Jong Sun esperó pacientemente a que Dong Min saliera del cuarto donde estaba su nieta. No podía entrar más de una persona, así que en partes, se sentía sumamente ansiosa por verla, llenarla de besos y mimar a su pequeña lunita.

Su telefono sonó y respondió rápidamente al ver quien llamaba.

-Dime, hijo.

-¡Jong Sun, ¿Dónde estás?! ¡Vine a tu casa y ne dijeron que saliste! -la omega se preocupó, el llanto de San Ha de fondo le puso los nervios alterados.

-¿Qué pasa, hijo?

-Seungkwan le pegó a San Ha porque se quemó con agua caliente.

-¡¿Qué?! ¡Llévalo al hospital, ponle agua fría!

-¡Abuela! ¡Abuela, ven! -gritaba el niño quien estaba en brazos de Bin siendo cargado mientras salían de la casa para ir al hospital.

-Mi niño... Bin, no puedo ir ahora, no estoy en el país.

-¿Qué? ¿Dónde estás?

-Yo-...

-Dejé a Susu durmiendo, señora Moon. -la voz que escuchó... Bin se quedó erizado.

-Te hablo luego, Bin.

-Mamá-.. -cortó de inmediato dejando al alfa con la palabra en la boca.

Acaso... ¿Era su Dong Min a quien había escuchado?

-¡Papá, me duele! -San Ha lo sacó de su ensoñamiento.

-Ya vamos a llegar, campeón. -se obligó a poner atención a su hijo. Ya luego se encargaría de hablar con su madre.

Por otro lado, Dong Min se sintió nervioso, la omega no dijo ni media palabra, por lo que habló él.

-¿Interrumpí algo? -dijo el omega.

-N-no, nada. Era solo-...

-Bin. -concluyó -¿Pasa algo? ¿Necesita regresar?

-No, él se encargará, solo que mi nieto se quemó e iba al hospital.

-Digale qué le ponga crema cicatrizante y le esté limpiando para que no se le haga una ampolla de agua.

-Le diré cuando vuelva a llamar. -le sorprendió que Dong Min estuviera hablando normal sobre Bin y su familia, pero había algo que la inquietaba. -¿No te gustaría un café?

De alguna manera, debía encontrar la forma de hablae sobre lo que ocurrió temprano.

...

Fueron a la cafetería del hospital donde tomaron asiento y bebieron un poco de café para soportar la guardia de esa noche, más Dong Min ya que al ser la madre pasaba más tiempo con Suyeon qué otra persona.

-Escuché lo de Bin -Dong Min desvió su mirada -¿Querías que él viniera?

El omega se tomó un tiempo para responder y asintió -Mi hija está delicada de salud, desde que era bebé siempre la falta de su padre en el embarazo arruinó todo. Por un momento pensé que si él venía y cuidaba de Suyeon, habían probabilidades de que todo se normalizara.

-Minnie, entiendo tu desesperación como madre, pero el que Bin venga solo te afectará a ti.

-Por supuesto que no quiero verlo, no quiero siquiera escucharlo frente a mí otra vez. Yo me quedé en el pasado, con los recuerdos buenos de un hombre que solía ser mi novio y que me amaba. Un hombre al que le tengo una hija, pero él murió para mí. -Jong Sun lo miró con tristeza -Es sencillo, desheché todo lo que me atormentaba y seguí adelante.

-Y lo has estado haciendo bien todo este tiempo.

-¿Sabe algo? Vine a este país con un corazón roto y colapsando, muerto en vida después de vivir la decepción más grande de todas. -sonrió con amargura mientras reproducia en su mente sus desgracias -Puede que parezca estúpido sufrir por alguien hasta el punto de querer acabar con tu vida, pero cuando se está enamorado profundamente y rompen tu corazón, te vuelves más frágil de lo que crees...

Jong Sun se mantuvo escuchándolo, realmente parecía que Dong Min necesitaba desahogarse.

-Pensé por un momento que ni el huir de esa relación me salvaría, pero con mi embarazo y el nacimiento de mi vida, pude ver la luna brillando en el cielo salir después de tantos días de oscuridad. Suyeon se convirtió en mi motor de cada día y la única razón por la que sigo vivo.

-Min, eres una madre excepcional sin duda. Tus ojos transmiten todo lo que quieres decir. -sus brillantes ojos y su sonrisa hablaban por sí solos duda alguna.

-Ella es la razón de todo mi existir. No necesito tener a un alfa a mi lado, solo necesito amar a mi hija, cuidarla, tenerla conmigo siempre y que no me deje. Es lo único bueno que he hecho.

-No digas eso, tú eres un hombre muy talentoso e inteligente. Eres demasido fuerte y con un gran corazón.

-Intento serlo, pero por dentro me derrumbo en mis mismos pensamientos. No confío en mí, no creo que estoy haciendo las cosas bien, siento que me estoy engañando y es frustrante porque no quiero decepcionar a mi bebé.

-Dong Min, escúchame. -el omega apretó su puño para contenerse. -Todo lo que estás haciendo es por tu hija y nadie más, ¿Qué más te vas a señalar? Estás dando tu vida por ella, date cuenta.

-Lo sé, pero no es suficiente.

-Minnie, solo hay una cosa por decir. Eres un omega que superó hasta el haber perdido una marca, un omega que pudo tener a su hija aun cuando cambiaste de raza, un chico que jamás le ha mentido a su hija y quien es la razón del sonreir de esa pequeña. Si estuvieras haciendo mal, ¿Crees que tu hija te adorara a cómo lo hace?

Dong Min negó y solo soltó un suspiro. -Quiero que ella me siga amando.

-Y lo seguirá haciendo porque su mami es su todo también. -ambos sonrieron, Jong Sun no estaba equivocada, Suyeon lo amaba así como él a ella.

Bin salió ya noche del hospital, San Ha tuvo una quemadura de segundo grado afectando su epidermis y parte de la dermis. Le pusieron un ventaje y ahora, está de camino a casa con su hijo en brazos. El pequeño San Ha de casi 6 años, no la tenido fácil, menos Bin quien es la única persona que ha mostrado interés en él a pesar de su apretada agenda.

Seungkwan parece tener una especie de relación amor-odio con su hijo, le está gritando, no le muestra interés, ni presta atención, solo le pega por las cosas que el niño hace en buscar de llamar la atención. Esto desata peleas continuas en casa donde el niño solo va a corriendo a su habitación y se encierra mientras terminan de discutir.

Llegaron a casa, San Ha duerme en sus brazos así que sale de el auto con cuidado, pero Seungkwan sale corriendo a encontrarlo y besa a San Ha en la frente mientras llora.

-Mi niño... ¡Perdóname! -el niño abre sus ojos cansado y lo ignora. Bin camina con él sin importarle Seungkwan.

Sube las escaleras hasta la habitación de su hijo y lo acuesta en su cama, lo arropa y antes de salir, le da un beso en la frente, dejando su luz de noche para que no tuviera miedo.

Parece que el alfa es un hombre amoroso, pero en cuanto sale, Seungkwan lo está esperándolo con una mirada fría dirigida a él y solo la ignora.

-¿Qué te dijeron?

-Qué se quemó y ya. -va por su chaqueta y el omega ve como se dirige a la puerta.

-No piensas irte ahora, ¿Cierto? -el alfa abre la puerta y sale. -¡Bin! ¡Bin, te estoy hablando!

-¡¿Qué quieres?!

-¿A donde vas? ¿Vas a dejarnos solos como siempre?

-Estoy harto de escuchar tus malditas quejas y ver el teatro que te armas.

-¡Solo sabes irte, pero no cuidas de nosotros! ¡Tú ya no me amas!

-Deja de preocuparte por esas cosas. Estoy molesto contigo, muy enojado. -comenzó a decir mientras encendía un cigarrillo. -Solo sabes pegarle a San Ha, eres como un verdugo.

-San Ha es muy necio, siempre está haciendo tonterías.

-San Ha es un niño que no tiene amigos, no sale, no habla con nadie y las únicas veces que escucho su voz, es cuando le gritas y le pegas.

-Me desespera.

-No debería, es un niño, have cosas de niños y si tan solo su madre estuviera al pendiente de él, te aseguro que habría menos desastre.

-¿Para qué hay tantas gente en esta casa? Ellos también deberían cuidarlo.

-¡Tú eres su madre, maldita sea! ¡Cuida a tu hijo antes de que sea tarde! -tiró el cigarrillo casi terminado al suelo y lo pisó para luego caminar a su auto.

-¿Dónde vas?

-Necesito distraerme.

-¡Al saber con que prostituta batata vas a verte!

-Si para ti distraerse es sinónimo de ir a coger con alguien, pues te equivocas, mi amor.

Escuchó las rabietas de su esposo sin embargo, las ignoró, subió al auto y se marchó. Iría a su lugar seguro, a casa de su madre.

Después de todo, aún seguía pensando en la voz que escuchó temprano.

Era Dong Min, sabía que era él y odiaba tanto el hecho de solo imaginar que su madre ha estado en comunicación con su beta desde hace mucho tiempo y no le ha dicho.

Al llegar, fue directo a su cuarto donde pasó horas pensando en su maldita vida y en todo lo que por estúpido le ha pasado.

Decide llamar a su madre considerando que ya es tiempo, pero intentó tres veces y nada, no le respondió.

Intentaría llamarla al día siguiente y descubrir de una vez por todas, si su beta estaba con su madre o no.

En la madrugada afortunadamente, Suyeon no tuvo ninguna crisis, esto le permitió a Dong Min descansar un poco mientras Jong Sun le aseguró que ella cuidaría de su nieta y si había alguna situación, le avisaría.

Durmió dos horas en las bancas del hospital como si se tratase de un colchón de un hotel cinco estrellas, esos días de desvelos claro que le estaban jugando una mala pasada.

Se despertó casi a las 4 de la mañana, Jong Sun estaba como si nada sentada en la habitación de la niña, cuidándola mientras leía un libro. El omega abrió despacio la puerta y la llamó.

Antes de salir, la omega tocó la frente de su nieta por si estaba con fiebre o algo, pero se encontraba bien y salió con Dong Min a caminar un rato.

La verdad era que a pesar del error se Bin, Dong Min nunca sintió ninguna especie de resentimiento con la mujer. Tal vez sea por lo que jamás tuvo una madre que lo apoyara y en su tiempo era Sunmi quien celaba por él, pero no puede negar, que la compañía de Jong Sun en la crianza de su hija le hace sentir más seguridad.

-¿Suyeon no ha vuelto a preguntar por Bin? -esta interesada en que su hijo estuviera presente en la vida de la niña.

-De hecho, sí. Ayer hablamos de él. -una sonrisa se escapó de sus labios en el momento que recordó como su hija se asustó con la voz del alfa. -Ayer me pidió que le pusiera otro audio de él para escucharlo. Por lo general no dice nada, pero mencionó que la voz "el señor Moon" le daba miedo.

-¿De Bin? -hasta a ella le extraño.

-Supongo que está familiarizada a Min Hyuk, él es escandaloso, pero su voz es suave. La voz de Bin es... -pensó por un momento en aquella voz del alfa, en cómo le hizo sentir algún día.

-¿Es...?

Erizante, dulce, relajante y algo grave cuando estaba...

-Es similar, supongo que también se deja llevar de lo que mira en Internet. Casi siempre me hace buscarlo en Google.

-¿Así que ella está buscándolo? -negó con un gesto.

-Dice que no quiere conocerlo y yo voy a respetar eso. Ya si ella quiere algún día, pues es su decisión.

-¿En serio planeas seguir ocultandosela?

-Si él pudo ocultarme su segunda vida, ¿Qué hay de malo ocultar mi vida entera?

Y simplemente, la conversación quedó cerrada.

Por la mañana, Suyeon estaba mejor, mostrando mejoría aparentemente. Dong Min fue con el doctor para hablar sobre el alta. Firmó unos documentos, pero antes, el médico le hizo saber algo muy importante.

-Suyeon está bien, pasó la noche sin los ataques y su corazón tiene buenos niveles, pero sus plaquetas están bajas. Está desarrollando trombocitopenia y lamento decirle esto, pero la niña necesitará mucho de su ayuda.

-¿Cómo puedo ayudarla?

-Primero, le explico que esta condición puede provocar sangrados nasales o de encías, o la presencia de moretones, hasta vómitos, así que es muy importante que su dieta sea balanceada. -dio una pausa para escribir unas recetas. -Estará en tratamiento, pero no hay mejor cura que las feromonas de su mamá.

-¿Puedo ayudarla?

-Tener las plaquetas bajas debilita significativamente a la niña, al haber un lazo bien formado con usted, ayudaría a controlar los efectos secundarios del tratamiento, pero importante también que sea muy cuidadoso con ella y que su es posible, no la envíe a clases por un tiempo.

Dong Min estaba por volverse loco, más complicaciones.

Y mientras él escuchaba al doctor, Jong Sun se encontraba con Suyeon a la cocinita. Le había llevado unos juguetes para que se distrajera y por supuesto que estaba encantada con aquello.

Y mientras estaba con ella, su celular sonó, respondió con miedo, pero lo hizo.

-¿Qué quieres?

-¿Dónde estás? ¿Estás con Dong Min?

-Bin, cálmate. -Suyeon al escuchar el nombre de su padre dejó de un lado su juego.

-¡Dime si es Dong Min o no! ¡No me sigas ocultando nada! -la niña le hizo de seña y ella tuvo que silenciar la llamada un momento.

-¿Es papá?

La mirada curiosa de su nieta solo le dio la idea hacer algo... Un poco interesante.

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Cap dedicado a snoona_kim. Gracias por leer todas mis tonterías, solecita💗

(Como no puedo darle a la revisión correcta tuve que improvisar, ya mismo agrego al siguiente cap lo que no se subió😿)