Rogué

Las mentiras blancas, también duelen.
Se me enseñó a orar, a creer que Dios escucha nuestras voces, que cuando clamamos, Él nos responderá.
Yo sé que es verdad. Aquel día clamé a Dios, cuando le rogué que se llevara mi dolor, que se tragara mis temores. Él me respondió.
Él se llevó todo, pero yo no hablé lo suficientemente fuerte. Él, en cambio, me envió un mensaje mucho más grande, me habló mucho más fuerte. Nada sucedió como yo esperaba.
'Hay cosas que no se borran, sin borrarlo nosotros primero.'
Dios existe, lo sé. Él nos escucha. Pero... todos somos pecadores.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top