Capítulo III: Aprendiendo cosas de humanos

Al día siguiente me desperté donde me quedé: en el patio del colegio, con esa llave en la mano. Al poco escuché voces, muchas y entremezcladas. Eso, más el pitido de la alarma de comienzo de clases logró que me despejase del todo y de golpe. No me sentó nada bien, me levanté cabreada y adolorida. Aunque, bueno... por la mañana solía levantarme cabreada casi siempre. Giré la cabeza hacia las voces y gruñí fuerte con indignación:

-¡¿Se puede saber qué voces son éstas?! ¡Son las siete de la mañana! ¡La gente normal desea dormir, ¿o es que no lo veis?! ¡Y encima vais en procesión...! Grr... ¡Humanos!

Recién levantada no recordaba mucho del día anterior y menos aún de que ahora iba a tener otra rutina muy distinta a lo habitual. Lo habitual era hacer lo que me daba la gana.

Un chico alto de pelo azul y bonitos ojos violeta se acercó a mí.

-Eh, chica, ¿qué haces parada en medio del camino? No puedes estar aquí... - Dijo.

-Mm... - Le dí yo por respuesta; aún seguía dormida, a pesar del cabreo.

-No me digas que has dormido aquí... - Dijo con sorpresa.

-Sí. ¿Y?

-Ésta llave es la de tu dormitorio, tonta... ¿No sabes dónde están?

-No. Oye, ¿quieres dejar de darme la paliza?

-Están allí, mira. - Me respondió él ignorando mi pregunta borde.

-Ah... - Dije, antes de quedarme boquiabierta.

La noche anterior rodee mil veces ese sitio pero no ví entrar a nadie. Vaya... Ahora me sentía estúpida. El chico me tendió la mano.

-Anda, levanta... Hay que ir a clase y a este paso llegaremos tarde. ¿Cómo te llamas?

-Mina. - Respondí, dándole la mano.

Al menos era un caballero con más tacto hablando que Noel.

-Yo soy Julius Fortner, encantado. - Se presentó con una sonrisa.

-Julius... ¿Fortner? - Repetí, pensativa. - ¿Dónde he oído ese nombre antes...?

-No lo sé, me conoce mucha gente. - Respondió él.

-Mm...

Me quedé con la duda. Mientras íbamos juntos hacia el lugar de las clases lo recordé... Noel fue el que pronunció antes ese nombre.

-Con que Mina, ¿eh? Nunca antes oí ese nombre... Aunque tampoco ví nunca antes un ser como tú. Pero esto es personal, no hables si no quieres, ¿vale?

-Oh, gracias. Al menos hay alguien con tacto... - Dije.

-Mina, ¿a clases de qué elemento estás? ¿Y a qué curso vas? Eso sí me gustaría saberlo...

-Pretendo controlar todos los elementos, así que cuando se lo informé a mi tutor personal, el profesor Elbert, no sé si lo conocerás... Me hizo un horario distinto. Iré una semana entera con la clase de tercero de elemento Tierra, otra semana tercero de Fuego... Y así, ¿entiendes?

-Sí... Yo voy a tercero de Viento, así que te veré, supongo...




Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top