La reina Poppy no iba a poder presentarse al concierto de Bro-Zone en Monte Regio. Debido a sus "labores reales" que la mantenían ocupada.

Ramon se lo tomo de buena manera, comprendiendo la situación de su novia, mientras que por otro lado, mientras que la banda se preparaba en su camerino, Floyd sentía su corazón partiéndose otra vez. Incluso antes que se asomo por el telón para darle un vistazo al publico, vio que ella no estaba ahí, solo había una manada de adolescentes con sus mamelucos coloridos y cuerpo de espagueti o y los trolls invitados en la primera fila del publico, los cuales incluían a Viva con su camisa oficial de la banda y un exagerado letrero que decía "Bro-Zone X100pre".

Tal vez ya era hora de dejar de suplicarle de manera silenciosa y de dejar de esperar a un amor inexistente. 

El troll entonces cepillo su cabello, se vistió y se puso su pintura de labios, reflejándose desganado frente al espejo de su tocador. John Dory se peino por ultima vez y llamo la atención del resto del grupo.

-Vamos Floyd, levántate que ya casi empezamos.-le llamo Toño.

Floyd tardo en ponerse sobre sus pies y acompañar a sus hermanos, fue recibido por Ramon, que toco su hombro amistosamente con una sonrisa.

-¿todo bien, Floyd?.-pregunto el troll de ojos azules y tonalidades oscuras.

-todo perfecto, Peque-Ramon ¿y tu estas listo para nuestra mejor noche en mucho tiempo?.-el antemencionado cuestiono, regresándole el gesto.

-mas que nunca.

Todos se reunieron en circulo, fueron las típicas palabras de apoyo y motivación para que no se preocuparan ni tuvieran miedo de cometer un error, mientras se repartían palmaditas, abrazos y sacudidas de cabello antes de llevar sus manos al centro. Escucharon a KidRitz desde el otro lado del telón, con el micrófono manteniendo eufórica a la multitud, ahí es donde supieron que era hora de iniciar.

-Damas y caballeros, binarios y no binarios, parejas y solteros.-decía el Monteregino de cabellos amarillos y celestes, mientras el instrumental crecía de fondo entre enormes nubes de humo.-Preparen sus mentes para el mejor concierto que hemos tenido en un muy largo tiempo, saludándonos desde las lejanas tierras troll del pop, la única, la deslumbrante, la adictiva, la cósmica, la única y adorada en su tierra: ¡BRO-ZONE!.

La multitud grito a todo pulmón y entonces empezó el show.

Empezaron su número, Toño y John Dory saltaron al frente, empezando ellos la canción mientras se mueven coordinadamente de un lado a otro, casi complementandose mientras sus perfectas voces se mantienen en sincronía, ahí fue donde entró Clay saltando de manera acrobática, empezando a dar vueltas sobre sus manos y cayendo sobre sus puntillas, ahí se pudieron escuchar los gritos de la princesa Viva, quien saltaba como loca con su letrero.

Floyd, aun con su corazón roto y doliendo como nunca antes, cambio de rostro y se presentó junto a Ramon, cantando los dos en coro, Ramon hizo una rápida movida de manos y pies, girando para finalizar apuntando a su hermano mayor, quien entonces repitió la misma movida y entonces regresaron con resto de hermanos para cantar en quinteto, bailando todos juntos, intercambiaban miradas de alegría y adrenalina, chocando las palmas y usandose mutuamente para saltar y bailar entre ellos. Sudor empezó a correr por sus cuerpos, el único aire que recibían era el del frío de la eterna noche en la que se encontraban. Las estrellas cámara levitaban cuidadosamente sobre el escenario y sobre la banda de hermanos,proyectándose en las pantallas del escenario y las que se encontraban repartidas por el resto de la ciudad. Los cinco hermanos se asomaron al borde del escenario, para estirar sus brazos hacia su público; los trolls y los monteginos caían sobre sus rodillas, algunos ya estaban pasmados sobre este, otros lloraban y gritaban su amor por sus miembros favoritos. Clay le guiñó el ojo a una monteregina de cabello rojo y esta empezó a gritar mientras sacudía a su compañero a su lado, Ramon por el otro lado lanzó un beso a unos tres trolls de colores rojo,verde y azul y en fila cayeron al suelo.

Todo iba casi en piloto automático para Floyd, cantando y bailando sobre el escenario, intercambiando lugares con sus hermanos y saludando a su público. Conocía las canciones que iban a tocar, las ensayaron una y otra vez antes de llegar ahí y recordaba perfectamente que lo que se aproximaba era un solo cantado por él.

Los cuatro hermanos se fueron dos a cada esquina, con sus manos apuntando junto a las luces que ahora se posaron sobre él, Floyd había tomado posición y bajo su cabeza, tomó un respiro y empezó a cantar.

y cuando terminó el primer verso...escucho una voz seguir la canción.

Floyd abrió sus ojos con sorpresa y miró hacia todas direcciones, más sólo estaban esas estrellas voladoras. Al fijarse y notar que sus hermanos estaban igual de anonadados supo que no fue su cerebro jugándose alguna broma. Hubo puro silencio antes de que acercara sus labios al micrófono y siguiera la canción.

y otra vez, esa voz continuó la estrofa y con ello continuó la letra...Floyd quedó estupefacto. Era una voz femenina, poderosa y armoniosa. Una que toda la tierra pop conocía...

y que él y su hermano adoraban.