O24

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El pequeño cuerpo de Yuri se removió debajo de las sábanas poco a poco despertando y saliendo del desastre de sábanas con su cabello hecho un lío y lindo a la vez, bostezando y estirándose un poco, inclinado su mirada hacia su pareja y riéndose con ternura por la manera en que ella estaba dormida con sus labios abultados.

De repente al estarla mirando dormir recordó lo que había sucedido la noche anterior y entonces un notorio color carmesí se expandió por sus mejillas, riéndose torpemente tapando su rostro con sus manos cuando cae realmente en cuenta de lo que habían hecho.

Literalmente su virginidad le dijo ¡adiós boba! la noche anterior, ¿así se sentía? ¿Y así es como se siente después? no está decepcionada, al contrario a eso, se encuentra tan feliz porque de alguna manera su relación con Yena cada vez está más avanzada.

Riéndose levemente se posicionó sobre la mayor aún dormida, con sus dedos quitando el cabello que se atravesaba en el rostro de su novia para inclinarse y comenzar a depositar besitos tras besitos entre risitas por todo su rostro hasta que sintió la primera vez que Yena se removía bajo su cuerpo y soltaba un aniñado quejido.

—Mamá... ve a despertar mejor a Sungmin, déjame en paz.—murmuró toda soñolienta, tapándose más con las mantas con sus cejas unidas, Yuri soltó una risita y se inclinó hacia ella, depositando besito tras besito desde su cuello hacia sus mejillas dulcemente, Yena comenzaba a despertarse lentamente con cada uno de esos adorables besitos hasta que finalmente ríe suave, con sus ojos cerrados.

—Buen día, súper novia.—se abrazó al torso de su pareja, ocultando su rostro en el cuello de la mayor mientras sentía como ella pasaba sus brazos alrededor de su espalda, apretándola ligeramente como un abrazo.

—Nunca pedí despertar de tal manera pero me alegra tanto que lo hayas hecho, sólo prométeme que lo harás más seguido porque lo adoré.—dijo con su voz de haber despertado recién, algo ronca por lo mismo. Yuri volvió a reír ocasionándole cosquillas a Yena porque había reído en su cuello.

—No voy a prometerlo porque para eso deberíamos dormir más veces juntas, pero puedo repetirlo luego.—murmuraba mientras que sus dedos hacían figuras imaginarias en el pecho de su pareja, Yena veía con encanto todo sobre su novia, desde cómo se veía a estas horas de la mañana hasta como sus deditos trazaban figuras.

—Oh vamos, no me digas eso porque puedo llamar a tu hermana y decirle que no volverás a tu casa por una semana.—sonríe al ver la expresión de asombro en el rostro de su pequeña, volviendo a reírse.—Es broma, a menos que estés de acuerdo con la loca idea de tu preciosa novia.—abultó sus labios con el propósito de que su idea recién planeada fuera aceptada por su pareja.

Yuri pone sus ojos en blanco pero con una pequeña sonrisita en sus labios, inflando sus mejillas mientras lo consideraba.

—De acuerdo.—asiente con su cabeza logrando que Yena sonriera ampliamente, acercándose hacia los labios de su pareja que nunca alcanzó gracias a que la menor se alejó.

—¡Todavía no nos hemos cepillado los dientes!.—reclamó tapando su boca con la palma de su mano, Yena se incorporó para sentarse con su novia sobre sus rodillas.

—Al diablo eso Yuri, ven aquí, quiero un besito.—tomó la cintura de la menor entre sus manos para poder atraerla hacia ella pero Yuri rápidamente saltó fuera de la cama y haciendo un escándalo de risas y burlas hacia la mayor por no poder recibir su beso, corrió al baño dejando a una indignada Yena en la cama.—¡Yah! ¡Jo Yuri, obtendré mi beso por las malas entonces!.—reclamó quitando sus sábanas para correr tras la chica que soltó un gritito y corrió más rápido hacia el baño.

Mientras tanto y fuera del escándalo entre la pareja adentro de aquella habitación, afuera de esta estaban dos chicas preguntándose la razón de la cuál hubiera tanto ruido ahí adentro.

—¿Qué crees que está pasando ahí adentro?.—Yujin le preguntó a Wonyoung, causalmente habían pasado por ahí y oyeron parte del espectáculo.

—No lo sé pero suena a que se divierten.—se encogió de hombros, Yujin alzó sus cejas y las bajó insinuando lo que podrían estar haciendo, ganándose un puñetazo en su brazo.—¡No, no me estaba refiriendo exactamente a eso!.—gruñó.

—¡Pero seguro también es divertido!.—otro puñetazo se había ganado por parte de la menor.—¿Porqué me pegas? ¡no estoy diciendo nada malo!.

—Sólo no digas más nada al respecto y bajemos, ya casi es hora de desayunar.—bufó y tomó del brazo a la muchacha para arrastrarla con ella.

—...Seguro que sí se divirtieron anoche porque no avisaron ni siquiera que subirían.

Total de puñetazos; 5

Tal vez si era mejor opción hacer silencio.

—¿Y bien?.

Todas en la mesa guiaron sus miradas hacia la mayor de edad quien disolvía con la pequeña cucharita la azúcar en su café.

—¿Y bien qué?.—Chaewon frunció sus labios mostrando lo perdida que se hallaba.

—Ayer creí haber dejado en claro que Yujin, Wonyoung y Yuri estarían conmigo y que Yena y Minju en otra.—recordó, al instante tanto Yuri como Yena sintieron el temor tocarles la puerta.—Insisto, ¿qué fue lo qué pasó?.

Yuri miró a Yena, Yena a Yuri y Yujin miró con una sonrisita insinuante a ambas chicas hasta que sintió una patada en su rodilla por su novia.

Yena no sabía qué hacer para ese entonces, sabía que Yuri no quería decirle y tampoco lo haría por lo que bufó, intentando ser lo más directa posible para no crear tanto drama, soltando su cuchara.

—Bien, sí tanto quieren saber véanle el cuello a Yuri, con eso la respuesta es muy obvia.—dijo sin más, Yuri expandió sus ojos y automáticamente sintió las miradas de todas encima, negó con su cabeza comenzando a ocultar su cuello con su suéter, al menos así fue antes de que las que estaban más cerca le saltaran encima para ver la evidencia.

—¡Sostenla Sakura, estoy segura de querer ver esto!.—Hyewon le pidió a la japonesa mientras Chaeyeon, Hitomi y Wonyoung también intentaban mirar a pesar de los reclamos de Yuri y risas por las cosquillas.

—¡Veo una!.—gritó emocionada Hitomi, Minju ladeó su cabeza mostrándose realmente fuera de lugar.

—¿Una qué?.—preguntó Minju, Yujin soltó una carcajada de la absurda pregunta que la mayor había hecho.—¿Qué? ¿De qué te ríes, tonta?.—frunció sus cejas.

—¡De ti! Es obvio de lo que se refería Hiichan, ¡marcas! ya sabes, en el cuello, succiones, esas.—alzó sus cejas con insinuación, la mayor hizo una de sus típicas expresiones de memes en las que sus ojos se abrían de sobremanera y su mano tapaba su boca.

—¡Choi Yena, por eso me dejaste afuera de nuestra habitación, hambrienta!.—acusó al instante recordando que cuando fue toda soñolienta a su habitación que compartiría con Yena no pudo abrirla, por lo que fue con Sakura y Chaeyeon quienes no se habían negado a dejarla pasar riéndose por lo que sabían que estarían haciendo esas dos dentro.

—¡No me culpes de esto! ¿Qué hubieras hecho tú en mi lugar? ¿negarte? oye, Yuri coqueteándome no es algo que pueda ver todos los días, ¿bien?.—soltó la mayor abultando sus labios y cruzando sus brazos.—Sólo están sintiendo envidia porque al menos nosotras si nos divertimos, nosotras y la cama.—alzó sus cejas, Chaewon pateó su pierna bajo la mesa causando que Yena se quejara por la fuerza que la menor utilizó.

—De todos modos no creas que nosotras hicimos oídos sordos, las paredes eran más delgadas de lo que creímos.—Hyewon se encogió de hombros causando que todas la miraran con impresión, incluso Yuri alzó un poco su cabeza al haberla oído.—¡Y si gimes como cantas! Diablos, Yuri.—agitó su cabeza negando con la misma, Yujin comenzó a reírse a carcajadas cuando Yuri se cayó de su silla tras haber oído las palabras de su fiel—ya no tanto— amiga y unnie.

—De acuerdo, nunca pedí oír eso pero tiene razón, tuve que poner un video de ASMR para poder dormir, par de calientes.—Chaewon dijo apuntando con su tenedor a Yena porque lastimosamente había terminado junto a Hyewon en la habitación de al lado.—De hecho subimos minutos después de que ustedes lo hicieran y bien, ya saben lo que oímos.—bufó, negando con su cabeza.

Yena ayudó a su novia a levantarla mientras que Chaeyeon levantaba la silla, ambas riéndose de la pálida Yuri que se encontraba ahora sentada mirando a la nada, claramente avergonzada hasta que frunció su ceño y cruzó sus brazos, ahora era evidente que estaba enojada.

—No ahora, por favor.—Yena murmuró masajeando su nuca, detestaba cuando debía ablandar a una Yuri enojada, por lo que suspiró y volteó para verla.—¿Amor? ¿Bebé? ¿Preciosa?¿Todo bien?.—cuestionó, con su mano sobre el hombro de su pareja.

—Esto es tu culpa, Yena.—murmuró, palabras que lograron desconcertar a la mayor por completo, abriendo su boca con impresión.

—¿De qué estás hablando?.—preguntó de una buena vez, estaba por enojarse también si no fuera porque oye una risita bastante conocida, rodando sus ojos y suelta un gran suspiro.—Yuri, tendrás que darme unos cien besitos para que pueda disculparte.

—De acuerdo, aquí va el primero.—se acercó hacia la mejilla de su novia y dejó un besito sonoramente allí, ambas chicas se rieron, la menor apoyando su mejilla sobre el hombro de la mayor.

—¡Que viva el yenyul, Dios mío!.—Yujin como siempre solía hacer, decía una de sus muchas tonterías arruinando momentos ganándose patadas, manotazos y regaños de sus mayores cada que lo hacía, esta vez, Wonyoung le llenó la boca con pan para callarla.

—Entonces.—Eunbi sonó su garganta, poniendo algo de mantequilla en su pan con el cuchillo.—Me están diciendo que tuvieron el grandísimo antojo de hacer de sus intimidades aquí en lugar de poder haberlo hecho antes en sus casas, ¿es enserio?.

—No puedo creer que aún hablemos de esto, es incómodo, hablemos mejor sobre Nako robando las velas aromáticas del hotel.—Yuri dijo rápidamente mostrando su mejor sonrisa forzada e incómoda, Eunbi tragó el trozo de pan sin haberlo masticado ahogándose, Chaewon escupió el jugo y Chaeyeon comenzó a reírse sólo como ella sabía hacer, con Sakura a su lado riéndose bajamente de su risa.

—¿Que Nako qué?.—luego de haberse recuperado y tragado finalmente el trozo de pan preguntó, con su mano en su pecho, Nako frunció sus cejas y miró acusadora a Yuri quien le dedicó una sonrisa temerosa.

—Estás en problemas, Yuri.—murmuró antes de bufar y mirar a Eunbi cruzando sus brazos.—No me harás sacar esas velas de mi mochila ¿bien? Ya Hitomi lo intentó, mamá dijo que le llevara algo así que, ¿qué mejor qué velas aromáticas de un hotel de Los Ángeles?.—sonríe orgullosa de su decisión, en cambio la mayor tenía un tic en el ojo derecho y Chaewon estaba rezando por todas ellas en silencio.

—Devuélvelas.

—Nunca.

Y una batalla de miradas intimidantes había comenzado entre ellas dos.

—Hagan sus apuestas, ¿Nako o Eunbi?.—preguntó Yujin sacando un billete para ponerlo en el centro de la mesa.—Le voy a Nako, ya saben el dicho, chiquita pero peligrosa.

—Hagan sus apuestas, ¿eran gemidos o notas altas de Yuri?.—salió Hyewon sacando otro billete, Yuri quitó sus aretes pequeños de sus orejas poniéndolos sobre la mesa, Yena intentó sentarla de nuevo pero no funcionó, Yuri ya había saltado al otro lado de la mesa tras la mayor que corrió y sorprendió a las demás porque jamás la habían visto correr en sus vidas.

—Un desayuno en paz, sólo eso pedí.—Chaewon sostuvo su cabeza con sus dos manos.

Wenas 🤡🔫
Vengo a dejar esta kk de capítulo relleno que escribí, vengo en zona de paz 🤪 a disculparme por desaparecer tanto por aquí, además aviso que los capítulos serán algo menos larguísimos como los hacía que ahora noté que eso me bloqueaba al querer escribir hace meses, sooo,, eso 🥺🥺🥺🥺

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