——¡Estúpida! — susurró a regañadientes y la ví apretando sus puños.

Yo solo miré mis uñas, restándole importancia a sus palabras que poco me importaban.

——Te creés mucho solo porque tienes el apoyo de tu abuelo y de otras personas... pero no eres nada.

La miré.

——Si tú te sientes inferior a mí, ese es tu problema.

Ella dejó ver una sonrisa cargada de rabia. Quería volver a soltar su veneno...

——¿Pasa algo? — Jungkook se acercó a nosotras y nos miró.

——No, amor. — le sonrió. ——Solo platicaba un poco con Tn.

Él asintió algo dudoso. Yo me levanté de mi asiento algo molesta, a fin de cuentas, era ella para sacarle el mal humor a una y si no dejaba la oficina por un momento, no tardaría esto en convertirse en un verdadero lío, algo que aún no me convenía.

Estando fuera, apoyé mis manos sobre el barandal de cristal, cerré mis ojos y cogí un poco de aire.

—— Pagarás por todo, Soyeon, te haré vivir el mismo infierno al que tú me has arrastrado una vez. — hablé para mí.

——¿Te encuentras bien? — escuché su voz detrás de mí y giré a mirarlo.

——Sí.

——¿Soyeon te ha dicho algo que te molesto?

——¿Por qué la has traído aquí? — seria.

—— ¿Eso es lo qué te molesta? — arqueó una de sus cejas. No le respondí, solo seguí mirándolo. —— No la traje aquí porque haya querido, ni tampoco para ponerte molesta a ti, solo que ella, fue muy insistente.

Solté una risita.

——Y fue tan insistente que no te ha quedado más opción que traerla a mi empresa, ¿no?.

——Tn, no sé que es lo que pasa entre ustedes dos, pero ella es mi esposa y aunque no te guste, también tiene el derecho de venir, no olvides que aún tenemos el 20% de las acciones.

La sangre me estaba hirviendo aún más que antes....

——¿Cómo puede ser qué seas tan idiota y no te des cuenta de nada?

——¿Darme cuenta de qué? ¿De qué siempre has estado mintiendome para luego darme un golpe bajo? — dejó salir su enfado.

—— ¿Golpe bajo? — me acerque y me puse frente a él. —— Si en realidad supieras quién ha dado el golpe más bajo aquí, no estarías acusándome a mí.

Estabamos los dos mirándonos fijamente y de la misma manera, con rabia.

Tiró de mi mano y me pegó a su cuerpo, atrapó mi cintura con una de sus manos y no despegó sus oscurecidos ojos de mí, ni por un segundo.

——Entonces, explícame y déjame entenderte.

——No lo entenderías aunque te lo dijera, no creerías en mí. — dije un poco a lo bajo.

—— Escúchame. — tomó levemente mi mentón e hizo que lo miré. —— Te prometo que haré lo posible por tratar de entenderte. Sé que tú no eres una simple casualidad en mi vida, Tn. — eso último me dejó sorprendida.

Era una lucha entre mente y corazón, ahora mismo. Me armaba de valor y le decía todo de una vez, arriesgandome a las posibilidades de ganar o perder, o seguía manteniendo el silencio y dejaba que mi venganza justiciera, siga.

El corazón....

—— Hace un poco más de tres años... — comencé a decir y obtuve su mirada atenta. —— Tu familia nos separó. — podía ver la confusión en sus ojos. En cuánto a mí, sentía que mi voz se rompería en cualquier momento. —— Jungkook, nosotros dos éramos mucho más que simples conocidos, nosotr....

—— Aquí estaban. — la voz grave de Taehyung, nos interrumpió, haciendo que nos separemos rápidamente.

Juro que iba a decirle todo....

——Los hemos estado buscando. — Soyeon se acercó a Jungkook y se colgó a su brazo.

——¿Qué pasa, Soyeon? — le dijo él, algo fastidiado.

——Tenemos que irnos a la casa de tu abuelo, cariño. Tu padre me habló, algo le pasó.

Jungkook me dió una mirada rápida y cerró sus ojos con fuerza.

—— ¡Joder! Vámonos. — le dijo a la otra, después de todo, la sangre llamaba primero.

Aún con su "esposa," prendida a su brazo, ambos pasaron a un lado de Taehyung y de mí. Me sentí tan tonta, por más que lo intentaba, ella y su familia siempre estaban un paso delante de mí.

—— Jungkook. — Taehyung, le habló y él, detuvo su paso. —— Espero que lo de tu abuelo no sea algo grave. —  se lo decía sinceramente.

Solo asintió y finalmente, los miré irse.

——Supuse que no te sentías bien, así que, dí por terminada la reunión. — Taehyung se puso a mi lado. —— También, ya hemos dejado algunas cosas arregladas con los chicos.

Asentí.

——Está bien.

——Cambia ya esa cara, preciosa. — con su brazo rodeó mi cuello. —— Vamos por algo de comer, ¿si? ya casi es hora del almuerzo.

[.....]

——¿A dónde vas tan guapa? — miré a Jisoo, a través del espejo. Yo estaba terminando de aplicarme labial. ——Ese vestido... ¿a quién quieres matar, niña?

Sonreí y volteé a mirarla.

——Iré a un bar.

——¿En serio? — asentí.

——Jin, ha organizado una salida de compañeros de trabajo, insistió tanto que no pude negarme.

——Pues, me parece una buena idea, mereces un poco de diversión, tienes tiempo que no te diviertes...

——Mhm. — sonreí leve. ——Déjame cargar a esa princesa.

——Ha estado muy inquieta, ni siquiera tiene ganas de dormir aún. — sonó algo cansada y me entregó a la bebé.

——Pequeña Sun Hee, tienes que dormir y dejar que tu mamá descanse un poco, ¿si? — toqué su naricita y una pequeña sonrisa, se asomó en ella. —— Tienes unos ojos preciosos, ¿lo sabés, cariño? — continúe hablándole.

—— Oye, Tn. — la miré. —— ¿Será qué esa salida de compañeros incluye también a Jungkook? — lo dijo con algo de picardía.

——Supongo que él no asistirá, creo que su abuelo se puso mal. — dejé escapar un suspiro. ——Hoy estuve a punto de contarle todo.

Se veía ella algo sorprendida.

—— Y por lo de su abuelo, de nuevo no pudiste decirle nada, ¿cierto? — asentí. —— Ese viejito debería pasar a la otra vida de una vez.

Mordí mis labios para conterner la risa, no podía reírme de algo así.

——Jisoo, por más daño que ese señor haya hecho en su vida, no le deseo la muerte.

——Nadie podrá decir que tú no tienes corazón, tanto por lo que has pasado y aún así, eres capaz de compadecerte.

——Bueno, yo tengo que irme ya. — le entregué a la bebé. ——Tengan buenas noches.

Me despedí de ellas, cogí mis llaves y salí de la habitación.

——¿A dónde irá mi querida hermana? — me encontré a Will, en la puerta.

——Saldré. — estaba a punto de abrir la boca, pero fui más rápida. —— Y, no escucharé sermones de un hermano sobreprotector. — dejé un beso en su mejilla y salí rápidamente.

Seúl, Bar.

Buena música, algunas que otras personas bailando y algo de olor a alcohol, casi abarcando los rincones del lugar.

—— Por aquí, pequeña butterfly.

Sonreí al escuchar a Yoongi, y caminé para acercarme hacía la mesa en dónde se encontraban.

——Buenas noches. — les sonreí leve.

—— Buenas noches. — una voz ronca, que conocía a la perfección, se escuchó detrás de mí.

Volteé.

Sus ojos se cruzaron con los míos y no había hombre más guapo que él, sobre la tierra....