— Anda, vamos a mi casa.— Insistía Hwang mientras salían del lugar de prácticas.

— Felix se enojará otra vez...

Hyunjin lo miró con mala cara, era obvio que aquella respuesta lo iba a molestar.

Se hallaban caminando hasta la calle donde Hyunjin estacionó su auto, que no estaba a nada más que unos pocos metros. En un primer momento, la idea era que el más alto alcanzaría al castaño hasta la casa del pecoso nombrado, pero automáticamente cambió de idea cuando se le ocurrió que Seungmin podría volver a su casa, a dormir entre sus brazos y ahora despertar con sus besos. Definitivamente no ignoraría esa gran oportunidad.

— No puedes vivir de lo que Felix quiera o no, Seung.— Expresó seriamente. —Él debe entender que el dueño de tu vida eres tú mismo. Además, creo que nuestra situacion es muy diferente a la de antes, ¿no te parece?

Seungmin se lo pensó, y la verdad era que sí, estaban muy lejos de aquel entonces, pero por más que se lo repitiera a sí mismo le costaba aceptar todo aquello y lo que menos necesitaba era que lo regañen, sino que lo entendieran.

— No me regañes.— Contestó con un gran nivel de seriedad, mirando al piso.

— No te regaño, Seung, solo es que a veces dejas que otros controlen tu vida y no me gusta.

Poco a poco, Hyunjin se adentraba a un tema un tanto delicado para el más bajo, provocando que el malhumor de éste se intensificara.

— ¿Puedes parar, por favor?— Le pidió cansado. —¿Crees que es fácil para mí? ¿Qué piensas, eh? Hasta hace un mes vivía bajo las estrictas órdenes de mis padres, mismas que se prolongaron por casi dieciocho años.— Informó haciendo puños sus manos, controlándose lo más posible. —Lamento no ser como tú y tu gran manera de ser, nunca fui alguien que se destacó por su carácter.

La conversación no siguió, ambos estaban enojados, mas no querían empeorar la situación o de otra manera todo terminaría mal, realmente mal. En cuanto llegaron a la.ubicación del auto ambos se adentraron a él en silencio.

El trayecto fue normal hasta que Seungmin sacó su celular comenzó a marcarlo donde rápidamente lo atendieron.

— ¿Dónde estás, Seung?

Felix ya estaba preocupado por el paradero de su inquilino.

— Hola, Felix, estoy bien.— Ironizó. —Me pasé por la academia de Hyunjin y estoy yendo en auto con él. No iré hoy a casa, ¿sabes?

— ¿Te quedarás en la casa de él?— Preguntó sorprendido, esperaba verlo pasar por esa puerta, misma que estaba viendo en ese mismo momento en el que sostenía el teléfono. De otro lado tan solo hubo una simple afirmación positiva. —Es mejor que vuelvas a casa por hoy...

— Nos vemos mañana, te quiero.

Cortó la comunicación, con un poco de malestar y tristeza, pero lo hizo. Felix debía entender que ya no era un niño y, a pesar de que la manera en la que el pelinegro le dijo las cosas no fueron expresadas de la mejor forma, sus palabras eran correctas, por lo que por voluntad propia decidió hacerle caso. Miró directamente a su novio, quien ya manejaba con una sonrisa. Soltó un sonoro suspiro y se dispuso a hablar.

— Será mejor que tengas palomitas en tu casa y un buen gusto en cuanto a películas o me vuelvo a casa de Felix.

— ¿Con azúcar o miel?— Bromeó con el humor totalmente cambiado.

— Son más ricas con miel.

Con una maniobra no tan segura seguido de una sonora carcajada, cambió de dirección para dirigirse a su departamento. Era noche de películas y ya se estaba ideando cuáles podían ser las opciones. Al llegar, Seungmin entró con confianza a la casa de su novio, dejó todas las bolsas que aún conservaba del día en la mesa y se sentó en el sillón, supuestamente a descansar tranquilamente, pues pasó varias horas caminando y yendo de un lado a otro. Hyunjin, por su lado, caminó hasta la cocina a ponerse a hacer las palomitas, pero llegó tarde, ya que cuando por fin se hicieron, las preparó con miel tal cual el gusto de su novio, las puso en un gran tazón y se encaminó al living, y ahí lo vio, un pequeño cuerpo durmiendo profundamente en su sillón, con la ropa incómoda e incluso con el ceño fruncido producto de la luz en la habitación.

Tranquilo, abandonó todo tipo de plan y subió arriba a preparar el baño, buscó entre sus ropas algunas que le quedarían bien a Seungmin y al final optó por un short deportivo y una camisa larga que ya no le quedaba y ropa interior que guardaba sin usar que incluso se guardaban con la caja original. Acomodó todo en el baño junto a una toalla color coral, pensó que a Seungmin le gustaría de esa manera.

Bajó otra vez y ahí seguía su pequeño novio. Se acercó despacio y silenciosamente y comenzó a tocarle suavemente el hombro para que despertara.

— Amor, tienes que bañarte.

Seungmin intentaba despabilarse, mas sus ojos se resistían, volviéndose a cerrar una y otra vez. Al ver esta resistencia por parte de los sentidos del castaño, Hyunjin inició una repartición de besos por toda la cara del chico dormido, consiguiendo su objetivo.

— Está bien, Jinnie. Ya estoy despierto.— Avisó con la voz ronca.

El último beso fue en la boca y solo así se alejó.

Lo acompañó hasta arriba, le mostró dónde podía encontrar el acondicionador y shampoo, así como jabón y todo lo que necesitara y finalmente salió para meterse en su habitación. Lo esperó hasta que salió, su baño duró unos veinticinco minutos a media hora.

Hyunjin y Seungmin eran personas que muchas preferían permanecer calladas, no eran necesarias las palabras si en el silencio significaba paz, por eso, sin ningún tipo de seña o dicho y entendiendo que el mas pequeño estaba cansado y quería dormir, se metieron bajo las sábanas, el mas alto se pegó a su novio abrazándolo por la cintura y juntos cerraron los ojos.

Dormieron juntos en otras oportunidades, no obstante, esta vez era muy diferente a otras, Seungmin no estaba soportando un gran dolor en el corazón, ni lloró previamente, ni cerró los ojos con miedo, nada. Y no existía cosa más dichosa para Hyunjin, quien veía su felicidad en ese pequeño que cuidaría incluso de sí mismo.

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¡Hola, perfecciones!

Espero que les esté yendo re bien, yo ando muy soft por el final del capítulo, esta bonito como el anterior :c.

Gracias a todos los nuevos lectores, de verdad son mucho <3. Y a los viejos también, que fueron mi pilar a actualizar hace dos o tres meses, cuando de verdad solo era un punto sin opacidad acá, como escritora de fics de SKZ.

¿Ven? Ando re soft.

Nos leemos luego~.

— D a n o n i n o .