ɪᴠ. ᴄᴀꜰᴇ ᴅᴇ ʟᴀ ᴘᴀᴢ




•✦───────────•✧

Capítulo editado

En estos capítulos estoy detallando más al fondo porque se deteriora la relación de los mellizos ya que a muchos no entendían bien lo que pasaba con ellos.

Los quiero

•✦───────────•✧




━━✧♡✧━━━✧♡✧━━━✧♡✧━━




El fin de semana había terminado, y los mellizos habían logrado acomodar sus pertenencias en su nuevo hogar, el cual resultaba más amplio que su anterior residencia. Aunque faltaban algunas de sus cosas, era bastante comprensible, ya que había comprobado que eran robadas así que fue confiscado por la policía.


—GRACIAS ESPIRITUS DEL CIELO. —grito el mellizo de manera dramática al ver su automóvil estacionado afuera del domicilio.

—En este punto siento que extrañabas más tu tonto auto que a mí. —murmuro Lexie abriendo el vehículo, esperando encontrar las identificaciones falsas que guardaron en un fondo que estaba en la guatera.

—No le hagas caso . . . esta loca. —Eduardo le susurro a su auto como si él se hubiera ofendido ante el comentario de su hermana.

—Pues está loca . . . es tu salvación. —informo Alexandra mostrando las múltiples identidades falsas junto con sus respectivas cuentas bancarias. —El doble fondo funciono y decías que era una pérdida de dinero.

—Entonces retiro lo dicho lunática. —Eddie le quito las tarjetas que le pertenecían mirando con incredulidad el escondite de su hermana. —¿Cómo es posible que no encontraran esto?

—No se . . . tal vez porque fuimos arrestados por . . . otras cosas en vez de estafas. —dedujo la melliza sintiendo un mal sabor de boca al recordar lo que habían pasado. —Creo que si vamos a gastarlo debe de ser poco a poco . . . ya sabes para no despertar sospechas.

—¿Significa que tendremos que esperar unos meses para podernos mudar de este lugar? —el mellizo cuestiono antes de señalar la pequeña casa que les rento el FBI.

—El lado positivo es que es más grande que nuestro antiguo departamento. —Alexandra se encogió de hombros antes de dirigirse a su nuevo hogar, preparándose mentalmente para desempacar todas sus cosas.


El fin de semana transcurrió de manera rápida y sin darse cuenta ya era su primer día en las oficinas de la UAC y por querer dormir "5 minutitos más", se levantaron con el tiempo justo, teniendo que desayunar en el trayecto. Aunque Eduardo odiaba comer en su coche, tuvo que ceder ya que no podían permitirse llegar tarde.

Al entrar al piso de perfiles se dieron cuenta de que algunas personas comenzaron a murmurar, Miranda tenía razón, eran la noticia local. En ese momento, tal vez recordaron lo que su madre solía decirles, hablaran bien o mal de ti, pero lo importante es que hablen.


—Me siento igual que mi primer día de escuela. —comento Eduardo abriéndose paso entra algunos agentes curiosos que se acercaban a ver a los excriminales entrar.

—Yo me siento más bien . . . como atracción de circo. —respondió Alexandra mirando a lo lejos a los demás. —¡LES JURO QUE SI NO SE MUEVEN LES DARE UNA BUENA RAZÓN PARA MIRAR! —amenazo la castaña bastante molesta, haciendo que poco a poco el espacio fuera despejado.

—Te daré cinco dólares si lastimas a alguien hoy. —propuso el mellizo sacando un billete de su cartera.

—Trato hecho, son los cinco dólares más fáciles que he ganado—respondió Lexie tomando el dinero, empujando 'accidentalmente' a su hermano provocando que se cayera de las pequeñas escaleras de los escritorios.

—No me refería a mí. —Eddie se quejó levantándose del suelo caminando lentamente a donde estaba el resto del equipo. —Tramposa . . . Dame eso. —intento tomar su dinero, pero solo recibió un manotazo.

—Regla número uno, jamás retes a un estafador. —bromeo la melliza notando dos escritorios vacíos, suponiendo que eran los suyos.

—¿Qué no era "No confíes en nadie"? —pregunto el azabache tratando de recordar las palabras de la menor de las Ocean.


Ambos guardaron silencio cuando por fin estaban en frente a los otros compañeros del equipo de perfiles, compartiendo miradas cómplices.


—Buenos días, al parecer a alguien se le quedaron las cobijas pegadas—bromeó Morgan al verlos.

—No quiero culpar a nadie, pero alguien prefirió dormir 5 minutos más y despertamos tarde —el mellizo continuo la broma provocando algunas risas y también miradas incomodas. —aunque necesito un café para terminar de despertar.

—Entonces, ven hermano, te llevaré a la zona de descanso. Debes de saber que el café de aquí es horrible, pero míralo como el café de la paz, sin resentimientos —propuso el moreno mientras estrechaba la mano del 'nuevo'. —Y tú pequeña . . . ¿Quieres un café? —preguntó cortésmente a Alexandra.

—Sí, por favor. —contestó Alexandra, soltando un suspiro de alivio. Pensó que después del incomodo momento de hace unos días, las cosas serian diferentes. —Con dos . . .

—Dos de azúcar y no muy cargado . . . ya lo sé, siempre pides lo mismo—respondió Eduardo, alborotando el cabello de su melliza.


La castaña camino hacia el escritorio que tenía una placa con su nombre, paseaba sus dedos en cada letra, aún no podía creer lo que estaba sucediendo. Cuando era niña quería ser chef o tal vez doctora, pero las circunstancias la llevaron a ser una criminal y ahora consultora del FBI.

Su vista se posó en una caja con varias carpetas encima, comenzó a hojearlas sin entender nada y al parecer no fue necesario que lo explicara ya que su cara hablaba por si sola.


—Ese es tu informe del caso pasado, debes de llenarlo. —informo Spencer al ver la confusión en su rostro. —Como son parte del equipo tienen que llenar papeleo, no solo es atrapar a los malos, algunos dicen que es aburrido, pero puedo ayudarlos si tienen alguna duda.

—Y yo que creí que esto podría ser fácil. —murmuro la melliza notando varias formas que llenar, al igual que un reglamento que leer.

—Soy el Dr. Spencer Reid . . . tu . . . tu . . . soy Spencer, no tienes por qué decirme doctor. —Reid se presentó de manera 'formal' levantando la mano como saludo.

—Si te recuerdo . . . el señor seriedad nos presentó la otra vez . . . Es un placer Alexandra Rivera . . . me dicen Lexie, Lex o engendro del diablo. —la castaña estiro la mano para estrechar la suya, sin embargo, el genio no se movió.

— Hey, niña, tal vez no lo sabes, pero a Reid no le gusta el contacto físico. Así que no te esfuerces o creerá que tratas de robar su reloj —contestó de manera burlona Elle.

Spencer abrió los ojos después de escuchar lo que Elle insinuaba. Él creía que tal vez Alexandra podría tomarlo en serio, e inmediatamente apretó su mano.

—No, claro que no . . . Solo que no muy abierto en cuanto al contacto físico, pero no te preocupes, estamos bien. —sonrió Spencer bastante nervioso, sintiendo su mano sudar.

—Tranquilo, tenía un conocido que también odiaba el contacto físico, bueno a estas alturas no se si era verdad o si me mintió porque le caía mal. —dijo Alexandra haciendo reír a su nuevo compañero.


Elle empezó a buscar algo en su escritorio, lo que llamó la atención de ambos. —No encuentro mi cartera, ¿te importa si busco en tu bolso? Ya sabes, por si aún tienes esa costumbre —sonrió maliciosamente hacia la melliza.


—Me parece tierno que creas que podría interesarme algo tan . . . sin valor. —la castaña se burló del intento de conflicto entre la otra mujer.

—¿Disculpa? —pregunto Greenaway obteniendo una sonrisa burlona de parte de la excriminal.

—¿Crees que después de robar obras de arte y miles de reliquias, me interesaría tomar tu cartera . . . con un par de dólares? —cuestiono Lexie mientras comenzaba a recogerse su cabello en un moño, dispuesta a 'resolver' las cosas a su modo. —Me he enfrentado a muchos bravucones como tú.


Elle no dudo ni un segundo ante de imitar las acciones de la chica. También estaba lista para arreglas las cosas con la nueva usando la violencia. Sin embargo, para desgracia de Greenaway, el agente Aaron Hotchner estaba presenciando todo desde la puerta de su oficina.


— Agente Greenaway, a mi oficina, ahora — sentenció Hotch.


El resto del equipo miraba como la susodicha se dirigía hacia la dirección de Hotch, mientras Eduardo y Morgan se acercaban a los dos castaños pidiendo del contexto de lo que había pasado.

Aaron cerró la puerta detrás de Elle antes de señalar una silla enfrente de su escritorio, 'invitándola' a tomar asiento


—¿Qué es lo que buscabas al provocarla?, ¿Querías ver qué tipo de movimientos aprenden en prisión o solo era una 'novatada'? —preguntó Hotch bastante molesto por la casi pelea en las oficinas.

— No lo entiendes, ¿Crees que es justo que ellos, que estuvieron involucrados en estafas y un homicidio, sean aceptados tan rápido, mientras yo tuve que esforzarme durante años para ser reconocida? contesto Elle bastante molesta

—Ellos están aquí para ayudar al equipo. Estamos del mismo lado. —informo el pelinegro regresando un par de expedientes en su maletín. —No puedes tratarlos mal por ser buenos en lo que hacen. —argumento recordando todos los recursos que usaron para salir de la cárcel.

—¿Por cuánto tiempo? ¿Hasta que ganen la confianza de todos y huyan o hasta que aprendan a como subir de nivel en sus crímenes? —preguntó Elle consiente de que sus habilidades pudieron ser practicadas para convertirse en asesinos seriales.

—Ese es mi problema, ellos están aquí bajo mi cuidado y si vas a seguir hostigándolos, es mejor que te preguntes si este trabajo es lo que quieres. —Aaron se limitó a hacerle una recomendación antes de seguir. —Eres buen elemento, pero si continúas así, no podemos seguir teniéndote aquí.

—Si . . . si . . . empezare a ignorarlos, ¿Ya puedo irme? —la mujer trató de ignorar a Hotch y buscando una salida ante la situación.

— No, te quedarás aquí y leerás el reglamento. Si tu actitud no cambia, involucraremos a recursos humanos — sacó un libro de un cajón y se lo entregó. Hotch no iba a permitir que nadie se sobrepasara sobre otro miembro del equipo.


Mientras la discusión entre Hotch y Elle continuaba en la oficina, el ambiente en los escritorios era diferente.

Derek intentaba mejorar el ambiente para que se olvidaran del mal rato que habían vivido. Al principio, hizo una pequeña burla sobre sus sobrenombres de la 'Baraja Maestra', comparándola con un título de película de magia, para después seguir con Spencer llamándolo "Pretty Boy", lo cual hizo que el genio se avergonzara de inmediato por el apodo de su amigo.

Sin embargo, la risa se vio interrumpida cuando una chica rubia los sacó de su burbuja de alegría.


—Los necesito en la sala de juntas, por favor—anunció la chica señalando el lugar indicado, pero al notar la presencia de los mellizos decidió acercarse.

—¿Cuál es la sala de juntas? —pregunto el mellizo recibiendo una mirada de '¿Enserio lo preguntas?' de parte de su hermana.

—Es la que acaba de señalar. —se burló Morgan mientras tomaba sus cosas.

—Ustedes deben de ser los Rivera, ¿Cierto? —pregunto la rubia recibiendo un asentamiento de los mellizos. —Es un gusto por fin conocerlos . . . soy Jennifer Jareau, pero pueden decirme JJ, espero que se sientan cómodos.

—Gracias por la bienvenida, eres muy amable. Soy Alexandra y él es mi hermano Eduardo. — sonrió la melliza mientras estrechaban sus manos.

—Es bueno saber que al menos somos bienvenidos—bromeó Eddie recibiendo un codazo por parte de su hermana.

—Bueno . . . a veces las cosas no salen como planeamos . . . pero los necesito en la sala de juntas, por favor, chicos. — pidió nuevamente antes de ir por Hotch a su oficina.


Una vez reunido el equipo comenzaron a reproducirse distintas imágenes y videos en la pantalla.

Jennifer explicaba que se trataba de un incendiario, que estaba aterrorizando un campus universitario durante los últimos 7 o 6 meses, pero nadie le había prestado atención porque no había herido a nadie.

Sin embargo, en su último incendio un chico quedo atrapado en el fuego, provocando quemaduras graves. Hotch solo se limitó a informar que los quería en el Jet en menos de 5 minutos, así que los mellizos fueron por sus maletas al auto para abordar el Jet, mientras esperaban a los demás.


—Bien equipo nuestro objetivo es detener a este incendiario antes de que cause más daño. Nos dividiremos una vez que lleguemos para cubrir más campo. —informo el pelinegro agrupándolos mentalmente evitando que se maten entre sí.

—Trabajare en el perfil psicológico junto con Reid, analizaremos los patrones del incendio y trataremos de buscar una conexión. —anuncio Gideon mostrando su libreta con anotaciones.

—Muy bien . . . Morgan y Rivera traten de centrarse en entrevistar a testigos o posibles víctimas. Quiero saber si alguien ha notado algo fuera de lo común antes de los incendios. —pidió Aaron moviendo mentalmente a sus compañeros.

—¿Cuál de los dos Rivera? —pregunto Eduardo mirando a su hermana, quien solo garabateaba en su libreta.

—Me refiero a ti Eduardo, coordínate con Derek—aclaro el agente Hotchner, antes de mirar a las dos restantes. —Elle quiero que manejes la coordinación entre nosotros y el departamento de bomberos local, busca detalles técnicos sobre los incendios.

—¿Es algún tipo de castigo? ¿O es porque no tengo compañero? —preguntó Elle al darse cuenta de que quedó sola en los equipos.

—No, Elle. Solo es una oportunidad para que demuestres que puedes hacer un buen trabajo por tu cuenta. Te pondría con Alexandra, pero temo que una de las dos termine lastimando a la otra —respondió de manera seria —Alexandra estará a cargo del análisis de la evidencia física: busca huellas, algún rastro de detonante, cualquier pista que nos dé una idea de cómo opera y cuál podría ser su próximo objetivo. Manténganse en contacto y compartan cualquier hallazgo importante.


En cuanto llegaron a la universidad, Gideon sugirió que intentaran pasar desapercibidos, no quería atraer más atención de la necesaria; todos se miraron entre sí, prácticamente llevaban gafetes visibles que decían "FBI", pero decidieron dirigirse a sus tareas asignadas: Eduardo y Morgan comenzaron a entrevistar a las personas que se encontraban cerca de los incendios fallidos, Elle fue directamente a la estación de bomberos para luego revisar el protocolo de incendios de la universidad, Gideon y Reid empezaron a analizar las entrevistas de Morgan y Derek junto con el perfil que ya habían creado. Alexandra estaba en la última escena del crimen, inspeccionando todo lo que había alrededor, mientras Hotch se encargaba de hablar con las autoridades de la escuela.


—Los primeros incendios fueron en casas o edificios vacíos; los únicos que estaban habitados fueron los dos últimos. En el primero no hubo heridos porque todos estaban en un partido —informó Elle, dejando las hojas de investigación, sentándose en frente de la melliza.

—Murió el profesor Wallace; una bomba casera explotó en su oficina —informó Gideon saliendo de su transe, llamando la atención de los presentes. —Uno de sus estudiantes cree saber cómo hicieron el artefacto. Rivera alcanza a los otros en el laboratorio de ciencias.

—¿Cuál de los dos? —preguntó Lexie, mirando a su hermano, quien solo estaba comiendo un burrito de carne.

—Tú, Eduardo. —Jason señalo el mellizo, haciéndolo salir a toda prisa. —Alexandra te quedarás con Elle para comparar las fotos que se tomaron de las personas. Busquen alguna expresión de culpa, excitación, lo que sea.

—Hotch dijo que no nos quedáramos solas. —Elle recordó las órdenes del pelinegro, temiendo de que se hagan daño.

—Y yo les digo que trabajen juntas . . . No me importan sus diferencias, son adultas arréglenlas y listo—ordeno Gideon saliendo de la pequeña oficina.

Ambas chicas quedaron en un espacio silencioso, compartiendo miradas incomodas, antes de que Greenaway se acercara a ella.

—Nos dividiremos a la mitad las fotos—mencionó la mujer entregando su parte correspondiente a Alexandra.

—¿Cómo se supone que un incendio causa excitación? — preguntó Lexie de manera incrédula, tratando de comprender ese sentimiento ante el fuego.

—Según Reid es la liberación de adrenalina en situaciones de riesgo pueden ser respuestas biológicas y psicológicas que ocurren en el cuerpo humano. —comento Elle entre risas recordando los datos que el Dr. debería saber.

—Y yo creí que era rara. —murmuro la melliza comenzando a esparcir las imágenes en todo el piso para tener mejor visualización.

—Niña . . . creo que te debo una disculpa. —aseguro Greenaway reconociendo la intención de salir adelante. —Me molestó que llegaran sin ningún esfuerzo, mientras yo pasé años intentando destacar.

—Tranquila, sé que iba a ser difícil encajar. —expreso Lexie, recordando todo lo que habían pasado. —Tampoco fue de la noche a la mañana.

—¿Así que la carrera de estafadora no despego a la primera? —pregunto la azabache con una pizca de burla.

—Para nada . . . Intenté durante años hasta que logré abrirme camino. —esas palabras de la melliza la hicieron desconectarse de la realidad.

Alexandra recordó el video que reprodujeron en la pantalla. El ignoto había intentaron tres veces entrar en la habitación. Y cuando ella verificó el cuarto en busca de alguna pista no había seguro en el otro lado de la puerta. ¿Para qué intentar si no tenía intenciones de entrar?

—¡Hey, niña!, ¿Todo en orden? —pregunto Elle viéndola, parecía que estaba acomodando sus ideas.

—Escucha ve a su oficina del profesor que falleció, busca sus horarios mientras que yo iré a la habitación . . . tal vez no vi algo obvio. —la castaña dividió las tareas mientras recordaba el comportamiento de un viejo conocido.




━━✧♡✧━━━✧♡✧━━━✧♡✧━━



Salón de ciencias


El aroma a productos químicos resaltaba en el aire del laboratorio de ciencias, donde los dos agentes y un consultor se habían reunido para buscar pistas sobre el incendiario.

El lugar estaba lleno de mesas cubiertas de tubos de ensayo, microscopios y equipos de laboratorio, el mellizo, se dedicó a recorrer el laboratorio por curiosidad.

Hotchner le pidió Reid dirigir algunas palabras a los alumnos y en eso estaba hasta que se desvío con datos diferentes.


—¿Qué motiva a alguien a causar incendios de esta manera? —Hotch le pregunto a Morgan, reconociendo su trayectoria y experiencia en esos casos.

—La piromanía es un trastorno psicológico, algunas personas encuentran satisfacción emocional al provocar incendios. —respondió Spencer robándole la palaba a su amigo. —Puede ser una forma de liberar tensiones o una manera de llamar la atención.

—Bueno en este caso, los incendios se han centrado en edificios específicos, y el uso de una bomba casera para matar al profesor Wallace sugiere cierta destreza y planificación en la fabricación de explosivos. —comento Eduardo tratando de recordar con exactitud lo que había dicho Derek hace unas horas.


Hotch miro a Eduardo con asombro, al parecer el tiempo que pasaba con Morgan estaba dando resultados o tal vez tantos datos que soltaba el genio aprendió algo de eso.


—Entonces . . . Estamos lidiando con alguien que tiene conocimiento y habilidades técnicas. —argumento Aaron intentando acomodar rápido el perfil. —Alguien que puede moverse sin ser detectado y que sabe cómo causar el máximo daño.

—Podríamos investigar si hay algún historial de alumnos con antecedentes de piromanía o inclinaciones hacia la fabricación de explosivos. —sugirió la melliza buscando alguna salida para el caso. —Además, podríamos analizar los registros de acceso a los edificios incendiados en busca de patrones.

—Y también deberíamos considerar la motivación detrás de los objetivos. —concordó Reid ante la idea del chico—El incendio en el edificio durante el partido parece estar destinado a causar confusión y evitar heridos, pero el ataque en la oficina del profesor Wallace fue claramente letal, como algo personal.


El sonido de unos pasos resonando por el corredor hizo que los tres dirigieran la mirada hacia la entrada, notando que Gideon se estaba acercándose a ellos con toda la calma del mundo, como si no hubiera un incendiario fuera.


—Recibí una llamada de JJ; al parecer, alguien en la línea anónima que proporcionamos dijo que lo hacía todo por Karen. —informo Jason leyendo la nota que tenía en su mano.

—Enfoquémonos en ese nombre. Tal vez sea algún exnovio, un pretendiente que enloqueció y busca algún tipo de venganza—propuso Hotch, pero sus palabras quedaron atoradas cuando se dio cuenta que su amigo había llegado solo. —¿Dónde está Lexie y Elle?

—Deje a ambas trabajando en la oficina, buscan a alguien sospechoso en las fotos. —expreso Jason intentando no darle mucha importancia. —Son adultas, no creo que se maten entre ellas.


En un abrir y cerrar de ojos, Eduardo corrió hacia donde habían dejado a su hermana, seguido por su jefe. Su mellizo sabía a la perfección de lo que era capaz Alexandra, ya que muchas veces tuvo que intervenir en las peleas que se metía.

Al llegar a la sala, la preocupación se apodero de ellos, al ver que no había nadie solo estaban las fotos en el suelo.

Después de un par de minutos, las chicas entraron a la sala algo agotadas del viaje que tuvieron que dar para recolectar la evidencia.


—¿Dónde estaban? —preguntó Hotch, aliviado de que nadie resultara herido.

—Elle me ayudó a conseguir algo del profesor para confirmar mi teoría —informó Alexandra mientras comenzaba a escribir en un pizarrón.

—Se que siempre fuiste más de teorías conspirativas y detallabas los planes para minimizar el margen de error. —Eduardo le dijo al oído, esperando de que nadie escuchara la plática. —Pero si fallas podríamos terminar en prisión.

—Gracias por tu apoyo, pero cállate y toma asiento. —contesto Lexie de manera sarcástica mientras seguía anotando. —Bueno . . . en el penúltimo incendio, fue en la tercera sección, en el edificio número tres y piso tres.


Greenaway colocaba el mapa que había trazado Reid para que todos pudieran mirarlo.


—En la última escena del crimen . . . el ¿Ignoto? . . . giró la perilla tres veces, sin entrar. —explico la melliza sintiendo que nada de lo que decía tenía sentido.

—Una trinidad de tres—completó Spencer levantándose de su asiento antes de comenzar a escribir en la pizarra. —El primer incendio fue el tres de marzo a las tres de la tarde . . . el tercer día del tercer mes. Es el síndrome del Toc, el desconocido no incendia por placer; es más una obligación.

—¿Y era el profesor Wallace? —preguntó Hotch intrigado ante la teoría que se estaba formando.

—Era la oficina número 3. —respondió Elle antes de entregarle una hoja con su información. —Su clase era los miércoles. Matthew Rowland estaba en esa clase; era la tercera clase del día.

—Creo que el ignoto no es un él es ella . . . Clara Hayle — comentó Aaron recordando el extraño comportamiento de la chica.

—Decía 'azúcar' tres veces y giraba sus anillos de un lado a otro. —respondió Reid siguiendo con sus anotaciones. —Cuando el patrón llega, lo tiene que incendiar.

—Gideon, dile a la directora que envíe la dirección a Morgan. Elle, alcánzalo. No intenten razonar con ella, porque no los escuchará. —coordinó Hotchner al equipo, guiándolos de manera rápida.

—¿Por qué repite todo tres veces? — preguntó Eduardo con interés, mientras recargaba su hombro en la cabeza de su hermana.

—Es palilalia, la repetición involuntaria de palabras. Howard Hughes la tuvo cuando su trastorno empeoró—contestó el genio haciendo una mueca intentando citar los párrafos correctos.

—Era lo mismo que tenía Steven. —Alexandra informo a su mellizo dejándolo confundido. —El chico que defendiste en quinto año.

—Ohhh . . . el pequeño Wilson. —menciono Eddie atrayendo miradas indiscretas de los demás. —Recuerdo que su mamá hacia buenos sándwiches.

—Oigan creo que esto puede ser un motivo religioso— comento Spencer hojeando las notas de la castaña. —Creo que no dijo "hago esto por Karen"; intentaba decir "hago esto por Caronte". —dedujo al mirar un dibujo de su compañera que se parecía al personaje mítico.

—¿El barquero de la muerte en la mitología griega? —pregunto Eduardo interesado en las cosas de historia o algún tipo de datos así.

—Si . . . tal vez cree que dios la mando a probar a las personas, si sobreviven pasaron la prueba y si no, no eran dignos de sobrevivir. —complemento Spencer devolviéndole su cuaderno a la chica, intercambiando sonrisas tímidas.

— Gideon, vamos a ayudar a Morgan y Elle — informó Hotch — Reid, Rivera 1 y Rivera 2 se quedarán aquí. Todavía no han pasado el examen y no se les han brindado armas, así que prefiero que estén seguros aquí.


Los mellizos se quedaron con Reid en la pequeña oficina, esperando a que atraparan a la chica. Mientras tanto, Eduardo 'retaba' a Spencer y su memoria eidética. Diciéndole una serie junto con el minuto exacto para ver si lo recordaba.

Los mellizos decían que cuando huyes frecuentemente de la policía, dejas muchas cosas atrás, así que para ellos era normal estar solos.

Después de unas horas, Hotch les informó que habían rescatado a tres chicos en un ascensor y Clara ya había sido detenida. Así que los tres se dirigieron al equipo para poder regresar a Quántico.


Así que ahora es Lexie y no Alexandra—Jason rompía el silencio aprovechando de que la mayoría estaban dormidos— ¿Te preocupas por ellos solo porque son tu responsabilidad o ellos comienzan a agradarte?

— Haley quiere hacer una cena para conocerlos — sonrió Hotch al recordar la conversación con su esposa — El estar aquí y convivir les hace bien. Eduardo me sorprendió con sus deducciones hoy. Al parecer, Morgan le está enseñando y Alexandra sigue sus instintos.

—¿Puedo preguntar por qué no dejaste que nadie leyera su expediente? — preguntó Gideon con cierto interés en ese tema.

—Es difícil, ellos demuestran ser fuertes. Lo aprendieron a corta edad . . . crearon una armadura y cuando comience a caerse . . . espero que sigan juntos . . . como hermanos.

—Henri Tajfel y John Turner. —aseguro el mayor viendo de reojo a los mellizos dormir desde el otro lado del jet. —La teoría afirma que una persona puede comenzar a identificarse o adoptarse a nuevas normas. Esto puede llevar a cambios en el comportamiento ya sea para alinearse o para defender lo que creen correcto.

—He tratado de perfilarlos . . . Eduardo es el mayor lo que indica que debe de protegerla, pero la actitud de ella dice todo lo contrario. —expreso Aaron estando consiente de la regla de 'No perfilar al equipo', aunque tuvo que hacerlo por su pasado criminal. —¿Tu qué opinas?

—El chico es . . . impulsivo, bastante desorganizado mientras que ella trata de imitar todo lo que hace su hermano, aunque logra ver algunos de sus errores y trata de perfeccionarlos. —informo Jason tratando de recordar las actitudes de los dos. —Alexandra no tiene personalidad propia, creo la suya a base de la de su hermano, eso hace que Eduardo sea el dominante, no le dolerá si se vuelven a separar.

—¿Enserio lo crees? —pregunto Hotchner con algo de incredulidad, ya que ambos se seguían a todas partes.

—Mira esa relación de hermanos como un matrimonio. —Jason tomo una metáfora para exponer su punto. —Ella arregla todos los desastres de él . . . Eduardo está acostumbrado a salir adelante sin mirar hacia atrás . . . tanta convivencia harás que alguno de los dos termine odiando al otro y creo saber quién terminara herido.

—¿Alexandra? —pregunto el pelinegro viendo a su amigo asentir. —Ella es bastante fuerte, algo egocéntrica, sarcástica y ambiciosa. Así que lo dudo que sea ella.

—Solo es una máscara. —Gideon desestimo el argumento de Hotch. —Es un espejo de lo que ve su hermano, reprime sus emociones, es ella quien siempre está detrás de su hermano . . . Miedo al abandono podría ser.


Al llegar a la UAC aún estaban dentro de las horas de trabajo, así que no quedó otra opción que empezar con el papeleo. Nadie tenía ganas de hacer nada, pero todos se animaron a 'trabajar' porque Morgan estaba organizando una tarde en el bar. Así aumentarían el lazo de confianza con los nuevos, esperando que poco a poco comenzaran a fluir por si mismos. Y aunque nadie lo notaba, Eduardo y Alexandra se estaban integrando no solo a un equipo, sino también a una familia.





━━✧♡✧━━━✧♡✧━━━✧♡✧━━

━━✧♡✧━━━✧♡✧━━━✧♡✧━━

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top