Alina no quería creer que podría ser posible, pero mientras ayudaba a un mapache parlante a construir una máquina del tiempo, decidió que tal vez recuperar a todos los que habían perdido no era lo más imposible que podía pasar. Agachada bajo el túnel cuántico con Rocket, estaba martillando partes en su lugar cuando Tony se les acercó.

—Ratchet, ¿cómo te va? —preguntó Tony.

—Me llamo Rocket —dijo él—. Cálmate. Sólo eres un genio en la Tierra, amigo.

Cuando el túnel estuvo en pleno funcionamiento, Clint Barton se ofreció como voluntario para ser el sujeto de prueba, de pie en medio del túnel vistiendo el traje que Tony diseñó para dar el salto en el tiempo sin ninguna complicación.

—Muy bien, Clint. Empezamos en tres, dos, uno —dijo Bruce.

Clint desapareció, y Alina esperó junto a Tony con los brazos cruzados. Clint regresó con un grito, aterrizando de rodillas, y Natasha corrió por la rampa hacia el túnel y hacia su mejor amigo.

—Oye, mírame —dijo Natasha— . ¿Estás bien?

—Sí —dijo Clint, sosteniendo un guante de béisbol—. Funcionó. Funcionó.

Los ojos de Alina se agrandaron— . Dios mío.

Con el túnel completo y funcionando, el equipo se reunió en la sala de conferencias para discutir la ubicación de las Gemas y cómo harían para conseguirlas todas. Alina se sentó a la mesa con el resto del equipo, esperando ansiosamente el plan.

—Bien, el cómo funciona —dijo Steve—. Ahora debemos resolver el cuándo y el dónde. Casi todos en esta sala se encontraron con una de las seis Gemas del Infinito.

—O reemplacen "encontraron" por "casi fueron liquidados" por una de las seis Gemas del Infinito —dijo Tony.

—Yo no, pero ni siquiera sé de qué diablos hablan —dijo Scott.

—Yo tampoco —dijo Alina.

—No importa, tenemos partículas Pym para un viaje de ida y vuelta cada uno —dijo Bruce—. Y estas Gemas estuvieron en muchos lugares a través de la historia.

—De nuestra historia —lo corrigió Tony—. No hay muchas épocas convenientes para visitar.

—Quieres decir que debemos que elegir los objetivos —dijo Clint.

—Correcto —dijo Tony.

—Entonces, comencemos con el Aether —dijo Steve—. Thor, ¿qué sabes?

Todos se volvieron hacia Thor, que estaba sentado en un rincón de la habitación. Tenía gafas de sol sobre los ojos y no se movía, una lata de cerveza colgaba de su mano. Tras una breve inspección, uno podría suponer que estaba muerto.

Alina preguntó—: ¿Está dormido?

—No, estoy bastante seguro de que está muerto —respondió Rhodey.

—Que alguien lo despierte —dijo Tony.

Nadie parecía demasiado ansioso por despertarlo, así que Alina se encogió de hombros y se puso de pie. Empujó el hombro de Thor, esquivando el puño que giró en su dirección cuando se despertó sobresaltado. Dio vueltas por un momento, desorientado, antes de volverse hacia Alina y notar que el resto del equipo lo observaba.

—¿Sí? —preguntó Thor.

—Bien, estás despierto —dijo Steve—. ¿Qué puedes decirnos sobre el Aether?

—¿El Aether? —dijo Thor, poniéndose de pie y parándose frente al equipo—. ¿Por dónde empiezo? El Aether, en primer lugar, no es una Gema. Alguien lo llamó una Gema. Más bien es una especie de lodo enojado, así que alguien tendrá que modificar eso y dejar de llamarlo así. Pero hay una historia interesante sobre el Aether. Mi abuelo, hace muchos años, tuvo que esconder la Gema de los Elfos Oscuros. Son seres aterradores. Así que Jane... oh, ahí está —una imagen de Jane apareció en la pantalla detrás de Thor—. Sí, Jane era un viejo amor que tuve. Esa vez ella metió la mano dentro de una piedra, y luego el Aether se metió dentro de ella y se enfermo mucho. Y entonces tuve que llevarla a Asgard, que es de donde soy, y tuvimos que intentar curarla. Éramos novios en ese momento, y tuve que presentársela a mi madre... que está muerta, y... Jane y yo ni siquiera seguimos hablando, así que... sí, son cosas que pasan. aunque. Nada es para siempre. Lo único que...

—¿Por qué no te sientas? —sugirió Tony.

—Aún no terminé —dijo Thor, apartando la mano de Tony—. Lo único permanente en la vida es la transitoriedad.

Tony aplaudió—. Impresionante. ¿Quieres huevos? ¿Quieres desayunar?

—No —respondió Thor—. Quisiera un Bloody Mary.

—De acuerdo, ese es el Aether —dijo Alina, escribiendo en un cuaderno—. Rocket, ¿qué sabes sobre la Gema del Poder?

—Quill dijo que robó la Gema del Poder de Morag —explicó Rocket

—¿Es una persona? —preguntó Bruce.

—No, Morag es un planeta —dijo Rocket—. Quill era una persona.

—¿Un planeta? ¿En el espacio exterior?

—Oh, mira —dijo Rocket—. Es como un cachorrito, todo feliz —comenzó a acariciar el pelo de Scott—. ¿Quieres ir al espacio? ¿Quieres, cachorrito? Te llevaré al espacio.

—Rocket —dijo Alina, sacudiendo la cabeza—. Eso no ayuda.

—Lo siento —dijo Rocket—. La Gema del Poder está en Morag, que es donde estuvo durante cientos de años hasta que Quill decidió robarla y fue casi responsable de destruir toda la galaxia.

Tony chasqueó los dedos—. Concéntrate. Entonces, la Gema del Poder está en Morag, ¿cuándo? ¿2014?

—Sí —respondió Rocket.

—BIen, ¿alguien sabe algo sobre la Gema del Alma? —preguntó Steve, una vez que Rocket se sentó.

—Yo —dijo Nebula, dando un paso adelante—. Thanos encontró la Gema del Alma en Vormir.

—¿Qué es Vormir? —preguntó Natasha.

—El reino de la muerte —respondió Nebula—. En el mismísimo centro de la existencia celestial. Es donde Thanos asesinó a mi hermana.

Scott parecía incómodo mientras suspiraba—. No la buscaré.

—

Más tarde esa noche, Alina estaba acostada en una mesa con Natasha y Tony, mirando al techo. Ahora sabían la ubicación de casi todas las Gemas. Sabían que la Gema de la Mente estaba en el cetro que Loki usó para controlar a la gente durante su invasión a Nueva York en el 2012, la Gema del Espacio estaba en el Tesseract, que Loki usó para impulsar el agujero que permitió que el ejército entrara en la ciudad, y el Aether estaba fuera del planeta, junto con la Gema del Poder en Morag. La Gema del Alma estaba en Vormir, y eso solo dejaba la Gema del Tiempo.

—Entonces, el de la Gema del Tiempo —dijo Natasha.

—Doctor Strange —la corrigió Bruce.

—Sí, ¿qué clase de doctor era? —preguntó Natasha.

—Una mezcla de otorrinolaringólogo y mago —respondió Tony.

—Tiene una casa en Greenwich Village —dijo Bruce.

—Sí, ¿en la calle Sullivan? —preguntó Tony.

—En la calle Bleecker —respondió Bruce.

—Espera, ¿vivía en Nueva York?— preguntó Natasha.

—No, en Toronto —dijo Tony—. ¿Escuchaste algo?

—Chicos —dijo Natasha—. Si eligen el año indicado, hay tres Gemas en Nueva York.

Bruce se sentó—. No puedes ser.

—¿Cuándo? —preguntó Alina—. ¿Qué año?

Tony se incorporó—. 2012.

Dividir los equipos resultó relativamente fácil. Thor y Rocket irían a Asgard a recuperar la Gema de la Realidad; Nebula, Rhodey, Natasha y Clint irían al 2014 para recuperar las Gemas del Alma y del Poder, mientras que los miembros restantes del equipo, Bruce, Scott, Steve, Tony y Alina, regresarían al 2012 para recuperar las tres restantes.

—Muy bien, tenemos un plan —dijo Steve—. Seis Gemas, tres equipos, una oportunidad.

—Traigamos a todos a casa —dijo Alina.