Sacrificios
- Lo lamento, Lumine... te falle... -
El rostro de Lumine levemente se tornó más suave al escuchar aquellas palabras venir del legendario Guardián Yaksha que estaba justo frente a ella, con su rostro bajo, y sus ojos cerrados; Lumine no podía culpar a nadie de que no pudieran atrapar a Sycamore, después de todo, ni siquiera ella misma fue capaz de vencerlo hasta muchos intentos después.
Lumine levemente negó, mientras el atardecer de Liyue se posaba justo entre sus siluetas. - Xiao... está bien, créeme... - Suspiró. - El es... más listo y fuerte de lo que aparenta... debí advertirles... -
- Meh... es bueno, no negaré eso... - Kaeya captó la atención de ambos ahí; este estaba recargado en uno de los pilares rojos que había entre ellos, mientras lucía su espada levemente. - Debo de preguntar, Caballera, de dónde conoces a este Don Sombrero? -
Lumine levemente colocó una expresión más fría de lo que su calmada expresión habitual era; aquella clase de preguntas iban y venían entre cada persona que estaba involucrada con respecto a encontrar a los fugitivos, y claro que, ella no podía dar una respuesta concreta.
- Un viejo conocido... lo hago más por un favor a la Reina Menor Kusanali... - Susurró Lumine, suspirando. - Es... peligroso que el esté ahí fuera... que ambos estén ahí afuera... -
- Claro... - Susurró Kaeya cruzándose de brazos. - Oye, se que tengo un parche, pero puedo notar que este es un tema incómodo para ti... - Levemente se movió, para así tomar el hombro de la chica. - Lo que sea que sea, terminará pronto, así que no te pongas triste, de acuerdo caballera...? -
Lumine levemente vio a Kaeya, solo para sonreírle levemente, y asentir. - Gracias Kaeya... -
Kaeya simplemente hizo un movimiento con su cabeza, antes de mirar a Xiao y susurrarle a Lumine. - Y... dile a tu novio que deje de mirarme así, los celos son una cosa terrible... -
Lumine se puso levemente roja. - E-El no es mi-
- Viajera! -
Lumine y compañía levemente voltearon a su lado, rápidamente notando las figura con orejas de Tighnari, llevando su habitual uniforme, y Cyno, quien corría junto a él como siempre lo solía hacer. Lumine sonrió.
- Tighnari! Cyno! Que sorpresa! - Levemente se acercó a ellos, notando como estos venían agitados. - Encontraron algo? Alguna noticia? -
- Mejor que eso... - Susurró Cyno mientras miraba a Tighnari, el cual asintió; Lumine lo vio con interés esperando escuchar las buenas noticias.
Tighnari suspiró, para así hablar. - Los encontramos... estaban caminando hacia el Desierto... en dirección al Bajo Sutej... - Tighnari dijo entre respiraciones. - La señorita de Rtawahist iba con ellos... -
- Layla...? - Levemente colocó una mano en su barbilla; porque Layla estaría acompañando a Sycamore y a Furina? Estaba siendo obligada? O estaba cooperando con ellos? Layla era una aspirante a astróloga, quizá la mejor de su propia área.
- Rtawahist es la Facultad donde se estudia las estrellas, o no...? - Susurró Lumine, a lo que Cyno asintió mientras se cruzaba de brazos.
- Parece que necesitan a Layla para algo, asumiré que de temas estelares se trata... - Cyno susurró; Xiao levemente se acercó por detrás de Lumine, antes de hablar.
- Debe ser sobre la consagración estelar... - Susurro Xiao, captando la atención de todos quienes voltearon a verlo. - No tengo mucho conocimiento del tema... pero La Consagración Estelar era estudiada por bastantes personas, inclusive aquí en Liyue... muchos decían que era un óptimo sistema de transporte... mejor que los Centros de Teletransporte de Teyvat... -
Lumine escuchaba atentamente, haciendo toda clase de conjeturas y trazados que le intentaran explicar del porqué del súbito interés de Sycamore en las estrellas; el solía decir que eran falsas, el no mostraba interés en tal cosa, porque el Sycamore que ella conocía ahora hacía todo esto?
- Deben de querer usarlo para llegar a Fontaine o... a otro lugar más rápido... - Kaeya habló mientras se cruzaba de brazos.
- Si logran usarlo, será como buscar una aguja en un pajar... no tendremos idea de a donde podrían haber ido... - Cyno habló.
Lumine levemente murmuró; hacía esto por Nahida, Nahida quería a su hijo de vuelta, y ella quería a su... estaba correcto llamarlo amigo? Lumine solo quería que esto acabara, de una vez, por todas.
Levemente suspiró, y miró a Tighnari.
- Guíanos. -
Wanderers of the Water and the Wind presenta:
Sacrificios.
Let me take on you a little trip!
My supersonic ship!
At your disposal if you feel
So inclined!
Well, alright!
We're gonna travel
Faster than light!
So do up
Your overcoat tight
And you'll go anywhere
You want to decide
- Falta tan solo una hora para que la consagración estelar comience, chicos! - Layla aviso, mirando su reloj en mano que marcaba las 11 de la noche; en el punto más alto de la oscuridad, una leve luz de una fogata se posaba en el suelo junto a una casa de campaña bien armada.
El sonido de una mochila cerrándose captó los oídos puntiagudos de Layla, que levemente volteó, mirando como ambos Sycamore y Furina estaban preparando sus mochilas con cada provisión que sea necesaria, ya sea comida, agua, o ropas que los hagan pasar desapercibidos.
- Llevas todo para entrar en la base de los Fatui? - Susurró Furina con una leve sonrisa nerviosa a Sycamore, el cual levemente se alzó, cargando su mochila en su espalda.
Sycamore suspiró, para así asentir. - Tome algunas telas que nos harán entrar sigilosamente, pero ahí dentro tendremos que robar ropa de alguno de sus subordinados para llegar a la pieza sin ser vistos... -
- Bien, me suena a un plan... - Susurró Furina para así suspirar, y levantarse también junto a su mochila. - Creo que ya tengo todo listo... -
Sycamore asintió, para así levemente acercarse y tomarla de la mano. - Estas segura de esto...? -
- Por qué no lo estaría...? - Susurró Furina mientras colocaba su mano libre en la mejilla del chico; Sycamore levemente se dejó recaer en esta mientras la miraba. - Es el último obstáculo... después de esto nos iremos a casa... juntos... -
Sycamore levemente asintió, cerrando sus ojos y suspirando. - Juntos... -
El sonido de la arena chocando contra unos zapatos fue escuchado por ambos, rápidamente mirando a su lado para ver que se trataba de Layla que caminaba hacia ellos con una leve sonrisa cansada.
- El círculo está listo, en cuanto la luz de la estrella caiga en el, ustedes entrarán en el círculo y los llevará hacia el destino... - Layla asintió. - Solo asegúrense de tener la Gnosis Hydro en sus manos, debería acercarlos lo más que pueda hacia su posición... -
Furina asintió, para así sacar la Gnosis que estaba a solo una pieza de completarse y tenerla en sus manos; Furina sonrió, para así mirar a Sycamore, y hace un ademán con su rostro que apuntaba a Layla.
- Ya le dijiste? - Dijo Furina; Layla parpadeo confundida.
- D-Decirme que? - Preguntó Layla con leves nervios mientras miraba a ambos chicos, las cuales la miraban de vuelta.
Sycamore levemente suspiró, para así sonreírle y tomar del hombro a Layla de manera calmada, ocasionando que se sonrojara. - Furina y yo charlamos esta mañana... llegamos a una conclusión que... puedes bien aceptar o no... - Susurró. - Queremos que vengas con nosotros, Layla... -
Layla sintió sus mejillas enrojecerse aún más mientras sus ojos comenzaban a brillar al ver a su amorío secreto de frente; Furina sonrió, para así tomarla de su hombro libre. - Si! No queremos dejarte aquí sola en el desierto está noche! Además! Tres cabezas son mejores que dos! No? -
- Asi va el dicho, si... - Susurró Sycamore con sus ojos cerrados para así mirar a Layla. - Que dices, Layla...? -
Layla miró a ambos chicos, a la pareja, a la pareja de esposos fugitivos que todo Teyvat estaba buscando, la pareja que estaba pidiendo que ella los acompañara; Layla siempre solía tener problemas con respecto al hecho de confiar en sí misma, o sentirse suficiente, siempre había algo en su mente que le hacía una mala jugada y le hacía sentir que no estaba dando su mejor intento.
Pero esta sonrisa, esta sonrisa que su amorío secreto y su esposa le estaban dando a ella no reflejaba nada más que confianza hacia ella; no podía creer que enserio ellos, con todo su poder, tanto de arconte como de anemo, aún tuvieran el sentimiento de cariño y confianza con ella.
Layla solo sonrió, para así susurrar. - Y-Yo... -
Entonces un leve brillo verde captó sus bellos ojos; quitando su mirada de los ojos de Furina y Sycamore, mirando en medio de ellos como aquel brillo verde comenzaba a acercarse, peligrosamente.
Y Layla gritó. - CUIDADO! -
¡SLASH!
Una lanza se enterró con fuerza entre la arena, no pudiendo atacar a nadie luego de que Layla empujara a ambos Sycamore y Furina fuera de su camino, haciendo que ambos cayeran hacia la arena de manera estrepitosa.
Sycamore fue el primero en levantar la mirada, notando como aquella lanza era la misma perteneciente al Guardián Yaksha al que anteriormente habían enfrentado cuando se dirigían a Sumeru, los estaba siguiendo?
Sycamore gruño, no había tiempo para esto; su sombrero empezó a brillar, desapareciendo detrás de él mientras sus manos comenzaban a formar vórtices de aire que estaban listos para ser desplegados.
En cuanto se dio la vuelta para levantarse, sin embargo, por lo único que fue recibido fue por el golpe de un arco que dio directamente en su rostro, lo cual hizo que saliera expulsado colina abajo entre la arena.
- Ah! Extrañaba esto! Una buena pelea siempre es bienvenida! -
"Me lleva la pinche chingada..." Fue el pensamiento de Sycamore luego de haber escuchado aquella voz resonar en sus oídos, una voz muy conocida por el, como no serlo? Había trabajado con el cuando era un Fatui.
El undécimo heraldo, Childe, o Tartaglia; jamás quizo convivir con el idiota inclusive cuando estaba dentro de las filas de los Fatui, le parecía irrelevante cualquier cosa que el hiciera, aunque ahora? Ahora mismo quería romperle todos sus dientes.
Furina gritó, mirando como Sycamore había sido tomado desprevenido. - SYCAMORE! -
Rápidamente sacó su espada de un destello, lista para atacar a Tartaglia, pero no pudo lograrlo debido a que una espada se dirigía a ella con rapidez; Furina tuvo que reaccionar rápido, bloqueando con su propia espada aquella que venía directa a su pecho.
¡CLAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAANK!
Furina detuvo en seco la espada de Lumine, la cual se dirigía a ella con una fuerza descomunal que ella jamás pensó que vería en su vida fuera de Sycamore; Layla gritó, pero aquella lanza de levantó del suelo en un destello.
Antes de siquiera poder moverse, la lanza se posicionó en su cuello, encerrándola; solo pudo sentir una respiración detrás de ella mientras forcejeaba por poder salir. Xiao, tenía a su merced a Layla, mientras el mástil de su lanza se posaba en su cuello.
- Están acabados... - Susurró Xiao, mientras mantenía rendida a Layla.
Furina gruño, mientras intentaba repeler con fuerza el ataque de Lumine con su espada, pero era casi imposible, la espada de Lumine, y Lumine misma, eran de una fuerza que jamás pudo experimentar ella.
Furina empujó con más fuerza. - V-Viajera! Escúchanos! Por favor! -
- No hay nada de lo que deba escucharlos... - Susurró Lumine con seriedad; llegó a su punto de quiebre, en un desliz bastante enorme, Lumine empujó finalmente la espada de Furina lejos de su alcance.
Lumine tomó eso como una oportunidad, y rápidamente alzó su espada, lista para dejarla caer en el cuerpo de la arconte; Furina solo vio como su espada caía delante de sus ojos.
Sycamore, en el suelo, y con el arco de Tartaglia apuntándole, gruño, y con el vórtice de aire más rápido que pudo haber creado, apuntó directamente a la viajera. - DÉJALA EN PAZ! -
¡SLAAAAAAAAAAAASH!
Una enorme ráfaga de aire dio directamente contra el rostro de Lumine, lo cual hizo que saliera volando algunos centímetros abajo de la colina y que su espada cayera al suelo; Tartaglia rio, solo para darle una enorme patada en el pecho al chico, empujándolo aún más abajo.
- No te metas en la batalla de otros cuando ya tienes una propia amigo! No quites tus ojos de mi! - Dijo Tartaglia con una sonrisa escondida debajo de su máscara de Fatui.
Sycamore gruño; el tiempo se estaba acabando, y definitivamente no quería tener a este idiota dándole lecciones; rápidamente se puso de pie, haciendo desaparecer su sombrero de nueva cuenta creando el mismo patrón de círculo en su espalda.
Sycamore emprendió un vuelo rápido, esquivando las fechas que Tartaglia le lanzaba para acabarlo; Sycamore simplemente se movía con agilidad alrededor de Tartaglia mientras este daba una vuelta en sí mismo mientras disparaba su arco.
Juntando la suficiente energía, Sycamore comenzó a generar una esfera de aire puro debajo de su pie, esfera que rápidamente pateo hacia Tartaglia, el cual no pudo evitarla a tiempo, generando una enorme explosión de aire que hizo que su cuerpo saliera volando junto a demasiada arena que se vio envuelta en el impacto.
- Por eso eres el undécimo heraldo... - Susurró Sycamore, antes de nuevamente emprender vuelo colina arriba hacia donde sus compañera estaban.
En el aire, rápidamente lanzó una ráfaga de aire hacia Xiao y Layla, para liberarla. - LAYLA! EMPÚJALO HACIA LA RÁFAGA! -
Layla reaccionó rápido, usando todo el peso de su cuerpo para pasar el cuerpo de Xiao delante de ella; Xiao no pudo evitarlo, y la ráfaga impactó de lleno contra su espalda, liberando a Layla, y con su cuerpo cayendo por la colina.
Sycamore rápidamente aterrizó junto a Furina, ayudándole a levantarse junto a su espada. - Te encuentras bien?! - Preguntó.
Furina rápidamente asintió, no dejando ir su brazo y su agarre; levemente Furina miró al cielo, solo para apuntar rápidamente hacia las estrellas. - Sycamore! Es hora! Es hora! -
Sycamore miró hacia donde Furina apuntaba, con sus ojos captando como una alineación de estrellas en lo más alto del cielo comenzaba a formar un rayo que unía a cada una de estas; entonces aquel rayo soltó una onda expansiva en el espacio estrellado, para así caer hacia la tierra, directamente en el círculo donde Lyla les dijo que entraran.
Lyla, levemente levantándose, apuntó hacia el centro del rayo. - Rápido! No hay tiempo! Tenemos que entrar! -
Sycamore gruño, ya no tenía energía para un vuelo, al menos no ahora; tenía que correr, y correr lo más rápido que podía junto a ellas. - ANDANDO! ANDANDO! -
Sycamore rápidamente tomó a Furina y a Lyla de sus manos, corriendo directamente hacia el rayo que quedaba a pocos centímetros de ellos; Lumine fue la primera en levantarse, viendo con shock como estaban apunto de llegar hacia el centro de aquella zona estelar.
- XIAO! -
Grito Lumine, y Xiao no necesito otra palabra para saber que es lo que ella quería que hiciera; Layla miró levemente detrás de ella mientras sentía el jaloneo de Sycamore en su mano, abriendo sus ojos de par en par al ver lo que estaba ocurriendo.
Xiao hizo aparecer su máscara junto a una enorme ráfaga de aire que lo rodeó enteramente; tomando su lanza entre sus manos, convirtió su cuerpo entero en una enorme ráfaga de aire que se acercaba a una velocidad aterradora hacia ellos.
Todo ocurrió de una forma lenta a sus ojos, todos sus pensamientos enfocados en todos lados que rápidamente se hicieron ríos, ríos que no llevaban a ninguna parte; Layla, sin embargo, era mejor que eso, porque eso le habían demostrado Furina y Sycamore.
Aquellos ríos sin sentido que era su mente, pasó a ser un lago que llegaba a una sola persona; Sycamore era callado, dócil, frío, y para nada amable, pero para Layla era más que eso, era un libro que ella tenía ganas de leer, una esfera que tenía ganas de poseer.
Quizá nunca podría tenerlo en sus manos, porque Sycamore ya era de alguien, y ese alguien ya era de Sycamore; pero ella podría devolver todo lo que él hizo por ella, porque para ella, Sycamore era una buena persona.
Layla entonces hizo brillar su visión Cryo, y alzó sus manos; de la nada la arena caliente e incómoda paso a ser una pista de hielo que hizo que Sycamore y Furina se balancearan levemente.
Pero Layla no terminó ahí, porque entonces empujó la espalda de Sycamore directo hacia el rayo, haciendo que el hielo y su fuerza hicieran el resto del cometido; sus oídos tapados no dejaban escuchar nada de los gritos que Sycamore y Furina dirigían hacia ella, pero ya no importaba más.
Layla, con sus brazos, creó una enorme esfera de hielo que hizo que aquella ráfaga de aire impactara a una fuerza descomunal contra esta, evitando que siguiera su camino, pero que no pudiera reaccionar a tiempo.
Furina y Sycamore cayeron dentro del rayo, siendo envueltos en una luz que comenzaba poco a poco a cerrarlos; no, Sycamore no iba a dejarla ahí.
En el rayo, sus cuerpos comenzaban a flotar directamente hacia el suelo, pero Sycamore con todas sus fuerzas intentó salir de este. - LAYLA!! - Grito Sycamore, pero Layla no escuchó.
Layla cerró sus ojos con fuerza, mientras mantenía su esfera evitando que aquella luz de aire la traspasara; no dejaría que llegara a ellos, por nada del mundo dejaría eso.
Furina grito, mientras se sostenía de Sycamore y el rayo comenzaba a elevarlos más. - LAYLA! VEN CON NOSOTROS!! -
Sycamore gruño. - NO SEAS ESTÚPIDA LAYLA! VEN RÁPIDO! - Layla no escuchó. - LAYLA! POR FAVOR! -
Pero Layla no escuchó.
Lo único que Layla hizo, fue ver por detrás de su espalda con una sonrisa calmada hacia Sycamore; Sycamore solo pudo verla, mientras su cuerpo poco a poco comenzaba a desaparecer entre el brillo del rayo.
Layla, a pesar de la fuerza del impacto, a pesar del miedo, susurró.
- Te amo, Sycamore... -
¡SLAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAASH!
...
Una gran explosión, y luego de ver solo un enorme brillo sobre sus ojos, sintió como su cuerpo aterrizaba con fuerza contra una suave capa de nieve que detuvo su impacto.
Sycamore y Furina cayeron por una enorme colina de nieve, no pudiendo detenerse; sus sombreros rodaron colina abajo, pero ellos finalmente se detuvieron.
Furina respiraba con fuerza, sintiendo su pelo caer sobre su rostro; levemente se levantó, viendo a su esposo frente a ella. Rápidamente dirigió su mano a él, tomándola con fuerza.
- Sycamore... - Susurró.
Sycamore levemente miró hacia ella, viéndola de frente; cerró sus ojos con fuerza, Layla... Layla se había sacrificado por ellos...
Furina levemente volteó hacia su lado; sus ojos levemente reflejando una enorme estructura que estaba a algunos kilómetros de ellos. Furina levemente sacudió a Sycamore de su brazo.
- Ll-Llegamos... -
Sycamore levemente volteó a su lado; la estructura que veían en el horizonte tenía la estructura de algo gótico, un enorme castillo con torres que la rodeaban y nada más que negro y morado entre sus colores.
Sycamore soltó su respiración levemente.
- Los Fatui... -
Canción de referencia: Supersonic Rocket Ship (The Kinks From AVENGERS ENDGAME)
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