Mini historia (parte 3)

UNA SEMANA MÁS TARDE...


(Narra Kevin)

Como cada día después del instituto, estaba ayudando a mi hermano en su dulceria. No podía estar mucho rato, pues me quitaba tiempo para hacer tarea, pero era un trabajo extra que no me molestaba hacer.

Él solía andar en la trastienda, guardando los dulces que llegaran y poniéndolos por las estanterías. Me dejaba el trabajo de cara al público a mi. Según dice, yo soy más agradable que él.

¡TIN-TIN!

-Bienvenidos a la...- comencé, pero al mirar a la puerta me callé- Oh, solo eres tú.

-¿No te alegras de verme?- dijo Lila, y añadió dramáticamente- Y encima que me molesto en venir a verte, desde tan lejos...

-Pero si vives ahí mismo- dije, señalando el edificio donde vivía, el cual se veía desde la puerta abierta de la tienda.

Por esa misma puerta entró su hermano, Skid, y se puso a mirar todos los botes con caramelos. Lila se acercó al mostrador.

-Bueno Kev, ¿Me podrías dar unos chicles, por favor?- pidió ella

-No- respondí- Nunca los pagas, y mi hermano no está muy contento con eso.

-¡Sabes que te los pagaré! En algún momento... ¡Y esta es la última vez, porfa!- añadió ella, y yo suspiré, y dejé una bolsa de chicles en el mostrador

-¡Gracias Kevin, eres el mejor!- dijo ella, aunque yo me fijé en que Skid miraba una televisión con el telediario.


(Narra Narrador)

Mientras Lila realizaba su "compra", su hermanito miraba la pequeña televisión que había en la tienda. El, obviamente, no estaba muy interesado en las noticias, pero lo que decían en ellas le interesó.

-Hoy se cumple una semana del trágico tiroteo en el instituto Funk School- decía el reportero, el cual estaba en la puerta del instituto de Lila- Este trágico incidente dejó alrededor de una treintena de fallecidos, y centenares de heridos.

-¿Fallecidos?- pensó Skid en voz alta- ¿¡Muertos!? No puede ser, si solo se movió un poco el suelo...

Por supuesto, el niño seguía creyendo la versión de los hechos que Grace le contó, que solo se había tratado de un leve terremoto.

-Afortunadamente, algunos vecinos alertaron de los disparos provenientes del lugar, y el suceso no fue aún más grave de lo que ya fue- seguía diciendo el periodista- Aunque la investigación sigue abierta, se les acusa del tiroteo a Cassandra Penylian y Pico N. Grounds.

La pantalla se iluminó, y en ella aparecieron los dos antes mencionados. Skid estaba aterrorizado.

-Solo podemos decirles, espectadores, que tengan cuidado con ellos- finalizó el periodista, y la pantalla hizo un fundido en negro, dando paso a los comerciales.



(Narra Kevin)

En cuanto me di cuenta de lo que Skid acababa de ver, apagué la tele de inmediato. Por desgracia, fue muy tarde. El niño se quedó mirando la pantalla apagada, claramente con miedo, sin reaccionar.

¡TIN-TIN!

Escuché que alguien entró a la tienda. Pasó por detrás mío así que no vi quién era.

-Pfff, bonito gorro- dijo ese alguien, dándole un golpe a mi gorro, haciendo que se cayera. No me giré a ver quién era, me preocupaba más Skid.

-Skid, umm... ¿Tu sabes eso de que las noticias mienten a veces, no?- dije, recogiendo el gorro- Solo están dramatizando, no fue tan horrible lo que pasó, créeme.

-¿Hubieron disparos, c-como con armas?- dijo el niño, asustado- A Lila le dan mucho miedo las armas... Q-Quizás es por eso...

-¡No pienses mucho en ello, amigo!- dije intentando distraerlo- ¿Te apetece un dulce? De seguro mi hermano no echará en falta uno o dos...

-¡Okey!- dijo el niño, distraído de inmediato, y me abrazó- ¡Gracias Kevin!

-No es nada- le dije

El se giró y caminó hacia el mostrador, aunque se paró en seco al ver quién estaba ahí, apoyado en el mostrador, hablando con Lila.

Ese alguien se giró hacia el niño, lo saludó con la mano y se quitó la capucha, dejando a la vista su cabello naranja.

-¡Hola Skid!- dijo Pico, sonriendo

El niño se quedó mirando a Pico, muy asustado. Lila miraba al pelirrojo también, pero en vez de asustada, tenía una sonrisa tímida.

-¡Hola Keith!- gritó Pico, saludándome

-Kevin- lo corregí, algo molesto- No es tan complicado.

-¡Kevin! No hace falta que seas tan desagradable- dijo Lila, cruzándose de brazos.

-No estoy molesto por eso, es que Pico se llevó el otro día una buena cantidad de dulces, y no los pagó- le dije, y me giré hacia él- ¿Quizás vienes a por más?

-Pico, ¿Es eso cierto?- dijo Lila, mirándolo

-Ehh... Si, precisamente vine a eso, sip...- dijo Pico, y dejó algo sobre el mostrador- Venía a pagarte esos dulces que me llevé el otro día, porque no llevaba dinero encima, ¿Recuerdas?

-Si si- dije, poco convencido- ¿Algo más?

-Nop, solo eso- dijo el chico, alejándose de Lila, Skid y el mostrador, y yendo hacia la puerta de salida.

Pero de camino, se paró frente a mi.

-¿Tenías la necesidad de decirlo?- me dijo

-Quizás sea suficiente para que no se acerque a ti- contesté- No me gustaría que le dispararas.

-Jaja, yo no le dispararía a nadie- siguió él, disimulando su enfado.

-¿De veras? Yo que tú le preguntaría eso a Nene- le dije- ¡Oh, cierto! No puedes preguntarle, está muerta.

-Nene era otro caso. Yo no le haría nada a Lila, así que calla, y agradece el aprecio que ella te tiene, o ya te habrías quedado sin dinero ni dulces en esta tienda- dijo él, más enojado

Y, sin esperar mi respuesta, salió de la tienda a paso airado.

-E-Ese era...- dijo Skid, tembloroso- ¿Pico N. Grounds, el de las noticias...?

-Si...- suspiró Lila, sonriendo- ¿Verdad que es lindo?

-¿Que el que?- pregunté, girándome hacia ella

-Que... ¡Nada!- dijo ella- Ehh... ¡Skid, vámonos ya, mamá nos está esperando!

-Lila, ¿Que habías dicho?- dije, aguantandome un poco la risa

-¡Skid, vamos, mamá nos está esperando!- repitió ella a su hermano

-No es cierto, dudo que esté en casa- respondió Skid, pero Lila lo tomó de la mano y fue hacia la salida- ¡Adiós Kevin!- me dijo el niño, antes de salir por la puerta

Les dije adiós con la mano, y volví hacia el mostrador, a recoger el dinero que Pico había dejado.

-Que raro que lo pagase... ¿Habrá tenido Lila algo que ver?- dije para mi mismo, y guardé el dinero en la caja.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top