Hace siglos fueron creadas unas joyas majicas que concedian poderes extraordinarios, los prodigios.

A lo largo de la historia los héroes han utilizado estos prodigios por el bien de la humanidad.Dos de estos prodigios son más poderosos que los demás. Los pendientes de lady bug que otorgan el poder de la creación y el anillo de Cat noir que otorga el poder de la destrucción .
Segun la leyenda aquel que controle ambas joyas ala vez conseguirá el poder absoluto.

Se ve la si fuera de un hombre cerrando una foto qie estaba en un collar.

-¿Esa foto no es de...?-dijo Adrian.

-¿Emili?- dijo Cloe

Los dos rubios estaban en Shock pero sobretodo Adrián.

Se supone que eso que vio fue un Kwami por ende ese era Lepidóptero pero...

¿Que hace Lepidóptero con la foto de su madre?

— ¿Quién es Emili? — pregunta Rose.

— Ni idea — contesta Juleka.

— Emili...era mi madre — dijo Adrián con algo de dolor.

-Quiero ese poder Nooro, quiero esos prodigios- dice una voz masculina

-Pero... Nadie sabe donde se encuentran- dijo un kwami violeta.

-Yo te encontré pequeño Nooro- dijo el hombre acariciando aquel collar- tu prodigio...recuérdame sus poderes.

- Quiero el poder absoluto! - dijo pisando el suelo haciendo a las mariposas volar - ¡Tu poder está bajo mi control! — lo señala — ¡Soy tu maestro y me obedeceras!

— Que berrinchuda — bufa Alix.

— Espera un momento... ¿Por qué nos muestran ese hombre? — pregunta Milene.

— Ahh, eso es porque él es Lepidóptero — obvia Israa

— Espera... ¿¡Que!? — se sorprende Nathaniel.

Pero Isras lo ignoro mientras sacaba de Dios sabe dónde unas palomitas.

— Cállense y escuchen.

Nooro baja la cabeza sumiso — si, maestro.

"Lepidóptero" se pone una brocha.

— Siento que me recuerda a alguien — piensa Marinette.

— Esa figura, la e visto en algún lado...— piensa Adrián.

— ¿Pero dónde? — piensa Cloe.

— Ñe, imaginaciones mías. — piensan los tres encogiendose de hombros.

— Nooro, ¡Alas de la noche! — las mariposas empezaron a rodear aquella figura y al separarse de pudo mostrar el cuerpo de Lepidóptero.

— Eso fue... ¡Asombroso! — exclama Alia.

Marinette la mira mal.

— No me vas a negar lo increíble que fue como se le pegaron aquellas mariposas al cuerpo.

— Entonces ya tenemos una lista sobre Lepidóptero — dijo Max. — El tiene una obsesión con las mariposas

— Bueno... Las mariposas son bonitas y no dan miedo — opino Milene.

— Genial, ahora solo tendremos que buscar entre todas las personas con mariposas, — hablo con claro sarcasmo Cloe — gracias por nada Max.

— De ahora en adelante me are llamar ¡Lepidóptero! ¡Muajajajaja!

— ¿Por qué está hablando solo?

— Se sentirá solo.

— Pobrecito... — dice Rose.

— Pobrecito no ¡Pobrecitos nosotros que tenemos que aguantar sus akumas! — dice Cloe.

Un Kwami verde de encontraba durmiendo en una caja de cerillas pero se levantó rápidamente dirigiéndose hacia un anciano que parecía hacer un masaje...

— ¿Que está haciendo? — pregunta Alix.

— Un masaje — contesta Noura.

— Pero si no le está tocando — la mira en busca de una respuesta.

— Ehhhh

— Un masaje espiritual(? — contesta Bou.

— Ese hombre me suena... — piensa Marinette — ¡Siempre me está siguiendo!

— Maestro, maestro — llama es Kwami verde.

El hombre levanta la mirada buscando de donde venía aquella voz.

— ¡Maestro! ¡Maestro! — finge el viejo — canto, así es el tratamiento.

— ¿Tratamiento de que? — pegunta Alia.

— ¿¡Podéis dejar de hacer preguntas sobre qué está haciendo el viejo!? — se molesta Karina.

— ¡Es tu responsabilidad contestar! — acuso Alia.

— ¡Eso! ¡Tú nos secuestraste! — acusó Kim.

— ¡No os secuestrados! — exclamaron las cuatro.

Todos: ಠಿ_ಠ

— ¡Pedimos el permiso y nos lo concedieron! — dijo Noura.

— ¿Así? ¿A quien?

— Le pregunté a mis zapatos y dijeron vale. — contesto Karina dandole al Play.

— ¡Gracias por venir! ¡Nos vemos pronto! — se despidió el viejo echando a su cliente.

— Yo le pediría una devolución — dice Cloe.

— Maestro, se trata de Nooro, sentí su aura.

— Caramba, pensaba que se había perdido.

— Pero si puede volar — dijo Iván — ¿Como se va a perder?

— Su aura es negativa, quizás aya caído en manos de un poder oscuro.

— Hay que encontrar a Nooro y a su prodigio, si caen en malas manos quién sabe los males que asolarian al mundo — dice el viejo dirigiéndose al centro de esa sala — ¡A transformarse! — ex Clans el viejo haciendo movimientos raros.

— Son los power ranger~

Algunos se ríen.

Poco después de aquellos movimientos el mayor cae al suelo agarrándose la espalda.

— Maestro cuidado, ya es mayor.

— Soy joven, solo tengo 186.

— ...

— Necesito saber su secreto — dijeron todos.

— ¡Es imposible que alguien sobreviva tanto tiempo! — dijo Cloe.

— Al igual que es imposible hacerle a alguien un masaje sin tocarlo.

— Ese viejo es una caja de sorpresas — dice Kim.

— Pero es verdad Wyse, no puedo yo solo — él anciano se dirige a una caja poniendo una contraseña abriéndola mostrando una caja.

Todos muestran intereses por la caja.

— Marinette, tu alarma no para desde hace un rato, llegarás tarde a tu primer día de colegio.

— ¡Venga ya, justo en la mejor parte tenía que mostrar a la panadería!

Varios gimieron de frustración.

— Vale mamá, ya voy — dice Marinette bajando lugar escaleras

— ¿Y por qué estamos viendo esto? — se queja Cloe — hasta el masaje invisible que estaba haciendo ese viejo es más interesante que ver a la panadera.

— ¡Cerrá el orto! — exclama Noura.

— ¿...Que?

— Que te calles — dice Israa.

— ¿Y por que lo haría?

— Te tragaras tus palabras — dice Bou.

Marinette le da un beso a su madre en la mejilla para ir preparándose el desayuno.

— Estoy segura de que Cloe seguirá en mi clase — dice con una expresión cansada.

— ¿Que comes que adivinas? — dice Cloe.

— ¿Cuatro años seguidos? ¿Será posible?

— ¿¡Cuatro años!? — exclama Alia.

— Yo creo que Cloe está enamorada de tí — dice Nathaniel.

— Asco — dice Marinette.

— ¿Homofóbica? — pregunta Karina.

— ¿Que? ¡No!

— Pues claro, soy gafe — dice echándole cola-cao a la leche.

— No digas eso, es el comienzo del curso, estoy segura de que todo irá bien — consuela Sabine animando a Marinette.

Entonces Marinette al dejar el cola-cao provoca que la naranja se valla resbalando por el pan pasando encima de la mantequilla con la ayuda del cuchillo, la naranja tira la leche, los azúcares que saltaron también tiraron el cola-cao  y esa misma naranja le tira el yogur.

— Esa naranja es maligna — dice Nino.

— Luego se ofenden cuando la llamo torpe — dice Cloe.

— Desde ese día prefiero desayunar cereales — admite Marinette.

Adrián se ríe causando un sonrojo en Marinette.

Marinette suspira derrotada mientras que su madre la ayuda a recoger.

[🐞]

— La,la,la,la,la,la,la,laalala — canturrea el padre de Marinette con una caja en las manos.

— Repito... ¿Por qué estamos viendo esto? — pregunta Cleo irritada.

— ¿No íbamos a ver algo de Ladybug? — pregunta Alia con una libreta para apuntar (Dios sabe de dónde saco esa libreta)

— Si os callarais.

— ¡Papa! ¡Sin increíbles! — se muestra una caja de Macarrons.

— Para tu clase — cierra la caja.

— ¡Caramba! Les encantarán, gracias. — dice Marinette cogiendo la caja.

— En donde yo vivo, decir "caramba" es una grandísima tontería — dice Karina — nosotros solemos decir "Joder", "Madre mía" y ese tipo de cosas.

— Gracias a tí y a tus increíbles diseños — muestra una libreta.

Marinette le sonríe abrazándolo soltando la caja pero Tom la coge con el pie.

— El ultra instinto — dice Nathaniel.

Marinette se despide de sus padres y se va, casi la atropella un coche.

En medio de la carretera estaba un anciano andando con un bastón, por un lado venía un coche.

— ¡PERO FRENA IDIOTA! — gritó la mayoría a la pantalla.

— ¿Por qué le gritais a una pantalla? — pregunta Bou.

Todos estaban con sus celulares sin prestar atención al anciano.

— El mundo está podrido — dice Adrián.

— Hasta la médula — completan algunos.

— Yo creo que esas personas se juntaron mucho con Cloe — bromea Alix.

— Ja, ja, que gracioso — contesta Cloe con sarcasmo

Marinette corre a salvar al anciano, después de salvarlo se cae.

— Muchas gracias — agradece el anciano — Oh, no, que desastre.

La gente empieza a pisar los Macarrons.

Algo dentro de Adrián se rompió.

— ¿¡Que la gente es ciega o que!? — explota Adrián.

Bink: ಠ,_｣ಠ

Bink, por alguna razón no podía tomarse en serio lo que decía Adrián.

— Hablando de ciegos — murmuró Bou.