CAPÍTULO SEIS

En el baño, resonaban las risas que vagaban hasta cada rincón del segundo piso. Con sus mejillas rosas, el muchacho colocaba shampoo en sus manos para luego esparcirse en el cabello castaño de su amada. Se había vuelto cotidiano, era una rutina deprimente y alegre al mismo puto tiempo, y Hae-e no sabía como expresarlo, si bien se divertía cuando el chico le narraba historias de su juventud, a veces era aburrido y humillante no poder lavarse por su cuenta el cabello, o siquiera darse una ducha sola. Aunque otras veces, como ese día en particular, era espectacular. Reían a carcajadas, con sus mejillas casi explotando como un tomate dinamita.

Hae-e se había dado cuenta en esos minutos donde él masajeaba su cuero cabelludo, subiendo los ojos, vio un lunar igual al de ella en él. Era de los que podrían pasar desapercibidos en el cuello, en la parte izquierda, idénticos. También tenían el mismo color de cabello, y sus ojos la misma forma. Eran bastante parecidos.

Estaba sentado en una silla afuera de la bañera, usaba sus mangas arremangadas hasta los codos.

—Debería cortarlo. —dice, hablando de su larga cabellera castaña que con paciencia su esposa lava.

—¿Eh? Claro que no. —se niega, tirando agua caliente de la regadera portátil— Me gusta tu cabello así como esta.

—Uhmm, esta bien. —suspira.

No es que odiara su cabello, tenía una melena suave y brillante, porque la cuidaba bien. El problema era a la hora del secado, tardaba desenredando cada nudo o tratando de que se vayan las gotas de agua.

JungKook se dio la vuelta tras extenderle su bata, ella se levantó de la bañera y la colocó alrededor de su cuerpo, atando un nudo incapaz de ser desatado. Dio un paso afuera, y dejando una huella de agua, caminaron hasta su cuarto. Estar allí sola se volvió normal, despertaba con el dulce aroma de un desayuno y se iba a dormir después de leer un libro o ver una película con el hombre. Pero jamás, desde que lleva despierta, han compartido la misma cama los dos. A lo que lleva a preguntarse el porqué, si se supone que son marido y mujer, si son pareja… ¿Por qué no la abraza en la noche?

Confundida observa su reflejo en el espejo mientras detrás suyo el pelinegro seca la melena. Se mantiene entretenido en su labor, sonriente y sin quejas. ¿Por qué le gusta tanto cuidarla? Cualquier otro hombre estaría yéndose por ahí, con una mujer fácil que lo complazca. Ella no puede complacerlo, no sabe si lo ha hecho antes, tal vez sí, tal vez por eso se mantiene con ella, por esos recuerdos que perdió. ¿Qué clase de pareja eran?

La señora Jeon, eh…

—Tu cabello es hermoso, desde que éramos jóvenes me gusta como lo llevas suelto.

—¿Sí? Aunque es molesto de cuidar.

—Hace tres años lo cortaste, como por debajo de tus orejas. Yo en ese entonces me sentí confundido, ¿Cómo podrías hacer algo así? Digo, eres tan bonita con tu cabello tal cual esta…

—Eso es lo bueno de ser dueña de mi propio cuerpo, puedo elegir todo sobre mi misma. —su respuesta había dejado desconcertado a JungKook, quien detuvo el secado. La miró desde el reflejo, y forzó una sonrisa— Quería hacerte una pregunta. —siguió.

—¿Hmmh? Soy todo oídos.

—¿Por qué no dormimos juntos? Se supone que somos marido y mujer, ¿No?

—¿Quieres dormir conmigo?

—Bueno, es lo normal. Y aquí en las noches hace frío…

—De acuerdo. Esta noche vendré. —su estado de ánimo había cambiado, ahora no cabía más de felicidad.

hice un grupo de wsp para que se unan y charlar... ♡