pov's yeo baeky

—... en París hay ratas, no sería mi sueño de Ciudad del Amor.

—Suena asqueroso.—acepte.

SeokJin había insistido en ir a un día de relajamiento para olvidar tantos días de decepciones, me trajo a uno de los salones que su madre transcurre. Es relajante sentir los masajes en mi espalda, el peliengro a mi lado observa una revista con unos ruleros en su cabello mientras espera que termine la cesión, para seguir con las uñas.

—¿Qué tal Italia? —pasó una hoja a la revista— Dicen que es lindo el turismo.

—Ya fui, no es la gran cosa.—me levanté de la camilla cuando el hombre corpulento terminó, Jin se acercó, dejando lo que tanto leía.

—No hay nada que te guste.

—Me gustan las citas más simples.

—¿Cómo qué? No me digas que un cine o esas cosas... suena a algo que TaeHyung haría.

En realidad, nuestras citas se basaban en él enseñándome lugares diferentes, o tocando algún instrumento para mi. Esas citas me gustan, pero Jin no lo entendería.

—Mejor salgamos, quiero ir a casa.

Es extraño no recibir sus mensajes, supongo que no le interesa hablarme así como JiMin tanto insistía.