-¡BUENOS DÍAAASS!-el grito de camila me hizo caer de la cama, sentía que no había dormido nada, sentía que hace cinco segundos estaba hablando con louis, sonreí al recordar eso.

-papá, ¿enserio tenias que conseguirte otra latina loca?-el rió con fuerza, yo solo suspire y pegué la cabeza de nuevo al piso, esta alfombra nueva si que era cómoda.

-si te vuelves a dormir te hecho agua.

-coñisimo de la madre nojoda.

-las groserías.

-perdón.

luego de bañarme y terminar de arreglar mis cosas, lo cual no fue muy difícil, pues iríamos hoy y volveríamos mañana por la tarde, pude bajar a desayunar, eran las cinco de la mañana y los únicos que parecíamos notarlo éramos joey y yo, que casi nos dormíamos sobre nuestros platos de cereal.

-apresurense, ya casi es hora de irnos.

subi rápido a cepillarme los dientes y luego fui hasta el auto, donde papá estaba guardo las cosas, me senté atrás junto a joey, unos quince segundos después estaba dormida.

-creo que no deberíamos despertarlos, cariño.

-no lo sé, juan, se ven tan cómodos así.

-lo se cami, pero no pueden quedarse aquí.

unos susurros me hicieron moverme un poco, cuando sentí un peso sobre mi cabeza entendi todo, abri los ojos un poco y pude confirmar lo que pensaba, joey tenía su cabeza sobre la mía y yo estaba recostada en su hombro.

aunque cuando me desperté obviamente el lo hizo también, nos estiramos un poco y bajamos del auto, sonreí mirando la naturaleza, había un precioso lago y muchos árboles.

¿será que hay señal en este lugar?

estuve a punto de sacar mi teléfono para revisarlo, pero en cuanto lo hice este fue arrebatado de mis manos, observe a mi papá confundida.

-solo por estos días no usaremos los teléfonos, hay un lago y mucho espacio para divertirse, ahora, quiero que joey y tu vayan por leña para la fogata mientras que nosotros armamos las tiendas.

rode los ojos y segui a joey hasta el bosque.-¿que era lo que teníamos que buscar?-rei.

-leña, joey, leña.

comenzamos a caminar por todos lados buscando leña, aunque realmente agarramos todo lo que parecía madera y lo llevábamos hasta donde estaban nuestros padres.

luego fuimos obligados a armar nuestra propia tienda, porque si, íbamos a dormir juntos, bueno, no juntos, cada uno tenía su propio saco de dormir, pero compartiriamos tienda, a eso le llamo confianza.

-lily, ¿quieres ir al lago?

-por supuesto, vamos.

en cuanto llegamos al muelle me quité la ropa y ambos nos lanzamos al lago, donde comenzamos a salpicarnos agua y nadar de un lado a otro.

-de hecho, esto es divertido.-dijo joey subiéndose a un pequeño kayak que estaba a la orilla de el lago.

-¿que haces?

-vamos, sube.

-no creo que eso sea una buena idea realmente.-el me tomo de la mano y no me quedo otra opción que subirme al kayak.

al principio íbamos bastante bien, de hecho me estaba divirtiendo y disfrutando del paseo, hasta que joey dejó caer el remo.

-¡joey!-grite, pues el se había lanzado al agua a agarrarlo, y esto hizo que me cayera del kayak, el comenzo a reír.

el resto de la tarde estuvimos en el lago, cuando el sol se puso nos cambiamos de ropa y nos colocamos nuestra pijama para sentarnos a comer alrededor de la fogata que había hecho papá.

-joey, ¿qué tal está sasha?-pregunto papá, el sonrio.

¿sasha?

-oh, bien, de hecho cuando volvamos a casa dijo que iremos a donde sus abuelos para conocerlos.

-el amor adolescente es tan lindo.

¿amor? ¿qué?

-¿quien es sasha?-pregunte tratando de sonar desinteresada.

-la novia de joey.

oh.