1. Primera impresión
Es el comienzo de un nuevo año de clases en el instituto, no voy a mentir, me encuentro completamente aburrido y solo era el primer día, no es que odie estudiar o algo parecido, es solo que este día en particular no tengo ánimos para nada y sé que cualquiera podría notarlo, soy muy obvio, mis expresiones y mi comportamiento me delatan, estoy seguro de que los demás pueden ver cómo mi mirada va recorriendo todo el salón en busca de una distracción, todo es igual, nada ha cambiado, excepto una cosa.
El único cambio en el salón se presentó esta mañana, un chico pelirrojo de piel pálida y que nació en Francia, o al menos eso fue lo que escuche, no estaba presentando atención, es un poco raro ver nuevos compañeros, la mayoría son viejos conocidos, supongo que él es como un aire fresco dentro de la rutina, es una lastima que me encontrará en las nubes durante la presentación, ahora no recuerdo su nombre, pero ya tendré la oportunidad de presentarme o no, como dije hoy no tengo ganas de hacer nada.
-¿Puedo ayudarte en algo?-Una pregunta simple por parte del pelirrojo, se escuchaba un poco incómodo, no lo culpo.
-Nada, solo estoy divagando, no quería molestar.
No voy a negar que esa primera impresión fue un desastre, no me sorprendería que piense que estaba juzgandolo o algo así, yo pensaría eso si alguien me observará fijamente sin decir nada, creo que olvide mencionar que se sienta junto a mi, así que tendría que sentir mi mirada tarde o temprano.
El resto de las clases hice mi mayor esfuerzo para no volver a mirar en su dirección, no fue una tarea sencilla considerando que se sienta junto a mi y que el rojo no es precisamente un color fácil de ignorar, el sueño y el aburrimiento también son difíciles de ignorar.
-Milo-Luego de escuchar esa voz sentí como una mano tocaba mi hombro y lo empujaba un poco-Deja de estar perdido y escúchame.
Muchas cosas son difíciles de ignorar, para mí desgracia Aioria, la persona que se sienta detrás de mí, no es una de esas cosas, es muy insistente cuando tiene algo en la cabeza.
-¿Qué quieres?-Mi falta de interés termino escapando junto con mis palabras.
-Alguien espera que le tiré agua en la cara la próxima vez que se quede dormido en clase-Comento con un tono un poco amenazante, luego de dar un pequeño suspiró para tranquilizarse decidió continuar hablando-Al terminar la clase, ¿No deberíamos presentarnos o algo así?.
-¿Tú crees?-Susurre mientras apoyaba mi cabeza en mi escritorio.
-Aioria, ¿Sabes que puede escucharte?-Intervino alguien con un tono de voz mucho más bajo y tranquilo.
No tenía que mirar para saber quién era, obviamente Mu escucho todo, él se sienta cerca de nosotros, al menos alguien sabe pensar.
-Me deje llevar, de todas formas lo haremos más tarde-Aioria tomando consciencia de su error anterior hablo un poco más bajo, finalizó sus palabras golpeando mi hombro como una pequeña advertencia.
¿Quién le dijo que quería presentarme?. Está tomando decisiones por su cuenta otra vez, ahora estoy prácticamente obligado a presentarme junto a él, caso contrario Aioria no dejará de molestar con el tema, al menos estoy casi seguro de que no seremos solo nosotros dos, Mu escucho su plan así que es probable que decida unirse a nosotros, es mejor si somos muchos así no tendré que hablar, no tengo la energía necesaria para mantener una conversación larga.
[...]
Las horas pasaron, las clases eran lentas y yo aún luchaba por no quedarme dormido, para estas alturas solo observaba el reloj esperando a que llegara la salida, es inútil continuar mirando las manecillas del reloj esperando que el tiempo pase más rápido, no sucederá nada, escepto tal vez la presentación, Aioria quería presentarse al finalizar las clases, no se porque eligió ese momento del día, gracias a su decisión ahora tendré que esforzarme un poco más antes de irme a casa.
Finalmente la hora de la salida llegó, guarde las pocas cosas que tenía en el escritorio para luego levantarme de mi asiento, con suerte podría escapar antes de que Aioria lo notara.
-¿A donde crees que vas?-Al terminar de hablar su mano ya estaba sujetando mi brazo impidiendo que me alejara.
-¿A casa?-Una pequeña mueca de molestia se formó en mi rostro.
-No lo creo, Mu debe estar con el nuevo y es seguro que nos está esperando, así que no permitiré que nos dejes plantados.
Aioria a veces es tan molesto, pero es algo así como mi amigo supongo que debo soportarlo, fue estúpido pensar que podría escapar, él tiene los reflejos de un felino.
Sin más opciones solo dejé que Aioria me arrastrará todo el camino hasta la salida del instituto, se supone que Mu y el pelirrojo nos esperaban ahí, lo bueno de todo esto es que conoceré su nombre, no quiero llamarle pelirrojo toda la vida, tampoco tengo la imaginación para pensar en un apodo, al menos no por ahora.
-Hola chicos, parece que tienen algunos problemas-Mu se burló un poco mientras señalaba mi brazo.
Claro, Aioria aún me estaba arrastrando, jale mi brazo para liberarme de su agarre y acercarme por mi cuenta.
-No es nada que un buen golpe no resuelva.
Aioria dio un pequeño golpe en mi hombro, creo que sí está molesto por hacer que cargará con mi peso todo el camino, para mí fue agradable no tener que caminar.
-En fin-un pequeño suspiró salió de la boca de Aioria como una forma de calmarse antes de presentarse-Mucho gusto, me llamo Aioria, espero que nos llevemos bien.
-Un gusto conocerte-la respuesta fue corta, no se notaba ningún tipo de emoción en su forma de hablar.
Sé que Aioria hizo su mejor esfuerzo para ser amable, aunque ya es tarde para él, gracias a mi el nuevo ya debe tener una idea de como es en realidad, en mi caso yo solo añadí otra mala impresión.
-Y yo soy Milo, bievenido-Trate de ser breve, no tenía la energía para más, además tampoco buscaba impresionar.
-Oh, eres el que estaba divagando en clase.
-Correcto, no creas que eso sucede todos los días- dije en un intento de corregir la imagen que el nuevo tenía de mi.
-Eso espero, es un poco incómodo que te miren fijamente.
-Bueno, en realidad sólo estaba mirando un punto cualquiera, tal vez el rojo es muy llamativo.
La conversación estaba durando más de lo esperado, incluso estaba compartiendo mis propios pensamientos, tampoco es malo decir que el rojo es llamativo, no tarde en darme cuenta de que aún no sé su nombre, dudo que me lo diga, tal vez asumió que lo escuché durante la presentación, ¿Si le pregunto su nombre incrementará la mala impresión que le estoy dando?.
Creo que es mejor no continuar por el día de hoy, le preguntaré otro día o puedo intentar descubrirlo por mi cuenta, tal vez Aioria o Mu podrían decirme su nombre.
La conversación continuo por algunos minutos más hasta que él se despidió de nosotros, Mu lo acompañó, ambos se iban por la misma dirección, Aioria me acompaño una parte del camino a mi casa, luego se fue por su propio camino, es casi seguro que pasará cerca de cierto centro budista que comenzó a frecuentar, no entiendo porque va si él ni siquiera está interesado en esas cosas.
Hoy no fue el mejor día, al menos ya podría descansar, con suerte el próximo día tendré más energía, tal vez debería intentar llevarme bien con el nuevo, empezando por aprender su nombre, pero ese ya es un problema para el Milo del futuro.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top