Todos creian que la primera vez que Carlos conocio a un perro fue hasta los quince años, cuando llego a Auradon y conocio a su perro Dude, pero en realidad, ya habia conocido a un perro antes de esto, cuando era tan solo un niño de cinco años. No era un recuerdo muy lindo.

Carlos estaba en medio del mercado de la isla de los perdidos, el solo, el niño se había perdido.

—¿M-Mama? –Murmuró mientras con la mirada la buscada por todos lados entre la multitud.

A diferencia de los demas niños de la isla, quienes se la pasaban todo el dia fuera de sus casas y conocian la isla como la palma de su mano, Carlos pasaba la mayor parte del dia en su casa, a menos que saliera con su madre, Gaspar u Horacio; puede que su madre no fuera exactamente la mejor, pero al menos tenia el sentido comun de no dejar a su hijo salir solo en una isla llena de villanos, a diferencia de los demas padres a quienes no les importaba en donde estuvieran sus hijos en todo el dia.

Sin embargo, ahora esto le cobraba factura y no tenia idea de donde estaba ahora, camino tanto tiempo buscando a su madre que poco a poco las personas desaparecieron y llego a una parte solitaria de la isla, donde no habia ni un alma presente.

Carlos, con miedo de perderse aun mas e incapaz de mover sus piernas, se quedo parado en el lugar, solo esperando a que su familia lo encontrara de alguna forma.

Se quedo paralizado al escuchar gruñidos cerca de el, lentamente, volteo lentamente hacia donde provenia los gruñidos.

Perros, eran perros callejeros, perros grandes, agresivos y hambrientos, muy hambrientos.

Lo siguiente que recuerda es a el mismo correr tan rapido como sus pequeñas piernas le permitian, con los tres perros detras de el.

No esta seguro de cuanto tiempo estuvo corriendo, pero eso se detuvo cuando termino en un callejon sin salida, con los perros cubriendo cualquier via de escape.

El niño intentaba pegarse a la pared lo mas que podia, esperando que de alguna forma la pared lo tragara para escapar, con su vista fija en aquellos aterradores animales que eran capaces de arrancarle la cara.

Uno de ellos se lanzo hacia el, cerro los ojos, esperando su inevitable fin a manos de esas bestias, final que nunca llego y solo escucho el lloriqueo de los perros y un casi imperceptible silvido.

Cuando se dio cuenta, estaba siendo abrazado por su madre.

—¡Carlos! ¿Estas bien? –Su madre lo tomó del rostro, con un rostro de preocupación qué nunca había visto en ella, una vez vio que no tenía nada, la mujer soltó un suspiro aliviada– ¡Te dije que no te soltaras mi mano! ¡Te dije que no caminaras solo! ¡¿Recuerdas?!

—A-Ah... Yo...

—No importa, nunca vuelvas a venir a este lugar ¿Escuchaste?

Sin que siquiera pudiera contestar, Cruella lo tomo de la mano y se lo llevo lejos de alli.

Carlos nunca volvió a pisar esa zona y con el tiempo, Carlos olvidó que eso había pasado y los perros fallecieron de vejez, siendo la primera y única vez que Carlos vio un perro. Al menos, hasta que llegó a Auradon.

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Ese recuerdo cayo como un rayo en la mente de Carlos, tantos años reprimiendo esas memorias, y por una muy buena razón, incluso en sus recuerdos fue aterrador, por un segundo se sintió nuevamente como ese niño acorralado. Ver a su joven madre siendo perseguida por aquellas bestias trajo de vuelta ese aterrador momento.

Esta agradecido de haberlo olvidado, pues de recordarlo, el miedo que le tenia a los perros en el pasado tendría mas sentido y tal vez jamás se hubiera atrevido a adoptar a Dude; sin embargo, de cierta forma estaba agradecido de recordarlo, pues eso explicaba mejor el miedo que su madre fomento a los perros. Aun no lo justificaba, pero podía entenderla mejor, al final, parece que ella si se preocupaba por el a su forma.

Jane: ¿Carlos? –La voz de su novia lo saco de sus pensamientos– ¿Estas bien? Parecías perdido...

Carlos podía ver en su mirada que Jane había estado preocupada ¿Tanto tiempo se perdió en sus pensamientos? Tal vez no, pero aun así se notaba.

Carlos: No te preocupes, estoy bien –Carlos le sonrió a Jane, pero no se veía del todo seguro.

Jane: ¿Estas seguro? Se trata de tu madre y tu abuela, no te vez-

Carlos: ¡Oh mira! La pelicula continua –Interrumpió antes de que pudiera preguntar mas.

La joven hada ya no respondió, deseaba poder ayudar a Carlos a afrontar la verdad, pero no sabia como.

Mal solo puso su mano sobre su hombro y le dio una mirada de apoyo, ella sabia como era descubrir verdades difíciles sobre su madre; además, necesitaría mas apoyo mas adelante, pues esto apenas esta comenzando.

Todos regresaron su vista a la pantalla.

Ya era de mañana, la pequeña Estella se quedo dormida en frente de la fuente junto con Buddy. La niña empezó a despertar y lo primero que vio fue a un pequeño perrito negro que parecía faltarle un ojo, pues lo cubría con un parche.

"Pero un nuevo día trae nuevas oportunidades, o al menos a un par de ladronzuelos"

Ben: ¿Un par de ladronzuelos?

Mal: No me digas que son... –La futura reina no pudo terminar la frase antes de que se respondiera sola.

Lo siguiente que vio fue a un niño gordito robando las monedas que la gente tira en la fuente.

"Horacio"

—Señor ¿Tiene cambio que le sobre? –Escucho otra voz cerca, viendo a un niño delgado pidiendo monedas a un señor, cuando el señor, cuando el señor paso a su lado, rápido tomo su billetera sin que se diera cuenta.

"Y Gaspar"

Evie: Parece que si eran.

Jay: Me agrada ese niño, tiene manos rápidas –Alago Jay, recordándose a si mismo en sus días le ladrón en la isla.

Audrey: ¿Se conocieron de niños? –Pregunto la princesa– Según la historia que me contaron, Cruella contrato a Horacio y Gaspar para secuestrar a los cachorros, jamás se menciono que se conocieran de antes.

Mal: ¿Así como no mencionaron lo que le paso a su madre?

Cruella: Créanme, hay muchas partes que se olvidaron de contar.

Por otro lado, Carlos miraba con más interés al segundo niño, sintiendo que de alguna forma, se parecía a él cuando era un niño.

No sería raro que así fuera.

Al voltear, Gaspar noto que Estella lo miraba y camino hacia ella, Estella de inmediato fingió que seguía dormida.

—Buenos días –Dijo el niño sentado a su lado en la fuente.

El pequeño Horacio se acercaba lentamente a ella, Buddy empezó a gruñirle, haciendo que Cruella note su cercanía y se ponga a la defensiva.

—Déjame.

"Horacio era el mas irritante"

Se levanto de su lugar y se paro en la fuente, dándole una patada en el estomago.

Eugene: Cuanta amabilidad –Comento burlón el esposo de Rapunzel.

Cruella: Supongo que después de una noche así tampoco reaccionarias bien con extraños.

Eugene: Toche.

Uma: Ni siquiera ahora se deja pisotear. Increíble.

—Vuelve con tu familia niñita –Le respondió burlón el niño.

"Gaspar era el mas perspicaz"

—Ella no tiene familia –Dedujo de inmediato con tan solo verla.

"Lo cual también era irritante"

Jay: ¿En serio puede saber eso con tan solo verla?

Aladdin: Cuando vives en las calles te puedes dar cuenta de esos detalles –El actual sultán se apuro en responder.

Escucho ladridos a su lado y al voltear vio a Buddy en el suelo, quien parecía querer jugar con el otro perro, quien le ladraba animado.

"Y Wink era muy amistoso, de nuevo, irritante"

Anita: Así que ese pequeño se llamaba Wink.

Pongo: Parece que el y Buddy se llevan bien –Dijo el dálmata, siendo capaz de comprender sus ladridos.

Roger: ¿Es que a ti todos te parecen irritantes? –Pregunto Roger al ver como describía a sus supuestos amigos.

Cruella: Supongo que así era al principio –Recibió una mirada molesta de Gaspar y Horacio, aunque este ultimo estaba mas concentrado en comer– Pero con el tiempo llegue a apreciarlos. Tu, en cambio, sigues siendo irritante.

Risas burlonas se escucharon de parte de los villanos y unas mas disimuladas de parte de los héroes, Roger no pudo hacer otra cosa mas que enfurruñarse en su lugar.

La pequeña regaño a su perro por llevarse con el perro de estos ladrones, cuando escucho el sonido de un silbato, al mirar el origen de este, los tres niños se dieron cuenta de que era un policía.

—¡OIGAN!

"Pero eran una mejor opción que ir a la cárcel"

Adam: ¿De verdad pensabas que te llevarían a la cárcel siendo solo una niña?

Cruella: Por supuesto –Contesto segura– Después de lo de anoche, estaba segura de que me estaban buscando.

Jafar: De todos modos, los policías no dudan en encarcelar a los ladrones, incluso si son niños –Por desgracia, el ex-visir hablaba por la experiencia.

Horacio, Gaspar y Wink no tardaron en salir corriendo, Estella tardo poco tiempo en comenzar en seguirlos con Buddy en brazos; en su mente, la posibilidad de ser arrestada por lo de anoche era muy real.

Siguió a los ladrones que corrían por las calles, siendo seguidos de cerca por el policía, hasta que en una esquina, el par de rufianes desaparecieron de la vista de Estella como se hubieran desvanecido en el aire. Buddy se bajo de los brazos de Estella, olfateando el piso, para al final encontrar un agujero oculto en la pared de madera por donde entro.

Sin mas opciones y con la policía acercándose, Estella entro por el agujero. Una vez dentro, Buddy siguió olfateando hasta un agujero en el piso al cual no dudo en tirarse, Estella siguió al perro y se tiro también.

Harry: Un pasadizo secreto ¿Eh? Chicos listos –Recuerda como sus piratas tienen atajos en la isla para facilitar sus robos.

Uma: Si no fuera por el perro ahora estaría en problemas.

Si dio una mejor vista a todo alrededor, el policía había pasado de largo, del otro lado había los restos de una casa que fue tirada abajo, quedando solo una escalera incrustada en la pared, los pequeños ladrones llegaron a ella por un pasadizo en la casa abandonada de al lado, subían por ella hasta llegar hasta el techo, en donde se tiraron por un traga luz, al fondo había un montón de colchones viejos que amortiguaban su caída.

Estella logro seguirlos hasta allí, dudando un par de segundos en saltar.

—Estuvo cerca, la dejamos atrás –Dijo Horacio a su compañero.

Un segundo después, Estella cae sobre los colchones.

—¿Que decías?

Jay: ¿Eso es un escondite?

Carlos: Parece más una guarida.

Mal: ¿No les recuerda a algo? –Le dio un golpecito en el hombro a Carlos, refiriéndose a la guarida qué ellos mismos habían conseguido en la isla.

Evie también sonrío al recordar ese lugar que por un tiempo fue como su hogar y un escape de la vida con sus padres.

Aladdin también sonrío al recordar su antiguo hogar antes de conocer a Jazmín; su esposa le dio un codazo también sonriendo, pensando en lo mismo.

Estella se bajo de los colchones, segundos después, Buddy también se cayo sin problemas.

—¿En donde estamos? –Pregunto mirando a su alrededor, estaban en un viejo y polvoriento ático, casi en ruinas.

—¿Y? ¿Cuál es tu historia? –Respondió con otra pregunta el pequeño Gaspar.

Ben: ¿Cómo sabias que tenia historia? –Pregunto el rey curioso, preguntándose si era parte de su perspicacia o un detalle del que no se había dado cuenta.

Gaspar: Todos los niños de la calle tienen historia, ninguno termino en la calle porque quisieran –Respondió en un tono más serio.

Cenicienta: ¿No podían ir a un orfanato? Allí no tendrían que robar para vivir, podrían encontrarles un hogar de acogida –Pregunto con inocencia y preocupación, sabía que debió ser difícil vivir en la calle, pero creía que había mejores alternativas.

Aladdin: No es tan sencillo y feliz como suena –Intervino el esposo de Jazmín, quien el mismo había sido una rata callejera– Vivir en un orfanato a veces puede ser peor. Entre tantos niños no se les puede dar la atención necesaria a todos y los recursos también son escasos.

Jafar: Y eso si no los malversan –Agregó el ex-visir– Los hogares de acogida también son una moneda al aire, la mayoría de padres de acogida no les importan los niños y más el cheque que reciben por "cuidarlos" –Hizo comillas con los dedos, remarcando su punto.

Eugene: Por eso muchos niños prefieren vivir en la calle que quedarse en los orfanatos. Yo mismo me escape de uno cuando era niño, prefería ser un ladrón que quedarme allí.

La sala se quedó en un incómodo silencio, seguros de la veracidad de sus declaraciones, ya que por desgracia, venían de la experiencia, todos ellos habían sido niños de la calle en algún momento.

Ben: Creo que... Deberíamos seguir viendo –El Rey intento disipar la incomodidad, pero se había hecho una nota mental para revisar las condiciones de los orfanatos de Auradon.

Estella se dio la vuelta, evitando responder la pregunta.

—¿Donde están tus padres? –Pregunto esta vez Horacio.

Chad: Que pregunta mas incomoda –Susurro Chad para sin mismo, aunque aun recibió un codazo de su madre.

Estella recordó los eventos de la noche pasada, una noche que jamás olvidaría.

Intentando retener las lagrimas, aun respondió –Mi mamá murió...

"Me salte la parte en la que la mate"

Anita: Pero tu no la mataste, eso fue un accidente.

Cruella: Oh, créeme que no lo fue, pero tampoco fue mi culpa.

Carlos miro confundido a su madre.

Carlos: ¿Entonces que paso?

Cruella: Mejor sigue mirando.

Los dos niños bajaron la cabeza, comprendiendo su situación mas de lo que quisieran.

—Creo que deberías quedarte y... Ser parte de la pandilla –Sugirió Gaspar.

—¿Que debería que? ¿Pero por que? –Susurro molesto Horacio– No hemos discutidos esto.

—Lo estamos discutiendo ahora y necesitamos una niña que se vea inocente y sirva de distracción.

Estella se sentó en el escalón, Buddy se sentó junto a ella.

—Yo solo deseaba ser una diseñadora, no una ladrona...

Jazmín: Ningún niño quiere ser un ladrón hasta que se ven orillados a hacerlo –Volteo a mirar a su esposo con pena, habiendo escuchado de el todas las cosas que vivió en la calle y aun así, mantener su corazón de diamante en bruto.

—Pero no tienes muchas opciones, solo a nosotros.

"Tenia razón, era una fugitiva"

Ante la realidad de que era la culpable de la muerte de su madre, ser una fugitiva y haberse quedado sola en el mundo, empezó a llorar otra vez.

—¿Otra vez llora? –Pregunto Horacio.

—Su mamá murió, sabes como se siente eso ¿No? –Contesto Gaspar.

Muchos de los héroes bajaron la cabeza, pues varios habían perdido a uno de sus padres a edad muy temprana. Los niños de la isla también se vieron incomodos, pues la mayoría no conocía a uno de sus padres.

"Y había una cosa que sabían que estarían buscando"

Cruella se quito el gorro que hasta hora no se había movido, revelando su cabello bicolor.

—¡Wow que cabello!

Los chicos de la isla soltaron una carcajada, no se esperaban eso y pensaban lo mismo cuando eran mas chicos. Los chicos de Auradon también se rieron mas discretamente.

Estella ignoro el comentario inoportuno del niño.

—Tengo que teñírmelo.

—No lo se, creo que es lindo.

Riana: Aaaw que lindo –La hija de Anita, junto con muchas otras chicas de Auradon también se enternecieron.

Reina Malvada: Si que lindo ¿No Cruella?

Los amigos de Cruella empezaron a reírse y hacer insinuaciones, Cruella no dijo nada y mejor se sirvió mas vino antes de perder la paciencia.

De todos modos, una escena después, Estella estaba frente al espejo del baño, reuniendo fuerzas para lo que estaba a punto de hacer.

"Cierto, ser un ladrón no es precisamente el sueño de una madre, pero..."

Jay: Excepto si vives en la Isla –El chico recordaba como su padre lo alentó a robar desde que era un niño– Pero me alegra que ahora ninguno tenga que vivir así.

Tomo el bote de tinte y empezó a exprimirlo sobre su cabeza.

"Ella se había ido"

Se miro al espejo unos segundos, con el tinte escurriendo por todo su pelo.

"Tranquilos, estamos empezando, aun pasan muchas cosas malas. Lo prometo"

Uma: ¿Aun mas cosas malas? –Pregunto con sarcasmo, como si lo que acabara de pasar no fuera lo suficientemente malo.

Cruella: Aun mas cosas malas –Remarco el "mas" para después tomar un buen trago de su vino.

La pequeña Estella bajo la cabeza para terminar de teñirse el cabello, pero quien se levanto, fue una Estella ya adulta quien se lavaba los dientes. Los años habían pasado.

Termino de lavarse los dientes y se miro al espejo, una bella mujer adulta y pelirroja.

Adam: Espera ¿Ya paso tanto tiempo?

Bella: Así parece.

Roger miraba a la Cruella adulta, teniendo una sensación de familiaridad, como si la hubiera visto antes.

Al salir del baño, se puede ver que el polvoriento y desolado ático se había convertido en una acogedora casa, teniendo una cama, una chimenea, una maquina de coser, incluso una televisión. No vivían nada mal.

Evie: Ahora si se parece mas a nuestra guarida –La joven sonrío con nostalgia.

—Vámonos Buddy –Un Buddy ya crecido esperaba a Estella, recostado en su cama, se habia convertido en un adorable perro marrón y peludito– ¡Es hora!

Dude: Oye Carlos –Susurro el perro que todo este tiempo estuvo sentado en su regazo– ¿Ese perro no te parece familiar?

Carlos miro a Buddy en la pantalla y luego otra vez a su perro Dude.

Carlos: Se parece a ti –Susurro su respuesta– ¿Es tu pariente?

Dude:... –El perro intento hacer memoria– Puede ser, no me acuerdo mucho de cuando era un cachorro.

"Cuando menos lo pensé, habían pasado diez años"

Horacio y Gaspar también eran adultos, mas parecidos a los de ahora.

"Podría decirse que habíamos formado un hogar"

—Horacio ¡Piensa rápido! –Estella le arrojo su sombrero que atrapo con facilidad.

—Dos minutos, es el tiempo extra –Señalo al partido que se estaba dando aun en la tele, mientras un Wink que no había crecido mucho ladraba.

"Éramos como una familia"

Aurora: Me alegra que encontrara un hogar, al menos pueden cuidarse entre ellos.

Mal: ¿No les recuerda a algo? –Mal abrazo a sus tres amigos, que pare este punto eran mas como sus hermanos, su familia.

—¡Horacio, ya déjalo! –Esta vez fue Gaspar quien lo apuro, mientras el mismo se ponía un abrigo.

"Una muy buena para..."

—¡Vístanse!

"Robar cosas"

Adam: Bueno, esto estaba yendo demasiado bien para ser Cruella –Por un segundo había olvidado que estaban hablando de Cruella, una de las villanas mas grandes.

Cruella: Estoy aquí ¿Sabes?

El ex rey sintió un escalofrió ante la fría mirada de Cruella, tomando una nota mental de cuidar mejor sus palabras con la mujer que estaría dispuesta en convertirlo en uno de sus abrigos.

Lo siguiente fue en un autobús, un Gaspar disfrazado empezó a platicar con una señora, mientras con sigilo abría su bolso.

"Muy..."

Estella disfrazada caminaba por el autobús, sacando discretamente las carteras de los abrigos de la gente y dejándolas caer al piso

"...Muy..."

Wink recogía las carteras y nadie se daba cuenta del pequeño perrito entre sus piernas.

"Muy buena"

—Aquí me bajo –Sin que nadie sospechara, Estella bajo con cientos en dinero robado, Wink también bajaba y tiro una cartera dentro de la sombrilla de Horacio, quien también estaba disfrazado.

Los jóvenes de la isla se sintieron algo envidiosos, después de todo, siendo la mayoría ladrones, todos se sentían orgullosos de ser los mejores en eso, así que ver como Cruella y su pandilla habían robado tanto sin tan siquiera llamar la atención.

Hasta Jay y Mal debían admitir que se sentían algo celosos de su habilidad. Eso explicaba porque era una mujer tan difícil de robar.

Al mismo tiempo, Carlos pensaba el porque jamás le había enseñado a robar si era una experta; ser un buen padre no era excusa porque eran villanos, y viviendo en la isla, era bastante necesario. Pensó que era porque tampoco sabia robar, pero ahora veía que ese no era el caso.

Como si no pasara nada, Estella y Gaspar bajaron del autobús. De reojo, Estella miro el cartel pegado en el autobús, que decía "House of Baroness - Liberty" y Gaspar se dio cuenta que lo miraba.

"Expandimos el negocio"

En otra escena, Horacio metió a Wink a un pequeño agujero en la pared, que era un pasadizo secreto, diseñado para que abriera la puerta del otro lado y poder escapar.

Jay: Ese es un perro listo.

Riana: Este pequeño sabe hasta robar y los cachorros solo muerden mis zapatos –La chica se lamento, recordando el millón de veces que encontró sus zapatos destrozados por los hijos de los hijos de los 101 dálmatas.

Roger: Muchos zapatos... –Se lamento al recordar el golpe en su economía por tantos zapatos rotos.

"Diseñaba fabulosos disfraces"

Paso una escena usando la maquina de coser, parecía saber exactamente lo que estaba haciendo.

"Robábamos"

Paso una escena de robo, donde Horacio y Gaspar se hicieron pasar por un taxi, con un disfraz tan bueno que nadie se percato que no eran taxis reales.

"Yo diseñaba"

Otra escena de Estella cosiendo, esta vez hasta altas horas de la noche.

"Robábamos"

Estella salió de un taxi vestida como toda una mujer roca, esta vez entraron a una joyería y mientras Wink hacia de distracción, los manos rápidas tomaban todos los collares y joyería cara.

"Diseñaba"

Otra vez Estella cosiendo hasta tarde, esta vez Gaspar le trajo un café y ella le agradeció con una sonrisa. Gaspar se fue, pero de reojo, vio que en el pizarrón donde Estella tenia notas y futuros diseños, había uno de "Liberty".

Evie: Son diseños hermosos –La joven diseñadora estaba encantada con los vestuarios– Es increíble que los diseñara sola en un ático.

Cruella no diría nada, pero se sentía alagada; pues nadie aparte de Horacio y Gaspar pudieron apreciar su arduo trabajo de ese entonces.

"Era una magnifica operación, yo hacia lo que amaba y estaba rindiendo frutos"

Esta vez se colaron en un hotel, vestida como mucama, sacando cosas de las maletas de los huéspedes ricos. Sin embargo, Estella se veía insatisfecha.

"Pero aunque la vida era buena, sentía que había algo mas para mi, que mi mamá habría deseado mas para mi"

Aurora: Ciertamente, aunque no tuviste opción y aun así haces lo que amas, tu madre hubiera deseado algo mas que solo esto.

Anita: Algo mas que ser desterrada a una isla después de todo –Murmuro para si misma, ella había estado en contra de su encierro en ese entonces, pero sus reclamos cayeron en oídos sordos.

Aunque su esposo si la escucho y prefirió no decir nada, porque el, en cambio, estaba muy de acuerdo y apoyaba activamente la idea.

Estella se sentó en la cama, mirando el horizonte, o mas bien, el enorme cartel de "House of Baroness - Liberty".

"Pero no sabia que"

—Pss ey! –Gaspar, vestido como un botones, la llamo– ¿Qué estas haciendo?

Estella salió de la habitación y Gaspar la siguió, no antes de darse cuenta exactamente lo que estaba mirando su amiga.

—Estoy aburrida –Menciono sin muchas ganas.

—¿Aburrida? ¿Es un chiste? Tengo una mini televisión –En cambio, Horacio estaba mas que contento– Había un japones dormido en la cama.

Chad: Eso parece bastante viejo –Arrugo la cara al ver el artefacto tan anticuado– Los celulares son mas pequeños y hacen mas cosas.

Horacio: Ey, en ese tiempo no existían los celulares, una mini televisión era revolucionaria –Por alguna razón, parecía personalmente ofendido por esto.

Chad, en cambio, tuvo un escalofrió, no por el villano, si no porque la idea de un mundo sin celulares era aterradora, al menos para el.

Antes de poder entrar a la siguiente habitación, el jefe de servicio se dio cuenta que estaban allí, tuvieron que salir corriendo y, para desgracia de Horacio, dejar la mini televisión.

Horacio: Mi mini televisión... –Se volvió a lamentar por tener que dejar atrás esa mini televisión, mas de veinte años después.

La siguiente escena cambio a una estela recostada en su cama, mirando todos sus recortes, en especial aquellos de Liberty, sin pensar en nada en nada mas, solo Liberty.

Hasta que Buddy subió a su cama, con un gorrito de fiesta puesto.

Estella lo miro y empezó a reír, mas en cuanto escucho a los otros dos cantar.

—¡Cumpleaños feliz, festejamos por ti, en tu día, linda Estellalalala, cumpleaños feliz!

—Conmigo, Gaspar y Wink y Buddy! –Canto al final Horacio mientras dejaba el pastel en la mesita mas cercana. En lugar de velitas, el pastel tenia una vela normal.

Hada madrina: ¡Oh, que lindo! –El hada era una gran fan de los cumpleaños, hasta el mas pequeño era adorable.

Malefica: Ya que lo pienso, ni nosotros sabemos tu cumpleaños –La fae miro a su amiga cuando noto este detalle.

Cruella: No soy muy fan de las fiestas, solo en privado. Además, a ti nunca te gustaron las fiestas en general.

Esta vez, Maléfica le dio la razón a Cruella.

Gaspar tocaba la guitarra y Horacio sostenía un pastel, Wink también tenia un gorrito de fiesta.

—Este es el cumpleaños mas bonito en... en años –Se sentó en la cama acariciando a Buddy, sintiéndose muy agradecida por tenerlos.

Cruella: Desde que era una niña –Ella recordó, su ultimo cumpleaños bonito antes de este fue con su madre... Mejor deja de pensar en eso, no quiere ponerse sentimental ahora.

—Eh, no para Judy –Dijo Horacio señalando el pastel.

—¿Quien es Judy?

—Eso no importa –Respondió Gaspar.

—No es importante, es solo que...

—Uy, Judy -Dijo Estella, al percatarse que el pastel en realidad decía "Judy".

—Tal vez tenga hambre.

Los niños de la isla rieron, obviamente era un pastel robado, pero de alguna forma seguía siendo bonito el detalle.

Estella se sentó en frente del pastel y apago su vela de cumpleaños.

—Pide un deseo.

—Gracias y gracias a Judy.

Se reía siguiendo la broma, hasta que Gaspar saco un sobre y lo puso frente a ella. Estella lo miro confundida.

—¿Que es esto?

—Esa es una oferta de empleo de Liberty en Londres, de nivel inicial.

Estella abrió el sobre, sin creerse lo que acaba de escuchar.

Evie: Espera... ¿Liberty? –La peli azul recordó sus estudios sobre historia de la moda– ¿Acaso esa no es..?

—Ay donde venden las hamburguesas ¿Cierto?

—Es la tienda departamental mas novedosa de la ciudad... ¿C-C-Como lo lograste?

Evie: No solo es la mas novedosa –Interrumpió Evie, en shock– Es la cadena de tiendas de la Baronesa.

Carlos: ¿Que? ¿Son de ella? –Por supuesto que estaba sorprendido, Cruella y la Baronesa se detestan ¿Como es que esté emocionada por trabajar en una de sus boutiques?

Lady Tremaine: Si, lo recuerdo –La madrastra de Cenicienta intervino– La mayoría de nobles conseguía su ropa de allí, incluso la mayoría de mi armario era de allí.

—Eh, solo moví mis influencias.

Sus influencias consistían en poner su currículum directamente entre las aceptadas de forma no muy legal.

Esta vez, hasta los mayores rieron por esto, de alguna forma les pareció lindo el gesto.

—Adoro Liberty –Aun así, Estella estaba encantada.

—Se que lo adoras, te le quedas mirando cuando pasamos –Y Gaspar estaba feliz porque ella estaba feliz– Eh, adorne tu currículum ligeramente, me refiero que-

—Lo hemos hecho –Intervino Horacio.

—Lo hemos hecho, todos los hacen –Dijo restándole importancia– Invente algunas referencias. Si preguntan como conoces al príncipe Carlos, di que fue en el polo y ya.

—Claro.

—Feliz cumpleaños.

Ariel: Eso es adorable –Elogio la mujer– Si ignoras la parte ilegal.

Rapunzel: Nop, aun así es lindo –Incluso Eugene había hecho muchas cosas no tan legales por ella.

—En el polo, entonces ¿Cuál es el ángulo? –Horacio resalto la ultima palabra.

—No hay un ángulo, quiero que Estella cumpla su sueño –Gaspar miraba encantado a Estalla, estando feliz por ella

Un "Aaww" se escucho de las mujeres más románticas de Auradon.

—Jaja okey... Ya en serio ¿Cuál es el ángulo?

Harry: Este tipo sabe lo que es importante –El pirata sonrió, siempre tiene que haber un ángulo.

—No hay ningún- Okey te lo diré, el ángulo es que Estella es demasiado talentosa para seguir trabajando con gente como tu y yo.

—Gracias Gaspar –Estella sonrió a Gaspar, esperando esta gran oportunidad.

—No es nada.

Audrey: Quien diría, Cruella estando agradecida y no solo eso, esta feliz de poder trabajar en una de las boutiques de la Baronesa.

Evie: Más que eso, Cruella admiraba a la Baronesa, para que al final terminaran siendo las peores enemigas.

Uma: Aun quiero saber porque.

La siguiente escena fue Estella tomando el té en Regent's Park con Buddy, Buddy tenia su propia taza.

—Es mi oportunidad, la que siempre e deseado –Estella hablaba a la fuente, era como hablar con su madre para ella– Te prometo que evitare conflictos y triunfare.

Choco su taza con la de Buddy en una especie de brindis y tomo ella misma su té, pronto será su primer día.

Anita: Eso es adorable.

Riana: ¡Yo también hago fiestas de té con los dálmatas! –Se sentía feliz de que alguien más compartiera este inusual pasatiempo, incluso si es Cruella.

Al menos ahora Carlos no se sentía tan raro por tener picnics con Dude, aunque nunca imagino que heredaría este rasgo de su madre.

Finalmente llego el día, Estella estaba frente al Liberty junto a Buddy.

"Ah~ el Liberty de Londres, era el pináculo de la moda en los setenta, tenia a los mejores diseñadores"

Evie: Eso puedo confirmarlo –Había pasado más tiempo des que esta dispuesto a admitir estudiando la historia de la moda, en especial la Baronesa y Cruella.

Estella le dio una ultima mirada a Buddy, quien no parecía muy seguro de esto, antes de entrar finalmente a su nuevo trabajo.

"Y ahora trabajaba allí"

Evie parecía encantada con la idea, mientras que Cruella tomo otro sorbo de su vino, no muy feliz de recordar esa parte.

Mirando dentro de la tienda, era como un sueño, había bolsos y joyería y mas prendas. Si te adentras mas al fondo, puedes ver a la gente trabajando, diferentes gerentes, diseñadores, costureros, gente con grandes ideas... Y hasta el fondo de todo esto, estaba Estella, lavando el piso de los baños.

Roger reprimió una carcajada, sabía que sería re prendido por su esposa, pero de alguna forma era una vista satisfactoria.

Por otro lado, los ya no muy amigos de Cruella no dudaron en reírse.

—Ah, disculpe señor –Estella llamo la atención del gerente del lugar– Tengo una idea para el escaparate.

—Te describí las funciones de tu puesto, atente a los confines de tus actividades ¿Puedes? –De forma condescendiente, antes de irse sin escucharla.

Cenicienta: Parece un jefe difícil.

Cruella: Mas que difícil yo diría irritante.

En varias ocasiones, Estella intento hablar con el gerente de sus ideas, mientras que este la rechazaba e ignoraba, una vez piso su mano por ni siquiera prestarle la suficiente atención. Una vez vio como a ella se le caían cajas, haciendo que crea que es una torpe. Estella se cansaba de esto cada día, sintiéndose frustrada con su trabajo e ignorada por su jefe. Deseaba al menos ser una de las vendedoras de afuera.

Uma sintió un escalofrío, era preciso a trabajar de mesera en el restaurante de su madre, era más limpio, pero igual de irritante.

En un momento, antes de sacar la basura, intento volver a hablar con su jefe.

—Señor solo quería decirle que soy muy buena con la aguja, podría trabajar en alteraciones.

—¿Porque estas hablando y no tallando? –Pero para el, era solo una molestia– ¿Ya limpiaste los baños según las indicaciones que te di? ¿Jabón, agua, trapear, blanquear, pulir?

Jane: Se que técnicamente es su trabajo, pero ¿No es demasiado?

Loonie: Empiezo a creer que tiene algo contra ella.

—Lo hice.

—¿En ese orden?

—Si, pero le decía que no lo-

—Hazlo.

Sin quiera escuchar, le cerró la puerta en su cara.

—Defraudare...

Para Cenicienta y Dizzy, era familiar a como era trabajar con su madrastra y abuela respectivamente. Al menos a Cruella le pagaban.

Estella, resignada y frustrada, salió a la parte de atrás a sacar la basura, encontrándose con Gaspar y Horacio.

—Ey!

—Hola –Se sentía aliviada de verlos, al menos algo bueno había pasado el día de hoy.

—Tu comida Estella.

—Buddy se acerco a ella, con una bolsa de papel en la boca.

Anita: Eso es lindo.

Roger: supongo que es considerado –Volteo a mirar a su perro, sentado al lado suyo y susurro– ¿Por que no eres como el?

Pongo: No te quejes, te conseguí novia y ahora esposa –Respondió también en un susurro.

Roger por su parte no pudo refutar esto, como venia pasando desde que inicio esta reacción, Riana, quien alcanzo a escuchar, no pudo evitar soltar una risita.

—Gracias.

Escucho un ladrido, al voltear, vio a Wink arriba de toda la basura, junto a la ventana.

—No –Reprendió Estella mirando a Horacio con molestia.

—¿Que?

—No voy a dejarte entrar por la ventana para que robes la caja fuerte.

—¿Ese no es el ángulo?

Harry: Sip, el me entiende –Con una sonrisa arrogante, se recargo en su asiento y subió los pies al asiento del frente, casualmente, el mismo asiento donde estaba sentado Peter Pan, quien no había cambiado después de tantos años.

Gil: Espera ¿Si hay ángulo o no? Estoy algo confundido.

Uma solo negó mientras se sostenía la frente con una mano.

—No hay ángulo –Respondió Gaspar.

—No hay un ángulo –Remarco Estella.

—¿Como que no hay un ángulo? ¡Vámonos Wink!

El perrito salto a los brazos de su dueño.

—No hay un ángulo –Dijo para darle un besito en la mejilla (¿Los perros tienen mejillas?).

—¡Gracias por todo. Besos Wink!

Chad: Parece que tiene sus prioridades –Bromeo al ver que el perro era el único que recibió un trato especial.

Ahora a seguir con su triste rutina, sin embargo, arrojando las bolsas a la basura, una se rompió, haciendo que la basura le caiga encima.

—¡¿Por que?!

Roger reprimió una risita antes de que su esposa lo escuchara, sus amigos villanos también intentaron reprimirlo. No era gracioso, por supuesto que no. No cuando Cruella ya lleva rato mirándolos con mala cara.

Como si no fuera lo suficientemente malo, la puerta ahora no podía abrir.

Amai: Parece que no es su día ¿Eh? –La chica comento, mientras le robaba el refresco a Carlos. Los otros VK's saltaron asustados, habían olvidado que ella estaba allí.

—Perfecto –Dijo con sarcasmo, ahora no le queda de otra que entrar por el frente.

Pero eso no era lo peor del día, no, lo peor fue pasar por el frente y mirar el escaparate, un diseño, soso, insípido y aburrido.

—Me duele que creas que eso es lindo –Le dijo a la trabajadora quien aun lo estaba acomodando.

—¿Que?

—¡Dije que me duele que creas que eso es lindo!

Evie: Ciertamente, es un diseño muy aburrido.

Chad: Al menos no puede ponerse peor.

Y como la cereza de este horrible pastel, en ese momento, el gerente salió a ver como iba el escaparate, encontrándose con Estella.

Loonie: Perdón ¿Qué decías? –Dijo mirando a Chad.

Al menos la dejo entrar por la puerta principal. Mientras se adentraba, daba pequeños comentarios a lo que los clientes veían y probaban, bastante acertados en realidad.

Finalmente, se encontró con el gerente cara a cara, a quien parecía que le dolía el solo mirarla.

Uma: Alguien está en problemas.

Jane: No entiendo porque, si no hizo nada malo, solo le cerro la puerta.

—Creo que no sabes que tienes una rebanada... de banana en la mejilla –Hablaba como si le costara, casi pareciera que le da asco.

Estella se toco la cara en busca del pedazo.

—Del otro lado.

Cuando la encontró, se la llevo a la boca sin pensárselo, cosa que al gerente le dio asco el solo ver.

Adam: Ew ¿Por qué lo comiste?

Cruella: ¿Que? Estaba en buen estado.

Mal: Estaba mejor que la mayoría de comida que enviaban a la isla.

A Ben le dio un escalofrió al recordar cuando descubrió eso ¿Cómo lo habían pasado por alto durante tanto tiempo?

—A mi oficina. Ahora. Rápido, rápido, rápido.

Estella se fue y al hombre parecía que le costaba mantener la paciencia.

Ya en su oficina, lo primero que hizo el gerente fue abrir su vitral donde tenia guardado un buen licor.

–Antes de despedirme debo decir algo –Antes de que pudiera continuar, su jefe la interrumpió con un carraspeo.

—Limpia mi oficina, de arriba a abajo, y eh, cuando vuelvas mañana, no vuelvas a olvidar jamás tu cerebro –Miro con desdén a Estella, con una copa en la mano y con la poca paciencia que le quedaba.

Hada Madrina: ¡Que grosero! Esa no es forma de hablarle a tus empleados.

—Eso estuvo incomodo –Murmuro para si misma aunque el la escucho– Le puedo apostar que oculto debajo de ese lindo traje, estrecho y extremadamente almidonado, hay un gentil hombre que le dará otra oportunidad a la chica lista.

Uma: ¡Eso! ¡Pon a ese tipo en su lugar!

Los chicos de la isla empezaron a tener mayor respeto por Cruella, y al mismo tiempo sintiéndose como idiotas por siquiera intentar hacerla victimas de sus bromas

El hombre la miro ya sin paciencia, antes de decir nada, se bebió todo su trago y dejo que la bebida surtiera efecto en su paciencia.

—A tallar, hazlo.

Las horas pasaron, ya era muy tarde y no quedaba nadie en la tienda, excepto Estella, quien estaba terminando de limpiar la oficina. Se sentía extremadamente agotada y frustrada por el día tan horrible de hoy, cuando algo se cruzo en su vista: El vitral con el licor.

No le vendría mal una copa o dos.

Carlos: Oh no, no me digas que va a... –Carlos tuvo un mal presentimiento, su madre siempre fue una mala bebedora, poniéndose borracha hasta ser fácilmente irritable y, en algunos casos, violenta.

¡Pero vamos! No esta tan loca para ponerse borracha en el trabajo después del peligro de ser despedida ¿Verdad?

Unos minutos después, llego en ascensor a la tienda, en una mano, tenia una bolsa de basura llena de papeles, en la otra, toda la botella de licor, al que procedió a tomar un buen trago directamente de la botella.

Oh mierda. Si lo esta.

Jafar: Creo que no es buena idea embriagarse al poco tiempo de casi ser despedida.

Cruella: Después de ese día de mierda ¿Qué mas podía hacer? –Contesto mientras se terminaba su copa, solo para poder servirse mas.

Hades: Emborracharte fue la peor idea que se te pudo ocurrir –Respondió a modo de regaño y algo para molestarla.

Pero en lugar de molestarle, ella se quedo pensando unos segundos.

Cruella: Suponiendo lo que eso causo después, puede que tengas razón.

Ninguno de los presentes entendió a lo que se refería, entonces mejor seguirían viendo.

Caminaba estando ya borracha por la tienda, cantando "This boots are made for walking" que sonaba en los altavoces. Antes de sacar la basura a la calle, se encontró con ese aparador que la lleva molestando todo el día.

Gaspar: Y según tu no estabas tan borracha –Aprovecho para reclamar lo que ya había pasado hace años.

Cruella: Hay por favor, no estaba tan borracha.

Después de darle otro trago a la botella, entro al aparador, tirando una mesa con un adorno de cristal, por supuesto que ahora esta roto.

Gaspar: Si claro, se nota –Sonrió victorioso a Cruella, había ganado esta.

Cruella: Okey, tal vez estaba un poco borracha.

Asegurándose que nadie este alrededor, miro al maniquí de aspecto simple y aburrido.

—Es que no te puedo dejar así –Le hablo al maniquí. A estas alturas, ya estaba muy ebria– Seria muy cruel.

Evie: Estoy segura que yo lo voy a gradecer.

Audrey: Y yo también.

Le dio un ultimo trago a la botella y tiro el sobrero del maniquí, lista para hacer magia con el y dejarlo maravilloso.

Este es el inicio del declive, al menos, así piensa Cruella.

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NUEVO CAPÍTULO MIS NIÑOS! Todo suyo, devorencelo.

Si, tardo un tiempo, pero es más complicado escribir esta historia :'3

¿Que les pareció? ¿Valió la pena?

Gracias por el apoyo que le están dando a esta historia, intentaré lo mejor y tardar menos en sacar capítulos.

Espero que les este gustando la historia, cuídense, tomen agua, bye~