10.

Otro día con Jimin a mi lado rogándome que vaya a la escuela, hace dos días que sucedió mi super gran rechazo por parte de Jungkook, no he ido a la escuela en esos dos días y no pienso ir a la escuela hoy tampoco, no quiero verlo nunca más.

-Tn, papá y mamá me castigaran si no te llevo a la escuela hoy--dijo jalando mi sábana

-Que te castiguen, no es mi problema--dije envolviéndome de nuevo en mis sabanas

-Tn, tendrás que volver a la escuela algún día, y ese día sera hoy--dijo

Me tomo en sus brazos y me llevo hasta el baño, me sentó en la bañera y me tiro una toalla en la cara.

-No te demores--dijo cerrando la puerta

Si llego a la escuela todos se reirán de mi y Tae no estará ahí conmigo, sus padres lo llevaron a visitar a sus tíos y primos en Daegu.

-Eres idiota si piensas que me cambiare contigo ahí--le dije a mi hermano mientras salia del baño

-Te esperare abajo, no me hagas subir por ti--dijo

-Estúpido--dije en un tono bajo para que este no escuchara

(...)

Jimin estaciono el auto y me miro, yo seguía con la mirada fija en la puerta de la escuela, tenia miedo.

-Esto es estúpido, dame la llaves me iré a casa--le extendí la mano

-No iras a ningún lado--me tomo la mano--esto es parte de crecer hermanita--me soltó para despeinar mi cabello

-Le rompió el corazón a tu hermana menor y estas como si nada hubiera pasado--me cruce de brazos--que gran hermano

-Yo ya me encargue de romperle la cara a Jungkook, ademas ese día estaba de mal humor y tu sabes es el--dijo y suspiro para luego salir del auto

-Eso no es excusa--dije

-Tn, debes bajar del auto ahora--dijo y salio del auto

Jimin abrió la puerta del copiloto y me extendió la mano en señal de que saliera ya de ahí

-No pienso salir de este auto--me cruce de brazos

-Bien--suspiro

Acomodo su mochila y me saco del auto cargándome al estilo princesa, odiaba que tuviera tanta fuerza.

-Bájame jimin!--chille

Habían estudiantes afuera que a penas llegaban al instituto y se nos quedaban viendo. Jimin me bajo, saco mi mochila y me la tiro en la cara para luego cerrar la puerta del auto y ponerle seguro, intente correr pero me tomo de la muñeca rápidamente y me arrastro hacia el instituto. Jimin prometió no dejarme sola en el pasillo pero al ver a Jin y a Yoongi se fue con ellos dejando a su pobre e indefensa hermana en manos de los horribles estudiantes de esta escuela, mientras caminaba abrazando mis libros miraba al suelo escuchando los susurros y risas de las personas en el pasillo. Llegue al salón de clases y mire por el vidrio que había en la puerta, ahí estaba Jungkook sentado con sus auriculares dibujando algo en su cuaderno, toque la fría perilla metálica de la puerta para comenzar a girarla pero me detuve, estaba loca si entraba a ese salón, me di la vuelta pero choque con el cuerpo de mi maestro.

-Ah..lo siento--hice una reverencia

-Señorita Park ¿a donde cree que iba? ya ha faltado demasiado a clases--me dijo serio

-Yo iba al baño--sonreí falsamente

-Adentro--señalo la puerta del salón-ahora

-Si señor--suspire y entre al salón

Todas las miradas se posaron sobre mi incluyendo la de el, si era cierto que Jimin le había pegado.

-Vean quien se digno a aparecer, la de las cartitas de amor-dijo una chica y todo el salo estallo en risas menos Jungkook, el solo devolvió su mirada a su cuaderno

Fueron las peores horas de clase de mi vida, me sentía tan avergonzada y estúpida. La campana sonó avisando que ya podíamos salir a comer, mientras hacia pacientemente la fila de la cafetería para comprar un delicioso brownie revise mis bolsillos y me di cuenta de que había olvidado mi billetera en casa, unas risas llamaron mi atención y ahí fue cuando voltee hacia la mesa del equipo de fútbol, mi hermano y sus amigos se reían como si no hubiera un mañana, la sonrisa de Jungkook era simplemente hermosa.

Maldita sea Tn, olvida su sonrisa es horrible.

-Es tu turno--me dijo un chico detrás de mi

-Pasa tu--le dije sonriente

Salí de la fila y camine dudosa hacia donde mi hermano.

-Jimin--le susurre intentando que nadie me viera pero al contrario todos voltearon a verme incluyéndolo a el--deje mi billetera en casa, dame dinero

-Siéntate aquí y come mi comida, no tengo hambre--dijo

-No!--respondí exaltada--digo...no--dije tratando de sonar mas calmada--no me gusta lo que pediste--dije

-Mentira, claro que si te gusta--dijo

-Maldita sea Jimin dame el estúpido dinero--dije enojada y escuche a los chicos pronunciar varios "uhhh"

-Ya ya que bestia--dijo sacando su billetera y colocando los billetes en mi mano

-Gracias--dije y me fui

Mi hermano era el único demente que piensa que yo me sentaría a comer en la misma mesa que el chico que me rechazo en frente de todos. Jimin se fue con sus amigos después de la escuela, me dejo las llaves del auto para poder irme a casa pero decidí tomar un pequeño atajo hacia la academia de baile que vi hace unos días. Al llegar me quede en la puerta intentando ver si había alguien adentro, apoye mi mano en el vidrio de la puerta haciendo que esta se abriera y yo cayera al piso.

-Que suerte tienes Tn--susurre para mi

Me levante y limpie mi uniforme, cerré la puerta detrás mio y camine hasta la recepción.

-¿Hola?--dije pero nadie respondió

En la mesa de la recepción había una campanita, la toque varias veces pero nadie venia.

-Bien, supongo que me daré el tour yo sola

Camine por un pasillo hasta ver a mi derecha una puerta de vidrio que mostraba un lindo salón de baile, paredes blancas con varios espejos y equipos de sonido. Entre y me quede observando un tiempo el lugar.

-Es bonito--dije

-Gracias--respondió una voz masculina a mis espaldas haciéndome morir del susto

Voltee rápidamente algo asustada, me encontré con un chico alto, de tez blanca y cabello negro, vestía con unos Jeans negros junto a una camisa negra de la cual tres botones no estaban en su lugar dejándome ver su pecho que a mi parecer era increíble, junto con una gorra del mismo color.

-Ah yo...hola--sonreí nerviosamente--¿estudias aquí?

-Soy el dueño--dijo mientras se apoyaba en el marco de la puerta

Eso me sorprendió, se veía bastante joven para ser dueño de una gran academia de baile, normalmente me imaginaba a un señor como dueño y no a un chico.

-¿Por qué no hay nadie?--pregunté

-Las clases terminaron hace unos minutos--dijo acercándose a mi

-Oh--dije--lamento haber entrado así, no había nadie por aquí y tiendo a ser un poco curiosa

-Tranquila, no escuche cuando llegaste--dijo--¿vienes a inscribirte?

-Si--dije--no estoy muy segura de hacerlo pero quiero intentarlo

-Tenemos a los mejores maestros--dijo

-No me digas, tu eres uno de ellos--dije y este asintió--algo me lo decía--reí

-Bien, acompáñame--dijo--te tomare algunos datos

-¿Las clases siempre son así de temprano?--pregunté mientras caminábamos hacia la recepción

-No, solo fue por hoy--dijo--¿te preocupaba la escuela?

-Si ¿como lo supiste?--pregunté

-Tu uniforme te delata un poco--dijo riendo

-Si, cierto--dije 

Tn a veces te pasas de idiota solo eso.

-Bien, anota aquí tu nombre y tu identificación--dijo extendiéndome un formulario

-¿No necesitas mi número de celular?--pregunte mientras terminaba de escribir

-No, aunque si quieres dármelo no estaría nada mal--dijo guiñándome un ojo 

-Listo--dije extendiéndole el formulario algo avergonzada

-Entonces mañana a las seis--dijo--¿te parece?--preguntó

-Si, aquí estaré--sonreí

-Bueno, nos vemos mañana Tn--dijo leyendo mi nombre en el formulario--y por cierto soy Sehun--dijo extendiéndome su mano la cual estreche con gusto








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