21.
Ladeó la cabeza observando aquella enorme pared que tenía delante y sonrió dando dos palmaditas.
— ¡Te lo dije! Ese color era perfecto... — sonrió hacia Wonho, pero notó que su comentario fue ignorado gracias a que su pequeña familia estaba concentrada en algo más, entonces tomó asiento en el suelo junto a él para husmear — ¿Qué están haciendo?
Wonho lo miró de reojo y apartó la cajita que tenía frente a él.
— Nada... Vuelve a lo que estabas... — sonrió y lo corrió con las manos como si se tratase de un animalito — seguro te falta algo por pintar...
Hyungwon frunció el ceño y lanzó una rápida mirada hacia la caja donde la bebé parecía estar entretenida.
— ¿Qué hay allí? — susurró ignorando sus intentos por correrlo — ¿que me escondes? — le dio un pequeño golpe a Wonho — Sisi... Bebé... — la pequeña lo miró mientras sostenía firmemente algo liviano en su mano — ¿Puedes mostrarle a mamá? Por favor...
Extendió su mano para que la niña entendiera su petición, entonces la pequeña sin dudarlo extendió el papel hacia él.
— Ma-má... — soltó una sonrisa tierna y volvió a ocupar sus pequeñas manos en lo que sea que hubiera dentro de la caja.
Al obtener el papel rápidamente se dedicó a observar de qué se trataba y sólo entonces fue cuando se dio cuenta que era nada más y nada menos que una foto de la boda.
Entonces lanzó una mirada de melancolía a Wonho.
— Dios... Aún recuerdo todo tan claramente... — sonrió — también recuerdo lo mucho que vomité antes de entrar... —Wonho se rió ante la expresión de su rostro — ¿Estas son las que quieres poner aquí?
Señaló la pared y Wonho asintió despreocupado mientras recibía las muchas fotos que Sisi le pasaba por diversión.
— Bueno, pensé que sería una buena idea... — se rascó el cuello — es decir, ya sabes... Hacer que sea como una pared llena de recuerdos...
Hyungwon asintió efusivo.
— ¡Empezando por la boda! — dio unos pequeños aplausos — que buena idea... debemos buscar un imagen juntos... Creo que habrá muchas...
Se abalanzó para meter sus manos dentro de la cajita de las fotografías, pero Wonho la apartó.
— Sobre eso... — la mirada de Hyungwon lo fulminó — es que... — soltó una risita nerviosa que Hyungwon no entendió — creo que podríamos dejarlo para después.
El delegado frunció el ceño con un poco de molestia ante lo dicho.
— ¿De que hablas? — susurró — ¿Qué hiciste con las fotos?
Le arrebató la cajita, sorprendiendo un poco a la pequeña que simplemente jugaba a meter los papeles para luego sacarlos y espacirlos por el suelo.
— Hyungwonnie... — Wonho soltó una risita, sin embargo no lo detuvo.
El menor tomó una buena cantidad de fotos y comenzó a verlas con rapidez para ver si notaba algo extraño.
Wonho lo vio con diversión y sentó a la pequeña en sus piernas, entonces ambos se dedicaron a mirar al histérico Hyungwon buscando las fotos que quería.
— ¡Aquí están! — levantó algunas y se las enseñó a Wonho con una sonrisa de victoria plasmada en el rostro — ¿que querías esconderme...?
— Nada... — sonrió.
Comenzó a revisar las fotografías con un poco más de lentitud y fue entonces cuando supo el motivo por el cual Wonho no quería que los viera.
— ¡¿Este soy yo?! — gritó levantando una foto hacia Wonho — ¿Qué demonios me pasaba?
Wonho soltó una leve risita.
— Solo estabas afectado por el vomito quizá... — le acarició la espalda intentando consolarlo.
Hyungwon bufó con molestia.
— Por Dios... — suspiró — tengo cara de no haber comido en 5 días... — miró a Wonho con frustración y lanzó la foto de nuevo a la caja — ¿como es posible que el día de nuestra boda me viera así? — hizo un puchero — ¿por qué me dejaste salir así? Hubiéramos pospuesto todo y...
Volvió a suspirar frustrado y Wonho se rió.
— Que estas diciendo... — se acercó a él muy suavemente y le dio un par de besitos en los labios para finalmente morder levemente su puchero — estabas hermoso...
Él rodó los ojos.
— O tú estabas ciego... — bufó.
Wonho soltó otra risita.
— Entonces quiero quedarme ciego toda la vida para seguir amándote más de lo que lo hago... — lanzó una mirada tierna a Hyungwon quien solo pudo deshacer su puchero y suspirar.
— A veces te odio... — sonrió y entrelazó sus manos — pero otras te amo...
Ambos se rieron ante su tontería y una tercera manito se unió a su tacto.
— Mamá... — señaló la fotografía y miró a Wonho.
Entonces él asintió y señaló a Hyungwon.
— Si mi amor... — sonrió — mamá sufrió mucho por verte aquí, pero te ama tanto como yo...
Al escuchar esas palabras simplemente pudo sonreír, nunca había imaginado una vida futura y menos de ese estilo, pero vivirla era una odisea.
La niña buscó los brazos de Hyungwon para darle un tierno abrazo que él no tardó en corresponder.
— Bien... Pongamos las fotos... — suspiró — voy a soportar todas veces que me pregunten "¿estabas enfermo en tu boda?" por ti...
Wonho soltó una risita y se puso de pie para meter las fotografías en sus respectivos marcos.
— Lo dices como si recibieramos muchas visitas... — rodó los ojos.
Hyungwon sonrió al verlo tan afanado en acabar con la decoración de la pared.
— Sabes que con Ruby burlándose de mi será más que suficiente para fastidiarme... — Wonho asintió colocando cuidadosamente cada marco en el lugar que creía correcto — además, cuando los compañeritos de Sisi vengan, sé que lo preguntarán...
Wonho sonrió recogiendo otro marco.
— ¿No crees que te adelantas mucho a las situaciones? — el delgado fingió molestia — además... Si alguien dice algo, yo te defenderé...
— Si, pero... — Wonho volteó repentinamente y se agachó para dejarle un beso fugaz.
— Hey... — susurró aún muy cerca de su cara — ¿te casaste con ellos o conmigo?
Hyungwon se rió.
— Contigo... — se mordió el labio.
Wonho asintió.
— Entonces la única opinión que debe importar es la mía... — se encogió de hombros con despreocupación y volvió a su tarea — y mi opinión siempre ha sido que te amo...
No pudo responder a eso, ni siquiera tenía la fuerza para verlo a los ojos después de esas palabras tan reconfortantes, así que simplemente se quedó en silencio viendo a su pequeña hija sin poder borrar la sonrisa que tenía plasmada en el rostro.
— Hyungwonnie mira... — levantó su mirada hacia su esposo quien sostenía en sus manos un marco que contenía algo más que especial — ya que aquí estarán nuestros mayores recuerdos, quise que esto también estuviera aquí...
Miró con detenimiento el dibujo que Wonho había hecho cuando era niño y sonrió cuando la nube de recuerdos le cubrió la mente.
— Es hermoso... — susurró apretando a la pequeña quien ponía un poco de resistencia ya que el cálido abrazo le interrumpía el juego con las fotografías — creo que se merece estar en un buen lugar.
Wonho asintió, luego tomó un poco de la pintura roja que había sobrado y dibujó un par de corazones pequeños alrededor del marco que contenía el dibujo.
— Se ve genial... — ladeó la cabeza mirando con más detenimiento su colorida idea — ¿Cómo luce la pared ahora?
Miró hacia su esposo quien después de varios segundos de silencio suspiró.
— Creo que falta algo... — sonrió, apartó la bebé de encima suyo y se puso de pie ante la atenta mirada de Wonho — espera... — en ese momento sacó su billetera y de allí sacó un pequeño cuadro que Wonho conocía muy bien — creo que también se lo merece...
Extendió el pequeño cuadro a Wonho quien lo tomó con un poco de nostalgia y suspiró.
Lo metió en el marco más pequeño que tenía y con un poco de pintura blanca dibujó a los lados del marco un par de alitas de ángel.
Ambos miraron hacia la pared y sonrieron.
El bichito, su bichito siempre sería su pequeño ángel.
— ¿Agregamos alguna más? — susurró Wonho rodeando su pequeña cintura — tengo la cámara aquí.
Hyungwon asintió.
— Claro... — sonrió con nostalgia — es momento de llenar esta pared con fotos de Sisi...
Wonho asintió y se acercó a su oído.
— ¿Y más tarde me permitirás llenar tu cuerpo de besos también? — arqueó una ceja con coquetería y Hyungwon rodó los ojos.
— Insoportable... — susurró.
Cambiamos.
Nos modificamos.
Somos diferentes.
Envejecemos.
Pero solo hay muy pocas cosas que sobreviven a todos esos factores.
Por ejemplo, el verdadero amor y los recuerdos.
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