Capítulo 4:La fiesta II
La fiesta comienza tras las palabras de Dylan, la música retumba por toda la casa, solo espero que los vecinos no se quejen por el ruido.
La música es jodidamente pegadiza, Aida y yo no esperamos mucho para ir a bailar, aunque nuestros movimientos y nuestro twerking sean nefastos ambas bailamos al ritmo de la música bajo la atenta mirada de Jason y Dylan.
Ambas podemos sentirnos lo suficiente observadas y observadas en el buen sentido, por muy mal que bailemos ellos nos van a seguir mirando con la misma intensidad que ahora, así que a Dylan le ha gustado Aida, muy interesante, aunque todas sabemos cómo es Dylan, hoy follo contigo, mañana no te conozco.
Mientras que Aida y yo tenemos nuestro momento de diosas empoderadas bailando de pena, pero atrayendo a dos tremendos dioses, Shaira intenta enseñarle a Ethan bailes de TikTok y el pobre chico intenta hacerlos sin ningún éxito, Caleb e Irina hablan cómodamente o eso parece ser y Dani intenta sacar a África a bailar, creo, por los gestos que hace eso es lo que parece.
Cansadas ya de bailar, Aida y yo nos dirigimos hacia los dos chicos que no nos han quitado la mirada de encima en ningún momento.
—¿Bailamos bien, o no? —Aida le sonríe a ambos chicos.
—Algunos movimientos se pueden mejorar—Dylan le devuelve la sonrisa a Aida.
—Pues para no bailar tan bien, no has apartado la mirada en ningún momento.
Miro a Jason esperando que entienda mi mirada, que dice que dejemos a estos dos solos, seguro que tienen muchas cosas que decirse el uno al otro, y como espero Jason entiende perfectamente mi mirada, así que juntos nos alejamos un poco de ambos.
Creo que está noche va a dar mucho de qué hablar no solo en Wallehesik si no en nuestro grupo de amigas y según va avanzando la noche parece ser que solo mejora.
—Bailabas muy bien—Le sonrío—No podía apartar la mirada de ti, aunque de eso ya te has dado cuenta.
—Bailaba fatal—Jason me da Ginebra con Coca-Cola.
—Pues yo creo que eres demasiado insegura de ti misma y que bailabas genial—Puede que lleve un poco de razón.
Bailar es una de mis grandes pasiones e inspiraciones, todo lo que siento lo puedo reflejar bailando, puede expresarme sin hablar y sin duda para mí es un arte hermoso. Nunca he sido segura de mi misma y menos a la hora de bailar ya que siempre me han dicho que mis primas bailan mucho mejor que yo y eso empezaba a acomplejarme desde corta edad, por eso muchas veces me cuesta dar esa expresión en el escenario, describir mis sentimientos. Es algo que realmente amo y que llevo haciendo desde muy pequeña, prácticamente llevo toda mi vida bailando y eso se ha convertido en mi gran ambición, sueño con bailar en grandes escenarios y enseñar a niños y niñas.
Después de muchos bailes y mucho alcohol en nuestro organismo, veo como Aida se sube en una silla con la ayuda de Dylan intentando llamar nuestra atención.
—¿Jugamos a verdad o reto? —Ella grita esas palabras subida en la silla.
Aunque no todos estábamos de acuerdo, al final terminamos sentados todos en el suelo formando un círculo, con una botella en el medio. Aida que es la que ha propuesto el juego empresa girando la botella que acaba apuntando a Daniel.
—¿Verdad o reto Dani? —Le pregunta Aida.
—Reto, obviamente.
—Tienes que besar a la chica que tú quieras, uno de nosotros te grabaremos y lo subiremos a Instagram —Es el reto que le proponemos después de haber discutido varios.
—Que propósito tiene ese reto.
—No ligaras en un buen tiempo—Le contesta África.
—Pues si yo no ligo, tu tampoco.
Daniel nos deja su móvil, Shaira está preparada para grabar, Daniel toma la iniciativa empezando así un beso muy apasionado con África, que nos deja a todos con el ambiente muy subido de temperatura, se separan y Shaira le tiende su móvil a Dani con el vídeo ya subido a Instagram.
Cuando los tres vuelven a su sitio, Dani gira la botella que está vez apunta a Aida.
—Reto.
—Siete minutos en el paraíso con el jugador que está a tu derecha—Le pone el reto Dani y el jugador de su derecha es Dylan.
Aunque Aida protesta termina cumpliendo el reto, se van juntos a la despensa que es donde hemos puesto el lugar, el propósito es que estén lo más pegadas posibles el uno al otro.
Cuando ambos vuelven al sitio, pasado el tiempo se puede notar que hemos logrado nuestro objetivo, las mejillas de Aida están rojas y sus labios hinchados al igual que los de Dylan, y el pelo de Dylan está despeinado, veo algunas sonrisas entre los chicos y las chicas.
Sólo espero que Aida sepa lo que hace, no me gustaría tener que consolarla porque Dylan se porte como un gilipollas con ella.
El juego sigue su curso, apuntando está vez a Irina.
—Verdad.
—Es verdad que hay un chico entre nosotros que te gusta—Habla Jason refiriéndose a su hermano.
—Es verdad—Contesta con timidez.
La botella vuelve a girar dando esta vez en Shaira.
—Verdad.
—¿Cuál es la persona más atractiva de los que estamos aquí? —Le pregunta Dylan.
—Ethan—Dice su nombre tan rápido que apenas da tiempo a oírlo y procesarlo.
Ya solo somos dos personas las que quedamos para vernos involucradas en este juego, y obviamente nos van a poner un reto o pregunta que nos involucre a ambos.
—Elegimos reto—Hablo yo por ambos.
—Baila para Jason—Propone Aida.
No muy segura de mí misma voy hacia Jason que se levanta del suelo para sentarse en una silla, me pongo en frente suya y cambia la música sustituyéndola por una mucho más sensual.
Comienzo a moverme, moviendo mi cadera de un lado hacia a otro y subiendo mis manos hasta que llegan a posarse en los hombros de Jason haciendo que se recueste en la silla, doy unos cuantos pasos hasta sentarme encima suya, muevo mi cuerpo hacia delante y hago que mis labios rocen los suyos, pero antes de que se toquen vuelvo hacia atrás, repito un par de veces la acción hasta que Jason pone una de sus manos en mi muslo apretándolo, se lo que eso significa, necesita que pare porque si no va a despertar su amigo.
Me levanto de su regazo y me giro para ver las caras de sorpresa.
—El espectáculo ha acabado.
—Yo creo que mejor voy a tomar el aire—Dice Jason mientras que algunos de sus amigos se ríen.
Después de jugar unas cuantas partidas más sin Jason, dejamos de jugar para beber aún más y bailar sin parar toda la noche.
Estoy muy borracha bailando con África que está igual o peor que yo, siento a alguien detrás de mí y como era de esperar al girarme me encuentro a Jason que en cuanto que me giro pone sus manos en mi cintura y comienza a bailar muy sensualmente conmigo, por un momento pienso que deje a África sola, pero rápidamente me doy cuenta que ella se encuentra bailando igual que yo con Dani.
Incluso veo como Irina se atreve a bailar junto con Caleb, cosa que me parece genial, tratar con Irina muchas veces no es nada fácil, pero Caleb está ayudándola y está dejándose llevar por las hormonas y la adolescencia.
Aida no sé dónde está, pero sí sé que está con Dylan porque ambos están ausentes. Después de haber pasado un buen rato bailando con Jason, pasamos de estar bailando a estar comiéndonos a besos, no sé exactamente en qué momento pasa pero Jason estampa sus labios con los míos, siendo correspondidos por los míos de inmediato, nuestras lenguas se encuentra, pone una de sus manos en mi mejilla profundizando el beso, yo pongo mis manos en su pelo despeinándolo, nos separamos por falta de aire, pero no tardamos mucho en volver a unir nuestros labios, no nos escondamos de nadie pues no siento la necesidad de hacerlo.
La noche avanza muy rápido, Jason y yo no hemos dejado de besarnos en todo lo que queda de noche y he podido ver cómo Dani se ha lanzado a África y ella le ha correspondido, Shaira se fue hace rato y Ethan le acompañó, Irina y Caleb también se han ido ya, Aída y Dylan creo que están en alguna de las habitaciones de arriba ya que no lo hemos visto desde hace mucho rato.
—África—Llamo la atención de ella que se separan de Dani y me mira—Podéis dormir en el sofá, ábrelo que es sofá-cama.
—¿Ya nos vamos? —Habla Jason dándome un beso en el cuello.
No le contesto solo lo agarro de la mano y tiró de él, subimos a la segunda planta y ambos nos dirigimos a mi habitación, espero que Aída no haya decidido ir a mi habitación, no quiero encontrarme sorpresas. Abro la puerta y me alivio al ver que está vacía, Jason cierra la puerta.
Me giro hacia él y hago que retrocede unos pasos hasta que choca con la puerta, él me sonríe antes de estampar mis labios contra los suyos bruscamente, el pone sus manos en mi culo apretándolo, deja mis labios para bajar a mi cuello, besa, chupa, succiona y muerde, me está volviendo completamente loca. Enrollo mis piernas en su cadera, siento lo duro que esta, deja mi cuello, levanta su cabeza y me mira, intento volver a unir sus labios con los míos, pero me para.
—No Ari, no así, los dos sabemos que va a pasar si seguimos—Mis pies vuelven a tocar el suelo y me alejo un poco de él.
—Va a pasar lo que tiene que pasar, joder Jason no me puedes dejar así—Él se dirige hacia la cama.
—Me gustaría que lo recordarás en su totalidad al día siguiente—Jason se quita su ropa quedando en bóxer y se mete en la cama—Deja de mirarme y métete en la cama.
—Como mandé el señor—Me quito mi ropa y me pongo la camiseta de Jason.
Me acuesto a su lado, siento como sus manos rodean mi cintura, me da un beso en el cuello.
—Buenas noches Ari.
—Buenas noches Jason.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top