NADINE P.O.V.

-Llegas tarde- dijo Steve, mi compañero de trabajo

-Si, es que mi última clase se alargó- dije disculpándome mientras dejaba mis cosas bajo el escritorio

Trabajo en la biblioteca de mi pequeña ciudad, Steve es universitario y tiene éste trabajo para poder pagar sus estudios; él es amable conmigo, pero no es mi amigo, sólo es diferente a los chicos de mi escuela y eso es porque es gay; Steve no es mi amigo porque yo no tengo amigos, y no es por mi apariencia, dejé de confiar en las personas, me cerré en mi mundo

Las veces que tuve amigos me... fallaron, y siempre terminaba encerrada en el baño llorando por haber confiado en las personas equivocadas, después de eso deje de confiar en los demás y sólo tuve conocidos, después de eso vino la preparatoria y todo salió mejor de lo que esperaba... creo, porque nadie me hablaba

-En el carrito hay unos libros para que los clasifiques y los acomodes en su lugar- dijo Steve sacándome del limbo mientras recogía libros de las mesas

Comencé a leer los titulos y sinópsis para saber de que trataba y así saber donde era su lugar

...

Ya había comenzado a acomodar los libros por pasillos, me senté en el piso para acomodar una enciclopedia de la Segunda Guerra Mundial dividida en tomos, pero estaba incompleta; mientras buscaba unos tenis se pararon junto a mí, eran de un chico

-Los comics están en el último pasillo- dije sin verle pero no se movió, alcé mi vista y me topé con el chico nuevo, mi boca se abrió por la sorpresa, y él me miro con su expresión seria, se agachó junto a mí y colocó un libro que traía en sus manos entre los otros, se levantó y se fué sin mirarme

Cuando reaccioné, miré el libro que había acomodado y me extrañé, pues era el tomo que faltaba, ¿quién rayos es este tipo?

...

-Fué un día muy productivo- dijo Steve mientras cerraba la biblioteca

-Si, creo que sí- dije suspirando, en ese instante una camioneta roja de batea se estacionó frente a nosotros, la ventanilla bajó y dentro del auto pude reconocer al novio de Steve

-¿Te llevamos a tu casa?- preguntó mi compañero

-Estoy bien gracias, debo, debo pasar por algo- dije tratando de sonar normal

-¿Estas segura?- miró su reloj de muñeca, -ya es muy tarde-

-Estaré bien- dije forzando una sonrisa

-Ok, nos vemos mañana- dijo subiendo a la camioneta, se despidió con la mano y se alejaron

Respiré profundo y tomé rumbo a casa; realmente era tarde y oscuro, pero no era la primera vez que iba del trabajo a casa en altas horas de la noche, sí tenía miedo, pero quien quisiera hacerle algo a alguien como yo

Mi casa estaba a 6 cuadras de la biblioteca, iba siempre en bicicleta así que realmente no tardaba mucho en llegar; mientras pedaleaba imaginaba un sin fin de ecuaciones con sus respectivos resultados y repasaba fechas importantes de la historia universal, eso hacía mi camino más rápido y no me preocupaba por mi alrededor, excepto ahora que veía a esos chicos de aspecto sospechoso al otro lado de la calle

-Ésto no es bueno- murmuré mientras me detenía y orillaba tratando de no ser vista

-¡¿Por qué te detienes?!- gritó uno de ellos en mi dirección, miré hacía atrás buscando al tonto o tonta que se dejó ser visto por esos delincuentes, pero sólo encontré la calle vacía, -¡te habló a tí, la de la bicicleta!- aclaró

-¿Y•yo?- pregunté tartamudeando

-¡Claro que sí niñata!- dijo molesto, -pedalea hasta aquí antes de que vaya por tí- exclamó, ¿debería hacerle caso? ¿Por qué?, -¡¿no me escuchaste?!- dijo caminando hacía mí, cuando estaba por alcanzarme cerré los ojos esperando lo peor

-Aléjate- dijo una voz gruesa y fría, abrí mis ojos de golpe y me encontré con una espalda ancha frente a mí cubierta con una chaqueta negra, creo que de cuero

-¿Quién rayos eres?- exclamó mi ¿agresor?, ni siquiera me tocó no se me ocurre otra palabra

-Nadie, sólo dejala ir- contestó mi ¿salvador?, ni siquiera sé que palabras pensar en éste momento

-Si eres nadie, ¿por qué debería hacerte caso?- exclamó mi atacante

-No quieres problemas conmigo, creeme, no me conoces, no sabes de lo que soy capaz- dijo con furia entre dientes y tomándolo del cuello de la camisa

-Ésto no se va a acabar aquí- dijo zafándose de su agarré y alejándose seguido de sus amigos, me quedé analizando la situación escena por escena, ¿qué rayos había pasado?

-Largo- dijo la voz sacándome de mi analísis, alcé la mirada y me encontré con el chico nuevo de la escuela, ¿3 veces en un día?

-Eso parece- dijo mientras encendía un cigarrillo, pensé en voz alta, -largo- volvió a decir al notar que no me movía, -si no te vas, quien te va a violar seré yo, y nadie vendrá a salvarte- dijo sin ninguna expresión en el rostro, me acomodé en mi bicicleta y pedalee como jamás lo había hecho en mi vida...