-Bien podría usar mi canto- dice Bianca a mi lado, ambas esperamos nuestro turno en el cual práctica esgrima y con ello. Lijar las garras que tenemos sobre la otra.

-No harás eso, sería caer bajo- digo, mirando como Enid está en punto de su duelo con su amiga Yoko.

-El amor juvenil-

-Callate-

A falta de movimiento alguno en estos días es que, entre las teorías y planes en dónde Bianca sería la pieza clavé. Se formó una especie de... "Alianza" no es mi amiga, jamás lo será. Pero es medianamente inteligente por lo que no es tan desagradable su presencia.

Con esto no faltó mucho para que ella supiera que había aceptado mi problema sentimental hacia Enid.

Problema del cual ella agarra para tenerme de rehén en sus charlas. Nunca me importo que piensen de mí, aún es así. Pero hasta no estar segura admito y duele. Que temo el que Enid lo sepa y, con ello. Un claro rechazó en todos los ámbitos.

-Pero no sería para que se enamore de ti. Solo es para que lo admita-

-Ella no tiene que admitir nada. Enid es un libro abierto así que sus sentimientos son vistos desde todos los ángulos existentes -

Bianca carcajea y niega a mi punto de vista innegable.

-Enid Sinclair deja salir tanto sus sentimientos que es obvio cuando los reprime. Te recuerdo que ella se transformó en momentos no aptos para los suyos-

-Dice que es para proteger a alguien que quiere. Así que, en vista. Lo hizo por una amiga -

-¿Y le creíste?- pregunta jugando con su espada.

Centro mi atención en Enid justo al momento en dónde obtiene su tercer punto contra su amiga.

He notado cambios en ella, en su actitud, personalidad. Es algo un poco más... ¿Salvaje sería la palabra? Un rasgo bastante notorio en los demás lobos aunque existe la fortuna de que Enid no sé la pasa revolcándose en la tierra de la escuela cada dos por tres u olfateando todo lo que ve.

Aún con ello busca mis brazos cada que puede, cuando escribo, cuando estoy mirando que leer en el celular o cuando estoy a nada de dormir, ella solo se mete sin decir nada.

Claro que, no me quejó de ello.

-Nos toca- declara Bianca antes que nadie.

Enid y Yoko cambian nuestros lugares, Enid se quita su máscara. Sonríe, me guiña y me pongo nerviosa como la estúpida adolescente que se supone debo ser.

-Maldita sea- siseo ejerciendo más fuerza en el mango de la espada.

.......

Madre: Tu tío cosa llevará al tío Lucas en unos dos días a Jericó.

: Los esperaré, gracias madre.

Madre: Mi tarantulita... El amor te volvió amable, quisiera conocer mejor a la persona que se roba tus suspiros.

: No suspiró por Enid.

Madre: Eso haz de creer.

-¿Qué haces Mer?- pregunta Enid abrazándome por la cadera.

-Nada- suspendo el celular y miro dónde estoy. En pleno maldito almuerzo, Eugene sigue leyendo su libro de insectos como si esto fuese de rutina -¿Por qué el abrazo?-

-Solo quería hacerlo. Oye ¿Quieres ir a tomar un café conmigo en la tarde?-

-¿Las dos?-

-Obvio Mer ¿Si?-

-No lo sé Enid. Debemos estar atentas, no sabemos si las cosas podrían cambiar de un momento a otro-

-Por favor Mer. Tú has dicho que, hasta que llegue tu tío Lucas no podemos hacer movimientos bruscos ¿Qué tendría de raro una salida de amigas?-

-... Bien-

-Gracias- besa mi mejilla y sale corriendo con sus demás amigas. Eugene se me queda viendo detrás de su libro, su mirada lo dice todo.

-¿Qué creés que deba hacer?-

-Me subes la autoestima al suponer que tengo una respuesta a tus dilemas amorosos. No sé mucho, pero incluso alguien como yo sabe que lo que pidió y aceptaste, fue una cita-

-No puedo creer que tú me estés diciendo estas cosas-

-¿Por qué no te relajas un poco? Ya lo dijiste el otro día en el club, sin tu tío cerca no harás nada de investigación. Tomate esos días como una especie de descanso-

-Y de esa manera podrán apuñalarme con la guardia baja-

Eugene alzó los hombros y siguió en lo suyo. Creo tiene razón mi extraño como a veces lamentable amigo, un momento de "descansó" no viene mal. Incluso yo, con todo lo ocurrido. Quisiera ser y comportarme como alguien aparentemente normal.

Pero también sé que guerras se perdieron por relajarse. Por subir por un sendero de fácil acceso, por atacar un puerto en busca de puntos estratégicos, cree que su fuerza miliar ganará por números.

Todas ideas y decisiones de estúpidos con gran ego.

Tengo un gran ego. Pero al menos sé que no peco de estupidez.

-Supongo que podría hacer una leve vigilancia -

-¿Lo dices, porque?-

-Porque el humano es tonto. Si se ve a Enid como si nada en la calle conmigo, cometerán un error. Y usaré ese error-

-Tétrico-

-Pero efectivo. Ya lo verán tú y tus gafas, la razón la tendré yo y nadie más -

.......

-No puedo creer que le pedí una cita- susurró a Yoko -¿Qué debería de hacer?-

-¿Salto de fe?-

-¿Qué?-

-Ya sabés... Hacer algo que no pensabas posible, es que… Solo míralo desde mi punto de vista: Merlina y tú se preocupan por la otra, ambas arriesgarían su vida por la otra y últimamente andan muy apegadas-

-No olvides lo de que somos manada... ¿Tú crees que si la beso, ella se moleste?-

-No sabría decirlo. Eso lo debes saber tú-

Unos días fuera de drama, de misterio y hasta asesinatos. Una tarde en dónde pueda aclarar mis sentimientos por ella finalmente... Suena tan fácil. Pero verla ahí, sentada charlando apenas con Eugene. Y que todo mi ser se estremezca con el pensamiento de que ella me vea de esa forma.

Suena tonto. Es estúpido pensar en ese tipo de cosas cuando tenemos todo el desastre de Wadd detrás de nosotras. Pero, por primera vez en mi vida. Me quiero sentir normal, y Merlina Addams es la única persona que me hace sentir de esa manera.

Ahora, y antes. Cuando aún era mal vista por los lobos de mi edad. Si, Merlina es rara, tiene muchos defectos y aún con ellos. Con todo lo que sugiere estar cerca de Merlina... Quiero hacerlo.

-Bien- digo con convicción -Confía en mi Yoko, mamá sabe lo que hace -

.....

Pienso viendo como Merlina toma de su expresso, de forma elegante, como si cuidara sus movimientos, pero aún con ello se nota una ligera sombra de descuido.

Ambas estamos en la cafetería de Jericó. Lugar en donde trabajaba el ex de Merlina... Ex que casi mato... Dos veces. Ahora que lo pienso no fue una buena idea traerla a este lugar.

-¿Y qué tal las clases?- pregunto nerviosa.

-Vamos juntas en la mayoría-

-Cierto, sí... Entonces... ¿Todo bien?-

Merlina deja la taza de expresso de lado. Junta sus manos como si fuese a cerrar un trato y levanta una ceja.

-¿Me dirás qué pasa?-

-¿Pasar?-

-La Enid que conozco nunca deja de platicar. Por alguna razón que no entiendo siempre sacas una charla ya sea por las buenas o malas-

-Vaya, yo. Nunca lo pensé así - dije algo decaída.

-No lo decía de mala manera. Me gusta eso de ti, es... Un atractivo de tu persona -

-A mí me gusta tu rara forma de ser directa - digo relajada, Merlina deja salir una leve sonrisa y sus ojos dejan de mirarme -De hecho. Diría que son muchas cosas. Eres inteligente, fuerte y de gran convicción... Sí, eres bastante rara y hasta diría peligrosa. Pero eso es lo que atrae, eres como... ¡Cómo esas ranas venenosas! Tienen lindos colores por todos lados, son chicas y dan ganas de acariciarlas, pero al mínimo toque. Bye bye. Así eres. Eres tan linda que haces daño-

Si hay algo que siempre me llamo la atención es que Merlina en la mayoría de las veces parece están en blanco y negro.

Es eso o su palidez y su forma de vestir el uniforme hacen ese efecto. Cómo sea, así que. Al ver el color rojo con leves tonos rosas en la cara de ella es que mis instintos lobunos se activan.

Quise saltar hacia ella. Besarla como jamás hubiese imaginado, pedirle ser mía para que con los años formemos una gran manada.

Al menos esa es la parte humana de mis pensamientos porque las que en realidad son las de lobo. Las "primitivas" piden más que solo eso.

-Eso, bueno. Es... Gracias Enid- Merlina no me ve. Estoy tan acostumbrada a su contacto visual que el que evite mi vista es incómodo como algo cautivador.

-Y... ¿Quieres caminar por el pueblo?-

-Si-

Se para rápido, se queda quieta y toma de golpe su expresso para salir de la cafetería. Le sigo feliz por la reacción de mis palabras.

Espera fuera del lugar. Esta de brazos cruzados sube y baja el pie con rapidez, sigue evitando mi mirada.

-¿Vamos?- pregunto extendiendo la mano.

-... Vamos-

Toda la tarde fue de las dos. Mirando, comiendo dulces (cosa que jamás pensé de Merlina) E incluso bromeando de algunas cosas... O al menos yo.

Total. Que fue la cita más gratificante que tuve en mi corta y joven vida. Verla sonreír e incluso reír.

Verla caminando a mi lado. Tomadas de las manos como si fuese algo propio de las dos. Todo tan perfecto, tan sencillo. Cómo si no hiciera falta decir grandes cosas o hacer grandes cosas. Solo disfrutando la una de la otra.

-Quiero llegar y dormir- dice Merlina mirando el celular. Desde que lo tiene y ataque, ella usa cosas como Twitter, Reditt y rara vez Instagram el cual tiene por mis pasadas insistencias.

Ambas vamos ya en el autobús camino a Nunca Más. La noche se viene sobre nosotras, el atardecer comienza a quedar detrás.

Sin duda. Un gran día.

-Nunca más- anuncia el conductor, ambas bajamos y comenzamos a caminar al portón.

Todo el camino de regreso me llegaban vagos recuerdos sobre lo que me dijo Yoko. El hacer un "salto de fe"

De reojo veo a Merlina. Caminando tranquila como siempre.

¿Qué pierdo a esta grado de la vida? Según lo dicho estoy en la mira de un grupo con gran poder económico el cual me podría desaparecer en cualquier momento. Por lo que, si lo pienso bien.

-Merlina- digo parando de andar a nada de llegar -Tengo que decirte algo -

-¿Por qué no lo dices en la habitación?-

¡Maldita sea! Había olvidado eso. Haga lo que haga no puedo escapar de ella pues vivimos juntas.

Pero. No, no,no, no. Es hora de tomar las riendas de algo por primera vez en mi vida.

-Es... Bueno, solo... Hay, alguien a quien... Está persona me -

-¿Te gusta alguien?-

-¡Si!-

Merlina cambio de expresión. A una más seria de la que lleva, incluso se alejó unos pasos.

-Somos amigas Enid. Pero no me interesa tu vida amorosa-

-¿Estás molesta?-

-Solo no me cuentes tu relación con Ajax o quien sé yo. Volvamos -

-¡No! Ajax no me gusta ya siquiera, es. Complicado y...-

-Dile esas cosas a Yoko-

Comienza a caminar, más rápido de lo que esperaba. Corro hacia ella, la abrazo y cargo recibiendo quejas e insultos varios que ni yo conocía.

-Bajame Sinclair- ordeno molesta -¡Ahora!-

La pongo en el piso, pero no la dejo de abrazar. No sé que hago, solo la miro. Hipnotizada en sus molestos como oscuros ojos.

-Enid- llama al parecer arta -No quiero saber tus relaciones personales. Son solo tuyas y por más que seamos amigas, jamás me interesara saber si-

Un salto de fe. Eso dijo Yoko, pues. Saltar es como tirarme a un vacío sin fin.

O tal vez es la sensación que me da tener mis labios contra los de Merlina.

Los ojos bien cerrados, pulso acelerado, miedo intenso a qué me aparte o me golpee.

Sentí como su cuerpo se tensaba para relajarse al poco. Al inicio solo fue eso. Yo presionando mis labios a los de ella, pero conforme paso ella aceptó.

Regreso mi beso de la misma manera.

Antes, cuando bese a Ajax por primera vez. Lo hice de forma desesperada, brusca, como si fuese algo para comer rápido.

Pero ahora es diferente. Quiero que dure, quiero recordar cada segundo de este corto pero gratificante beso.

Las sensaciones, la electricidad. Todos mis nervios explotan al mismo tiempo con el simple roce de nuestros labios.

Calidez. Eso siento, alguien como Merlina Addams me hace sentir esto. Hace que sienta amor, pues la amo y si tengo la suerte necesaria. Ella no solo gustará de mí sino que me amara.

Solo pido eso. Eso y que las cosas cambien a bien desde ahora.

Nos separamos. Un leve temblor en la voz de ambas. Abro los ojos, de nueva manera ella tiene color en su rostro y una gran sonrisa un este.

-Idiota- dice apenas -Perro idiota-

-Quiero ir a dormir- digo dejado un beso en su nariz -Vamos Mer-

Toma mi mano por decisión propia. Siento temblores en esta, es eso o somos ambas.

La luna se alza sobre la escuela. Aún no es luna llena, aún no empieza lo que sea que vaya a ocurrir.

Por ahora, solo quiero seguir disfrutando de esto. De ella. De ambas.

.

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.

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-Sí... Si, la chica lobo al parecer si tiene novia. Podríamos usarla para que está se entregue-

Miro desde la parte alta de la escuela. Cómo esas dos jóvenes almas se dan el amor que tanto han profesado desde que las vi.

Ojalá las cosas pudieran ser diferentes.

-Te queremos cerca. En pocas semanas estaremos operando al 100% de nuestra capacidad. Sin Tyler o el profesor las cosas serán algo complicadas pero funcionales. Recuerda, si quiere que cumplamos debes hacer lo mismo-

-Si, señor - aprieto con fuerza el teléfono, con ganas de lanzarlo, de gritar a todo lo que dan mis viejos pulmones.

-Bien dicho Nessa. Te hablaremos luego-

Cuelgan, me siento en el frío suelo rocoso de la escuela. Siento como el aire abandona mi cuerpo, el temblor, el enojo, la rabia, irá, molestia. El asco.

Miro mi celular. Me centro en la pantalla en dónde salgo sonriente junto a mi niño y, por más mal que haga. Las cosas se ven claras al ver esa sonrisa en su rostro.