El leer esas palabras me habían dejado algo confundido, es decir, ¿Renata se iba? ¿No la íbamos a ver? Era tan extraño pensar que se alejaba de nosotros... Pero sus papás así lo querían y no podíamos hacer nada, los 5 estábamos confundidos, nos dimos cita en el cuarto del hotel de Alan y Alonso

—Se va mañana, ¿qué haremos?

—No podemos hacer nada

—Claro que si, tratar de llegar a tiempo, nos tenemos que despedir de ella

Hablamos de que haríamos, con que pretexto diríamos que teníamos que llegar rápido.

Me puse a recordar la vez que le reclame a Bry por meterla al grupo

—Estas bien idiota, ¿cómo se te ocurre meter a una persona equis?

—Según lo que hable, es una chica, se ve buena onda

—Bryan, no mames

—Ni que fuéramos tan famosos

—Uhhhh, justo en mi corazón

Debo admitir que nos reímos y al recordar eso también me reí por pensar que ahora si éramos famosos. Cada uno se durmió y al despertar estábamos más que listo para viajar de regreso a México. Al llegar, huimos hacía la casa de Renata, no sin antes comprar unos "recuerdos" y pasar por la carta que Renata le había dado a Bryan.

Nos dirigimos a la casa de Reno, temíamos que al llegar ya no estuviera, pero corrimos con suerte, ella aún estaba ahí, pudimos escuchar el audio que habíamos grabado horas antes. Cuando se dio cuenta que estábamos ahí le dimos un abrazo grupal.

Juraba que si la quería raptar, no quería que se fuera, era una amiga, una amiga importante.

Al abrazarle sentí que si era el último y esa sensación de no soltarla no se me quitaba, era mi amika, mi Reno, a la que le hacía bullying y ella me lo regresaba peor, a la que le "adivinaba" lo que hacía y ahora no podía adivinar a donde se iba.

Cuando se despidió de todos y se subió al auto fue algo cruel. Nos hizo una seña de adiós y el auto avanzó, Renata se había ido, pero dejó una huella y el cariño que se había ganado lo dejo con nosotros, la íbamos a recordar siempre y más cuando fueran los conciertos, porque ya no tendríamos quien nos dijera sus piropos tan, tan... Renata quien sabe de donde los sacaba ó cuando me emocionara ya no vería mi cara que según ella era la más sincera o cuando nos pasará algo vergonzoso ya no tendríamos quien se burlara.

Nos despedimos de Regina y subimos a mi auto, los 5 callado, aunque sabía que en algo estábamos de acuerdo.

Los chats no serían los mismos sin ella.

Fin.