▹memory
∵CHAPTER FOUR | WARRIOR∵
❝RECUERDO❞
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—... puede ser peligroso, aún más que un penitente.
—¿Qué es más peligroso que un penitente?—Mi voz hizo a los jóvenes sobresaltarse, cuestionando sobre lo único que había escuchado a Newt decir.
El rubio miró al Novato, y él le devolvió la mirada. Se podía leer "¡¿qué le digo, Larcho?!" en los ojos de Newt mientras en la mirada del otro decía "yo qué sé, es tu amiga no la mía". Los hombres eran tan fáciles de leer que podría adivinar sus pensamientos con solo una mirada, no sabían disimular. Sin embargo, ahora moría en el interior por haber podido escuchar un poco más de aquella conversación.
—Meterse contigo—respondió Newt de repente. Asentí mientras bajaba las comisuras de los labios como si estuviera de acuerdo, luego me moví para pasar una pierna sobre el tronco y luego la otra, quedando sentada en el tronco a la derecha del Novato—. Tienes más conocimiento en medicina que todos aquí, podrías matarnos sin dejar evidencia.
—Eso es cierto—contesté dejando salir una risa, pero mi mirada se fue directamente al vaso que sostenía Newt—¿No te lo vas a tomar?
Él negó con una mueca, usualmente un par de tragos era suficiente para él, por lo que estiró el brazo y lo agarré. No pasó ni un minuto y ya me lo había tomado todo sin toser ni torcer el rostro con muecas de disgusto. Estaba acostumbrada y cuando se bebía muy seguido, el gusto dejaba el sabor extraño de lado y se hacía normal beberlo de vez en cuando.
—Oye, tú estabas con Gally cuando lo inventó, ¿por qué no nos dices lo que tiene?
Ambos me observaron mientras fingía pensar si les decía lo que contenía, pero la verdad era que ni siquiera lo recordaba. Lo único que me acordaba era de mí quejándome por todos y cada uno de los ingredientes que mi amigo le agregaba y de él quejándose también pero de mí, pues no me callaba y él comenzaba a fastidiarse.
—Porquería—resumí encogiéndome de hombros.
El rubio rió conmigo, mientras que el Novato sonrió de lado al vernos pasarla bien. Y es que parecía que Newt y yo nos conocíamos de toda la vida y se notaba el ambiente tranquilo cuando estábamos juntos, por lo que me solía preguntar siempre si él y yo éramos tan amigos cuando vivíamos en las instalaciones de CRUEL. No había sido así desde el inicio a pesar de que fue él quien se encargó de sacarme del elevador cuando llegué, muy contrariado murmuró un "bienvenida al área" y no supe más de él por varios días. Tiempo después confesó que presentía que en el pasado no había sido bueno con las chicas y temía hacerme sentir peor. Aún recordaba sus mejillas sonrojadas cuando me lo dijo y como se rascaba el cuello con timidez.
—Hoy hiciste suficientes preguntas—le dijo Newt al Novato, preparándose para levantarse—. Vamos, se supone que eres el invitado de honor.
Thomas comenzó a negarse mientras Newt se levantaba bajo la mirada de nosotros dos, sacudiéndose la tierra que se había quedado en el pantalón, asegurando aún que debía dar una vuelta con el nuevo para que conociera un poco a los habitantes. Pero al ver que quizá yo estaba allí para hablar con él, como siempre hacía con los novatos, me señaló con el dedo índice.
—Tráelo.
—Sí, señor—bromeé elevando una mano a la altura de la frente para hacer un saludo de manera militar. El rubio se alejó a paso relajado con las manos en los bolsillos, y cuando me aseguré de que estaba lo suficientemente lejos, bajé la mirada hacia el castaño—¿De verdad no recuerdas nada?
La verdad era que solía dar espacio a los nuevos para que se pudieran acostumbrar al lugar sin incomodidad y que cuando quisieran, se pudieran abrir sin que nadie estuviera allí de intenso haciendo preguntas. Pero me picaba la curiosidad de saber qué hacía mi viejo amigo y el favorito de CRUEL allí adentro y si Paige le había dejado al menos un poco de recuerdos como a mí.
—Lo he estado intentando todo el día pero lo único que me da es dolor de cabeza—murmuró perdiéndose en sus pensamientos con su mirada puesta en las penumbras que se encontraban frente a él.
—Sí, es normal, nos pasa a todos los primeros días—comenté sin importarme si mi voz delataba lo decepcionada que me sentía. Tragué grueso con temor de molestar al chico por querer insistir—¿No tienes ni siquiera como una... una sensación de que ya los habías visto?
El castaño frunció el ceño y giró su cuello hacia mí.
—¿Haberlos visto antes? ¿De dónde?
Solté un suspiro.
—No lo sé, ¿como un dejavú?
Él frunció su ceño y regresó a su posición original, viendo a lo lejos. Nunca había querido tanto poder meterme en la cabeza de alguien, porque aunque sabía que en la de él existían muchas preguntas, necesitaba saber qué pasaba por allí. Deseaba saber el tipo de información que CRUEL había borrado y si tenía recuerdos disfrazados de pesadillas.
—¡Pero de qué hablan tanto ustedes dos!
La voz impaciente de Newt me hizo reír, su acento se marcaba de una manera graciosa cuando se molestaba. Me puse de pie riendo y sin pensarlo mucho, agarré al Novato de la mano para ayudarle a levantarse. Lo arrastré hacia la fiesta mientras él murmuraba "le dije a Newt que no hace falta presentarme a todos".
No iba a mentir, sí estaba utilizando todo aquello como excusa para tener el más mínimo contacto con él. Mi mente me gritaba "¡aléjate de él, piensa en Riley!", porque su cercanía solo me provocaba desesperación por hablar, por decirle que deseaba que me recordara como yo a él (a pesar de que no todo lo recordaba), pero ahí, en ese momento, agarrarlo de la mano y arrastrarlo conmigo hizo que todo desapareciera por unos segundos. El miedo, la confusión, la furia... la soledad.
—¡Eileen!
Me detuve de golpe y Stephen igual por consiguiente. Al buscar quién me llamaba, me encontré a Alby que me miraba a lo lejos junto a Clint y Jeff, los otros mediqueros. Con un movimiento de cabeza me hizo entender que me quería con ellos, luego se giró hacia mis compañeros y con los brazos cruzados sobre su pecho siguió hablando mientras los otros dos asentían sin decir ni una palabra.
—El jefe me llama—dije confundida, soltando la mano del novato fingiendo que no me había olvidado de dejarle—. Que te diviertas.
Sin esperar respuesta me dirigí hacia Alby con rapidez, no deseaba una reprimenda de su parte por ignorarlo. Crucé el Claro a gran velocidad, casi corriendo, pues él se había alejado lo suficiente para que su conversación no fuera escuchada. ¿Qué hicimos ahora?, me cuestioné confundida.
—¡Hey!—saludé cortando la charla, sonriendo a más no poder para ocultar un poco mi nerviosismo. Los chicos me respondieron con una sonrisa de lado, parecían relajados pero atentos al mismo tiempo—¿Me necesitabas?
—Quiere saber cómo está Ben—contó Jeff, apretando los labios al sentir la tensión sobre el tema.
—¡Oh!
—Pero como dijimos ya, se encuentra casi en la última fase—comentó Clint de inmediato, como si yo les fuese a regañar—. Estamos dando todo lo que podemos.
—Lo sé—aclaró Alby, negando con su cabeza al mismo tiempo con una mano masajeando sus sienes —, no cuestiono su trabajo. Solo necesito asegurarme de que cada uno de nosotros nos encontremos bien.
—Dentro de lo que cabe—murmuré casi para mí misma, sabiendo bien que "estar bien" no era un estado común en aquel lugar. Alby me miró con una ceja arriba—. Él está bien dentro de lo que cabe, las últimas veces que lo hemos checado ha estado durmiendo tranquilo pero parece quejarse en medio de aparentes pesadillas.
Los otros dos asintieron dándome la razón.
—Cuando despierta parece estar en un tipo de trance pero está tranquilo—argumentó Clint—. Quién sabe, quizá y lo logremos esta vez.
¿Será que sí? ¿Y si encontrábamos la manera de sobrevivir a la picadura de un Penitente? No. Eso era imposible, nunca había escuchado sobre eso cuando vivía en las instalaciones de CRUEL. Pero... ¿y si Ben resultaba inmune? ¡Eso nos podría sacar de aquí!
Mis pensamientos se construían a gran velocidad dejándome fuera de la conversación. Alby terminó con algunas advertencias y se marchó, los chicos me preguntaron si los acompañaría y solo pude negar con mi cabeza porque una semilla de esperanza fue sembrada en mi corazón ante las palabras y emoción de Clint. Y todo me hizo pensar, ¿y si Stephen estaba allí porque todo se acabaría pronto?
Me giré sobre mis pies y lo busqué con la mirada hasta encontrarlo caminando con Newt mientras el segundo le presentaba varias personas y PUM, una punzada apareció en mi cabeza... y todo se reprodujo como una película. Por fuera quizá solo parecía que estaba allí de pie mirando a la nada mientras todos disfrutaban de la fogata, pero dentro de mi cabeza, un recuerdo se hizo paso en mi mente y todo comenzó a caer en su lugar.
Era una fiesta, o eso parecía, en uno de los pasillos más lejanos de las instalaciones de CRUEL. Todo era blanco, el piso, las paredes, el techo y nuestros uniformes también. Estaba rodeada de personas pero por más que intentaba reconocer sus rostros, no sabía quiénes eran y en la búsqueda de algo o alguien que me resultase familiar, a lo lejos (así como estaba pasando en el presente), hallé a Stephen. Hablaba a gusto con una chica castaña, ambos parecían muy de acuerdo y asentían con sus cabezas e incluso reían un poco.
Hasta que él dejó de mirarla. Parecía que buscaba algo entre el grupo de personas que bebían y bromeaban entre ellos, pero de pronto, su mirada se detuvo en mí. Era una mirada distinta a la del Stephen del Laberinto, el Stephen de mi recuerdo parecía muy seguro de sí mismo, no titubeaba al hablar ni al actuar y tenía bien levantada su barbilla en muestra de la seguridad que tenía de sí mismo.
Levantó la mano y la sacudió en modo de saludo, pero en mi recuerdo todo se veía tan borroso y yo me movía tan extraño que presentía haber bebido bastante alcohol aquel día. Por un momento, sentí que me iba al suelo hasta que alguien me sostuvo y me sacó del lugar. Yo balbuceaba cosas sin sentido y cada una de ellas, la persona que me había sacado, me respondía con paciencia y tranquilidad.
"Este lugaaar pa-parece un laberrrinto", dijo mi yo del recuerdo arrastrando las palabras.
"No deberías hacer chistes así", comentó una voz masculina, notándose que su intención no era retarme puesto que hablaba con dulzura, "así como no deberías beber tanto".
Me arrastré un rato más hasta que encontré una ventana que daba hacia un laboratorio. Las luces del laboratorio estaban apagadas por lo que pude ver con claridad mi reflejo y al ver quién estaba a mi lado, me sorprendí cuando vi a Stephen sujetándome fuertemente de los hombros para no caerme. Al instante, me volteé hacia él y...
Le grité.
¿Por qué mi yo del pasado le gritaba tan furiosa? ¿Había pasado algo entre el momento que le miré y el momento que le grité, o solo era bipolar? No entendí pero cuando salí de mi ensimismamiento, dejando de lado el recuerdo tan extraño, me sentí enojada hacia Stephen, confirmando que algo había roto nuestra amistad antes de yo ser enviada al Laberinto.
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Salí de la cocina con sigilo, la fiesta me había dejado agotada, pero el hambre que tenía era inmenso, quizá más grande que el mismísimo Laberinto. Me conocía demasiado bien, sabía que si me acostaba sin comer algo, no podría dormir en absoluto y además de eso, mi estómago haría sonidos horribles. Por lo que, me metí a la cocina por la única ventana que había, y comí del guisado que había quedado del almuerzo. Sartén no se enojaría conmigo... puesto que no tenía porqué saber que había sido yo la ladrona de comida.
Dando leves palmadas a mi estómago lleno, llegué a mi cabaña que compartía con Chuck. Antes de su llegada, es decir, hacía un mes exactamente, había dormido sola por dos años y la verdad era que ya me había acostumbrado, sin embargo, tener un poco de compañía no estaba mal. Aunque aquel niño caía dormido al instante que tocaba la almohada, por lo que era prácticamente como estar sola. Pero cuando le había dicho a Alby, hacía un mes, que no me importaría compartir cabaña con el Novato, osea Chuck en ese momento, jamás pensé que me terminaría enviando al nuevo Novato de este mes.
Al empujar la puerta, vi a Chuck quejándose con el Novato porque no estaba atando la hamaca como él le estaba diciendo.
—Tienes que hacer un nudo más fuerte de ese lado—dijo el mayor haciendo un nudo de su propio lado.
Chuck negó moviendo su dedo índice de un lado al otro.
—Tengo más experiencia que tú... un mes para ser exactos, pero al final de cuentas es más experiencia en hamacas que la que tú tienes.
Aclaré mi garganta para interrumpir, ambos dieron un brinco por el susto que se habían pegado, lucían como si les hubiese atrapado haciendo algo malo.
—¡Eileen!—saludó el niño con felicidad— Alby me dijo el Nova... ah, cierto—soltó un risilla—, que Thomas podría dormir con nosotros ya que hace un mes duermo yo también aquí.
Mi boca se abrió y se cerró un par de veces, no sabía ni qué decir. Recordé lo incómodo que fue para mí estar cerca de Thomas en la fiesta por haber tenido un flashback sobre él en el que yo cortaba con nuestra amistad y ahora resultaba que debía compartir techo con él.
—Si te incomoda le puedo decir a Alby que me busque otro lugar donde dormir. —Thomas se apresuró en agregar.
Sí. Sí, me incomoda.
—No, no me incomoda —Sacudí ambas manos al ver que el chico se alejaba de la hamaca con intenciones de marcharse—. No hace falta, además, ya es muy noche y debemos descansar.
Me apresuré en acostarme después de quitarme las botas y ponerme la única sudadera que tenía, aquella que tenía puesta cuando había sido enviada. Thomas terminó de amarrar la hamaca él solo y en silencio, pues Chuck había asegurado que estaba perdiendo la paciencia y que Thomas, definitivamente, no había nacido para acampar. Al par de minutos de haberse acostado, sus ronquidos llenaron el lugar.
Mirando la pared de la cabaña escuché cómo terminaba de amarrarla bien y cuando se sentó para probar si resistía y si no se caería en cuanto él se acostara. A los minutos, le oí quitarse los zapatos y acostarse para soltar un suspiro de alivio por al fin poder descansar. Mi rostro se dejó llevar y sonreí. Sonreí porque aunque mi yo del pasado estaba furiosa con él, mi yo del presente no quería mentir y aceptaba el hecho de que tenerlo cerca me inquietaba pero me daba paz al mismo tiempo. Y por primera vez me dormí tranquila.
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¿Les soy sincera? Escribir esta historia se me está complicando mucho.
Díganme, ¿Thomas o Newt?
Love u all!
WM
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