Los muertos vivientes ganaban cada vez más terreno, y lo hecho por Arthas en Stratholme no había ayudado mucho, ya que eso solo aumento las filas de los muertos vivientes.

Jaina y Natsu habían ido a la capital del reino para hablar con el rey Therenas de la situación que se estaba viviendo actualmente, los dos magos ya estaban frente al rey, además de que Antonidas y Uther también se encontraban ahí.

-Jaina, Natsu, es bueno verlos nuevamente- Saludo Antonidas a los magos.

-Lord Antonidas- Saludo Jaina con una reverencia que fue imitada por Natsu.

-Veo que ustedes tampoco formaron parte de esa locura- Dijo Uther al ver a los dos jóvenes.

-Habia otras maneras de hacer las cosas...- Dijo Natsu con seriedad, Uther asintio en respuesta, el entendía al pelirrosa.

-Creo que vienen a informar de la situación que se vivió en Stratholme- Dijo el rey de Lordaeron con seriedad.

Ambos jóvenes Asintieron, Jaina empezó a explicar la situación de la plaga y como está había afectado Stratholme.

Los asesores y el rey se horrorizaron al escuchar lo que contó Jaina, pero Therenas se decepcionó por la decisión que tomo su hijo.

-Pero a pesar de todo eso, no creo que esa plaga sea tan importante, el ejército podrá contenerla- Dijo uno de los consejeros del rey restándole importancia al asunto.

-Yo he visto como actúa esa plaga... El grano infecta a la gente y los convierte en muertos vivientes rápidamente, y no sabemos que tantos pueblos ya estén infectados, esto no es una simple plaga, es solo el comienzo de algo más grande- Dijo el pelirrosa con seriedad, sorprendiendo a todos los consejeros y al rey.

-Muchacho... ¿Estás seguro de lo que dices?- Le pregunto el rey Therenas al pelirrosa.

-Completamente- Dijo Natsu con seriedad.

Un enorme silencio inundó la sala del trono, hasta que Antonidas decidió hablar.

-Natsu es uno de los mejores magos del Kirin Tor, sus palabras no deben ser tomadas a la ligera, si lo que dice es verdad, la situación es bastante grave- Dijo Antonidas, apoyando al joven pelirrosa.

-¿Que es lo que sugieres, chico?- Le pregunto Uther al Dragon Slayer.

-Unir a la alianza, es la única opción que encuentro para poder enfrentar está amenaza- Respondió Natsu a la pregunta de Uther.

Todos, excepto Jaina se sorprendieron por eso.

-Joven, aunque es una buena idea, actualmente la alianza está muy dividida, y no creo que algún otro reino acepte tan rápido unirse a la misma- Dijo Therenas con seriedad.

-Eso no es un problema, mi rey, si nos permite, Natsu y yo podríamos ir a algunos reinos que pertenecían a la alianza para convencerlos de volver a unirse- Dijo Jaina.

Jaina sabía que Natsu era buen amigo del principe Kael, asi que tal vez podrían convencer a los elfos de volver a la alianza, por su parte, ella podría hablar con su padre y convencerlo de que la flota de Kul'Thiras estuviera presente en la alianza una vez más.

Los consejeros parecían estar meditando la idea al igual que el rey, mientras Antonidas solo veía con una sonrisa a los dos magos, Natsu había aprendido bastante y Jaina había crecido mucho como maga desde que la conoció.

-Therenas, te aconsejo que aceptes la idea de estos chicos, si hay personas que pueden convencer a los reinos de volver a la alianza son estos dos- Le dijo Antonidas al rey de Lordaeron.

-Confias demasiado en estos chicos- Dijo Therenas con una leve sonrisa.

-Se lo que son capaces de hacer- Dijo Antonidas también con una ligera sonrisa.

-Esta bien, ellos dos serán los encargados de ir a los reinos para convencerlos, pero irán junto a una comitiva encabezada por Lord Uther, ¿Entendido?- Le dijo Therenas a ambos jóvenes.

Los dos chicos Asintieron y el paladin acepto la orden.

-Entonces vayan a prepararse chicos, su misión no será nada fácil- Les dijo Antonidas, estos Asintieron y se retiraron de la sala del trono.

-Uther, también ve a prepararte, tu y tus paladines están en servicio, la orden de mi hijo queda anulada- Dijo Therenas.

El paladin asintio y se retiró para prepararse para está misión.

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Unos días después

La comitiva ya había partido hacia su primer destino, la tierra de los elfos Quel'Thalas.

No tardaron mucho en llegar, pero los elfos se negaban a recibir a la comitiva de Lordaeron.

-Escuchen, díganle a su príncipe que Natsu Dragneel quiere una audiencia importante con el- Dijo Natsu con seriedad.

Los elfos iban a negarse, pero una voz conocida para Jaina y Natsu se escuchó en el lugar.

-No es necesario que ellos vayan Natsu, yo acabo de escuchar tu petición- Dijo un elfo rubio con facciones bastante finas, este era el príncipe de Quel'Thalas, Kael'Thas Sunstrider.

-Tiempo sin vernos, príncipe Kael- Saludo Jaina con amabilidad.

-Jaina, es un gusto verte, aunque no creo que todos vengan simplemente a saludar a un amigo- Dijo Kael viendo a la comitiva de Lordaeron.

-Hay problemas, y necesitamos hablar con el rey Anastherian- Le comento Jaina al elfo.

-Vengan conmigo, los recibiremos con gusto- Dijo Kael mientras guiaba a todos a la entrada del reino de Quel'Thalas.

Kael convenció a su padre de escuchar a la comitiva humana, así que este salió a la puerta del reino.

-Escuchenme bien humanos, se que están aquí por el problema de la plaga que azota Lordaeron, pero esos son problemas humanos, mi pueblo no tiene porqué involucrarse en esto- Dijo el Rey Anastherian con seriedad.

-Ademas hemos oído rumores de la masacre que hizo Arthas en Stratholme- dijo Kael con seriedad, si bien era amigo de Natsu, tenía que portarse serio en este momento.

-El pueblo de Quel'Thalas no se volverá a someter a una alianza que no tiene nada que brindarle- Dijo Anastherian con firmeza.

-La plaga que está en Lordaeron no es más que la punta del Iceberg, algo más grande se aproxima y si no trabajamos juntos para detenerlo, este reino arderá en ruinas- Dijo el hijo de Igneel con un semblante bastante serio.

-Si no se detiene a la plaga en Lordaeron, puede que ni sus puertas mágicas los puedan proteger de lo que se avecina- Le dijo Jaina al rey Anastherian.

-¿Que los hace creer que no podemos enfrentar a esa plaga?- Pregunto Kael'Thas.

-Se que podrían hacerlo, pero la perdida de vidas sería enorme príncipe... Es por eso que la mejor opción es que regresen a la alianza, así se evitará la perdida de vidas inocentes- Dijo Natsu, esperaba que ese argumento fuera suficiente para convencer al rey, pero no espero que Uther tomara la palabra.

-En el pasado, humanos y elfos unieron sus armas para luchar contra diversos enemigos, trolls, orcos. Luchamos y derramamos sangre juntos, y aunque tengamos diferencias, es momento de dejarlas de lado una vez más. Rey Anastherian, como paladin de Lordaeron, solicito que considere la petición de unirse nuevamente a la alianza. Luchamos juntos o caemos solos- Dijo Uther con sabiduría.

Anastherian pareció pensarlo, llamo a Uther para conversar un poco y tomar una decisión, ambos se fueron a los jardines de la ciudad.

Nadie decia nada, Kael observó por unos momentos a Jaina, noto que ella hablaba con el pelirrosa en voz baja, el elfo aún tenía sentimientos por Jaina, pero sabía que la maga no sentía lo mismo por el, pero podía ver algo en Jaina cuando ella estaba con Natsu, su mirada tenía un brillo bastante particular, cosa que no pasaba cuando la rubia estaba con Arthas.

"Parece que ninguno de los dos se ha dado cuenta" Pensó el príncipe con una ligera sonrisa, Natsu no era Arthas, prefería mil veces más que Jaina estuviera con el pelirrosa a qué estuviera con el arrogante de Arthas.

Uther y Anastherian regresaron al lugar y todo mundo les presto atención.

-Joven mago, nuestras razas han compartido mucho en el pasado, y si bien tenemos diferencias, todos compartimos un mismo hogar... Azeroth. Quel'Thalas se volverá a unir a la alianza- Dijo el rey con una voz firme.

Natsu y Jaina se abrazaron, pero al darse cuenta se separaron rápidamente con un leve sonrojo.

Kael solo rio levemente por eso, le dolía saber que no podría ganar el corazón de Jaina, pero sabía que el pelirrosa podía hacer feliz a la maga.

Natsu se acercó a Kael y le extendió la mano.

-Cuento contigo, príncipe Kael- Dijo Natsu con una ligera sonrisa.

Kael acepto el apreton de manos con el hijo de Igneel.

-Ya verás que saldremos adelante de esta Natsu, solo asegúrate de cuidar bien a Jaina- Le dijo el rubio a su amigo.

-Te lo prometo- Dijo Natsu.

La alianza empezaba a reformarse, pero aún quedaba un largo camino para poder frenar a la plaga que estaba azotando Lordaeron.

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Y bueno, hasta aquí el capítulo, espero que sea de su agrado.

Esta es la última actualización que podré hacer para una de mis historias ya que mañana regreso a clases en línea. Así que no sé cuánto tardaré en actualizar.

¿Que les parece el rumbo que le estoy dando a la historia?

Sin más que decir...

Sayonara!!!