¿Cómo yo?
HEIKO P.O.V.
-¿Cuánto?- exclamó Nadine sorprendida
Reí, -invertía casi todo y tenia la suerte de ganar, después Joe se lo llevó a algunos casinos e igual ganaba; unos meses despues recibí la llamada de un museo de arte, querían exponer mis pinturas- me encogí de hombros, -me pagan por hacerlo-
-¿Aún?- asentí, -¿y donde guardas el dinero?- preguntó
-Joe abrió dos cuentas a su nombre, una donde el museo deposita el paga anual de la renta y otra de ahorros, él solo tiene acceso a la cuenta donde hacen el deposito y yo a la de ahorros, y cada cierto tiempo Joe deposita lo que me pagan, en mi cuenta- expliqué
-¿Y con eso también pagas la escuela?-
-No, esa es responsabilidad de mi padre; la escuela, comida, ropa, techo- enumeré encogiendome de hombros, -ya yo me encargo de los gastos de mi novia- agregué sonriendo mientras ella se ruborizaba
-Y apesar de eso no te haz ido- aseguró en voz baja
-Si fuera mayor de edad, ya lo hubiera hecho- dije en voz baja, -quizá la relación con mi padre no sea la mejor de todas, pero algo me dice que si me voy... le afectaría, de alguna forma- murmuré encogiéndome de hombros
-Es tu padre después de todo- susurró
-Después del accidente tardé un par de días en despertar, y cuando lo hice, él no estaba- dije mirando un punto fijo en el piso, -pero la enfermera que me atendía dijo que llevaba solo unos minutos fuera, que el doctor lo habia obligado a irse a casa a descansar, porque no se habia separado de mí desde que habia llegado al hospital, ni siquiera sabían si comia- agregué, -creí que después de eso las cosas mejorarían, pero en realidad empeoraron. La policia llegó a interrogarme sobre lo que habia pasado- me encogí de hombros, -me iban a llevar a el tutelar, pero mi padre les dio su palabra de que me alejaría de todo eso y si llegaba a recaer, él mismo los llamaría, creo que hasta firmo un papel frente a un juez- fruncí el ceño, nos quedamos en silencio por un momento, hasta que ella volvió a preguntar
-¿Y còmo fué que dejaste las drogas sin ayuda?- preguntó en voz baja
-Bueno, las personas que me vendían solo las veía los fines de semana por las carreras o peleas, solo en algunas ocasiones me los topaba entre semana; en realidad drogarme era como beber sólo los fines de semana, no me hice una dependencia, así que dejarla no fue un problema- me encogí de hombros, -lo único que seguí haciendo fue fumar, pero ya lo dejé tambien- agregué sonriendo mirándola
-Dejaste de fumar- asentí, -¿por qué?- preguntó dudosa
-Por tí- afirmé, ella abrió mucho los ojos y bajó la vista sonrojada, -siempre estuve conciente que el cigarro mata a el fumador lentamente, pero nunca me imaginé que podía matar a alguien externo instantaneamente- susurré, ella cambio su expresión a una seria y triste, tomé su mano y la atraje para que de sentara en mi regazo, -no quise hacerte recordar- dije abrazándola
-Esta bien, es solo que, son muchos recuerdos- susurró enterrando su cara en mi pecho
-No estaras sola, no ahora que estoy yo aquí- dije besando su cabello
-Te quiero mucho Heiko- murmuró
-Yo más bebé-
...
-Tampoco puedes dormir- susurré al sentir como se removía en mi pecho
-No- susurró en respuesta
-¿En qué piensas?- pregunté
-En lo que ha pasado los últimos días- contestó
-¿Qué hay con eso?- pregunté acariciando su espalda de arriba a abajo
-Jamás me imaginé pasar por esto-
-¿Por una relación?-
-Si, y menos con alguien como tú- murmuró
-¿Cómo yo?- pregunté confundido, pero ella no contestó, en un rápido pero delicado movimiento, me coloqué sobre ella sin dejar caer todo mi peso
Coloqué mis brazos a cada lado de su cabeza y la miré a los ojos, su rostro tenía una tímida sonrisa dibujada, sus manos acariciaron mi cabello y después bajaron para acariciar mis mejillas
-¿A qué te refieres con eso de alguien como yo?- repetí, logré notar como se sonrojaba en la oscuridad, -dime pequeña- susurré frotando mi nariz con la suya
-Guapo- murmuró
-Guapo- repetí alejándome para ver su expresión, tenía una expresión alegre, casi pícara, pero no lograba asegurarlo en la oscuridad
Sonreí, y comencé a besarla suavemente, me encantaba la forma como ella se aclopaba a mí. El beso subió de intensidad, mi mano derecha bajó para acariciar su vientre por debajo de la blusa, sus dedos comenzaron a jugar con mi cabello, mi mano siguió bajando hasta su cadera y su pierna flexionada junto a mi cintura, acaricié el interior de su rodilla mientras mi mano bajaba y subía por ella, un gemido salió de su boca cuando empujé mi pelvis contra la suya mientras bajaba mis besos a su cuello y clavícula; mi miembro erecto bajo el boxer rozaba con su feminidad bajo sus bragas, era el único contacto que teniamos bajo las finas telas y aún así se sentía bien, decidí no dejar de moverme
-Heiko- jadeó mientras mordía el lóbulo de su oreja, su respiración se aceleró al igual que la mia y la temperatura de la habitación ascendió varios grados centigrados
Bajé mi otra mano y la colé ppr debajo de la blusa, llegué a su brasier y acaricié sus pechos por encima de éste mientras seguía besando y chupando su cuello
Nadine rodeo mis hombros con un brazo mientras colocaba su otra mano en mi cabello, estiró su cabeza hacia atras mientras yo seguía moviendome, sabia que comenzaba a sentirlo, al igual que yo, volví a besar su boca y sin dejar de hacerlo ambos llegamos a esa explosión de placer...
---------------------------
¿Hace calor aquí o solo soy yo (⊙o⊙)?
Bien criaturitas, las cosas se pusieron intensas (′・ω・') jaja, nos leemos el miercoles babies
/.\
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top