⻝ ┇ ❝catorce.

KyungSoo llevó a Dahye a una cafetería cercana, sin querer que sus compañeros, por casualidad, escucharan algo. Lo que menos deseaba era que pasaran a descubrir cualquier cosa, no cuando quedaba tan poco para que el año académico se terminara.

Llamó con rapidez a Momo para preguntarle si podía quedarse un ratito más con BaekHyun, y al escuchar su afirmación, pidió un jugo para beber. Dahye, frente a él, no tenía cara amigable.

― Creo que ChanYeol fue lo suficientemente claro contigo. ― Dijo KyungSoo, incapaz de contener un poco más el silencio. Dahye no dejaba de observarlo ―. Él y yo estamos juntos, ¿acaso no es evidente? Él ya no quiere nada contigo.

No le importaba si sonaba cruel o malo, porque Dahye estaba en busca de problemas y KyungSoo no se dejaría amedrentar por ella. ¿Qué era lo que pretendía yendo allá?

― ChanYeol siempre ha sido indeciso en varios aspectos. ― Replicó Dahye, y le miró despectivamente ―. ¿Y no te parece raro a ti que un alfa maduro y adulto esté con un chiquillo como tú? De seguro sólo quiere una cosa de ti.

KyungSoo lo pensó varias veces al inicio, pero ahora, no dejaría que ese pensamiento le comiera la cabeza. Llevaba saliendo con ChanYeol cerca de cuatro meses, además, tomó el rol de padre de BaekHyun sin complicarse mucho, y demostró en varias ocasiones que no quería sólo acostarse con él.

Por Dios, ellos hacían varias cosas que no incluía penetración, y jamás insistió para llegar más lejos. Es más, ChanYeol siempre era el que le detenía para no hacer otras cosas. KyungSoo era un cachondo de primera.

Vale, pero no debía pensar en eso ahora, ¡estaba en algo serio!

― ¿Ese es tu argumento? ― Le preguntó KyungSoo, impasible. Dahye hizo un mohín ―. ChanYeol y yo llevamos bastante tiempo juntos, ¿y sabes qué? Jamás te nombró. ― Alzó su barbilla ―. Él ya no te quiere y deberías dejar de insistir en estar con él, porque ChanYeol es feliz conmigo.

― Lo que él y yo tuvimos fue mucho más serio de lo que tiene contigo. ― Dahye parecía enojada a ese punto, probablemente molesta por todo lo que KyungSoo le estaba diciendo.

― ¿Un matrimonio arreglado? ― Bufó KyungSoo, desdeñoso ―. ¿Desde cuándo eso puede ser más serio? Además, terminaron hace… ¿hace cuánto? ¿Siete años? Por favor, supéralo ― Sonrió con un poquito de burla ―, él ya lo superó.

KyungSoo estaba un poco sorprendido por la actitud que tenía, pues jamás actuó de esa forma. Al inicio, pensó que sería tímido y torpe, tratando de hablar con calma, pero parecía que su omega no estaba de acuerdo. Santo cielo, su omega estaba muy enfurecido con esa chica e iba a proteger lo que era suyo. ChanYeol era suyo, no de ella.

Casi podía gruñir en señal de defensa.

― Pensé que, tal vez, serías alguien más maduro ― Masculló Dahye, sin parecer amedrentada por sus comentarios ―, pero ahora, mirándote, sólo confirmo que ChanYeol debe ver en ti una zorra barata.

Su mano tembló cuando sintió la tentación de lanzarle el jugo al escuchar esa ofensa, entrando en cólera por lo que ella le estaba diciendo. Era como recordar todos esos insultos en el colegio, cuando se enteraron de que estaba embarazado.

Fue mucho más morboso para todos, porque KyungSoo siempre tuvo un bajo perfil y destacaba sólo en las calificaciones. Qué divertido tuvo que ser para ellos que el santo, inocente y amable Kyunggie hubiera quedado en cinta de un alfa desconocido.

Sin embargo, se controló a tiempo para no hacer una locura. No estaría bien reaccionar así, no en público, al menos.

― Y, aun así ― Le gruñó ―, ésta zorra barata es su novio, y no tú. ― Le miró con disgusto ―. ¿Eso sería todo, entonces? Tengo cosas más importantes qué hacer.

― No ― Dahye ahora se veía algo alterada ―, quiero que termines con él ― KyungSoo iba a soltar una risa ―, y si no lo haces, entonces no me quedará más remedio que ir a la dirección de tu universidad y denunciar que sales con tu profesor.

KyungSoo abrió su boca con incredulidad ante lo que estaba escuchando, observando el rostro triunfante de Dahye frente a él.

La mujer hablaba muy en serio, se podía notar en sus ojos, y el menor hizo un mohín. De verdad, ¿qué había visto ChanYeol en ella? Cuando le contó de esa relación, parecía recordarla con cariño, pero ahora que la veía frente a él, no podía evitar preguntarse eso.

Bueno, no era nadie para juzgar, ¿cierto? Después de todo, él se metió con el cretino de Kangsan.

Se puso de pie.

― Hazlo ― Le dijo, desafiante, y Dahye puso una expresión de sorpresa ―, vamos, te desafío. Hazlo, no me importa ― Es decir, si le importaba, pero no se lo demostraría ―, ¿crees que no puedo ir a otra universidad? ¿O que ChanYeol tendrá dificultades para conseguir otro empleo? ― Rodó los ojos ―. Acúsame, vamos, te desafío a hacerlo, ¿o piensas que te tengo miedo? ― Se puso de pie, agarrando su jugo ―. No te tengo miedo, Dahye, así que deja este patético intento de separarme de ChanYeol, porque no funcionará.

Se dio media vuelta y dio dos pasos, sin embargo, antes de seguir avanzando, se giró a decirle una última cosa.

― Ah, y no te preocupes, le contaré a ChanYeol todo lo que me acabas de decir. Vamos a ver si le quedan ganas de volver contigo luego de esto.

Se marchó antes de que la mujer pudiera decirle otra cosa, tratando de contener todavía el enojo que sentía por la situación en la que estaba. Y más aún, por la preocupación ante la amenaza dada. ¿Y si ChanYeol se enfadaba si lo echaban por culpa de esa relación?
Como si lo estuviera invocando, y mientras tomaba el bus para irse a casa, recibió una llamada. Era ChanYeol.

― ¿Channie? ― Preguntó, yendo a sentarse en los asientos traseros.

Hola, bebé ― Suspiró ChanYeol―, ¿estás libre ahora?

― Mmm… ¿para qué?

Para verte, ya no lo soporto más, te extraño un montón, Soosie. ― Sus palabras le causaron una risa ―. Llevo comida.

― ¿Y dónde estás?

Estacionado fuera de tu departamento.

― ¡ChanYeol!

¿Todavía no llegas? ¿O estás con algún amante?

Resopló ante sus palabras, soltando unas risitas.

― Estoy en cinco, espérame abajo.

Para su fortuna, el bus no tardó demasiado en llegar fuera del edificio, donde ChanYeol ya le esperaba, apoyado en su auto estacionado y sosteniendo una bolsa con comida.

― ¿Tan tarde saliste de tu examen? ― Preguntó el alfa al verlo llegar, y lo abrazó por la cintura.

KyungSoo le dio un beso en la boca, aliviado de sentir al alfa junto a él. También le echó de menos, no se veían hacía más de cinco días y ya le estaba pasando la cuenta.

― Tenemos que hablar. ― Le dijo al alejarse, arreglándole las solapas de su abrigo.

― ¿Uh? ― ChanYeol parpadeó ―. Eso no suena bien.

KyungSoo le sonrió, agarrándole la mano y llevándolo al interior del edificio. Mientras subían, le contó brevemente sobre su día y cómo le fue en el examen, preguntándole también cómo le fue a él los últimos días.

ChanYeol estaba con la preparación de todos los exámenes, y el viernes de esa semana debía hacerles a ellos el último examen del curso. KyungSoo estaba aprobando, no con las mejores notas, pero tampoco con la mínima calificación de aprobación.

BaekHyun se encontraba sentado en su sillita cuando llegaron, con la compota de manzana a medio comer. El bebé los saludó con felicidad, emocionado de ver a su papá luego de tantos días separados.

― ¡Papa! ― Gritó, contento, y extendió sus bracitos para que lo tomara en brazos. KyungSoo, mientras, le pagaba a Momo el día.

― Gracias por cuidarlo, y lamento llegar tan tarde. ― Le dijo, acompañando a la chica fuera.

― ¡Tranquilo, oppa! Me gusta jugar con BaekHyun. ― Momo se despidió y pronto quedó la pareja a solas.

ChanYeol sostenía a BaekHyun en sus brazos, que le agarraba una mejilla y chillaba. KyungSoo fue a servir la comida, acomodando la sillita del bebé para que siguiera comiendo con ellos.

― ¿Me echaste de menos, bebé? ― Le preguntó ChanYeol a BaekHyun.

― Por supuesto ― Contestó KyungSoo, en cambio y con unas risitas ―, creo que me estoy haciendo adicto a ti.

― ¿Ah, sí? ― Escuchó el gruñido del alfa, que acomodó a BaekHyun en su sillita ―. Pues tú me vuelves loco, precioso… ― ChanYeol lo agarró por la cintura ―. Oh, eso sonó como una línea de una mala película. ― KyungSoo también se rió, dejándose abrazar con cariño.

― Se va a enfriar la comida. ― Le dijo KyungSoo, recibiendo un beso en la mejilla.

― ¿Sabes cómo podemos calentarla? ― Gruñó ChanYeol.

― ¡Eres un monstruo! ― KyungSoo volvió a reírse, y lo soltó para ir a sentarse en la mesa.

Comieron un instante, retomando la conversación sobre lo que pasó los últimos días. Cuando estaban en mitad de toda la comida, KyungSoo decidió sacar el tema en conversación. No podía ocultarle algo así a su novio.

― Dahye apareció hoy en la facultad ― Le dijo.

ChanYeol se atoró con un trozo de papa frita, teniendo que agarrar su vaso con agua y beberlo un poco. BaekHyun comenzó a reírse ante la visión del alfa atragantado, sus manitos hechas puños golpeando la mesa. KyungSoo tuvo que servirle un poco más de agua, viendo el rostro enrojecido de ChanYeol.

― ¿Muy sorpresivo? ― Preguntó KyungSoo.

― Claro que… sí… ― Jadeó ChanYeol, bebiendo algo más de agua ―. ¿Y qué… qué quería ella?

KyungSoo pensó bien en qué decirle. Recordar la conversación le ponía los pelos de punta, en especial acordarse de todos los insultos que la mujer, prácticamente, le dijo. Por un instante, quiso acusar eso con ChanYeol, sin embargo, decidió que mejor se los guardaría. No quería echar tanta cizaña a esa situación.

― Quería que tú y yo terminemos. ― Le contó, preocupado. ChanYeol volvió a atorarse ―. Y ha dicho que, si no lo hacemos, nos va a denunciar en la universidad.

ChanYeol no dejó de toser como por diez minutos, hasta BaekHyun comenzó a preocuparse, abrazando su perrito.

― Mierda, lo siento, bebé. ― Barboteó el alfa una vez logró recuperarse ―. No pensé que ella… ella fuera a hacer algo así. ¿Qué está pensando? Sus padres deben estarla presionando más para volver a comprometernos. Si tú quieres…

― Le dije que no me importaba ― Intervino KyungSoo, ordenando los platos vacíos de comida antes de ponerse de pie y sentarse en las piernas de ChanYeol ―, no me importa si me echan de la universidad por estar contigo. Estoy cansado de tener miedo, Chan.

― Bebé…

― Es decir, si a ti te importa…

― Claro que no ― ChanYeol lo abrazó y le dio un beso en la boca ―, si me despiden, tampoco me importa, cariño. Quiero estar contigo. ― La mirada del alfa se oscureció ―. Hablaré con Dahye y le diré que esto es una locura. Me encargaré de ella, y que no vuelva a molestarte.

― ¿Sí? No quiero verla nunca más. ― KyungSoo le devolvió el beso ―. Y tampoco quiero verla cerca de ti. Es una víbora, ChanYeol.

― ¿Una víbora? ― ChanYeol soltó unas carcajadas, pareciendo olvidar su molestia ―. ¿Y tú eres el pequeño pigüino a punto de ser devorado?

― Devorada por un lindo tigre gruñón. ― Contestó KyungSoo, besándole la punta de la nariz.

― ¡Mamiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii! ¡Papaaaaaaaaaaaaaaaa! ― Chilló BaekHyun, golpeando la mesita por atención.

Los dos suspiraron por los gritos del bebé.

Sin embargo, más tarde, ChanYeol decidió quedarse en el departamento, sin muchas ganas de regresar a su hogar. Una vez BaekHyun se quedó durmiendo, ellos fueron a la habitación y se acurrucaron uno al lado del otro.

― ¿Sigues preocupado? ― Le preguntó KyungSoo, apoyando la cabeza en el pecho de ChanYeol.

― Estoy sorprendido y algo decepcionado. ― Corrigió el alfa ―. Jamás pensé que Dahye fuera capaz de hacer algo así. ¿Te trató muy mal, bebé?

― Sí ― KyungSoo lo abrazó con más fuerza ―, ella dijo que tú no querías nada serio conmigo.

― ¡¿Qué ella dijo que?! ― Gritó ChanYeol, enderezándose con una expresión incrédula.

― ChanYeol, no es para tanto…

― ¡¿Cómo qué no?! ― Ahora se veía enfurecido e indignado ―. ¡La voy a matar!

― ¡No seas así! ― KyungSoo trató de recostarlo en la cama otra vez ―. Sólo lo dijo por celos…

― ¡Peor aún! ― ChanYeol dejó que su novio lo acostara, luciendo todavía muy molesto ―. ¿Cómo se le ocurre meterse con mi chico?

― ¿Tú chico? ― KyungSoo se rió.

― Mi bebé ― ChanYeol se volteó a verlo, llenándole el rostro de besos esporádicos ―, mi lindo y pequeño bebé, tan bonito y tierno, perfecto para comérmelo…

Las risas se volvieron más escandalosas antes de transformarse en un suave gemido cuando se besaron en la boca, suspirando por la forma en que ChanYeol le agarró de la cintura. Pronto, los besos se volvieron más y más calientes, ambos devorándose la boca a cada segundo.

La temperatura en el cuarto no tardó en subir. La mano del alfa se deslizó bajo el pijama de KyungSoo, agarrando su polla endurecida y empezando a masturbarlo.

― Te adoro tanto ― Le gruñó ChanYeol, separándose un poco. Un hilo de saliva conectaba ambos labios, y KyungSoo tenía el rostro enrojecido y los labios hinchados por los besos ―, te quiero tanto, mi omega bonito…

― Alfa… alfa… ― Gimió KyungSoo, moviendo sus caderas para que ChanYeol le masturbara más rápido ―, ah… Alfa…

Sólo bastaron un par de movimientos más en la polla del omega para que llegara al orgasmo, gimiendo contra la boca del alfa para no terminar gritando y despertar al bebé. En la habitación sólo se escucharon los jadeos de KyungSoo, tratando de recuperarse, y de los gruñidos de ChanYeol.

― Eres mi chico ― Reafirmó ChanYeol ―, y voy a cuidarte como corresponde, bebé.

― ¿A mí y a Baek? ― Susurró KyungSoo.

― A los dos. ― ChanYeol le dio un beso dulce ―. Hablaré con Dahye para que nos deje en paz, pero quiero que sepas que siempre te elegiré a ti primero, ¿vale?

― Yo también ― Afirmó KyungSoo ―, te elegiré primero, Channie.

ChanYeol le sonrió y KyungSoo suspiró por la calma y felicidad.

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