Todo lo que quedaba de día transcurrió con tranquilidad. Hoy se supone que tomaría mi falta para realizar un día de limpieza, pero papá decidió hacer todo el trabajo en forma de disculpa. De igual forma, limpié las habitaciones sin que se diera cuenta y tuve un regaño por parte de él cuando se enteró. Se molestó tanto que me dejó que limpiara la cocina solo por no hacerle caso, solo fue una limpieza rápida porque ya tendría que ir prepararme para ir a comprar .

Normalmente realizo la compra del mes en un día en especial donde el supermercado ofrece 50% de descuento a alimentos ya rebajados, y ese día en especial, era hoy. Es una estrategia de venta, lo sé, pero de igual forma no puedo perder la oportunidad de ahorrar mucho dinero.

—¡Saldré a comprar! — tomé lo más rápido que pude mi cámpera.

—¿VOS NO VAS A NINGUNA PARTE A ESTA HORA!—me gritó desde el segundo piso, aún desde abajo podía oír sus dedos tecleando en la computadora.

—¡HOY HAY OFERTAS!

—¡NO ME IMPORTA! ACÁ NO FALTA DINERO, VAS MAÑANA CON O SIN OFERTAS.

Subí las escaleras lo más rápido  que pude, pisando con fuerza y chocandome con la puerta al entrar a la "oficina" improvisada de mi padre.- Por favor- supliqué, no puede dejar pasar este tipo de oportunidades- con el dinero ahorrados nos iremos a Londres lo prometo- seguí suplicando. Es un poco vergonzoso actuar así, pero es lo que me hacen las ofertas y el ahorro.

—Es muy tarde para andar jugando por ahí.  —dirigió su mirada hacia mí, su aura de padre responsable sale justo cuando no la necesito.

—¿No deberías hacerte una auto crítica con eso? —me crucé de brazos, dispuesto a discutir. 

—No lo voy a discutir, no es no.—pasó totalmente de mi pregunta poniendo sus ojos nuevamente sobre la pantalla.

No pasó ni media hora hasta que cayó dormido sobre el teclado, dejando una linea de z en mayuscula en word. No soy tan fuerte como para llevarlo a su pieza, solo arrastrandolo podría pero no quiero despertarlo. Terminé dejandolo en un cama improvisada del sillon, dos almohada, dos sillas a los lados -para que no se caiga, siendo que se mueve mucho- y una frazada térmica. El suele ser muy fríolento.

Ultimo que quisiera es tener un castigo y ni siquiera haber podido comprar nada. Hace mucho frío a esta hora, me arrepiento de no haberme puesto guantes, así que empujo lo más que puedo la remera polar hacia mis puños y luego meto los mismos en mi buzo. Sigo teniendo frío, pero al menos tomé precaución de congelarme las manos.

Me habría gustado ir caminando pero no podría cargar las bolsas, además es más facil llevar el helado y los congelados. No suelo comer helado, le gusta mucho a Juho hyung, así que me encargo que cuando viene a ayudar o a visitarme, tengamos al menos un poce de chocolate solo para él. Lo mismo para Seokwoo hyung, siempre que lo visito insiste en quedarme a comer, estoy muy agradecido con el , conseguiré galletitas con formas de animales. Sus favoritas son las que tienen forma de jirafa, así que me encargo de separarlas especialmente cuando papá quiere comerselas. A Papá casi no le puedo comprar nada, a él le gusta todo, así que le conseguiré su balsamo de fresa favorito, tiene ciertos gustos "caros" ¿vieron esas personas que suelen ir a lo mas caro en la tienda sin saberlo? Bueno, así. De igual forma, casi nunca se compra cosas para él, por más caro o barato que sea...

Pude ver las luces del supermercado cerca, estaba lleno. No importa, había terminado todo mis déberes y esto practicamente sería mi regalo de hoy por ser tan buen hijo. Me resisto a balancearme con el carrito al entrar, no suelo tener ese tipo de comportamiento, tal ves es la emoción.

Hice las compras normales: lacteos, pastas -en especial arroz, había oferta de 2x1 y este mismo rebajado a la mitad, terminé comprando 8 bolsas-, verdura no, ya que en la verdulería es mejor el precio y la calidad, carnes -dios, como lloré, nunca volvería a ver precios tan hermosos-, jugos, etc.

Iba juntando dos packs de agua con 6 cada uno cuando me dí cuenta que el carrito estaba lleno. No me importa mucho el precio, tengo anotado en el cuaderno el costo de cada cosa y no estoy ni siquiera cerca de pasar el monto de mi tarjeta.

Aún me quedaban artículos de limpieza que comprar cuando la ví. Una mascarilla, de esas que miro despectivamente en una farmacia por su precio. Presiento que a papá le encantará, espero que funcione como disculpa por escaparme... ¡tiene que hacerlo! Estas cosas valen una fortuna.

Ya llevaba aproximadamente una hora y media ahí, no me preocupa, Inseong tiene el sueño pesado, pero por si acaso mantendré el celular encendido.

No me había girado ni un segundo, y ya veía alguien metiendo la mano en mi carrito.

—EH ¿QUÉ HACES?—el idiota me miró asustado, yo estaba dispuesto a pegarme por esa mascarilla.

—Tranquilízate, amigo. —dijo levantando las manos en son de paz, pero aún con ella en una de sus manos.

El chico peliazul movió su fleco para atras- mira, en serio necesito esto- suplicó.

—No soy tu amigo, te voy a denunciar.  —amenacé.

—¿Con el guardia de seguridad? —preguntó asombrado, entre la risa y la confusión.

—Soy capaz. —dije protegiendo mi carrito.

— Aún no lo compraste.

— Es robo igual.

—POR FAVOR, MI PADRE LO NECESITA, Y TU TIENES LAS PIEL PERFECTA.  —lloriqueó

—No es para mí imbécil.  —me tapé el sonrojo, más que por el reproche/halago, la vergüenza de pasar esta situación en una zona transitada.

—Lo siento, pero en serio lo necesito, por favor. — volvió suplicar

—Es solo una mascarilla. —¿qué le pasa a este imbécil?

—¡¿ENTONCES POR QUÉ NO ME LA DAS?! —intentó arrebatármela.

Bueno, tampoco la necesitaba tanto...

NO, SI LA NECESITO.

—¿Te podes calmar?—pregunté fuerte al borde de la cólera, ya es decir mucho ni que a los niños aguanto, menos a este.

— ¿Qué puedo hacer para que me la des?— preguntó nervioso sosteniendo fuertemente su camisa.

— Nada.- contesté tranquilo.— por favor, vete.

—No, lo siento, en serio necesito que me la des.—se me está haciendo tarde y ahora mi preocupación porque Inseong se despierte se incrementó ¿en serio este chico no planea irse?

—En serio, ya me tengo que ir.—dije alejándome lentamente, pero el agarró la parte delantera del carrito sin dejarme ir. Ya lo habría golpeado de no ser que es un lugar público y soy significativamente más pequeño que este teñido.

—Y yo, en serio, necesito eso.— qué pesado.

—¿Para qué mier-- —me corregí —¿para qué lo quieres? —ahora sí pregunté correctamente.

—Es para mi padre. — dice esperando algún signo de empatía.

—Qué curioso, también es para mi padre. — sonreí — entonces entenderás como se siente, gracias por entender. — sonreí otra vez falsamente, me quiero ir de aquí.

—No te dejaré ir hasta que me la des. — estoy seguro de que dice la verdad, no estoy dispuesto a comprobarlo, ya hay mujeres de edad y algunas otras personas observando atentamente mi situación.

—Toma. — se la entregué seco, no solo lo maté con la mirada, lo reviví, y lo maté de nuevo.

—¡MUCHAS GRACIAS!— grita, rodea mi carrito y me da un efusivo abrazo. Me esfuerzo para contener las ganas de encajarle un golpe como la gente.

—Ok, suéltame. — lo apartó de un tirón con fuerza, esperando que se caiga detrás de alguna linea de productor pero, mierda, que es fuerte. Y aún así sigue sonriéndome.

No pienso comenzar un plática con este sujeto. Así que empujo mis cosas hacia otro lado, enojado y con un puchero, la necesidad de hacer un berrinche y tirar todo lo que veo no se va de mi mente, pero resisto.

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Hola, ¿quieren un dato curioso? este capítulo era más largo (el doble de lo ya escrito), pero como la chingada no terminaba, pasé la otra mitad al próxima capítulo. Cuando lo termine, lo subo, ahr a nadie le importaba, no sé por qué sigo viva. Nadie lee esta wea pero conste en acta que me esfuerzo en escribir :')