❝She said, "Let's get out
of this town, drive out
of the city, away from
the crowds"❞

══════⊹⊱🜲⊰⊹══════

  Había pasado un año desde la última vez que Uma hizo su primera y última aparición pública en Auradon.

Un año desde que los VK's, junto a Ben, habían estado buscando la forma correcta de liberar a la Isla.

  Un año desde que todo en lo que los core four pensaban, además de su graduación, era en cómo ayudarían a toda la gente a la que ya le habían dado la espalda una vez.

Y, después de que Mal y Evie -como futura Reina y Consejera Real, respectivamente- hablaran con el Consejo en representación de los VK's durante tanto tiempo; finalmente habían llegado a un acuerdo.

  A pesar de que había sido un año bastante cargado de estrés, en los que la ojiverde había soñado con los miles de escenarios posibles en los que sería capaz de reencontrarse con la bruja del mar, también había sido un año de oportunidades para todo el mundo.

Ahora era el turno de que una nueva generación de VK's recibiera las mismas oportunidades, y para eso Mal, Evie, Carlos y Jay habían regresado a su hogar.

  Un niño estaba haciendo trucos con su bicicleta mientras arrojaba los periódicos en la calle que había sido nombrada «Jay's Way» en honor al descendiente de Jafar. En la misma, había un graffiti de la silueta de Maléfica y varios pósters en los que se veía al chico de cabello largo, también había otros de sus amigos.

— ¡Hey, miren! —Gritó el menor para llamar la atención de un montón de niños que se aproximaron para tomar el papel y empezar a leerlo. — ¡Es el día del VK!

Todos salieron corriendo, emocionados, dejando el periódico en el suelo; en el que se veía una foto de los core four en un artículo que anunciaba la gran noticia.

⊱🜲⊰

  En «Mal's Court» los core four empezaron a llamar a la gente que se encontraba por allí.

—From the North to the South, from the East to the West —Cantaron los recién llegados, saludando a los VKs—. Lost boys, lost girls, you all know you're the best!

—Hit the streets, it's your day! —Dijeron los core four mientras formaban una ronda en medio de la calle y observaban hacia el cielo—. Turn it up, now's your chance, it's time to get up on your feet and dance, whoo! —Dicho esto, bailaron en sus lugares y luego los chicos unieron sus manos en el centro, las chicas imitaron sus acciones antes de separarse para ir hacia diferentes sectores de la Isla.

—Anybody wanna be like us? —Dudó la chica de cabello morado, mirando a una niña que los observaba desde su ventana, con su aplicación en mano—. Everybody wanna be like us!

—Hey! All the boys from Auradon. —Dijo Carlos, destapando a un chico que dormía en el refugio y ofreciéndole su mano para ayudarlo a levantarse, él la tomó—. And the girls 'cause they know what's up, huh! —Insistió y rodeó la cama para treparse a las demás, con la intención de que nadie se perdiera la celebración.

—Your life could change today, your life could change today! —Aseguró Evie, quien estaba de brazos cruzados observando cómo Dizzy barría la entrada de Curl Up & Dye, los abrió y la pelirroja soltó la escoba para abrazarla; riendo con ternura al volver a verla.

—These streets named after us, because we paved the way! —Alardeó Jay, sosteniéndose de un palo y haciendo piruetas hasta que el repartidor del periódico se detuvo a su lado, le acarició el casco.

—Everyone come and take your shot... —Cantó Mal, quien estaba terminando su graffiti del VK DAY, se giró para ver a su mejor amiga y le guiñó el ojo antes de arrojar la lata de spray a un cajón. Juntas abrieron una puerta corrediza.

—Now's the time, show 'em what you got, ah... —Dijeron las dos, viendo a más VK's salir para comenzar a bailar delante de ellas—. 'Cause everyone is gonna get their chance.

—They said that being from the Isle was bad... —Siguieron cantando, empezando a saltar en el medio de los demás.

—Well, it's good to be bad... —Se les unió el descendiente de Jafar mientras se deslizaba sobre un techo. —And we're proof of that! —Presumieron con orgullo, mientras él se encontraba con la gente que dormía allí, con quienes comenzó a hacer piruetas.

—Used to be lost, now we're on the map, used to steal stacks, now we're giving back. —Cantaron —Remember that, it's good to be... bad!

—If you got pride, raise your V's up high. —Dijeron mientras todos saltaban por la terraza, divirtiéndose—. Wave 'em wide, side to side, feel the vibe, it's good to be bad! —Jay dio una vuelta, feliz.

Carlos dio un salto para darle una palmadita a un chico que dormía en una cama marinera y tomó una almohada para arrojársela a otro que aún dormía en una hamaca, se deslizó para despertar a otra muchacha mientras los huérfanos lo seguían con sus hojas en la mano. Él se subió a un banco para tocar una campana antes de salir corriendo hacia la salida, guiando a todos.

  Abrió la puerta de «Carlos' House», aquel refugio para todos los habitantes Perdidos de la Isla, de donde salió danzando y dando vueltas.

Mientras tanto, la princesa malvada caminaba por «Evie's Alley» con un grupo de chicas.

—I wanna see you all rep your block, I wanna see you all rep your block. —Les dijo la chica de cabello azul, elevando su brazo y aplaudiendo, mientras bailaba y todas la imitaban; incluyendo la hija de Drizella.

—Hey!

—Show your pride, let me hear ya shout... —Dijo, girándose mientras más chicas se le unían.

—We're from the Isle of the Lost! —Gritaron todas con orgullo.

—Yes!

—We're here to celebrate, we're here to elevate... —Cantó Evie, dando dos vueltas y bailando—. If you're down, then make your move, but you best not hesitate! —Dijo, retrocediendo entre las demás y girándose para luego mirar al cielo con una gran sonrisa.

—Come on! —Las alentó De Vil.

—Today's the day that you won't forget... —Prometió la ojiverde, caminando hacia el puesto ambulante de la hija menor del Hombre Sombra quien le sonrió, la saludó con la mano mientras ella mezclaba las cartas y la mayor se colocaba delante de la VK, quien le mostró las mismas—. The best to come ain't happened yet, ah.

  La descendiente de Maléfica tomó una y la observó.

—Take a bow, it won't be your last. —Dijo, enseñándosela a la tarotista con una sonrisa. En ella se veía el dibujo de una persona llegando al final de su camino. Celia se levantó para modificar el cartel de su puesto y Mal fue tras ella.

—You're from the Isle if anybody asks, whoo! —Cantaron ambas mientras la mayor colocaba una mano sobre el hombro de la menor y salían de aquel callejón juntas.

—It's good to be bad, and we're proof of that. —Cantaron todos los VKs que ahora avanzaban juntos bailando en la plaza, los core four lideraban al resto—. Used to be lost, now we're on the map, used to steal stacks, now we're giving back.

—Remember that! —Dijeron. —It's good to be... bad! —Insistieron, luego giraron y Carlos y Evie rodearon a la multitud por el lado derecho mientras que Jay y Mal lo hacían por el izquierdo, al mismo tiempo en el que el resto del grupo avanzaba.

—If you got pride, raise your V's up high. —Siguieron cantando todos, danzando y disfrutando del momento, mientras los core four se apresuraban a subir hacia el balcón—. Wave 'em wide, side to side, feel the vibe, it's good to be bad!

—They can try to deny our style, but we were born this way! —Alardeó el hijo de Jafar, tocándose el pecho con orgullo y cantándole a la multitud que se giró a verlo, señaló a la nieta de Lady Tremaine—. 'Cause you can take the VK outta the Isle, but you can't take the Isle out the VK! —Mencionó con entusiasmo.

—If you wanna make it hype, not a moment to waste. —Cantó el pecoso, señalando hacia todos lados—. Make it loud, make it live, make it jump to the bass.

—Make it what you want, but you'd better make your case. —Insistió el menor de los core four, golpeando su pecho con ambas manos—. 'Cause the Isle makes us and we're reppin' this place! —Dijo, mientras Jay se colocaba a su lado.

—So when I say "V", you say "K" —Les dijeron los core four, levantando los brazos. —V!

—K! —Contestaron los demás, alegres.

—V! —Repitieron Evie, Jay, Carlos y Mal.

—K! —Gritaron los otros.

—When I say "all", you say "day" —Les dijeron los core four mientras los chicos se trepaban a la baranda del balcón—. All...

—Day! —Respondió la multitud.

—All... —Volvieron a insistir los primeros VKs que habían sido elegidos para ir a Auradon.

—Day! —Contestaron los demás.

—When I say "V", you say "K" —Repitieron los core four mientras los muchachos saltaban, siendo atrapados por cuatro chicos que los estaban esperando abajo—. V!

—K! —Gritaron los demás.

—V! —Repitieron los core four mientras los chicos corrían a posicionarse con los demás hasta estar al frente.

—K! —Contestaron los otros.

—When I say "all", you say "day" —Dijeron Jay, Carlos, Evie y Mal, mientras las chicas se juntaban en el centro del balcón.

—All day! —Gritaron todos antes de comenzar a bailar en sincronía, moviendo los brazos y las piernas mientras las VKs que observaban desde las alturas solo improvisaban pasos.

—Come on! —Los alentó De Vil, mientras la hija de Maléfica movía los brazos como si estuviera tocando una batería y la descendiente de Regina movía los hombros. El pecoso se abrió de piernas en el suelo, teniendo a su mejor amigo detrás.

—Hey! —Dijo el chico de cabello largo, moviéndose hacia un lado y simulando levantar al menor de los core four, al igual que los demás hacían lo mismo con sus respectivas parejas; incluso Dizzy con Celia.

—It's good to be... —Tararearon los demás.

—Bad! —Contestaron los que estaban en el suelo, terminando de incorporarse con un salto y dándose la vuelta para correr con el mayor, esquivando a los demás quienes seguían bailando y regresando hacia las escaleras para subirlas a toda velocidad.

—It's good to be bad! —Cantaron todos y saltaron—. And we're proof of that! —Siguieron, sin dejar de danzar.

—Used to be lost, now we're on the map. —Prosiguieron. —Used to steal stacks, now we're giving back.

—Remember that... —Repitieron con orgullo—. It's good to be bad! —Dijeron con entusiasmo.

—If you got pride, raise your V's up high. —Insistieron—. Wave 'em wide, side to side, feel the vibe...

—It's good to be bad! —Finalizaron, alzando los brazos en los que los VKs tenían las solicitudes, señalando a los core four quienes los apuntaban a ellos.

La multitud se puso a gritar y a aplaudir, mientras Carlos y Jay corrían para bajar las escaleras.

— ¿Quién quiere ir? —Dudó la chica de cabello morado, mientras su compañera señalaba a alguien, luego ella hizo lo mismo—. ¿Tú?

— ¡Sí! ¡Eligeme, Mal! ¡Eligeme! —Contestó la niña a la que había señalado, mientras varios VKs recogían las hojas de los demás.

  El señor Smee, junto a sus dos hijos, se abrió paso entre la gente.

Mal y Evie intercambiaron miradas antes de que la primera riera y ambas se alejaran para esperar las solicitudes que los VKs terminaron de agrupar para entregárselas a los core four, mientras la multitud hablaba entre ellos, hasta que las chicas regresaron a la baranda del balcón con dos solicitudes en sus manos; al igual que los chicos tenían las suyas. Los VKs gritaron de nuevo y las muchachas se pusieron a saludar mientras la hija de Drizella daba saltitos de emoción.

— ¡No puedo creer que este día finalmente ha llegado! —Comenzó a hablar Evie, su mejor amiga gritó junto a los demás—. Honestamente, desearía que pudiéramos llevarlos a todos con nosotros y, algún día; muy pronto, tal vez podamos... —Dijo, girándose a ver a Mal por unos instantes hasta que ella rompió el contacto visual para ver a los VK's.

—Sí, vamos a volver tantas veces que ustedes van a estar tan hartos de nosotros. —Bromeó la chica de cabello morado, mientras la princesa malvada se acomodaba un mechón de su cabello.

—Tan hartos de nosotros. —Repitió ella, riendo con los otros. — ¿Pueden darme unos redobles de tambores, por favor?

  Todos comenzaron a pisotear el suelo, emocionados y ansiosos.

—Primero, me gustaría comenzar con la nieta de Lady Tremaine, la hija de Drizella; mi dulce y tierna mejor amiga, mi hermanita, mi Dizzy. —Habló la chica de cabello azul quien se llevó la mano al corazón, mientras Mal la señalaba por unos instantes y luego la primera imitaba su acción, solo para ver cómo la pelirroja se puso a chillar de emoción antes de correr hacia el balcón mientras todos aplaudían y gritaban. Pasó a un lado de Jay, con quien chocó los puños, luego subió las escaleras y abrazó a las dos VKs por unos instantes.

Carlos desdobló el papel que tenía.

—Siguiente, el hijo de Smee. —Habló el descendiente de Cruella, los menores se miraron, pues eran gemelos. — ¡Ven, Squeaky! —Lo alentó, moviendo su brazo.

  Su padre soltó su mano y el pequeño empezó a avanzar hasta llegar al VK, lo abrazó y el pecoso le correspondió con una gran sonrisa.

—Y de ninguna manera vamos a separar a los gemelos así que ¡ven aquí, Squirmy, vamos! —Prosiguió Jay con emoción, agachándose y golpeando el suelo. El otro niño se apresuró a correr hacia él, mientras Carlos le daba una suave palmadita en el hombro a su hermano.

—Y por último, pero no por eso menos importante, todos elegimos a esta chica porque concordamos en que ella podría usar un poquito de la clase de Bondad Correctiva del Hada Madrina... —Siguió hablando la ojiverde, mientras Evie hacía el gesto con sus dedos junto a su mejor amiga— ¡Denle un fuerte aplauso a la hija del Dr. Facilier, Celia! —Gritó, señalándola.

—Soy mala. —Presumió la chiquilla, señalándose a sí misma y dando una vuelta, acomodó su cabello y se dispuso a subir las escaleras con elegancia mientras la multitud gritaba y hacía reverencias.

Mientras Jay, Carlos, los gemelos y Celia subían hasta donde estaban las chicas y la última estrechaba la mano con la VK que la había elegido; y Evie tenía un brazo alrededor del hombro de la joven diseñadora, el grupo estaba feliz.

—Volveremos por ustedes la próxima semana, chicos, ¿okay? —Dijo el pecoso.

—Sí, así que empaquen sus cosas, sus propias cosas... —Aclaró Jay, haciendo reír a los demás.

— ¿A dónde estamos yendo? —Preguntaron Mal y Evie al unísono.

— ¡Estamos yendo a Auradon! —Gritaron Dizzy, Celia y los demás.

⊱🜲⊰

  Una semana después, Mal estaba en el balcón del Castillo de Bestia, observando el océano a través de sus binoculares hasta que los apartó de su rostro; inclinándose un poco más hacia adelante.

—Sé que estás en alguna parte. —Dijo la chica de cabello morado, volviendo a usar los binoculares para inspeccionar el agua con más atención, esperando ver un brillo; un tentáculo, una trenza, lo que sea. Cualquier cosa que le hiciera saber que ella estaba bien, cualquier cosa que confirmara que sus sueños no eran los únicos lugares en los que podía reencontrarse con la hija de Úrsula. —Por favor... No puedes estar a la deriva por tanto tiempo. —Murmuró, hablando sola, lo cual no le avergonzaba porque los guardias que custodiaban las puertas del balcón ya estaban acostumbrados a oírla.

Estaba tan concentrada en su búsqueda que ni se dio cuenta de que el castaño había salido a buscarla, caminando lentamente hacia ella para tomarla por la cintura con ambos brazos, haciéndola ahogar un grito mientras él reía.

—Idiota. —Dijo la ojiverde entre risas, bajando los binoculares para dejarlos en la baranda mientras el recién llegado la soltaba y ella lo miraba.

—Lo siento, no pude resistirme. —Se disculpó el rey, viéndola con ternura. —Y extrañaba eso.

— ¿Extrañabas qué? —Cuestionó la descendiente de Maléfica, elevando una ceja.

—Tu risa. —Respondió el joven, haciéndola suspirar antes de que volviera a ver hacia el horizonte, Ben la imitó.

—No hay ni un tentáculo a la vista. —Le cambió de tema la VK.

–Creo que si Uma planeara algo, lo sabríamos. —Quiso consolarla el descendiente de Bella, mirándola nuevamente. —Sé que la extrañas, sé que esperas reencontrarte con ella, pero es una chica inteligente y tiene recursos. Estoy seguro de que está bien. —Dijo.

—No, no lo sabrías, Ben. Yo sé cómo piensan los villanos. Y confío en Uma, aunque quiso tirarte a los tiburones. Y sé que está planeando algo, me lo ha dado a entender cuando la veo en mis sueños, y sea lo que sea... tengo que averiguarlo. —Lo corrigió Mal, viéndolo a los ojos para luego bajar la mirada. —Claro que la extraño, ha pasado más de un año... Ella es inteligente, pero está sola. En la Isla tenía recursos, afuera... no tiene nada. Ni a nadie. Ni siquiera a mí. Esperaba verla alrededor de la Isla en el Día del VK, pero no apareció.

—Hey, tranquila. No estás sola en esto, ¿si? —Murmuró el AK, tomando sus manos. —Está sola, pero es libre ahora. Seguro se las habrá arreglado. Y que no haya aparecido en el Día del VK no significa que le haya sucedido algo malo, tal vez simplemente no quiso quitarles oportunidades a los demás. —Le sugirió.

—Lo sé, pero la conozco. Auradon le dio la espalda, yo la volví a traicionar... Ella va a esperar hasta que nuestras defensas caigan y entonces va a atacar. —Dijo la hija de Maléfica, viendo sus manos entrelazadas y soltándolas para tomar los binoculares. —Realmente desearía tener más tiempo para poder hacer mi vuelo de dragón porque podría ir mucho más alto... —Añadió, haciendo pucheros y volviendo a colocar el objeto a la altura de sus ojos.

—Mal, hiciste uno hace media hora. No puedes estar en todos los lugares al mismo tiempo. —Le recordó el rey, tomando los auriculares y bajándolos para dejarlos en la baranda, captando la atención de la contraria. —Además, yo te cuido la espalda. Estamos en esto juntos. Somos un equipo. Rey y rei...

—No aún. —Lo interrumpió la muchacha, viendo de reojo hacia los guardias que estaban en las torres, vigilando el perímetro. —Solo es un compromiso falso, para unir a la Isla y Auradon. —Dijo, más para sí misma que para él, a quien volvió a ver.

—Confía en mí. No haría nada para perjudicarte. —Aseguró Ben, mirándola a los ojos y pasando su brazo tras su espalda para dejar una mano en su hombro. —Vamos, la multitud nos está esperando.

—Espera. —Pidió Mal, tocando su brazo con delicadeza, él la soltó para tomar sus manos. — ¿Conseguirás más guardias? —Cuestionó.

—Conseguiré más guardias. —Le prometió el joven. —Ahora, respira. —Le indicó, entonces los dos inhalaron juntos y ella se echó para atrás al exhalar, viendo al cielo antes de volver a enderezarse.

  Ben volvió a colocar una mano en su hombro mientras Mal posicionaban un brazo en la espalda baja del contrario, quien le aseguró en voz baja que todo estaría bien, pasara lo que pasara; porque él estaría a su lado.

⊱🜲⊰

En el jardín delantero de Auradon Prep, Evie y Audrey estaban repartiendo carteles a las personas que no tenían, tomándolos de una pila que Lonnie sostenía.

—Okay, entonces, estos chicos son más jóvenes; así que podríamos lidiar con algo de nostalgia. Y también son algo toscos, pero son buenos. —Dijo la princesa malvada, caminando con las AKs, mientras la hija de Aurora entregaba los carteles.

—No te preocupes, todos han sido vacunados, no vamos a tener a ningún enfermo. —La tranquilizó Audrey, quien ahora estaba rubia—. Lo más importante es hacerlos sentir en casa.

— ¿Qué es lo que haría yo sin ti? —Dudó la descendiente de Regina, mirándola con cariño.

— ¿Balancear tu propia chequera? ¿No saber hacer los mejores smoothies del reino? —Bromeó la princesa de Auroria, haciendo reír a su novia, mientras se aproximaba hacia su rostro para besarla; sin embargo Lonnie se aclaró la garganta.

—Detesto interrumpir, pero Aud, tu abuela está con Chad. —Intervino la joven guerrera, haciendo que la pareja se apartara de mala gana.

—Si Don No-Supero-Que-La-Más-Bella-De-Auradon-Es-Lesbiana le está diciendo que debería volver con él... voy a golpearlo. —Gruñó la rubia entre dientes, tomando el último cartel de bienvenida a los VK's que les quedaba.

—No tienes que ir si no quieres, puedes quedarte con nosotras. —Dijo Evie, quien aún recordaba el incómodo espectáculo que esos dos habían iniciado durante su primer Día de la Familia en el reino—. Nos encargaremos de Chad después, amor...

—Sabes que no hay nada que me encantaría más... —Exclamó su pareja, acariciando su mejilla.

— ¡Audrey! ¿Acompañarías a tu abuela, querida? —Se oyó la voz de Leah, las adolescentes intercambiaron miradas y la susodicha no tuvo más opción que asentir con la cabeza.

—Lo intenté. —Admitió la princesa con resignación, acomodó su cabello y se giró para ir hacia ellos, pero Lonnie tomó su mano para detenerla.

—Si alguno de los dos se desubica, solo tienes que mirarme e iré a sacarte de ahí, ¿okay? —Le hizo saber la joven guerrera, la contraria asintió antes de dirigirse hacia su pariente y su ex novio. —No me gusta que esté aquí.

—A mi tampoco, Lo. —Susurró la VK, viendo como la rubia llegaba junto a ellos y le ponía el cartel en la cara al príncipe de Charmingtown antes de saludar a su abuela con dos besos en las mejillas, entonces suspiró—. Esa mujer me pone muy nerviosa, pero con suerte solo estará cerca de ella por hoy. —Dijo, tratando de calmarse.

—Espero que tengas razón. —Habló la capitana del equipo de R.O.A.R, desviando la mirada hacia Carlos y Jane que estaban entre la multitud y a Jay que se encontraba junto a las porristas, luego volvió a ver hacia el frente—. ¡Aquí vienen!

  La banda escolar comenzó a tocar mientras Lonnie y Evie se adelantaban un poquito hacia el escenario, la princesa malvada unió sus manos, mientras la pareja real era escoltada a través del jardín por los guardias reales. Mal saludaba a quienes veía con su mano libre, ya que la otra estaba entrelazada con la de Ben, quien también saludaba. Incluso sus padres aplaudían mientras las porristas hacían una pequeña coreografía y todo el mundo aplaudía hasta que los recién llegados se subieron al pequeño escenario que había en medio del lugar.

La hija de Maléfica señaló a sus amigos y avanzó por la tarima con la intención de ir hacia ellos, pues aún no le gustaba ser el centro de atención de todo el reino, pero el Hada Madrina le hizo un gesto con su brazo.

— ¡Oh, quédate! —Le pidió la mujer con amabilidad.

— ¿Quedarme aquí? —Repitió la ojiverde, señalando su lugar, la mayor asintió y la VK acomodó su cabello mientras el castaño llegaba a su lado; colocando una mano tras su espalda mientras los dos volvían a saludar a la multitud, luego se miraron cuando la música finalizó.

—Bibidi Bobidi, uno, dos, uno; dos, ¿pueden escucharme todos? —Habló la madre de Jane a través de su micrófono, mirando a la gente, quien se puso a gritar.

— ¡Sí! —Respondió su hija, quien sostenía el brazo de su novio, a quien observó reír.

  La adulta se giró hacia el rey.

—Ben. —Lo llamó, extendiendo el micrófono hacia el joven, quien lo tomó.

—Gracias, Hada Madrina. —Exclamó el muchacho, metiendo una mano en el bolsillo de su pantalón y tomándose un momento para observar hacia su pueblo con una gran sonrisa—. ¿¡Cómo están, Auradon!? —Quiso saber.

Todo el mundo se puso a gritar y a aplaudir, los camarógrafos seguían apuntándolo, transmitiendo todo en la gran pantalla que estaba en el palacio.

— ¡Gracias! ¡Muchas gracias por venir a darles la bienvenida a los recién llegados! ¡Ellos estarán aquí pronto! —Habló el castaño con entusiasmo, ignorando que sus progenitores aplaudían lentamente, no estando tan encantados con la idea.

—No es como si tuviéramos elección. —Le susurró Leah a su nieta, quien solamente suspiró. No iba a decirle que la nueva generación de VK's que llegaría dormiría en el castillo de su novia, en el que ella también pasaba las noches.

—Funcionó muy bien para los primeros cuatro. —Prosiguió Ben.

— ¡Sí, especialmente para ti! —Le comentó Chad, logrando que la rubia que estaba a su lado chasqueara los dedos para callarlo.

—Qué gracioso. —Mencionó la hija de Aurora, porque así no era como ella lo recordaba, al menos no al principio.

— ¿Qué dices? ¿Que ya no funciona tu relación y quieres volver conmigo? —Se burló el príncipe, a lo que la heredera de Auroria simplemente le arrancó el cartel de las manos, lo dobló y lo golpeó varias veces con el mismo.

—Supéralo o voy a obligarte a comerte tus palabras junto a este cartel. —Le advirtió la contraria mientras lo golpeaba.

—Audrey, ¿te puedes comportar como la princesa que se supone que deberías ser? —Le recriminó su pariente, por lo tanto la adolescente tuvo que cesar con su pequeña venganza de mala gana.

—Lo siento. —Murmuró la AK de mala gana, entonces buscó a Lonnie con la mirada, pero ella estaba entusiasmadísima viendo a la parejita real junto a Evie. Puedes aguantar, pensó Audrey, porque al fin y al cabo eso era lo que siempre había hecho.

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