La noche de la feria estaba siendo un éxito para todos los que tenían un puesto esa noche, Lisa no había visto más a los hermanos Jeon, su madre ya estaba con ella ayudándola en el stand y con el dinero. Lisa iba a salir para poder distraerse pero visualizo a Jungkook a par de metros, comprando lo que ella suponía helados. Apartó la vista rápidamente, iba a volver a entrar al stand pero un grito hizo que se volteara.

— Hey, ¿Vas a fingir no verme después de verme hace unos segundos? — Jungkook se acercó a ella con una sonrisa burlona.

— No, claro que no, qué dices. — Lisa no podía ocultar sus nervios. — ¿Dónde está Seung? — preguntó al no verlo junto a él.

— Se fue con mi mamá hace unos minutos, ya tenía sueño y no iba a regresar para volver. — Lisa asintió entendiendo. — Oh, por cierto, ten, ¿Me acompañas a la rueda de la fortuna? — le extendió el helado en modo de invitación, la tailandesa lo recibió gustosa notando que el sabor era de sus favoritos.

— Fresa, lo recordaste.

— Bueno, debía tener una excusa para invitarte a recorrer la feria. — Jungkook le sonrió juguetón haciendo que Lisa apartará la mirada avergonzada.

Caminaron a paso lento por la feria, Lisa veía todo fascinada, no de había dado el tiempo de ver con atención el lugar y su vecindario se había lucido ese año, había más personas que el año pasado y le emocionaba. Se detuvo al ver a la rueda de la fortuna frente a ella, miró de reojo a Jungkook y pudo ver un brillo en sus ojos que nunca había visto, similar al que había visto con Rosé, lo curioso era que nunca había visto tal destello en los ojos de la ex pareja cuando salían. 

— Aquí es. — Jungkook hizo salir a Lisa de sus pensamientos, rápidamente Lisa le sonrió. 

Hicieron la fila para poder ingresar, mientras hablaban cómodamente esperando que sea su turno, una vez ya pudieron estar sentados, esperaban que la rueda empezará con su pequeño viaje, una vez ya en la cima de la rueda, Lisa se volteó hacía Jungkook con una sonrisa emocionada. 

— Jung, desde aquí se puede ver toda la feria y wow, que preciosa vista. — Lisa miraba fascinada la vista, Jeon hizo caso omiso a las palabras de su amiga, la veía a ella; totalmente perdido en ella. 

Jungkook se sentía más libre ahora que no estaba en ninguna relación, no quería empezar a salir con alguien en esos momentos, podía conocer a cualquier persona pero él no quería eso, solo tenía interés en conocer a la chica frente a él y lo haría sin que nadie se interponga. 

Salieron de la rueda de la fortuna y visitaron cada una de las atracciones que podían, llegó el momento de ir al stand de Lisa, entre risas y empujones pudieron llegar bajo la atenta mirada de la madre de Lisa. 

— Chicos, ¿Me ayudan a cerrar y llevar todo esto a casa? — ambos asintieron y se dispusieron a meter todo en cajas para poder llevarlas a la casa de los Manoban. 

Jungkook de camino a casa no pudo sacarse de la cabeza la sonrisa y momentos que había pasado junto a la castaña, sin duda alguna no querría perder a su pequeña Lili. Llegaron a la casa y ayudó a llevar todo al ático, salió de la casa para poder ir a la suya, Lisa lo detuvo tomándolo del antebrazo. 

— Gracias por lo de hoy, si no fuera por ti, la hubiera pasado de lo peor. — Lisa le dio una pequeña sonrisa. 

Jungkook negó mientras soltaba pequeñas risas, le dio un beso en la frente y se dispuso a irse a su casa, una vez dentro suspiró feliz y se fue a su habitación. Lisa por su parte, rió y fue a dormir con una sonrisa en el rostro. 

Eran demasiado tontos como para saber qué sentimientos comenzaban a formarse entre ellos. 

Maratón 2/3

más tarde subo el último capítulo de el maratón, mientras, mueran de amor con el lizkook