Capítulo 9.

It was the best of times,

the worst of crimes

══════⊹⊱🜲⊰⊹══════

  Audrey a veces fantaseaba acerca de cómo sería su vida si hace seis meses los VKs hubieran elegido el mal en lugar del bien. Probablemente su familia habría terminado encerrada, y la princesa (que ahora era castaña/rubia) sería forzada a tener que servir a los core four, lo cual no le parecía tan malo si eso le daba la oportunidad de pasar tiempo cerca de Evie. Sin embargo, en su fantasía, no había destrucción inminente ni muerte, de hecho la misma había comenzado con los chicos de la Isla alrededor de un caldero.

—Démosle a Auradon una probada de maldad. —Propuso Mal, viendo como la princesa malvada sacaba una manzana del interior del caldero con una cuchara de madera para luego dejarla caer dentro del mismo, entonces comenzó a revolver mientras la primera abría su libro de hechizos—. Hay maldad bajo la piel, quien coma esto será cruel. Recitó un encantamiento, viendo de reojo a Carlos y soltando una carcajada malvada mientras la música comenzaba y Jay vaciaba un cubo de manzanas en el caldero.

We got all the ways to be W-I-C-K-E-D. —Comenzaron a cantar los cuatro mientras los muchachos vaciaban cubos repletos de manzanas dentro del caldero, luego los tiraron mientras Evie sacudía su cabello y todos tomaban las frutas para finalmente quedarse con una que levantaron con orgullo. —We got all the ways to be W-I-C-K-E-D.

 La escena cambió, ahora el hijo de Cruella apareció en Auradon Prep.

C'mon! —Mencionó él, dejando caer el balde con manzanas al suelo, captando la atención de varios estudiantes en el pasillo que se lanzaron a buscarlas mientras Mal aparecía; caminando por los casilleros con una lata de spray mientras cerraba las puertas abiertas de los mismos—. Hey, hey, hey, hey, hey, hey, hey, hey, hey, haha, hey, hey, hey, hey, hey. —Cantó junto a los AKs, mientras la hija de Maléfica se detenía, colocando la espalda contra los casilleros en los que se leía «long live evil»; en ese instante Jane se aproximó a ella, usando su traje de porrista. La chica de cabello morado le ofreció una manzana.

Crashin' the party, guess they lost my invitation, boo-hoo. Mencionó la ojiverde, observando como la menor tomaba la fruta y la mordía, luego agitó su lata de spray y desvió la mirada hacia el objeto, hasta que la hija del Hada Madrina se lo arrebató—. Friendly reminder got my own kinda persuasion. —Añadió, notando como la pequeña daba una vuelta, golpeaba un casillero con la lata y la arrojaba al aire para atraparla y finalmente se retiraba mientras Mal la observaba.

Looks like this place could use a bit of misbehavior. —Dijo el pecoso, arrojando el cesto por el suelo, notando como los estudiantes saltaban para esquivarlo mientras Jane pasaba por su lado y el VK bailaba por los casilleros, girándose para llegar hasta donde estaba su mejor amiga y rodeándola con su brazo para marcharse con ella. —Happily ever after with a little flavor.

  En el jardín delantero de Auradon, Jay estaba lanzando manzanas.

Bad to the bone, with even worse intentions. —Exclamó el chico de cabello largo, pateando una hacia la banda que intentaba practicar para luego colgarse de una lámpara exterior, arrojando una fruta más y luego saltando al suelo para rodar; ponerse en cuclillas y lanzar las demás hacia Doug—. We're gonna steal the show, and leave 'em all defenseless.

 En el salón de clases, Evie ya estaba en el pasillo, con una manzana. Ya había dejado frutas para sus compañeros y su novia.

A fairy tale life can be oh-so overrated. —Dijo la princesa malvada, dejando la fruta en el atril de la profesora y girándose para llevar su dedo índice hacia sus labios mientras veía como los demás comían las manzanas envenenadas—. So raise your voices and let's get it activated, ay. —Los alentó, el Hada Madrina se aproximó al atril para tomar la fruta y morderla mientras los demás se incorporaban de sus asientos.

  Audrey la ayudó a subirse encima de dos mesas, tomándola de la mano para que no perdiera el equilibrio.

Long live havin' some fun. —Cantaron los alumnos, quienes lanzaron al aire un montón de papeles mientras Mal veía todo desde el balcón de la segunda planta.

 En el pasillo, Carlos tenía el control sobre los demás AKs, quienes hacían desastres.

We take what we want. —Dijeron todos, haciendo maldades. —There's so many ways to be wicked.

With us evil lives on the right side of wrong. —Siguieron cantando, mientras Audrey tomaba a Evie de la mano para dejarla cerca del pizarrón, quien veía como todos danzaban. —There's so many ways to be wicked.

  Mal la saludó con la mano y su mejor amiga le guiñó el ojo, todo estaba saliendo de acuerdo al plan, sobre todo cuando la descendiente de Aurora notó la interacción entre ambas VKs y; muerta de celos, tomó las mejillas de la chica de cabello azul y le dio un apasionado beso para dejar bien en claro que era su pareja. La princesa malvada le correspondió de la misma forma y al separarse, no tardaron en entrelazar los brazos para bailar juntas.

Apple, apple dip, dip. —Cantaron los otros, mientras la pareja dejaba de girar cuando sus rostros quedaron a centímetros—. Wanna try it? Tick, tick.

Take a bite, c'mon, be bold. —Tararearon los core four, cada uno por su lado—. Change the way the story's told! -Exigieron.

Luego, Mal y Evie estaban en el patio, repartiendo manzanas a los estudiantes.

-This time the dark is finally getting your attention. -Cantó la ojiverde, sirviendo una de las frutas en la bandeja de Lonnie mientras la chica de cabello azul la saludaba con la mano, la joven guerrera les sonrió antes de irse; viendo la manzana con antojo.

-We're wicked by the book and class is back in session. -Exclamó Evie, ya detrás del atril en el salón de clases, teniendo un libro que arrojó lejos.

El hijo de Jafar ahora estaba en el patio, rodeado de porristas, incluidas Jane y Audrey.

-You like it? Steal it, gotta beat 'em to the treasure. -Aconsejó el VK, mientras las chicas hacían su rutina con las manzanas, el VK acabó comiéndose la que tenía.

-A right of passage. -Cantó Carlos, lanzando manzanas hacia Bella y Adam.

-Bad just doesn't get much better! -Gritaron los core four.

-Long live havin' some fun, we take what we want, there's so many ways to be wicked. -Siguieron todos.

-Mother always knows best. -Afirmó Mal, con una mano en un mástil, vio hacia arriba y comenzó a izar su bandera.

-Show her, pass every test. -Demandó Evie, con una mano en el atril encima del libro abierto y una manzana en la otra mano, pasó una página del libro.

-Hear her voice in my head. -Mencionó Carlos, escuchando música a través de unos auriculares y quitándoselos.

-Evil is the only... -Habló Jay, en los jardines, caminando hacia sus tres amigos.

-Real way to win. -Cantaron los cuatro, haciendo una ronda.

La bandera de LONG LIVE EVIL escrito en la silueta de Maléfica estaba en lo alto del mástil, moviéndose, mientras un montón de estudiantes se reunían en el jardín delantero de la escuela.

-We got all the ways to be, hey, hey, hey, hey, w-i-c-k-e-d. -Exclamaron todos, bailando con las manzanas.

-Let's go! -Gritó el hijo de Jafar.

-We got all the ways to be, hey, hey, hey, hey, w-i-c-k-e-d. -Repitieron los demás.

-Yeah! -Elevó la voz la ojiverde.

-Long live havin' some fun, havin' some fun, we take what we want, there's so many ways to be wicked. -Siguieron todos-. With us evil lives on, evil lives on, the right side of wrong, there's so many ways to be wicked.

Mal se subió a una escalera para terminar de pintar la estatua de Bestia con su lata de spray.

Y entonces más gente salió del castillo, incluso el Hada Madrina y Bella con Adam, además de la banda escolar. Evie le dió una patada al aire.

-Hey, hey, hey, hey, we got all the ways to be w-i-c-k-e-d. -Cantaron todos. -We got all the ways to be w-i-c-k-e-d. -Se repitieron.

-We got all the ways to be w-i-c-k-e-d. -Dijeron-. We got all the ways to be...

-Wicked! -Afirmó la princesa malvada, sosteniendo una manzana con elegancia.

-So many ways to be wicked... -Finalizó Mal, llevando la fruta hacia su chaleco para limpiarla, besarla y luego lanzarla lejos.

Audrey salió de su fantasía cuando una manzana golpeó su cabeza y oyó el bullicio de la prensa que rodeaba a Mal contra la estatua de Bestia, estando a un par de metros de la princesa. Oyó todas sus preguntas, cada una más irrespetuosa que la anterior, hasta que Ben llegó a su rescate y luego el Hada Madrina intervino; echando a los reporteros y camarógrafos de la escuela para luego retirarse. La pareja real habló en voz baja, estando en su propio mundo, hasta que la hija de Aurora notó que la princesa malvada acababa de salir del castillo.

La castaña-rubia elevó un brazo para captar su atención y la joven le lanzó un beso en el aire mientras caminaba hacia su mejor amiga y su novia, interrumpiendo su momento íntimo y llevándose a su compañera de cuarto para una prueba de vestido, dejando al rey a merced de la prensa que inmediatamente volvió a buscarlo. Audrey suspiró y siguió su camino, pasando por un lado de la multitud que la ignoró (por una vez, le agradaba pasar desapercibida) e ingresando a la preparatoria.

⊱🜲⊰

En la habitación de las VKs, la lagartija que una vez fue la Emperatriz del Mal estaba encerrada en su terrario, decorado con un sillón; una nevera y una rueca en miniatura. También había un cartel en el que se leía: «NO ALIMENTAR A MI MADRE» en una caligrafía desprolija pero entendible. Aquel animal, sentada en el sillón, estiró el lomo al ver que su descendiente parecía una maldita princesa.

La rubia, parada encima de una tarima, usando un vestido con los colores del reino; permanecía sería mientras su mejor amiga la tomaba por los hombros para poder ajustar su vestido. La primera se quejó, mientras la princesa malvada terminaba de ajustarlo y subir el cierre, haciendo que la ojiverde se quedara sin aire y protestara.

-Okay, Evie, no puedo respirar. -Le informó la villana.

Su mejor amiga levantó su brazo y se colocó a su lado.

-Bueno, podrás respirar luego del Cotillón. -Dijo la chica de cabello azul, Mal dejó caer su brazo con resignación y usó su otra mano para acomodar dos mechones de su cabello que ahora estorbaban su visión.

-Sinceramente, lo dudo. -Confesó la futura Dama de la Corte, mientras su amiga le acomodaba la falda-. Tengo, por lo menos, 20 eventos luego de este y ni siquiera puedo recordar cuál es cada uno de ellos. -Añadió, elevando sus antebrazos y dejándolos caer a los costados de su cuerpo con resignación.

Sin hacer caso a su comentario, la otra VK se llevó los dedos a los labios.

-Impecable. -Murmuró con orgullo para luego quitarse la cinta métrica que llevaba alrededor de su cuello. -Y, con respecto a los eventos, estoy segura de que Audrey conoce cada uno de ellos. Tal vez podrías pedirle ayuda con eso.

Mal prefirió no molestar a la hija de Aurora con ese tipo de cosas, por lo tanto desvió la mirada hacia el perchero en el que se encontraba su chaqueta de cuero.

- ¿Evie? -La llamó la hija de Maléfica, mientras la susodicha medía el largo de su falda. - ¿Piensas en lo que estaríamos haciendo si volviéramos a la Isla ahora mismo? -Dudó, temiendo saber su respuesta.

-Ja, ja, eso es divertido. -Forzó una risa la contraria, evitando el tema. Dejó de medir y oyó la música de uno de los canales de noticias, entonces giró la cabeza hacia la televisión-. ¡Oh! ¡Mira quién está en TV!

Inmediatamente la chica de cabello azul tomó la mano de su compañera de habitación para ayudarla a descender de la tarima, la ojiverde levantó su falda con su mano libre y luego bajó de la misma.

-Mientras la pareja real continúa con su gira por el reino, tuvieron una cena con Aladdin y Jasmine. -Dijo la reportera mientras mostraban imágenes de aquella situación, mientras Evie se aproximaba a su mesa de trabajo para ver mejor la tele y la rubia tomaba asiento en su cama. En la televisión vieron cómo Mal escupía un pedazo de comida en una servilleta, haciendo reír a la ojiverde. -Hace seis meses, nadie pensó que el rey Ben y su novia del lado equivocado del puente seguirían juntos. -Añadió.

-Sí, no están bromeando. -Murmuró la descendiente de Maléfica, quien era consciente de que había gente en Auradon que todavía no aceptaba a los VKs.

-Mal debe estar contando los días para el Cotillón Real, en donde se convertirá oficialmente en una Dama de la Corte. -Siguió hablando la reportera, mientras la rubia bajaba la mirada hacia su mano en la que tenía el anillo de Bestia y entonces recordó que tenía que hacer algo. Se incorporó para rodear la cama y tomar asiento de un salto, estirándose para tomar dos libros, colocó uno en su regazo y sostuvo el segundo. Vio a la joven diseñadora, que le estaba dando la espalda, entonces se acomodó para abrir el libro de hechizos y buscar la página que necesitaba.

Evie notó esto, viéndola de reojo.

-Léelo pronto, no despacito, recuerda todo lo que necesito. -Leyó la rubia en voz alta, señalando las palabras con su dedo, cerró el libro y tomó el otro para dejar el primero en su regazo. Movió su mano, de la cual comenzaron a salir pequeños rayos verdes hasta la portada del libro, justo cuando su mejor amiga se dio la vuelta con las manos en las caderas y caminó hacia la cama. La ojiverde abrió el libro, pasando su dedo por las hojas.

-Conozco el secreto de Mal para encajar y a Ben no le gustaría nada. -Le recriminó la descendiente de Regina, colocando ambas manos en los postes de la cama. La contraria la vio de reojo y siguió con lo que estaba haciendo, ignorándola-. ¿No han tenido suficientes secretos entre ustedes dos ya?

La ojiverde dejó de pasar el dedo por las páginas para ver a la chica, definitivamente no habían tenido suficientes secretos, además lo que el rey no sabía -como su relación con Uma- no le haría daño. Pero no podía decirle eso a su compañera, por lo tanto prefirió centrarse en el tema por el que ella le estaba recriminando.

-Evie, recuerdas cómo era antes de que comenzara a usar mi libro de hechizos, ¡quiero decir; era un completo desastre! -Se justificó Mal, quien se sentía miserable, pero la contraria no debería ver eso. Nadie debía.

-Bueno, personalmente como tú mejor amiga creo firmemente que este libro de hechizos pertenece al museo. -Dijo la joven diseñadora, estirándose para tomar el objeto, su dueña se quejó y dejó caer el otro libro mientras la veía-. No me hagas esa cara. -Le advirtió.

La rubia hizo un puchero.

-Quita el puchero. -Demandó Evie, la contraria apenas movió el rostro, la chica de cabello azul ladeó la cabeza-. Mmh. Sabes que tengo razón.

Y entonces se alejó lentamente para dejar el libro sobre la cama y volver a sostenerse de los postes de la cama mientras Mal desviaba el rostro y presionaba los labios para intentar contenerse, luego se giró a enfrentar a su mejor amiga.

- ¿No extrañas correr libremente y romper todas las reglas? -Inquirió la rubia.

- ¿Robar? ¿Mentir? ¿Pelear? -Enumeró la chica que tenía frente a ella.

- ¡Sí! -Confirmó la contraria.

- ¡No! -Respondió la chica de cabello azul.

- ¿Qué? -Cuestionó la ojiverde.

-Oh, ¿por qué lo haríamos? -Le preguntó la diseñadora, rodeando la cama y tomando sus manos para ayudarla a levantarse y arrastrarla hasta la mesa de trabajo mientras entrelazaba sus brazos sin soltar su mano. -M, ven aquí. Mira dónde estamos. Estamos en Auradon. Somos chicas de Auradon ahora. -Le recordó, llevándola hasta allí para que prestara atención a la televisión en la que ahora mostraban una cita de la pareja real, en la que Ben le daba de comer en la boca.

-Desde que Mal reveló su amor por las fresas, ella ha recibido millones de cajas de sus admiradores. -Dijo la reportera, provocando que Evie chillara de alegría y la rodeara con sus brazos, ignorando la falta de brillo en los ojos de su amiga y su agotamiento físico y emocional. La soltó luego de unos instantes. -Aquí está ella, disfrutando de una íntima cita. -Prosiguió, mientras mostraban como Mal metía una fresa en la boca del rey.

- ¿Ves? Esta es la tierra de las oportunidades. Aquí podemos ser quienes queramos ser. -La consoló la diseñadora, siempre con una gran sonrisa y un enorme optimismo, sin dejar de ver lo que mostraban en la TV. -Así que, por favor, dejemos el pasado en el pasado; ¿okay?

Mal la observó, entonces la chica de cabello azul estableció contacto visual con ella luego de unos segundos.

-Además, quiero decir, ¡mira los zapatos! -Cambió de tema su mejor amiga, separándose para tomar uno de los zapatos que usaría para el Cotillón-. ¡Míralos! -Repitió.

-Muy hermosos. -Dijo la rubia, viendo como la contraria dejaba el calzado encima de su mesa nuevamente mientras reía con dulzura y luego se volteaba para verla, Mal se obligó a sí misma a forzar otra sonrisa.

Tal vez no tenía una relación perfecta que la hiciera inmensamente feliz como la que Evie mantenía con Audrey, pero al menos... tenía bisexualidad.

⊱🜲⊰

Luego de que la prueba de vestido terminara, los core four caminaban por el patio de la escuela con Dude, mientras las chicas saludaban a Evie y a Jay como si su vida dependiera de ello; mientras Mal tenía un semblante serio y se aferraba a su libro y Carlos notaba que todas las estudiantes trataban de captar la atención de sus mejores amigos.

-Lo lamento señoritas, Evie no está disponible. -Intervino el pecoso.

-Son mis clientas, C. -Le hizo saber la chica de cabello azul-. Pero es cierto... aunque no me ha invitado al Cotillón todavía.

-Lo hará, seguro está planeando una manera extraordinaria para pedírtelo, seguro te sorprenda. -Comentó Jay, guiñándole el ojo y luego saludando con la mano a dos chicas cuando pasó por su lado.

- ¿Por qué las torturas? -Le recriminó el menor del grupo mientras le daba un golpe en el brazo-. Solo elige a alguien para llevar al baile de una vez. -Le dijo, como si fuera lo más fácil del mundo, aunque para él no lo era.

-Iré solo. De esa manera, podré bailar con todas. -Respondió el ex ladrón, colocando una mano en el hombro del hijo de Cruella y luego bajándola.

-Ah, eres el experto. -Mencionó Carlos con orgullo, se detuvo-. Uhm, Jay, si quisieras invitar a alguien; ¿cuál es la mejor manera de hacerlo?

El joven volvió a colocar una mano sobre su hombro.

-Escucha, todo lo que tienes que hacer... -Comenzó a hablar el descendiente de Jafar, dejando de caminar igual que las chicas y haciendo una pausa para generar suspenso- ...es lucir como yo. -Finalizó, haciendo que Evie riera por aquella broma estúpida.

-Oh, ja, ja. -Dijo De Vil con sarcasmo, mientras el otro lo soltaba y él desviaba la mirada hacia el frente.

-Mal. -Pronunció la hija del Hada Madrina, caminando hacia el cuarteto, la VK salió de sus pensamientos para sonreírle inmediatamente; Carlos también la estaba mirando, al igual que los demás.

-Oh, hey Jane. -Saludó el pecoso.

-Hey. -Contestó la recién llegada.

-Me estaba preguntando... uh... -Le hizo saber el menor, girándose para ver a Jay mientras Jane veía a las VKs, luego los dos volvieron a establecer contacto visual- ...si te gustó el pastel de zanahoria de anoche.

-Comí el pastel de calabaza. -Le contestó la chica de ojos celestes, con una gran sonrisa.

-Oh, cool. -Exclamó el descendiente de Cruella-Uhm...

-Discúlpennos. -Intervino Jay, tomando a su mejor amigo por los hombros y llevándoselo de allí junto a su mascota, justo cuando Lonnie y Audrey llegaron para colocarse a un lado de la menor. El corazón de Evie se aceleró al ver a su novia, entonces se adelantó velozmente.

-Tengo dos espacios para dos pruebas de vestido a las 3 y a las 4, ¿quiénes los quieren? -Preguntó la joven diseñadora.

- ¡Yo! -Dijeron las recién llegadas al unísono, adelantándose unos pasos, hasta que la hija de Aurora quedó demasiado cerca de la villana. -Hola, cielo.

-Hola, princesa. -Murmuró Evie, dándole un beso en los labios a modo de saludo que fue correspondido, sin embargo se apartaron luego de unos segundos.

-Lo siento. -Se disculparon Lonnie y Audrey con la otra AK.

-Perfecto. -Exclamó la chica de cabello azul, viendo a Jane de reojo-. Te agendaré para más tarde. -Le prometió antes de alejarse un poco con sus dos clientas para poder concretar cuál horario era mejor para cada una.

-Mal. -Dijo la descendiente del Hada Madrina, la VK se aproximó a ella.

- ¿Si? -Cuestionó la rubia.

-Detesto seguir molestándote pero el Comité de Decoración necesita más respuestas. -Informó la pequeña rápidamente mientras gesticulaba con su mano libre-. Así que, por más que odie... ya sabes...

- ¿Molestarme? -Sugirió la ojiverde.

-Sí. -Concordó la contraria con pena.

-Correcto. Jane, amaría hacerlo, pero tengo que ir a clase. -Replicó la futura Dama de la Corte.

-Solo asiente con la cabeza si te gusta. -Le pidió la joven hada con desesperación.

-Okay. -Accedió la VK.

-Cubre sillas, estandarte, luces; diseño de servilletas, manteles y todavía no has elegido los souvenirs de la fiesta. -Le comenzó a enumerar la ojiceleste mientras le mostraba todo en su tablet.

-Honestamente, Jane, lo que sea...

-Pueden ser cadenas, llaveros, cubre lápices... Adoro los cubre lápices pero podemos hacer los tres. -Intervino rápidamente la pequeña hada, entonces los ojos de Mal comenzaron a brillar intensamente, asustando a la menor. La rubia cerró los ojos, tratando de calmarse, luego los abrió y le sonrió a Jane.

-Digo que los cubre lápices. -Le dió la razón la chica de la Isla.

- ¿Si? -Quiso corroborar la pequeña hada.

- ¡Sí! -Afirmó la mayor.

-No te arrepentirás. -Prometió la chica de ojos celestes, entusiasmada, haciendo reír a la VK mientras sus tres amigas regresaban con ellas.

-Apenas puedo esperar para saber cómo será tu boda. -Mencionó Lonnie, la hija de Aurora le dio un golpe en la nuca por bruta.

-Yo también. -Le dió la razón Mal para luego reaccionar y ver a las cuatro con horror-. Espera, ¿¡qué!?

-El Cotillón Real es como comprometerse a comprometerse a comprometerse. -Le explicó Jane, mientras Evie abría la boca con asombro.

- ¡Lo sabía! -Exclamó la joven diseñadora.

-Todos lo saben. -Añadió la hija de Mulán, recibiendo otro golpe en la nuca por parte de la castaña-rubia.

-No todo el mundo, ¡estúpida! -Dijo Audrey, quien parecía ser la única que notaba que la villana estaba al borde del colapso-. Mira, eso es lo que esperan que pase, pero es una gran decisión y está bien si no estás lista para eso todavía. -Trató de calmarla.

-Yo no lo sabía. -Habló la ojiverde, nerviosa, ignorando que su novio se aproximaba hacia ellas-. ¿Cómo es que nadie me dijo eso? ¿Acaso mi vida entera está siendo planeada delante de mí?

-Hola, Mal. -Saludó el rey, haciendo que la ojiverde se callara al darse la media vuelta para verlo.

-Hola, Beeeeen. -Se burlaron sus amigas, imitando el tono con el que la hija de Maléfica solía saludarlo, la villana las miró mal antes de volver a dirigir su mirada hacia su pareja; quien se aproximó a ella hasta que Jane intervino, tomando al castaño del brazo.

-Oh, oh, un momento. -Pidió la pequeña hada, llevándolo hacia un lado lejos de las demás y enseñándole dibujos de vitrales en su tablet, mientras que Audrey, Evie y Lonnie se retiraban. -Está bien, casi tan terminado con la sorpresa de la gran noche de Mal. Aquí está el de Blancanieves, el de Bella, pero el que diseñaste para Mal es mi favorito. -Dijo, haciéndole zoom al rostro de la VK para que lo apreciara mejor.

-Asegúrate de que sus ojos sean verdes. -Le indicó Ben, usando un tono de voz bajo para luego girarse a ver a su novia, quien ya estaba por irse pero se detuvo al verlo-. Uhm, te veré más tarde.

-Okay. -Accedió Mal, dándose la media vuelta y siguiendo su camino.

- ¿Cuál verde deberían usar? -Cuestionó Jane, mostrándole tres tipos diferentes de aquel color.

El rey tomó el que le pareció el más indicado.

-Este.

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