Jungmin

En cuanto veo a mi hermano caminar con Jungkook hacia donde estoy con JiuBang, mi mano toma la suya y hago que caminemos hacia la derecha, dónde está la biblioteca y la sala audiovisual. La cual consta de tres pisos.

Me quitó mis audífonos con solo una mano y los guardo en el bolsillo de mi falda.

—¿Qué haces Jungmin? —pregunta ella tratando de que el paso de sus piernas sean tan rápidas como las mías—.  ¿Todo bien?

—Sí, todo bien —respondo con simpleza. Ella no parece conforme con eso y voltea hacia atrás.

Trata de detenerme, entiendo que tenga un flechazo por mi hermano, pero es tan raro, yo que se, el hecho de decirle tío a Yoongi, hace las cosas aún más perturbadoras, siento como ella trata de frenar mi paso, pero no puede, mi persistencia de no hablar con la gente es más que la de ella por hablar con mi hermano.

—¿Por qué huyes de tu hermano? —cuestiona rendida, sabe que no voy a ceder a detenernos.

Mi única salida es ese edificio bibliotecario, así que, sin importar entramos al edificio.

—No es de él de quién estoy tratando de no encarar, sino del cabeza de arándano azul.

Miro los pasillos de la biblioteca y parece un laberinto, así es como suelto a JiuBang y la dejo en una de las mesas. Arreglo su cabello y uniforme, para que se vea linda.

Es hora de escapar, Jungkook es un intenso.

—Si preguntan por mi, diles que estoy en la sección de terror, Sowon sabe que amo estar allí —hablo corriendo al segundo piso.

La sección de terror está en el primero, así que, tengo tiempo de escapar por la ventana. Camino lo más rápido posible, busco la ventana y la recuerdo que está entre los estantes de Ciencias y salubridad.

La salida que tengo es detrás de las canchas, dónde están las gradas, pusieron la escalera y no hay vista alguna. Una ventana totalmente estúpida.

No es que le tenga miedo a Jungkook o algo así, claro que no, pero me da pereza hablar con él. No quiero tener que ver con gente nueva, solo quiero centrarme en mis metas, cada que conozco a alguien, recuerdo que no puedo hacer nada por esa persona.

Sin pensarlo, es como paso una pierna sobre el borde y después la otra, para bajar con cuidado. Puedo sentir mi pie resbalar por lo lisa que es la pared al hacer fricción con mi zapato, y me trato de aferrar a la pared. Más el dolor que tengo en el abdomen por el enfrentamiento de ayer, y sumando el peso de mi mochila me hace caer de espaldas, a pesar me he caído encima de la mochila, lo que amortiguó mi caída, sentí mi cuello estirarse fuertemente, y mi hematoma del abdomen arder.

Suelto un gruñido adolorida, y ruedo sobre el pasto, agarrando con suma fuerza mi abdomen, tratando de que se alivie el ardor.

Seguro parezco un gusano blanco, aplastada tratando de revivir, o de seguir su camino.

—Siempre te encuentro en situaciones extravagantes, ¿estás bien? Fue una caída algo alta. Seguro escapas de un profesor, no sabía que vinieras a esta escuela —miro una mano extenderse en mi rostro y ayudarme a levantar del pasto y mirar con atención mi abdomen. Así que me dejó de agarrar.

Taehyung sonríe y yo le miro con seriedad.

“Estoy bien, mi cabeza no se golpeó, aunque sentí mi cuello romperse como el de Gwen, si me permites, tengo que correr” —digo en lengua de señas y Taehyung asiente.

Allí es cuando me voy a mi edificio, mis piernas tratan de ir más rápidos meterme a mi salón y no ver a Jungkook, miro mi reloj, frunzo mi boca al ver que faltan unos dos minutos para entrar a clases. No me gusta llegar tarde, porque no me tocara asiento digno.

Volteó hacia atrás y Tae está viendo algo en su celular, parece no muy atento a que ya es tarde para ir a clases.

No me importa, si el llega tarde es asunto de él… Bueno el me ha ayudado en dos ocasiones y seguro no sabe que ya es hora de ir a clase.

Soltando un gruñido por tener valores altos, de devolver los favores que me han hecho, así es como me doy de nuevo la vuelta, pero Taehyung de va al otro lado, caminando en dirección contraria.

Bueno, lo intente, intente ser buena persona, pero el universo quiere que siga teniendo mi cara de culo.

Camino cuidando que mi hermano no venga con ese Jungkook.

Repito, no es que le tenga miedo a Sowon o a Jungkook, sino que se que Sowon quiere que sea más “social”

¿Para que? ¿De que sirve? La gente siempre defrauda, la gente no siempre es buena, la gente nunca te escucha, aquellos que no pueden hablar, que no tienen quién los escuché son quienes se ven como los débiles, no importa cuánto grites, no lo hacen, no te escuchan, te dejan atrás.

Todos esos recuerdos comienzan a llegar, y yo simplemente puedo caminar mirando al frente, tratando de no mirar el rostro de nadie. Justo para ir a las listas.

Hasta que siento un brazo rodear el mío.

Al principio quiero arrebatar mi brazo de quién lo está tomando, más no lo hago al ver a la chica alta, y aunque no quiero tensar mi ceño, lo hago.

Por ella también tengo que lidiar con el golpe del abdomen, ese imbécil tenía fuerza en la rodilla. No debo meterme en asunto ajenos, pero ver a una chica siendo intimidada, o a un chico, me hace actuar sin pensar.

Miro al frente y veo a quien la estaba molestando hace unos días, ella no voltea a vernos, pues no le conviene. Seguro reprobó, era un año más grande que yo, el hecho de que esté en la escuela me hace pensar que está chica se sentirá en confianza conmigo, y eso no lo acepto.

No me gusta el contacto, pero tal vez lo dejaré pasar por esta ocasión, solo porque ella quiere a alguien que le ayude, yo también hubiera querido que a ella la ayudarán, no que tuviera una amiga cobarde.

Al dar media vuelta al pasillo, hago que me suelte y la miro con algo de molestia.

—Entiendo que te quieras sentir protegida, pero no soy niñera —suelto tranquilamente y ella muerde sus labios levemente.

Mamá dice que no debo ser tan directa, pues puedo dañar a los demás, o los puedo hacer sentir mal.

—Lo siento…

A veces me exaspera la gente, pero al mirarla es como verla a ella y eso hace que mi corazón se encoja y sienta punzadas en mi espalda y pecho. Como si sintiera culpa de haberle hablado mal.

Tal vez soy la única persona que conoce en Seul y la trato mal. Genial.

Me doy media vuelta y le tomo de la correa de la mochila, para jalar su cuerpo junto al mío.

—No debí hablarte así, solo que debes afrontar los problemas, ¿quieres que te tomen enserio? ¿Que no te molesten? Pues no pueden valorarte si no demuestras de lo que eres capaz, ¿sabes? O puedes ignorarlos, pero no lo hagas escondiéndote, no siempre estará alguien para cuidarte, no seas decadente.

Ha pasado mucho tiempo desde que digo algo tan largo, tanto que siento mi corazón palpitar, puedo ser una chica que da platicas motivacionales, pero creo que a veces sueno brusca.

—Creo que tú fuerte no es ser amable, eres pasiva agresiva, muy directa, y tajante, pero eso es bueno, me agradan mucho tus consejos, es como si no tuvieras sentimientos.

Simplemente me encojo de hombros y sigo mi camino. No recuerdo su nombre. ¿Eso será grosero?

—Me llamo Jungmin, no recuerdo tu nombre.

—Tzuyu, Kim Tzuyu podríamos ser amigas, ¿si? —su interrogatoria me hace quedarme callada y mirar al frente.

—No, si quieres considerarte mi amiga, está bien, solo no me des problemas

Y el camino sigue silencioso, puedo notar que ella está algo incómoda. Y yo simplemente trato de seguir mi camino. No quiero volver a tener amigos así como ella, y Tzuyu parece ser igual a ella, no quiero que todo se repita.

—¿Oye sabes dónde están las listas? —pregunta y yo asiento.

—Tienen que estar en el lobby, si eres de primero, están a lado de la oficina, si eres de segundo en los casilleros, los de tercero…

Y allí es cuando veo a Taehyung parado en la esquina, mirándome con la boca abierta, y mis audífonos en mano.

Seguro se me cayeron cuando bajaba de la ventana…

—¿¡Hablas!?

Me quedo callada mirando a Taehyung con mis labios apretados, pareciera que es una sola línea.

—Claro que si animal, deja a mi nueva amiga en paz.

Tae mira a Tzuyu y le muestra su lengua, como si fuera un pequeño niño.

—Esto es una traición, esto es una mentira, una falacia —dice con un severo dramatismo—. Pensé que éramos amigos, por eso hablaba en lengua de señas, para que sintieras que te escuchaba, no me duele, me quema, me lastima —dice tirándose al suelo como si esto fuera lo peor que le hayan dicho—. ¿Las tardes jugando en la pump it no valieron la pena? Me duele el corazón, me duele que no me dejaras escuchar tu voz —habla en un falso tono lleno de decepción.

Demasiado dramatismo, no lo soporto, solo soporto el drama de mi padre y de Sowon.

Le quitó mis audífonos de sus manos y suspiro con molestia. El primer día y tengo que lidiar con estas personas, sabía que desde ver a Jungkook junto a Sowon sería de mal augurio, ¿Qué falta? ¿Jimin pegándose a mi como chicle? ¿Qué se vuelva un patán?

Yo solo quiero un año escolar tranquilo.

—Sí, si hablo, pero no con desconocidos, ahora tengo que irme, entraré a clases tarde.

Y los dejó atrás, sin pensarlo, me dirijo al baño, no hay alumnas, por lo cual puedo estar tranquila, me quedo allí varios minutos, levanto la camisa del uniforme, mirando el color morado con rojo contrastar con mi piel, ese inmundo golpeó varias veces allí, pero lo que más me dolió fue cuando me golpeó con su rodilla.

Debería de ser menos temeraria.

Miro al espejo y el golpe se ve algo grande, espero no sea impedimento para mis entrenamientos, bajo la camisa y la acomodo perfectamente.

Para despejar un poco el dolor, terminó mojando mi rostro, y mirando el reflejo, específicamente mis labios.

Aquella cicatriz me hace ver como una chica mala, debería de no maquillarla, así me vería más ruda.

Cuando seco mi rostro y por fin salgo de los baños, saludo a los maestros y busco las listas, más no las encuentro. La campana suena y yo sigo sin saber en qué salón voy.

Justo cuando creía que no iba a encontrarlas, las veo detrás de la sala de profesores.

Todos entran a clases mientras yo busco mi nombre, llegaré tarde, no quiero llegar tarde, ¿por qué la vida es injusta?

Kim Jungmin, salón A-3

Y así es como mis piernas tratan de ser rápidas y subir las escaleras corriendo, puedo escuchar mis pisadas chocar con el piso, haciendo que suene hueco por todo el pasillo. Agradezco que ningún maestro salga a regañarme por correr en los pasillos.

Mientras corro siento mis audífonos y celular caer, tengo que regresar para recogerlos, me lamento al ver que la mica del teléfono se ha quebrado en la esquina derecha. No solo eso también mi cartera se cayó y las monedas salieron volando.

—¿Por qué a mí? —murmuro recogiendo mis cosas lo más rápido. Pero mi costado duele, mamá me regañara si sabe que tuve un enfrentamiento y terminé lastimada.

Ya perdí más de cinco minutos.

Y al llegar a la puerta, planchó mi uniforme y tocó la puerta con firmeza. Rápidamente veo que está se abre y veo al profesor con un saco negro y pantalones de la misma forma.

—Al parece la impuntualidad se hereda —dice y todos voltean a verme.

Miro al salón y trato de que mi mirada se vea dura, pero al ver a mi hermano y a tres personas más, hace que me sienta agobiada.

—Bueno profesor Namjoon, no se volverá a repetir, yo siempre llego temprano a clases, solo que tuve un altercado —digo seriamente y el sonríe, sus hoyuelos hacen que me sienta bien.

Tío Nam siempre ha sido agradable. El también trata de ayúdame, creo que es en quien más confío de mis tíos, siempre me da charlas profundas.

—Lo sé, se que no es como Iseul, pero sabe muy bien que no puede llegar tarde a clases, menos el primer día —dice dándome el paso.

Miro los asientos vacíos, solo hay dos y es el penúltimo del fondo de la primera fila, me gusta ese asiento, pero no me gusta quien está enfrente y al último.

Mi hermano y Jungkook están en la última mesa, Jimin y Taehyung en frente, quedaré en medio de ellos.

Miro al tío Nam y trato de parecer una persona demasiado inocente.

—¿No hay otros asientos? No quiero estar con ellos, hablan mucho.

Tío Nam sonríe de lado y niega. Es malvado entiendo por fin a mamá. No tiene corazón, me ha dejado en medio de ellos.

—No, es el único, ahora siéntate antes de que te haga presidenta de la clase ahora mismo —Y solo con decir eso, es como voy a mi destino.

Miro a los cuatro y suspiro con fuerza. Jimin me mira y se encoje un poco. Pues nuestra mentira de que era muda se ha caído, y ya está al tanto. No por nada Taehyung se sentó con él.

—Espero nos llevemos bien este año escolar —les digo mirando a todos y sentándome dónde está la ventana.

Justo cuando veo a Jungkook y Jimin tratando de pasar a mi lado, subo una de mis piernas al asiento y niego.

—Si se quieren sentar acá, les daré la penosa noticia, este asiento está ocupado por mi pierna, y no pueden interrumpir la clase moviéndose de asiento, odio a la gente que interrumpe las clases.

Y ambos se quedan quietos. Tal vez este año no estaré tan tranquila. Primer día de clases, y ya me quiero ir a casa.

^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^^^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°^°

Jungmin rompebolas jajaja, creo que que es el personaje femenino que más me está costando, y está muy debajo de mi top preferido jajaja.

G_BPotatx ☠️💖