casino le daba esa mala fama ya que algunas de sus compañeras si hacen ese tipo de "trabajitos", pero ella, ella era una dama y si no fuera por su tío no sería solo una camarera.

chocó contra una pared, ahora si estaba más que frita, ¿Qué podría hacer?...

él no se detenía y verla así a su merced hacía que su expresión se torciera más, no quería verlo, así que giró la cara cuando lo sintió cerca y cerró sus ojos con fuerza presa del miedo, si no estuviera contra una pared hubiera caído por lo mucho que le temblaban las piernas pero de todas maneras caería al no poder sostener se más en pie como los latidos de su corazón iban deprisa y el aire le estaba empezando a faltar.

se escuchó con fuerza un golpe metálico y algo cayendo con fuerza, abrió los ojos con esfuerzo y se encontró frente a ella a uno de los compañeros de trabajo de su tío con una bandeja alzada y el tipo de antes tirado en el suelo inconsciente, había golpeado al humano con eso para defenderla.

-¡¡¿Bochi?!! - pregunto viendo al zorro antropomórfico frente a ella sin creérselo y con gran alivio en su interior, lo conocía gracias a su tío pero jamás pensó en verlo ahí, menos hoy.

-¡Señorita Frisk! ¿Se encuentra bien?- pregunto preocupado mirándola - No se preocupe su tío viene de inmediato para acá-

-Si... gracias  ¿mi tío?- estaba confundida y aturdida con eso y el zorro solo la tomó de los hombros para ir por el pasillo en el que anteriormente se había ido la cantante arácnida, no planeaban salir por la puerta de antes, la trasera, seguramente su tío llega por ahí.

-Tranquila Señorita Clover todo estará bien- dijo al ver que la joven no dejaba de temblar

-Muchas gracias Señor Bochi, ¿así que me imagino que usted lo llamó?- seguían caminando, por alguna razón los disparos fueron disminuyendo, sería un desastre arreglar eso después.

-Si... aunque fue un martirio je... casi me deja sordo cuando le conté en cuanto comenzó el caos- decía divertido aunque la chica no lo encontraba gracioso.

[momentos antes con el de pelaje rojo]

estaba atento a lo que pudiera pasar, en la comisaría llegó una misteriosa nota la cual informaba sobre un informante fantasma y decía que habría una emboscada al tercer Don mas importante en la ciudad, que estaría en el casino "La Reina De Corazones", específicamente el Jefe de la Familia mafiosa de los Darby, un tipo que la ley ya se había hartado de él y sobre todo el comisario por cómo era su modus operandi y por haber intentado llegar más lejos con la hija más pequeña del comisario.

El inconveniente que tenía el zorro era que ahí trabajaba la sobrina de su amigo y compañero de trabajo, lo peor... A este le restó total importancia y se burló de cómo era que los criminales enviaban esto y que no les importaba.

y lo peor pasó, el si había ido para comprobar que todo estuviera bien y que no era solo un mal presentimiento lo que sentía, cuando el caos llegó al lugar, corrió como pudo a uno de los teléfonos del casino y marcando rápido esperando a que la llamada fuera receptada y contestada rápido.

-Mira vieja, si estás llamando para que deje a Frisk cantar en tu casino de mala muerte ni te lo pienses maldita ya te dije que- menciono con cierto enojo en su tono de voz, la persona al otro lado del teléfono.

-No Roger, idiota soy yo-

-¿Bochi? ¿Qué pasa? la única que me llama a esta hora es la vieja decrepita jefa de Frisk, siempre me insiste que la deje cantar frente a todos esos inútiles adictos del juego cuando su única cantante no puede, no te imaginas-

-¡AHG!,¡ no hay tiempo para esto! lo del informante fantasma era cierto Roger, ahora mismo se están- ¡¡Bang!! se escuchó de fondo dando más que suficiente contexto al que estaba atento escuchando.

-¿Bochi? ¿estás ahí? ¿QUÉ DEMONIOS ESTÁ PASANDO? ¿FRISK ESTÁ CONTIGO? ¿SABES SI ELLA LLEVÓ AL NIÑO?- preguntó preocupado levantándose de su silla rápido aún con el teléfono en su oreja- voy para allá salida trasera ya sabes- y sin más colgó.

lo cierto era que el zorro, cuando escuchó el estruendo salió corriendo dejando a su amigo con dudas al aire, ya que se le había olvidado el pequeño detallito de... Frisk, si le sucedía algo, su compañero lo mataría sin piedad alguna, daba miedo como sobreprotege a la chica de sonrisa amable.

Gracias al cielo llego a tiempo para noquear aquel maldito enfermo, le hubiera pegado mas si no fuera por el peligro que corrían ambos ahí, la verdad, ella era una joven ejemplar y muy buena, no se merecía nada de esto, sentía que su amigo hizo un excelente trabajo criando la solo y a pesar de que la sobreprotege ella era demasiado independiente, y ambos compartían ese sentimiento de justicia, lastimas que tuvo que pasar por tanto la pobre.

mientras que en la comisaría del distrito de NewHome salía un hombre de su oficina apurado sin mirar a nadie ni devolver los saludos, encendió su auto un Rolls-Royce Phantom III de color negro, y marcho a gran velocidad hacia el distrito de Waterfall con dos paradas en mente.

Hola hola!

Por fin apareció Sans y dos capítulos hoy wow! actualmente tengo escrito hasta el capítulo 9 y por eso me he permitido de a poco ir corrigiendo algunas cositas antes de publicar :3

¿Qué pasara?

¿Sans habrá regresado al local?

¿Sabremos al fin de quien se habla pero no se sabe quien es?

Mas en el próximo capítulo.

fecha 1:12/04/2022

fecha de publicación: 19/01/23