Esta vez no me sonrojé.... Sino todo lo contrario, los colores de mi cara se drenaron por completo, dejándome pálida como un papel. Pero, es que, ¿Quién mierda lo entiende? Si él mismo había dicho que no le parecía atractiva....

Arggggg!!!!!!

Jadeé sorprendida.-Eres increíble...-Mi mirada se llenó de veneno cuando el sarcasmo goteó de cada una de mis palabras.-Tú mismo has dicho que no te parecía bonita, que era rellenita, que era infantil, que era una niña pequeña, que era...

Él sin quitar sus manos de mi cintura, envolvió fuertemente sus brazos y besó mis labios interrumpiendo lo que iba a decir. Jugó con mi lengua, lentamente. Sus labios tibios eran suaves y carnosos al contacto con los míos. Gemí sobre su rostro, lentamente él se separó sin quitar mi cuerpo de su delicado agarre.

-Nunca dije que no me parecieras atractiva...-Susurró a milímetros de mis labios. Su mirada estaba únicamente en mis ojos, torturándome, llamándome a besarle nuevamente. Tragué saliva ante la cercanía entre nosotros.-Solamente dije que no estaba interesado en ti, nada más que eso.-Suspiró enviándome su aliento. Morí.-Así que no metas cosas innecesarias en tu cabeza.-Se apartó bruscamente de mí y caminó a la puerta.-Que duermas bien.

Cerrando la puerta, se marchó...

-

-

No podía dormir... el dolor me invadía demasiado, en todo el cuerpo, y recién me había dado cuenta que estaba llorando. Aún me encontraba con la tentadora lencería puesta sin ser capaz de mover un músculo debido a algunos moretones, que ya no eran tan notorios de todas formas, ardían sobre mi piel fuertemente.

Una idea estaba en mi mente... pero no era la más recomendable.

Suspiré... de todas formas no perdía nada por intentarlo.

Levantándome de la cama, fui al corredor lentamente intentando no hacer nada de ruido. Suavemente, le di unos golpecitos a la puerta de Jeon.

No respondió.

Volví a tocar un poco más fuerte, y su puerta se abrió rápidamente.

Madre de Dios...

Allí estaba él.... Usando nada más que un par de bóxers blancos con el elástico de Calvin Klein en ellos. Su torso estaba completamente esculpido a mi vista, y su cabello totalmente despeinado. Su rostro... oh Dios...

-Hermanita...-Murmuró con una de sus cejas arqueada, su brazo casualmente apoyado en el marco de la puerta.- ¿Pasa algo?

Oh...

-Yo...-Miré mis pies tímidamente.-No podía dormir... por el dolor.-Mordí mi labio con aún más timidez. Su rostro tenía una sonrisa ladeada, y su intensa mirada irradiaba peligro. Yo era tan estúpida, ¿qué se suponía que él haría de todas formas?-Mejor olvídalo...-Musité dándome la vuelta sobre mis talones decidida a volver a mi recámara.

Con un ágil movimiento, cogió mi cintura y me impulsó dentro de su cuarto apenas iluminado por la luz de la luna. Tragué saliva cuando me acorraló contra la puerta ahora cerrada.

-Te daré algo para el dolor...-Susurró con una pequeña sonrisa irónica.-Siéntate en mi cama.

Caminé hasta toparme con un colchón contra mis piernas y me senté en él. Escuché como revolvía algunas cosas en su baño, al cabo de un rato apareció con un vaso con agua y una pastilla en su otra mano. Se sentó junto a mí y me tendió lo que llevaba en sus manos.

-Tómate este calmante, cuando peleo con alguien y tengo heridas me hace sentir mejor.-Sonrió de costado y le sonreí suavemente aceptando la pastilla y el agua.

Tragué la pastilla con ayuda del líquido y no pasó mucho tiempo antes de que hiciera efecto.

-Gracias, Kook...-Murmuré. Además, los efectos del champain ya se habían ido hace algunas horas haciéndome recuperar mi timidez habitual. Apoyé el vaso en la mesita junto a mí, decidida a levantarme, su mano en mi muslo me volvió a sentar, lo miré sin entender.

-Duerme aquí hoy.-Susurró lentamente.-Creo que has despertado a mi padre, y si él te llega a ver salir de mi cuarto con esa ropa estoy seguro que será incómodo para ambos.-Rio lentamente, enrojecí mirando su mano en mi pierna, haciendo que todo mi cabello cayera en mi rostro por la gravedad. Él rio en un tono bajo.

-De...de acuerdo...-Musité. Él me impulsó lentamente sobre la cama, dejándome acostada, y él me imitó luego. Su cama era de dos plazas al igual que la mía -cama matrimonial- por lo que era bastante espaciosa. Hacía bastante calor a pesar de ser otoño, por lo que Kook pateó las sábanas fuera de la cama.

-Que duermas bien...-Susurró abrazándome por detrás y apoyando su cabeza en mi hombro.

-Em....Jeon...-Murmuré silenciosamente.- Hace algo de calor, ¿Podrías soltarme?

Lo sentí sonreír sobre mi piel.-No.-Me apretó más fuerte contra él, haciéndome sentir su definido abdomen en toda mi espalda. Tragué mucha saliva ante tanto contacto de piel a piel, y la suya cabe añadir que era extremadamente suave al igual que su cabello sobre mi hombro que me producía cosquillas. Suspiró enviándome toneladas de escalofríos, me estremecí por completo. Sus manos acariciaron suavemente mi abdomen, de arriba abajo, haciéndome suspirar segundo a segundo.

Sus respiraciones se habían vuelto más pesadas de un momento a otro, y me di cuenta... que se había dormido, conmigo fuertemente sujetada en sus cálidos brazos, y su masculina fragancia ingresando a través de mi piel.

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....... Sin palabras..... ustedes comenten y díganme que piensan ;)

BESHOTESS Y VOTEN PARA QUE EL SIGUIENTE SEA MEJOR :D

y buenas noticias.... War of Hormone está #662 en fanfiction!!!!! las amo tanto, y estoy tan feliz :')