35

Podía sentir nuestras respiraciones juntas y el cálido aliento de Taehyung que daba en mi rostro. Iba él acercándose de a poco a mí, mientras dirigía su mirada a mis labios, en ese momento, el tiempo parecía no querer correr.

Ví como relamió un poco sus labios y justo cuándo estaban a punto de tocar los míos, Azabache, ese precioso caballo negro, comenzó a relinchar, volvió a inquietarse nuevamente.

Nos alejamos rápidamente, sentí mis mejillas arder, para mi mala o buena suerte, era algo que ya no podía evitar. Taehyung me miró por un segundo, para luego volver a dirigir su mirada hacia el caballo, acercó su mano a él y lo acarició suavemente, mientras le susurraba.

——Está bien Azabache, tranquilo.

——Él está bien, ¿cierto? — me acerqué un poco.

Me miró.

——Lo está.

——Parece que tu voz lo ha ayudado, se ve un poco más calmado ahora.

——Azabache no es un caballo salvaje, pero si que es bastante rebelde. — rió. ——Ha estado por varios días recuperándose de una lesión en la pata trasera, no ha sido nada grave, pero eso lo inquieto mucho.

——Ya veo...

—— ¿Quieres montarlo? — me miró.

——No estoy muy segura de eso, la última vez que monté uno, fue cuándo era niña y con ayuda de mi abuelo.

Él sonrió de lado y se alejó un poco de Azabache.

——¿Tienes miedo, preciosa?

Azabache era un caballo muy imponente, sí, sentía yo algo de miedo.

——Con lo imponente que es y considerando que está desesperado por salir de aquí, ¿tú que creés, Kim?

——Oh, vamos, apuesto a que eres una muy buena amazona.

——Mi hermano subirá contigo, Tn. — escuchamos la voz de NamJoon, a nuestras espaldas.

——Hermano... — le decía el otro, con sus manos en sus bolsillos.

——Ella tiene razón, Azabache en si, es rebelde y no creo que pueda sola con él. — sonrió un poco.

——¿Lo ves, Kim? Por fin alguien un poco cuerdo aquí. — reí.

——¿Entonces, preciosa? — arqueó una de sus cejas, mientras me miraba divertido.

——Bueno, yo venía a buscarlos para ir a desayunar, pero creo que primero van a salir a montar... — nos miró a los dos.

Asentí con una sonrisa.

Taehyung pidió que ensillaran al caballo, mientras nosotros esperábamos por él, fuera.

——¿Puedo preguntarte algo, Tn?

——Claro, dime. — lo miré con atención.

——No quiero sonar entrometido ni nada por el estilo, pero... siempre me he preguntado por qué razón la familia de Jungkook nunca te ha aceptado.

Suspiré y miré hacía otro lado.

——Perdóname si te estoy incomodando, no tienes que responder si no quieres.

——Desde la primera vez que te ví en casa de mi abuelo, me has dicho que sabías parte de mi historia, me sorprende que él no te haya dicho algo tan simple cómo lo es la razón por la cuál la familia Jeon no me quería.

——Bueno, también te dije que no entramos en detalle de todo, eso es algo que no me incumbe, solo que está vez, me dió curiosidad por saber.

——Los Jeon siempre fueron de estándares altos, debés ya saberlo, buena posición social, prestigió intachable, entre otras cosas... No creían que yo fuera la mujer indicada para su único hijo. Jamás permitirían que alguien "ordinaria" fuera parte de su familia.

Él me miraba algo confundido, yo seguí hablando.

——Lo que sucede es que, yo nunca he querido el dinero de mi familia aunque estuviera ahí para mí, había decidido llevar una vida simple, trabajar y ganar mi propio dinero. Conseguí un trabajo de medio tiempo en una cafetería y también estudiaba. Jungkook me conoció de esa manera — reí un poco al recordar. ——Era mi segundo día en la cafetería y sin querer, le había echado una taza de café encima. Lo bueno es que, él no se molestó conmigo por aquél incidente.

Lo ví sonreír levemente.

—— Que tonta.

——¿Cómo?

——Que eres preciosa.

——Kim, me has dicho tont...

——Señor. — dijo uno de los empleados a Taehyung. ——Azabache está listo.

Asintió.

——Muy bien, muchas gracias.

Taehyung se acercó un poco más a mí.

——¿Lista?

——Sí.

Me tomó de la cintura y me ayudó a subir al caballo, él se montó atrás, pasó sus manos a mis costados y agarró las riendas.

Empezamos a andar.

[....]

Una semana había pasado desde que estuve en la casa de campo de los Kim, para mí fue agradable pasar tiempo con ellos y con los pequeños, que eran pura ternura. Necesitaba distraerme un poco, alejarme de los problemas y no puedo negar que eso ha servido. Era momento de volver a la rutina de siempre, me encontraba revisando papeles trás papeles junto a Yoongi.

——Se ve que quieres mucho a los hijos de Nam.

Sonreí.

——Sí, son unos niños muy amables y respetuosos, les he tomado mucho cariño. NamJoon ha hecho un buen trabajo al criarlos cómo lo hizo.

——Tienes razón. — sonrió leve. ——Él se ha partido el alma para poder hacer de ellos unos niños de bien, además de que, ser padre soltero, no habrá sido algo fácil.

—— Mhm... ¿sabés? Yoo Seung, el más pequeñito, tiene mucho talento para el arte, también toma clases de Taekwondo, a veces me recuerda mucho a él...

—— ¿Te recuerda a Jungkook?

—— Es que, a veces tiene una manera de hablar única y suele hacer unas expresiones que, no sé, pero me hacen pensar que estoy cerca de un mini Jungkook. — reí por mi loca idea. —— ¿Dirás qué solo son ideas mías?

Negó.

——Es lo que tú sientes... después de todo, puede que en la vida siempre nos encontremos a algún niño que nos recuerde a alguien.

En ese momento, los dos mirábamos hacía la puerta, alguien estaba tocando.

——Adelante. — dijo, Yoongi.

——Permiso. — dijo, Hanna. ——Señorita Tn, el padre del señor Jungkook, está aquí y quiere verla.

Yoongi y yo, nos miramos.

——¿Qué querrá ahora? — susurré audible y Yoongi, elevó sus hombros. ——Dile que lo recibiré, Hanna.

Ella asintió y salió de la oficina.

——A ver qué se le ofrece ahora al distinguido señor Jeon. — solté con sarcasmo y me levanté.

En ese momento, me dió un mareo e hice una mueca de disgusto, para llevar una de mis manos a mi rostro.

——Hey — Yoongi, me sostuvo de la cintura. ——¿Qué pasa? ¿Estás bien?

Asentí algo desorientada.

——Sí, un mareo, pero estoy bien.

——¿Segura, Tn? — me miró preocupado.

——Sí, no te preocupes.

Él me soltó cuidadosamente y recuperé mi postura.

——Estás pálida.

—— No es nada, seguro me cayó mal algo que comí.

Él negó, mientras seguía mirándome. Tocaron nuevamente y el padre de Jungkook, entró.

——Buenos días. — serio.

——Buenos días. — respondí de la misma manera.

——Los dejo. — dijo Yoongi y se fue.

——Bueno, usted dirá, señor. — lo miré.

—— Vengo.. — soltó un bufido. —— Vengo a pedirte un favor.

Crucé mis brazos y lo miré con seriedad...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top