Días después.

La respuesta de Daelin Proudmoore había sido afirmativa, Kul Tiras se uniría de nuevo a la alianza para poder enfrentar a la amenaza que eran los muertos vivientes, eso alegro a Jaina, y le habría encantado quedarse unos días en su tierra natal, pero un ataque de los muertos vivientes causo que el grupo tuviera que regresar a Lordaeron, aunque Jaina por alguna razón se sentía intranquila, aunque en estos días los muertos vivientes habían desaparecido como por arte de magia.

-¿Que ocurre Jaina?- Le pregunto el pelirrosa a la rubia.

-Me preocupa Arthas... Lo ultimo que supe de el es que se dirigió a Northrend, y eso fue hace unas semanas- Dijo Jaina pensativa.

Natsu se quedo pensando con respecto a eso, el tenia un mal presentimiento, presentimiento que solo incremento cuando las campanas de Lordaeron empezaron a sonar.

-¿Que esta ocurriendo?- Se pregunto Natsu al escuchar las campanas.

-¡El príncipe Arthas ha regresado!- Fue el grito de algunos de los habitantes de Lordaeron, los cuales se dirigieron a la calle principal del reino para ver el regreso de su príncipe.

La rubia se alegro por el regreso de Arthas, mientras que el pelirrosa aun seguía con ese presentimiento.

-Jaina, creo que deberíamos espiar un poco- Dijo el pelirrosa.

-¿Espiar? ¿Te preocupa algo?- Pregunto la maga algo confundida.

-Llámalo instinto, usa tu hechizo de invisibilidad y entremos a la sala del trono- Dijo con seriedad el hijo de Igneel.

La rubia tenia dudas, pero decidió hacerle caso al Dragon Slayer y uso su hechizo para que ambos entraran la sala del trono.

***********************************************************************************************

Minutos después.

Jaina y Natsu estaban ocultos en la sala del trono, ambos pudieron observar como el príncipe de Lordaeron entro acompañado por dos hombres.

El pelirrosa podía detectar que el príncipe no era el mismo, pero lo que lo puso en alerta fue la espada que llevaba, esa espada emitía un tremendo olor a muerte que le desagradaba al hijo de Igneel.

Therenas estaba felicitando a su hijo, pero este se levanto, se quito la capucha que llevaba y mostro su cabello el cual ahora era blanco, este se acerco a su padre mientras que sus acompañantes se deshacían de los guardias reales.

-¿Que es esto? ¿Qué estas haciendo, hijo mío?- Pregunto Therenas alterado por lo que posiblemente planeaba hacer su hijo.

-Destronándote, padre- Respondió Arthas, preparando su espada para matar a su padre.

Jaina no podía creer lo que estaba presenciando, quería detener al príncipe, pero su cuerpo no respondía.

Antes de que el príncipe matara a su padre un puño en llamas lo golpeo en todo el rostro, mandándolo contra una pared, el hechizo de Jaina se deshizo, Arthas miro con furia a quien lo había golpeado.

-Joven Natsu- Dijo Therenas sorprendido al ver que el pelirrosa lo había salvado.

-¡Dragneel!- Grito con furia Arthas al ver al pelirrosa, también noto la presencia de Jaina, pero su furia hacia Natsu era bastante grande como para prestarle atención a la maga.

La maga por su parte estaba sin saber que decir, ese no era el Arthas que ella conocía, ese no era el príncipe del que se había enamorado.

-¿Enserio eres tan desgraciado como para intentar matar a tu propio padre?- Pregunto con seriedad el pelirrosa.

-¿Y que si así fuera? Este reino debe caer, y de sus cenizas surgirá una nueva orden, que hará temblar los mismos cimientos del mundo- Dijo Arthas sin ningún remordimiento por lo que trato de hacer.

Therenas veía a su hijo con decepción y tristeza, mientras Jaina trataba de contener las lagrimas,  ella se acerco al ahora peliblanco.

-Arthas, no se que te ocurra, pero sea lo que sea, déjame ayudarte- Dijo Jaina lo mas calmada que pudo, quería quería creer en Arthas, que esto era algo en lo que ella podía ayudarlo.

Por un instante, Arthas vacilo, pero ese momento de vacilación fue muy breve, rápidamente trato de matar a Jaina apuñalándola con su espada.

-No necesito que me ayudes Jaina, simplemente necesito que te unas a mi ejercito- Dijo Arthas bastante decidido.

Justo antes de que la espada atravesara a la rubia, esta fue apartada por el pelirrosa, este tenia sujeta la hoja de la espada con su mano cubierta de fuego.

-Arthas...- Dijo la maga en shock, el enserio iba a matarla.

-Ese hombre ya no es al que conocías, joven Jaina, ese ya no es mi hijo- Le dijo el rey Therenas a la maga.

Natsu pudo escuchar afuera los gritos de la gente, podía sentir el tremendo olor de la sangre.

-Jaina, llévate al rey y evacua a toda la gente que puedas... Este maldito acaba de traicionar a su propio reino- Dijo con enojo el Dragon Slayer, haciendo reaccionar a la maga. 

Arthas trato de golpear a Natsu, pero este se alejo rápidamente.

-¿Que hay de ti?- Pregunto con preocupación la maga, tenia miedo de que algo le pasara al pelirrosa.

No recibió respuesta ya que Natsu uso sus llamas para repeler lo que parecía ser un anillo de energía de color verde.

-No te preocupes por mi Jaina, te veré después, lo prometo- Dijo el pelirrosa, sin apartar la vista del peliblanco.

-Mas te vale...- Dijo Jaina mientras salía del lugar junto con el rey, los que acompañaban a Arthas iban a ir tras ella, pero el pelirrosa creo un muro de fuego que les impidió el paso.

-Ustedes no se van a ir de aqui- Dijo con seriedad el pelirrosa.

-¿Enserio crees que puedes vencerme, imbécil?- Le pregunto Arthas al hijo de Igneel con burla.

-Si peleara enserio contra ti, no me durarías ni 5 minutos, podrá sonar arrogante de mi parte... pero no eres digno de ver mi máximo poder- Dijo con seriedad el pelirrosa, aunque eso ultimo había sido un golpe fuerte al orgullo de Arthas.

-¿¡Me estas subestimando!?- Pregunto con enojo el peliblanco. 

-Solo te estoy diciendo la dura y cruel realidad para ti, si yo peleo enserio, creo que muy pocos me darían pelea- Dijo Natsu, eso enfureció aun mas al peliblanco, el cual sin perder el tiempo se lanzo al ataque.

El peliblanco trato de cortar al pelirrosa, pero este simplemente lo esquivo, sus acompañantes tambien trataron de atacar, pero el hijo de Igneel esperaba eso.

-Karyuu no Houko! (Rugido del Dragón de Fuego)- Natsu lanzo un poderoso torrente de llamas de su boca que impacto a los hombres de Arthas.

El peliblanco nuevamente ataco con magia al pelirrosa, pero este no tuvo ningún problema en esquivar el ataque de nueva cuenta.

-¡Voy a matarte aqui y ahora, y después de eso me encargare de Jaina!- Grito con enojo Arthas.

Ese comentario hizo que el pelirrosa mostrara un rostro de odio puro.

-Tu no te vas a acercar a Jaina, estarás muerto antes de que eso ocurra- Dijo con odio el pelirrosa.

-Voy a disfrutar ver como la vida se va de los ojos de Jaina y como ella se une a mi ejercito después de eso- Dijo con locura el peliblanco.

Eso fue suficiente para que Natsu fuera rodeado tanto por sus llamas como por algunas llamas negras.

-Espero que en el inframundo te tengan piedad... ¡Porque yo no te la voy a dar! ¡Modo Kokuenryū! (Modo Dragón de llamas Negras)- Grito Natsu.

No le iba a mostrar todo su poder a Arthas, pero se encargaría de mostrarle que no era buena idea hacer enojar a un dragón-

***********************************************************************************************

Y bueno, hasta aqui el capitulo, espero que sea de su agrado.

Si, yo se que me tarde, y lo siento, pero no tenia ideas para escribir en esta historia hasta que se me prendió el bombillo y surgió este capitulo.

Como ven, los acontecimientos algunos se mantienen igual, pero algunos ya están cambiando aqui, y se viene un primer enfrentamiento entre Natsu y Arthas, que espero me salga bien.

Tenemos nueva portada en la historia, así que por favor déjenme sus opiniones y sus comentarios.

Y sin mas que decir...

SAYONARA!!!