Dong Min durmió esa noche en casa de su amigo, luego de cenar el omega quiso platicar con él, pero lo esquivó, disculpandose con la excusa de estar muy cansado. Pero la realidad, era que tenía mucho en que pensar.

Se acostó en aquella cama luego de apagar la luz y solo dejó en su habitación, la pequeña lámpara encendida de la mesa de noche, misma en donde se encontraba el ramo de rosas rojas qué Bin le había enviado.

Sacó una de las rosas y la tomó en sus manos, oliendola, sintiéndose extraño ya que por el enlace podía sentir algo diferente. Sentía una tristeza, un dolor profundo que no era suyo y supuso por obvias razones que Bin era quien se sentía así en ese momento.

Comenzó a arrancar pétalo por pétalo de aquella rosa, tratando de ordenar su mente.

No voy a caer ante ti otra vez. No puedo hacer que mi vida se destruya nuevamente.

Tenía una clara decisión ahora, que consistía en no entrometecer en el matrimonio de Bin aún cuando este fue por obligación. No quería volver a tomar el papel de amante, mucho menos pensaba darle entrada al alfa. Eso era lo principal.

Encendió su celular y buscó una de las fotos favoritas que tenía de su hija, y sonrió.

-No merezco vivir, mi amor, no cuando te hice tanto daño...

Y siempre se iba a recriminar la muerte de su hija, todo cuanto pasó aún cuando la culpa no fue del todo suya, pero fue tan estúpido e ignorante a todo que ahora, solo le queda lamentarse.

"Tienes que descansar."

Dong Min enfadado tiró al suelo lo que quedaba de la flor y maldijo.

-No me hables más, no trates de comunicarte conmigo de esa forma.

"Te amo".

Porque odiaba sentirlo y escuchar a su alfa hablarle como si lo tuviese en el oído.

En la mañana, Wooyoung y Dong Min fueron a una clínica qué les recomendó Bin, el alfa le había agendado una cita para que un profesional lo atendiera y que más da, que al momento de entrar a la terapia y que le preguntara sobre la razón por la que había llegado ese día, no pudo soltar nada, como si fuese mudo, sus manos comenzaron a temblar y en su impulso por controlarse, se golpeó las piernas con fuerzas. Rápidamente el doctor lo auxilió intentando que se controlara, pero fue sumamente difícil.

Y mientras Dong Min estaba siendo controlado, los pasos del alfa se fueron cortando hasta que Wooyoung se quedó congelado con su visita.

-¿Qué haces aquí? Dong Min te dijo que no vinieras. -no hubo momento de responder, la enfermera entró al consultorio para darle al omega un poco de agua y poder tomar su presión arterial.

Cuando Dong Min se tranquilizó, hicieron pasar a Wooyoung y a Bin con él, el castaño no esperó ver a su alfa tan repentinamente y por poco tiene otro ataque de pánico.

-Señor Moon, me da gusto que haya podido venir. Cuando me llamó pensé en que sería para algo menor, pero parece que será más difícil.

Los ojos del alfa se fueron directamente a aquel rostro tan duro y sin expresión, su omega lucía tan hermoso como lo recordaba sin duda.

-¿Qué pasa, doctor?

-El señor Lee va a necesitar una terapia intensiva, tal parece que está desarrollando un trastorno de ansiedad. Mutismo selectivo para ser exactos.

-Solo intérnenme. -Interrumpió Dong Min.

-Internarte no está bajo discusión. -respondió el alfa con dureza, de cierta manera estaba preocupado aunque no era la manera adecuada de hablarle.

-Perfecto. -se puso de pie y salió del lugar.

-¡Minnie! -llamó Wooyoung, pero no le hizo caso. Bin fue tras él para evitar que se fuera. Lo alcanzó y rápidamente este se soltó de su agarre.

-Min-...

-¿Qué te dije? -dijo con molestia. -¿Acaso no te pedí que me dieras tiempo? ¿No te dije que me dejaras en paz?

-Dong Min, escúchame-...

-¡Se supone que debías de hacer lo que te pedí, pero vienes aquí sin importarte una mierda y sin respetar lo que quiero!

-Dong Min, solo quería verte-...

-De acuerdo, ya me viste, ¿Feliz? -en el momento en que el alfa conectó con su mirada fue como si el enlace destruido, nuevamente estuviera creando tejidos. La sensación en su pecho fue reconfortante.

-Muy feliz, Minnie... -el omega no supo que responder solo volteó su rostro.

-¡Minnie! -Wooyoung notó el sonrojo en el alfa y negó, no podía creer que en una situación como esa se pusiera así. -¿Ya no tomaron una decisión?

-No lo voy a internar.

-Pues vas a tener que aceptar porque es lo que quiero. -contradijo. -No es la primera vez que estoy encerrado y es por eso que te lo pido. Necesito estar solo, sin nadie que me hable, sin saber nada.

-No quiero de-...

-¡No se trata de lo que tú quieres! ¡Esto es lo que quiero, es mi decisión y solo te pido que la respetes!

Wooyoung tuvo que alejarse de ellos un poco, las feromonas de Bin estaban muy fuertes y podría ser que su alfa ya estaba reaccionando a su omega después de mucho.

-De acuerdo... Wooyoung, le diré al doctor que haga el papeleo, mañana vendré para-...

-Señor Moon. -interrumpió Dong Min -Quiero pedirle una última cosa... -ya lo había pensando bastante, no tenía sentido callar. -A partir de hoy, usted tiene prohibido acercarse a mí, no quiero volver a verlo, no quiero saber nada de usted.

-Min-...

-Es lo único que le pido, por favor. No quiero problemas.

Y con el dolor de su alma aceptó, aceptó porque no tenía más opción.

-Está bien, Dong Min, no sabrás de mí nunca más.

Fue una promesa que no pudo romper, ni siquiera le dio tiempo de darle un beso aunque se en la mano y destrozado se fue de aquel lugar para dejarlo en paz.

Aunque en realidad, no solo se iba por lo que le dijo a Dong Min, sino porque se sentía exhausto y sofocado. Como si su alfa quisiera entrar en celo.

Fue a casa directamente para descansar, todo el día pasaría en casa ya que no tenía trabajo pendiente y podía darse libre. En ese instante, recibió una llamada repentina de San y respondió.

-¿Pasó algo?

-¿Acaso tiene que pasar algo para poder llamarte? -dijo el alfa. -Como sea, Wooyoung ya me dijo lo que hiciste, ¿Por qué sofocas a tu omega?

-¿Qué querías que hiciera? Sabes que me moría por verlo.

-Independientemente, debiste darle su espacio.

-Ya hablé con él y me pidió tiempo y espacio. No quiere verme más, no sé que hacer. -dijo con frustración.

-¿No crees que eso es una señal? Tal vez Min ya no quiere saber nada de ti y tú aun sigue insistiendo.

-No me interesa, no lo voy a dejar, no voy a renunciar a él.

-Bin date cuenta-...

-Choi, si realmente vas a ponerte en ese plan, entonces es mejor que cuelgue.

-¡No, no! Bin, solo quiero que dejes de seguir a alguien que realmente no quiere nada de ti. Dong Min puede ser muy amigo de mi esposo, pero reconozco que ese omega no vale la pena-...

-¡Ya basta! -Colgó sin decir más nada. En un minuto San logró desesperarlo, pero no le daría importancia. No quería centrarse en esas estupideces que su "amigo" decía.

Ya su alfa se había calmado por lo que ya no se sentía tan mareado, ni acalorado, y simplemente lo que quedaba de ese día disfrutaría su casa ya que Jong Sun estaba trabajando, San Ha en la escuela y Seungkwan ni sabía a donde estaba.

Trataría de pensar en algo...

En la noche, Dong Min cenó junto a la familia de su amigo, llamaron a Sunmi y le contaron que los trámites estaban listos y que al día siguiente Dong Min ya estaría en aquel hospital internado.

Aunque el omega tenía mucho en mente, en especial, un destino incierto el cual buscar...

Le hizo saber a Wooyoung qué daría un paseo por el jardín ya que no se sentía bien y su cabeza dolía horriblemente.

-Está bien, Minnie, después haremos la maleta para mañana.

Solo asintió y salió de la casa, en realidad si pensaba dar un paseo, pero en su misma curiosidad quiso salir de dudas de una sola vez y sin ser visto por terceros, salió, tomó un taxi con destino a su desengaño.

...

En cuanto bajó del taxi, se filtró en aquella casa para no ser visto por nadie del servicio, se acercó lo suficiente para poder ver dentro de la casa y la luz de aquella ventana hizo que su ilusión una vez más muriera frente a sus ojos.

Bin tenía sentado en sus piernas a su esposo, el omega se estaba frotando contra él buscando más de su olor como a un cachorro mientras Jong Sun le mostraba unas cositas para bebé. Y fue cuando Dong Min recordó lo que Seungkwan le dijo:

«Decidimos tener uno más porque estamos muy enamorados...»

Por un momento quiso creer que Seungkwan solo lo había dicho por decirlo, pero al ver aquel panorama, realmente sintió envidia, enojo y sobre todo, tristeza en su alma.

Y mientras Dong Min observaba aquella escena, no se percató del niño que lo observaba casi cerca de donde estaba. San Ha miró al omega asustado y más cuando lo miró llorando, y corriendo hacia la salida. Obviamente no lo reconoció y tampoco quiso investigar, pero se le hizo demasiado extraño.

En cuanto entró a su casa miró a sus padres siendo melosos y detestó aquello porque sabía que era un engaño de Moon y él no sería tan ingenuo como para creerle. Quiso decirle sobre lo que miró, pero le daba igual de todas formas.

Cada quien que haría lo que fuera.

Y Dong Min... Dong Min se fue de aquella casa sin saber que Bin realmente solo fingía y que todo era parte de su plan. Aunque ya fue demasiado tarde...

Cuando volvió a casa de Wooyoung, hizo como si nunca se hubiera movido de aquel jardín, incluso ayudó al omega a hacer su maleta y habló con él sobre cambiar, sobre tener otro estilo de vida y animarse.

Y al día siguiente... Cuando Wooyoung ya estaba listo para desayunar con su amigo, fue a su habitación y... Dong Min no estaba...

El sonido del teléfono despertó a Bin de su excesivo sueño, al ver que se trataba de Wooyoung respondió de inmediato, levantándose de la cama para no levantar sospechas de Seungkwan.

-Buenos di-...

-¡Moon, Dong Min no está! -dijo el omega exaltado y sumamente nervioso.

-¡¿Qué?! ¡No, eso es imposible!

-¡Se llevó su maleta, no dejó nada, lo he buscado cerca del vecindario pero nadie lo ha visto! -le dolió el pecho, sentía que no podía respirar correctamente.

-¿Cariño? ¿Todo bien? -preguntó el omega adormecido.

-S-sí, mi amor... -respondió con una sonrisa -Ya llego a tu casa.

Cortó de inmediato y fue a alistarse para irse, le dijo Que Seungkwan que necesitaba reunirse con uno de los senadores para algo urgente. Se despidió con un beso para ko levantar sospechas y se fue lo más rápido que pudo.

Cusndo llegó a casa de Wooyoung los gritos frustrados fueron la principal melodía en aquella casa, trataron de buscar algo en las grabaciones de las cámaras de seguridad de la casa y nada, no había registro de que Dong Min salió en la noche, aunque si supieron que el omega salió en la noche y que regresó con el rostro bañado en llanto por alguna razón que no entendían.

Y por más que lo llamaron, lo buscaron, pasaron semanas y Dong Min no apareció por ninguna parte. Llamaron a Sunmi para darle la noticia hasta luego de un mes y la omega en cinta no pudo con tanto, y terminó perdiendo a su bebé a sus ya cuatro meses de gestación.

No solamente fue desgarrador para Sunmi, principalmente para Bin porque por más que intentó comunicarse con él por el lazo, no pudo, era como si nada estuviese pasando y lo único que recibía era el cálido cariño de Seungkwan quien realmente tenía su marca y que en un impulso bruto, término re abriendo, sellando una vez más el pacto con Seungkwan.

Y pasaron los meses, la búsqueda del omega fue fallido, sin éxito total y resignado de alguna manera, su único refugio fue ver crecer el embarazo de su esposo. Se sintió en total sintonia con aquel bebé que se estaba formando y se convirtió en el alfa más amoroso que jamás creyó ser.

Y cumplidos los nueve meses de embarazo, el calor abrazó su cuerpo en el momento que escuchó el llanto de aquel bebé.

-Felicidades, es una niña muy sana...

Aquella bebecita había nacido con bien, porque el lazo con Seungkwan fue mayor que cuando San Ha nació, porque Bin marcó nuevamente al omega estando en cinta y su bebé estaba más que lista para tener una buena vida.

Y mientras él daba la noticia a su amigo, un omega dio pasos hacia la sala de neonato, mirando por el vidrio a todos los bebés en las encubadoras.

-¿Disculpe? -una de las enfermeras notó al omega ido viendo y quiso saber que hacía ahí.

-Oh, quería saber cual.. Es el bebé de los señores Moon. -su voz sonó gelida pero con su sonrisa logró reparar todo.

-Esa hermosa niña que estaban poniendo ahorita. -señaló la mujer a la bebé y asintió. -¿Es familiar?

-S-sí, soy su tío... -la mujer lo dejó sin hacer más preguntas y mientras miraba a través de aquel cristal sus lágrimas cayeron por rostro sin poderse evitar.

Bin había tenido otro hijo y esta vez había sido otra bebecita, con la diferencia que esa niña sería llena de amor y no tendría problemas al crecer, no como su pequeña bebé a la que le faltó todo, en especial el calor de una maldita marca que destruiria su vida.

Dong Min lloró sin contenerse, pero sabía que había hecho lo correcto.

-No podía alejarte de tu padre, necesitabas que ellos estuviera juntos para tu nacer y ser una estrellita en ese hogar.

Porque de la forma que fuera, sabía que Bin en algún momento por instinto lo querría a su lado, porque sabía que cuando aceptó su ayuda era como estar aceptando al alfa nuevamente en su vida y estaba seguro que si las cosas se daban bajo el mando de su omega y de el alfa del pelinegro probablemente Bin hubiera terminado abriendo la marca otra vez lo que significaba que aquel bebé podría morir o pasar por lo que Suyeon pasó.

-¿Lee, estás listo? -dijo su cuidadora y él asintió.

-Sí, vámonos.

Decidió desaparecer, no dejar rastro alguno de donde estaba.

Y fueron cuatro años en los que el omega no volvió ni siquiera dio alguna señal de vida.

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Cap dedicado a AlejandrinaMtz. Gracias por leer, lindx❤️‍🩹

No odien al domingo, él solo no quería que la bebé pasara por lo mismo ojo☝🏻😔