Pase el resto del día pensando en como convencerla. Entiendo que no quiera ir pero es que ella no sabe que el cielo es mejor que el infierno, ella creció aquí y no conoce más que dolor, por lo que se que si aquí piensa que es feliz en el cielo va a disfrutar cada segundo del día. Paré de pensar cuando terminé de hacer su regalo. Fue entonces cuando vi que solo quedaba una hora para encontrarla, lograr que quiera ir y llegar al lugar donde había quedado con su "familia".

Con la misma salí de la casa e intente encontrarla por todo los alrededores, no lo logre y tan solo quedaban quince minutos. No se que cable se cruzó en mi cabeza pero decidí ir al lugar donde habían quedado, corrí todo lo que mis piernas me permitieron y en menos de tres minutos ya había llegado. Ví muchos caballos blancos, también muchas naves de fondo, entre estas y los caballos un montón de soldados, al frente había cinco personas personas. Dos mujeres y tres hombres:

Una de las mujeres tenía el pelo largo (aunque no tanto como ella) de color morado y sus ojos eran verdes, tenía buen físico aunque se notaba que nunca había tenido que hacer nada, en sus manos había muchas joyas, al igual que en su cuello, pelo y ropa. Vestía un vestido azul de manga por el codo, con caída, largo abierto por delante, a la altura de las rodillas y con caída en cascada, llevaba un manto por encima de los hombros del mismo color que el vestido y los zaparos, estos eran unos botines con un poco de plataforma. No tenía ni alas, ni cuernos, ni tampoco cola, aun así supuse que es Angélica porque es muy parecida a Diabla. [Es Angélica, hija de Thor y Maléfica, hermana gemela de Diabla, es decir tú, y melliza de el Joker].

La otra mujer debía tener cincuenta años, era rubia de ojos verdes como los de Angélica, vestía un vestido verde de manga larga, con una capa la cual arrastraba, en la parte de arriba del vestido (desde los hombros hasta la mitad del cuello) tenía un montón de perlas haciendo un circulo, simulando ser muchos collares apilados. [Es Frigga, la esposa de Odín y por ende la madre de Thor y Loki].

Uno de los hombres miraba asombrado el infierno. Tenía los ojos azules, rasgados aunque muy abiertos y el pelo negro peinado hacia atrás. Llevaba un traje negro, pegado al cuerpo, tenía unas botas con refuerzo en la espinilla, pantalones largos con detalles en oro y color verde. También usaba una chaqueta que le llegaba hasta más abajo de las rodillas, esta tenia verde en los hombros y el vuelto de la parte superior, y en esta parte tenía franjas doradas. [Es Loki, hermano de Thor e hijo adoptivo de Frigga y Odin].

El siguiente era rubio con melena algo más larga que la mía, ojos azules y una perilla rubia. Vestía un traje de guerra negro, pegado al cuerpo [yo me guio por el thor de avengers] con una capa roja, unas botas negras hasta la rodilla. Tenía un martillo muy raro en su mano derecha.[Es Thor, dios del trueno].

Por último un hombre de unos cincuenta años media melena blanca, barba corta pero poblada, sus ojos son azules y se le nota que está atento a cada movimiento. Usaba una armadura negra y dorada de manga corta con una capa roja, unas botas hasta las rodillas. Y en el antebrazo tenía unos brazaletes de oro, algo abollados.[Es Odin].

En cuanto ví toda aquella estirpe me subí a un árbol, al primero que vi, me senté en una rama a mitad de este y los observe.

-¿De verdad quieres que me valla con ellos?

Busque la voz que me había asustado, la encontré sentada unas ramas más arriba que yo. Escalé hasta donde ella estaba, me di cuenta de que estaba completamente convertida (es cuando tiene la cola y el brazo derecho derretidos, es decir en huesos, el pelo y la piel quemada, una sonrisa como la mía y todas las heridas abiertas) me senté detrás de ella, dude un momento si abrazarla o no, ella debió darse cuenta porque se apoyó en mi pecho.

-Se que es difícil pero serás más feliz allí.

-¿Cómo lo sabes?

-En el mundo humano si te portas mal en vida al morir vienen al infierno, si lo haces todo bien van al cielo.

-¿Quieres que me valla con ellos?

-Sí- le di un beso en el cuello- quiero que vallas y aproveches todo lo que puedas- repetí la acción anterior.

-Esta bien.

-¿¡Iras?!

-Si me prometes que nos volveremos a ver sí.

-Te lo prometo.

Se giró y me beso. Fue lento demostrando el amor que nos tenemos como en la noche. Cuando nos separamos me abrazó y yo correspondí.

-Sí, estamos aquí. Vale, dame cinco minutos.

-¿Tu hermana?

-Sí.

-No les hagas esperar.

-Llevo dieciséis años esperando yo y ellos no van a esperar cinco minutos? No me jodas.

-Jajajajaja. Te amo- se separó del abrazo.

-Yo más a ti.

Nos miramos un momento supongo que los dos pensábamos lo mismo, poco a poco nos acercamos al otro hasta que nuestros labios chocaron. Esta vez ella bajo mis manos a su culo y volvió a subirlas ha mi nuca, pero de manera lenta palpando mis brazos, mis hombros y finalmente enredando sus dedos en mi pelo. Nos separamos de nuevo y aproveche para poner la corona que había hecho esta tarde en su cabeza. Ella se la quitó y la observó.

-¿Desde cuando la tienes?

-La hice esta tarde. Pensaba en ti, en cómo convencerte y sin darme cuenta la hice. Lo malo de tratar con Gimiko.- Ella rió, por mi comentario.

-Me encanta. Gracias.- Me miro muy ilusionada, pero esto le cambio muy rápido.- Jeff hagamos un pacto.

-¿Cómo un pacto?

-Cuando yo me vaya con mi hermana dejamos de ser novios.

-¡¡¡¿Qué?!!!- tome aire.- ¡¿Por qué?!

-Porque no quiero fallarte.- No quería hacerlo, pero lleva razón, prefiero no fallarle.

-Esta bien. Te amo- la bese una última vez.

Apretó la corona y la colocó en la cabeza, me dio un pico y saltó del árbol. Calló con una rodilla y las manos en el suelo, la otra rodilla encogida. Se levantó y caminó hasta la frontera. Posó la corona que le había regalado en el suelo y se puso en modo normal pero ocultando sus heridas y los cuernos, se puso la capucha y recogió la corona del suelo poniéndola de nuevo, miró hacia mí le dije que la amaba (con gestos) y respondió que ella a mi también. Dio un paso y ya estaba al otro lado de la frontera, la note coger aire y soltarlo, camino y su hermana también camino en su dirección, vi al hombre del martillo avanzar junto a la chica, pero está freno y le dijo algo con lo que logró continuar sola, ambas avanzaron hasta encontrarse cara a cara.

La que debe de ser Angélica abrazo a mi novia ella en un momento no supo reaccionar, luego su hermana la dijo algo que hizo que mirara hacia mí, sonrió, giró de nuevo y juntas avanzaron a la caballería. En el camino metió las manos en el bolsillo de mi sudadera blanca, además de esto llevaba unos leggings y botines negros de Gimiko, se la veía muy bien pero debe de engordar unos kilos más, cuando los tenga será demasiado para cualquiera. Ellas se pararon frente a las cuatro personas (supongo que todos son ángeles) él que miraba todo asombrado se acercó al rubio y puso la mano sobre el hombro de este, supuse que hablaría así que agudice el oído.

-En vista de que mi hermano se a quedado sin palabras, me gustaría decir que- se arrodillo frente a ella y trató de agarrar su mano, pero ella la quitó a tiempo- bienvenida a la familia. Yo soy Loki, soy tu tío y me gustaría estar para lo que necesites.

[Por si alguien es fan de los vengadores, Loki es amable con ella porque más a delante la pedirá que le enseñe tácticas de defensa, asesinato,...; y como ya sabréis los que os gusten estas películas tiene mucha labia cuando le viene bien]

-D(Diabla): Gracias pero no creo necesitar nada. Angi (debió de hablarla por telequinesia porque no escuche nada).

-A(Angélica): Tranquila Loki es nuestro tío, él (señaló al del martillo) es Thor, nuestro padre, él (refiriéndose al viejo de la barba) es Odín, nuestro abuelo y ella (indicando a la señora) es nuestra abuela, se llama Frigga.

-D: ¿Porque están todos ellos aquí?

-A: Porque... (la interrumpieron).

-T(Thor): Porque aquí ninguno de nosotros está a salvo y tú tampoco.

-D (Sacó las manos de la sudadera): No me conoces y ya me juzgas?- Todos se quedaron atónitos, mi cuñada le agarró la mano que más cerca tenía.

-A: Tranquila Diabla, nadie te está juzgando.

-D: ¿A no? A mi me ha parecido que además de juzgarme me veis como si necesitara vuestra ayuda y os diré algo "me las puedo apañar yo, no os necesito". De nuevo hubo un silencio, que pasados unos segundos rompió el abuelo de mi princesa.

-O(Odín): No es eso. No creemos que no te las puedas apañar, si no que es mejor si vives con nosotros. Porque allí serás tratada como una princesa, al igual que tu hermana y el resto de mis nietos. Por lo que es mejor que vengas con nosotros en vez de aquí.

Ella se acercó al viejo pero también unos guardias de la primera fila, los cuales pasaron dos espadas entre ellos. Aunque eso no la detuvo, se quitó la capucha, se acercó más hasta que las espadas detuvieron su pelo y entonces los otros dos hombres se acercaron a ella echándola hacia atrás.

-Si no confiais en que esté cerca de vosotros sin hacer nada?, cómo creéis que estaremos en una casa todos? ¿Se me prohibirá entrar en la cocina, en el baño, en las habitaciones,...?¿O mejor, vosotros comeréis a una hora y yo a otra? ¿Tendré que estar vigilada?- Espero un momento en el cuál nadie pronunció ni una palabra.-Ya veo, sabéis como yo no os necesito, pero tanto Angi como Jeff quieren que vaya, me voy a quedar por los alrededores y si queréis que vaya a Asgard tendréis que entrar a por mí. Pero aviso al amanecer me iré y entonces no habra vuelta atras.

Con la misma se dio la vuelta y caminó hasta la frontera, entró, se ocultó entre la maleza, se puso en modo normal y elevó la mirada buscándome, al darme cuenta baje del árbol.

-Por eso no querías ir.

-Yo ya sé que me temen desde que supieron de mi existencia. La duda que tengo es si me aceptan sabiendo que estoy "viva", o prefieren no saber de mí.

-¿Qué tienes planeado hacer?

-Voy a ir a la casa del tonto ese (donde se despertaron). Pero necesito que te quedes, por si a mi hermana se la ocurre entrar. No quiero que este sola por aquí. El resto me da igual pero ella es importante.

-Traerá medio ejercito con ella.

-Ya, pero cualquiera se los puede cargar. Se creen fuertes y astutos pero no son ninguna de las dos.

-¿Y porqué no la esperas tú?

-Porque me doy asco, te recuerdo que llevo ocho horas fuera y las primeras seis he estado matando. Además te voy a robar unas playeras.

-A no no, que después te vas y me quedo sin ellas.

-Pues como pasara con tu sudadera.

Se acercó a mí, puso un brazo en mi hombro, agarró mi mandíbula para girar mi cabeza y me beso la mejilla.

-Me esperas, sí?- Rodé los ojos.

-Esta bieeen.

Antes de subir al árbol, la agarré y la di el beso que llevaba rato queriendo, ella me siguió el juego. Cuando nos separamos se fue desapareciendo entre la maleza. Subí al árbol y observé la escena producida a medio kilómetro de mi. Se veía a él tal Loki mirando atentamente hacia donde ella se había ido, a Thor consolando a Angélica, la abuela regañando a los guardias y su esposo tratando de calmarla. Volví a agudizar mi oído, para descifrar que decía cada uno.

(2075 palabras).

El capítulo es largo pero creo que lo vale. Un saludo, cuidaros.